Como un nuevo Sol, vengo, hijos Míos, a manifestar y cumplir una Voluntad de Dios, una Ley Superior, de estar al lado de Mis hijos en el fin del fin de los tiempos, hasta la consumación de su entrega en la cruz del mundo, la cruz planetaria.
Yo Soy Aquella que silenciosamente acompaña sus pasos, pero que siempre está pronta para emitir una palabra de aliento, de guía, de fortaleza y de amparo, para que Mis hijos no desistan de caminar cuando encuentren piedras y tantos otros obstáculos en esta ardua trayectoria de la transformación y de la trascendencia de la condición humana.
En este 8 de agosto, hijos Míos, una etapa finaliza en sus vidas, como en toda la humanidad. Es el fin del desierto y de los cuarenta ciclos de pruebas que anteceden a los tiempos finales.
Ahora, y por tres años más, sus corazones estarán a tiempo de fortalecerse, entregarse y crecer en espíritu, en la constancia de una vida superior madura y silenciosa, para que puedan, finalmente, ser columnas que sustenten a la consciencia humana.
Ya no les hablo sobre ciclos de formación, sino de acción consciente, acción interior, oración y conexión con el Divino, silencio y búsqueda verdadera de la maduración de la consciencia en los grados del amor, siendo capaces de vivir por sí mismos el perdón, la reconciliación y la manifestación de la Gracia y de la Unidad que tanto esperan ver plasmadas en la consciencia humana.
Durante este próximo ciclo, acompañaré a sus corazones, como acompañé cada paso de Mi Hijo, porque para eso fue creada Mi Consciencia, para estar al lado de las criaturas de Dios hasta la consumación de su oferta, de la trascendencia de su condición humana, del viejo al nuevo hombre.
Es tiempo de que sean conocedores de las Leyes Universales, pero no de forma superficial, sino atenta y verdadera, siendo capaces de ver esas Leyes manifestadas en sus vidas, para que sepan actuar en consonancia con el Propósito Divino.
Es solo cuando comprendan las Leyes y los Rayos Divinos de forma verdadera y los vivan, que la Jerarquía Espiritual le podrá conceder a la humanidad la autonomía de un nuevo paso y mayores grados de responsabilidad para con el planeta y su evolución.
Hasta entonces, hijos, vivan con mayor madurez su camino interior y estén en el mundo sin ser del mundo. No permitan que las aspiraciones superficiales de la vida humana se apoderen de sus corazones ni de su tiempo terrestre. Den tiempo y valor a lo que tiene valor real en la vida del espíritu, y así percibirán lo que les quiero transmitir y por qué aún estaré aquí, a su lado.
Yo los aguardo en oración.
Los bendice,
Su Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más