¡Paz, eso es lo que le falta al mundo!
Por eso, hijos, con Amor y Misericordia vengo a establecer el Reino de la Paz de Dios y así desterrar de esta humanidad las acechanzas de una crueldad interminable.
Yo vengo para enseñarles sobre el amor, la constancia y la paz, síganme con confianza y no teman, están en Mi Corazón y Yo estoy con ustedes todos los días de la vida.
La tensión diaria cesará. Esa es Mi promesa para los orantes y los buenos.
Sean mansos y perdónense, así las uniones internas con el universo no se cortarán.
No teman por Mi adversario, su juego de mentira y confusión nunca llegará a reinar.
Por eso, con Mis pies piso la serpiente del engaño terrestre y les doy Mis Gracias como un bálsamo de Luz para sus vidas.
Hoy descansen en Mis brazos y duerman, duerman en el espíritu de Mi maternidad y protección.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los anima a vivir el Plan de Dios,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz