Mensajes de Cristo Jesús

La Voz del Señor resuena en el mundo entero y también resuena en el universo interior de todos los que se disponen a escucharme.

La Voz del Señor pronuncia los últimos decretos de Misericordia, para preparar a las almas para el desenlace de este Proyecto de perdón y redención que el Creador está realizando en este mundo y en Su Creación desde el principio.

Compañeros de Mi Corazón, en su interior deben preguntarse dónde está la prioridad de sus vidas, dónde están sus aspiraciones, cuál es la meta de sus espíritus.

Diariamente, busquen meditar en el propósito de su existencia y darle sentido a sus días a través de este propósito. Yo estoy aquí para señalarles el camino, y ese camino no está afuera de ustedes, sino adentro.

Afuera de ustedes, verán al mundo derrumbarse, verán los principios y los valores distorsionarse en las familias, en las naciones y en las mentes humanas; verán la desesperación de la Tierra expresarse en el desequilibrio de los Reinos. Y ese mismo desequilibrio se reflejará con intensidad en las emociones de los hombres, porque no habrá paz en la consciencia humana si no hay paz entre la humanidad y los Reinos de la Naturaleza.

Afuera de ustedes, verán las profecías cumpliéndose, una a una; verán las Palabras Sagradas tornarse vida y acontecimiento en los cuatro puntos del mundo. Sin embargo, sus corazones no pertenecen al mundo; entonces, no teman.

Las profecías tienen un desenvolvimiento, pero también tienen un fin. La transición de los tiempos le traerá consecuencias al mundo y a toda la vida; pero tendrá, por encima de todo, un propósito, y es en ese propósito en donde deben estar sus corazones.

No tengan fe a medias, no tengan esperanza a medias, no se oferten a medias, no amen a medias; sino vivan con plenitud, vivan por entero. Y es en esa aspiración de un amor completo que Mi Corazón vendrá a su encuentro y completará lo que esté vacío e incompleto dentro de ustedes.

Por eso, que sus ojos estén en Mí, que su meta esté en Mí, que sus corazones estén en Mí, que sus prioridades estén basadas en Mi Corazón, y siempre hallarán un lugar seguro, porque Yo Soy su lugar seguro en un mundo incierto. Estén en Mi Corazón.

Hacia ese propósito, los guío.

Su Maestro y Señor,

Cristo Jesús