Jueves, 29 de octubre de 2015

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Queridos siervos de Dios Altísimo:

En este día les digo que para que puedan vivir aún en este mundo, las Leyes Superiores que se viven en el universo, tendrán que reencontrar lo sagrado.

Lo sagrado es el don de conocer la Presencia de Dios en todas las cosas. Lo sagrado colma el alma y aproxima el espíritu a la materia corrupta, para volverla pura y limpia.

Encontrar lo sagrado es una forma simple de decir que la consciencia está recorriendo el camino de las Leyes Universales. Y la clave para descubrir lo sagrado en todas las cosas es la reverencia.

A diario las fuerzas de oposición al Plan de Dios intentan destruir lo sagrado como concepto en la vida humana, y esto comienza desde la infancia, degradando las relaciones familiares.

Es por eso que Mi Casto Corazón desciende al mundo para hacer un llamado especial a las familias. Así como pude vivir lo sagrado con la Santa Familia de Nazaret, hoy les pido que celen por lo sagrado dentro de sus familias.

Que desde la infancia los niños puedan conocer el amor, la reverencia a Dios, así como al prójimo; la reverencia a las ceremonias, a la oración, a los Reinos de la Naturaleza, a la vida.

No permitan que se pierda de los corazones de los pequeños la pureza que ellos traen. Cuiden las influencias que ellos reciben; prefieran el contacto con los Reinos de la Naturaleza al contacto con las tecnologías. No solo traten de distraer a sus hijos, hermanos, nietos, sobrinos… sino asuman esas pequeñas almas y sean para ellas el ejemplo para seguir. Que encuentren en la vida del espíritu la alegría de estar en la vida, y esto se dará por medio del ejemplo de ustedes. 

Una vida vacía de amor, vacía de Dios y de Su Santo Espíritu está construyendo la actual juventud del mundo, que no encuentra más sentido para la vida, porque sus almas que vinieron al mundo en este tiempo para cumplir una misión específica no están encontrando, en lo que el planeta ofrece, aquello que Dios les encomendó realizar.

Por eso, celen por los jóvenes y por los niños del mundo y háganse responsables de aquellos que tienen a su lado. Muéstrenles la vida del espíritu, de la oración, de la búsqueda espiritual, de las cosas que trascienden la vida en la materia. Porque aquellos que están naciendo en este tiempo tienen la misión de recordar su origen, para atraer así hacia el mundo el nuevo tiempo, la Nueva Humanidad. Por eso, es importante conducirlos por el camino correcto, antes de que el alma se confunda con todo lo que el mundo ofrece, como las superficialidades y los falsos caminos espirituales.

Hagan esto por el Plan de Dios y por el futuro de la humanidad,como también de todo el universo.

Yo los amo y les dejo Mi amoroso impulso de salvación, sobre todo a los jóvenes y a los niños de este mundo.

San José Castísimo, siervo de Dios, eternamente