Finalmente, llegué a la Amazonia y desde ahora preparo las bases espirituales para que en la Ciudad de Manaos, después de la Maratón de la Divina Misericordia, se establezca una base permanente de trabajo y de asistencia, no solo humanitaria sino también de servicio a los Reinos de la Naturaleza.
Llegó el momento, después de tanto sufrimiento, de que los Reinos Menores sientan el amor y el amparo de los seres humanos. Por eso, un espacio de preservación, de cuidado y de restauración de los Reinos Menores deberá ser creado en Manaos, para que los mismos tengan un lugar de paz y de cura para después continuar su evolución.
Cientos de especies vegetales y animales necesitan del cuidado y del servicio de los seres humanos, la que será una tarea fundamental para esta Obra, fundada en los principios del amor y de la hermandad.
La asistencia a los Reinos y a los pueblos originarios por parte de la Orden Gracia Misericordia será de alivio y de acogimiento, ante un proceso de desigualdad, de abandono y de explotación.
Dos sectores de trabajo se establecerán en Manaos: uno a través del servicio humanitario y otro a través del servicio de la Orden Gracia Misericordia a los Reinos de la Naturaleza.
¡Les agradezco por guardar Mis aspiraciones en el corazón!
Los bendice,
Su Maestro y Señor, Cristo Jesús