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“Desde hace siglos, vengo pidiendo la adoración al Santísimo Sacramento de la Eucaristía, debido a la gran necesidad de equilibrio y de armonía espiritual en el mundo entero”, recordó la Virgen María en Su Mensaje del 26 de octubre de 2013.
Además, Nuestra Señora pidió que, en el día del Corpus Christi, ofreciéramos un acto especial de alabanza a Su Hijo ante el Santísimo Sacramento.
Así, en este día sagrado, los adoradores del Cuerpo Eucarístico de Cristo están invitados a unirse en honor y reverencia al Rey de reyes en los Sagrarios del mundo, como una tarea de reparación y expiación universal.
Todo fue una preparación para este tiempo
Cristo Jesús reveló, en Su Aparición del 12 de agosto de 2020, que todo, desde el día en que se instituyó el Corpus Christi hasta el presente, fue una preparación para este tiempo final, en el que comenzaría la gran tarea de los adoradores del mundo.
Es allí, en esa fuerza divina, en esa unión esencial con el Sacramento del Altar en donde encontrarán la fuerza, el coraje y la valentía para sobrellevar estos tiempos y no en otro lugar.
La tarea de los adoradores
La Adoración, en este tiempo final, modifica la genética humana transubstanciándola y redimiéndola en cada ejercicio de Adoración.
Nuestro Señor afirmó que, en estos tiempos, la tarea de los adoradores tiene un impacto planetario: quienes adoran no solo reciben el código crístico celular con cada ejercicio de adoración, sino que también ayudan a desarmar los planes del adversario, a salvar almas de los abismos de la consciencia y a sostener el planeta, especialmente su eje.
Por lo tanto, Él nos invita, como siervos de la Luz, a adorar su Santísimo Cuerpo Eucarístico por el fin de las guerras, los conflictos, la indiferencia, la soberbia, la explotación de los Reinos de la Naturaleza y, sobre todo, por el fin del mal.
Los Adoradores y el Retorno de Cristo
El Maestro enfatizó que los adoradores desempeñarán un papel importante en Su Regreso, ya que sus presencias irradiarán atributos que ayudarán a disipar la oscuridad:
Llegada la hora de la gran revelación celestial en toda la esfera de la humanidad, aquellos que acompañen el transcurso de Mis Caminos serán como lanzas de fuego, que traspasarán el mal y liberarán, solo por su presencia, toda oscuridad.
Pero nadie sabrá quién lo hará, colocaré un velo sobre todo este misterio, solo el amor y la humildad en los simples demostrará el poder de este gran misterio creador.
Y, aunque los espíritus impuros estén sueltos como lobos feroces en el actual mundo, los adoradores, que forman parte de Mi Cuerpo Místico, defenderán el poder de Mi Gloria y de Mi Retorno.
Una Ley atraída del Cielo por almas devotas
Nuestro Señor reveló que la adoración era una Ley instituida espontáneamente por almas devotas en los inicios del cristianismo.
Fueron las primeras comunidades cristianas en reconocer la Presencia Real de Cristo en la Eucaristía y, de esta manera, comprender el significado de estar en contemplación y reverencia ante el Santísimo Sacramento.
Él afirmó que, a lo largo del tiempo y de las generaciones, la adoración ha permitido a las almas atraer, como un milagro espiritual y profundamente interno, las Leyes Divinas de la Fuente al planeta. En consecuencia, la adoración permite a las almas vivir la Voluntad de Dios.
Milagros Eucarísticos
El Maestro observó que la adoración, al permitir la acción de las Leyes Divinas, puede producir, por obra del Espíritu Santo, milagros Eucarísticos, muchos de los cuales están documentados en todo el mundo.
Sin embargo, el Redentor fue más allá: enfatizó que, en este tiempo culminante, Él necesita que nuestras propias vidas como adoradores, en sus procesos de conversión y redención, sean "el milagro Eucarístico mismo a través de la adoración".
Adoradores de otros tiempos
Según Jesucristo, las almas que adoran en este tiempo ya lo hicieron en el pasado. Mediante esta profunda conexión con Su Corazón Misericordioso, se convierten en guardianes de Sus tesoros espirituales y sus vidas son convertidas y redimidas, perdonadas y absueltas de los errores del pasado.
Los cinco Poderes de Cristo
En su Mensaje del 12 de agosto de 2020, Cristo Jesús afirmó que en la Sagrada Eucaristía de la Iglesia Celestial y en todos los Sagrarios de la Tierra se encuentran sus cinco Poderes: liberación, transfiguración, transubstanciación, redención y Misericordia. Exhortó a las almas a buscarlos mediante la adoración.
En la Eucaristía está la síntesis de toda Mi Vida y experiencia con la humanidad, es el testimonio de la Presencia del Dios Vivo.
Ahora ya conocen Mis cinco Poderes, búsquenlos, contémplenlos, adórenlos y los alcanzarán.
Quienes adoran recibirán proporcionalmente
Cristo Jesús aseguró, en Su Mensaje del 26 de septiembre de 2013, que quienes lo adoran recibirán del Cielo proporcionalmente por haberlo contemplado.
Como explicó Nuestro Señor, uno de los efectos sublimes de adorar su Santísimo Cuerpo Eucarístico es transfigurar los códigos corruptos de la humanidad, para que todo, hasta la más pequeña célula de la conciencia humana, se vuelva redimible.
Me apoyo en todos los que adoran al Santísimo Cuerpo de Cristo, que ya no miden el tiempo ni las horas para poder adorarme; porque la adoración es lo que permite la Presencia de Dios, para que Su Mano toque y llegue a los lugares más recónditos del planeta en donde se vive el sufrimiento.
Además, la Virgen María afirmó, en Su Mensaje del 15 de agosto de 2020, que con cada nuevo acto de adoración, los misterios de la Resurrección de Cristo cristifican a quienes lo adoran.
Finalmente, San José aseguró, en su Mensaje del 27 de julio de 2019, que cuanto más contemplamos y adoramos a Dios en la Eucaristía, más Él estará en nosotros y se revelará en nosotros.
La Eucaristía no es solo el Cordero entregado por Amor para reparar los pecados del mundo. La Eucaristía es el Corazón completo y perfecto de Cristo, en donde se guardan los misterios de la Creación y la esencia del Amor de Dios. Amor que, conteniendo en sí a todas las cosas, se multiplicó para que la vida tuviera forma y espíritu, renovando y recreando la Existencia Divina.
La Eucaristía es la presencia del Altísimo revelada. Allí está quién es Dios, Sus misterios, Su Amor y Su esperanza. Contempla y adora a la Eucaristía y en ella, al Portal para retornar al Origen, a la Verdad, a la Luz.
En el Santísimo Sacramento, nuestras conciencias se expandirán
En Su Mensaje del 12 de julio de 2014, Nuestro Señor reiteró que Él está presente en todos los Santísimos Sacramentos de la Tierra, esperando que más almas se atrevan a conocerlo en silencio.
Dijo que si las almas se entregaran un poco más a Su Corazón, Él podría resolver todos los problemas que experimentan; sin embargo, advirtió que el enemigo siempre intenta confundir a los Suyos.
Cristo enfatizó que en el Santísimo Sacramento, nuestras conciencias se expandirán y pronto sabremos distinguir, mediante la adoración, Su Voluntad.
A través de la adoración, sabremos sentir el camino a seguir.
Sabremos distinguir cuándo Él quiere que hagamos ciertas cosas y no otras.
Sabremos esperar cada día las señales que vienen de lo Alto.
Por eso el Maestro enfatizó que debemos enfocarnos en el poder de la adoración; en ella, muchas tormentas se disolverán y encontraremos el remedio para curar los males espirituales.
Yo estoy observando cómo muchos son engañados. La profecía del Apocalipsis se está desdoblando con fuerza y determinación sobre el planeta, pero solo los sabios de corazón percibirán estas cosas. Yo deposito el poder de Mi Confianza en ellos, pero sé que siempre serán más tentados que los hipnotizados.
Quien concentre su corazón y su mirada en el Santísimo no se perderá, sabrá distinguir lo parecido de lo verdadero y contará con herramientas espirituales para poder sobrellevar el tiempo de los engaños.
Tener el Cuerpo Eucarístico de Cristo como centro de la vida
Cristo Jesús reveló que, en el Reino Celestial, la adoración es permanente. Es un estado eterno de conciencia, venerado por los ángeles para rendir homenaje y honrar los méritos que alcanzó a través de su dolorosa Pasión.
El Maestro expresó que aspira a que nuestras almas, algún día, sean como los ángeles:
Quiero que algún día sus almas, de tanto adorar y amar, sean como los ángeles, sean como los santos, sean como todos los seres de buena voluntad que tienen como centro espiritual el Cuerpo Eucarístico de Cristo, su Maestro y Señor.
A través de la adoración, también podemos ser fuentes vivas de Misericordia
San José dijo, en Su Mensaje del 18 de abril de 2019, que debemos contemplar en adoración los altares celestiales donde late el Sagrado y Flagelado Corazón de Jesús, hasta que la piedad, la Misericordia y la compasión se conviertan en realidades vivas en los seres.
Según Él, cuando esto suceda, ya no será necesario derramar estos atributos sobre la Tierra, porque los seres humanos mismos serán fuentes vivas de Gracia, como expresiones perfectas de la Creación.
Una protección invencible
La Virgen María afirmó que, mediante la adoración, estaremos protegidos contra cualquier acción del adversario, porque Cristo, presente en el Santísimo del altar, nos guardará en su Divina Gloria.
Soy la Guardiana del Cuerpo Eucarístico de Mi Hijo y, a través de la perpetua oración, la Adoración de las almas al Cuerpo de Cristo se vuelve invencible; es como cientos de ángeles que son atraídos por la luz de la Adoración para ayudar a disolver las raíces del mal y de la perdición de las almas.
Ya en Su Mensaje del 13 de febrero de 2023, Nuestra Señora enfatizó que, en este ciclo, la oración y la adoración serían una cuestión de supervivencia para las almas.
Anunció:
Sin estos dos ejercicios, Mis amados hijos, disculpen que les diga esto, no conseguirán sobrevivir, porque las energías de este mundo no solo comprometen a las naciones y a los pueblos, sino también colocan a las almas en grandes abismos, desconocidos e impenetrables para la propia Jerarquía Divina.
Tiempos de batalla
Cuando estés solo, inquieto o débil, encuéntrame en la Adoración. Mi Corazón es el Santísimo para el mundo y todos deben penetrar las dimensiones a través de la contemplación. Ella será el escudo que los librará de todo mal. Ella será el lucero que alumbrará la próxima noche oscura.
Nuestro Señor advirtió que estos son tiempos de batalla, pero que la adoración nos dará la fuerza de espíritu para vencer el mal.
El Cielo y el infierno se juegan el reinado de la Tierra. Cuanta más tentación, más será la debilidad; cuanta más Adoración, mayor será la fortaleza inquebrantable del espíritu.
El Maestro aseguró que tiene el poder de disolver toda negatividad; sin embargo, para que esto suceda, es necesario que más almas se unan a Él en la adoración:
Yo tengo la Potestad Divina de disolver todas las crueldades del espacio; bastará que más corazones se postren ante Mi Santísimo Sacramento para que, en profunda honra y Adoración, Yo pueda extirpar las influencias del mal y más almas, que mueren por tan amarga sed, puedan resucitar por Mi Agua de Vida.
Finalmente, el Ángel Custodio del Cuerpo Eucarístico de Jesús, en Su Mensaje del 4 de septiembre de 2023, afirmó que, simplemente venerando el Cuerpo Eucarístico de Cristo en los Sagrarios de la Tierra, podemos reparar los graves ultrajes de la guerra, del hambre, de la enfermedad y de la impunidad.
La adoración tiene el poder de aliviar los desequilibrios planetarios
Cristo Jesús anunció que la adoración al Santísimo Sacramento puede protegernos incluso de los desequilibrios planetarios causados por las acciones de la humanidad.
Hoy expongo Mi Santísimo Cuerpo a todo el planeta porque será el Portal por el cual podrán entrar, para estar a salvo en la Divina Protección y bajo el Amparo de Mi Corazón Eucarístico.
Dichosos serán los que así lo hagan, y si lo hicieran muchos más, mayor equilibrio habrá en este planeta y no será necesario, a pesar de la gran deuda de esta raza, desde su género humano hasta los Reinos de la Naturaleza, que se agiten tanto los Océanos, ni tampoco se mueva tanto la Tierra.
Dijo también, en Su Mensaje del 6 de febrero de 2023, que era cada vez más urgente que nos postuláramos al ejercicio de adoración, para que los diferentes puntos de la Tierra fueran sustentados por un equilibrio espiritual, especialmente su eje.
Un momento en el que todo se renueva
Aquellos de Mis seguidores que se dediquen a la adoración de Mi Sagrado Corazón, recibirán todos los días el impulso de luz que necesiten para resolver problemas, dudas, incertidumbres, falta de fe, falta de amor, de sentido en la vida de la materia o del espíritu.
Cristo Jesús afirmó que cada momento de adoración es un momento de reparación, donde todo se renueva.
No hay nada que quede sin resolverse en aquel que adora a Mi precioso Cuerpo Eucarístico porque, en verdad, fortalece su unión interna con Mi Sagrado e Insondable Corazón, que da vida a todas las cosas, que resucita a todo lo que está muerto y que trae la Paz..
El Maestro también enfatizó que ninguna adoración es igual a la anterior; es un paso hacia la profundización del camino espiritual.
Hoy, quisiera dar mención especial a este ejercicio y a qué es lo que sucede en los planos internos de la vida cuando un alma se postra a los pies del Santísimo del Altar; muchas miserias son disueltas, faltas son perdonadas, curas inexplicables son concedidas y, sobre todo, emerge del corazón adorador la fuerza de Mi Amor para que pueda seguir adelante, adorando por un planeta que sufre, por una humanidad que se enferma y también por los Reinos que sufren las consecuencias de estos tiempos.
Adoración: una fuente de prodigios
En resumen, la adoración al Santísimo Cuerpo Eucarístico de Cristo es uno de los ejercicios espirituales más prodigiosos y profundos que podemos realizar para fortalecer nuestra unión con el Universo Celestial.
En este acto sencillo y silencioso, a la vez que solemne y misterioso, encontramos las claves para:
Por lo tanto, que el cuerpo místico de los adoradores del Cuerpo Eucarístico de Cristo crezca y se fortalezca cada vez más, como un gran ejército de Luz al servicio del cumplimiento del Plan Divino en la Tierra.
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más