Jueves, 28 de mayo de 2020

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Un alma, sensibilizada por la urgencia de la necesidad de despertar de la humanidad, por la urgencia de la necesidad de transformarse y de servir, le oraba a Dios, pidiéndole más oportunidades de servir, más responsabilidades y posibilidades de actuar en Su Plan de Amor, y diciéndole: “Señor, aquí tienes mi corazón, mi espíritu, mi alma, mi mente, mi cuerpo y mis sentimientos; úsame para la manifestación de Tu Plan. Dame más posibilidades de servir, más responsabilidades para llevar adelante la manifestación de Tu Voluntad en la Tierra. No me dejes, Dios, solo observando la somnolencia de la humanidad, sino colócame en aquellos lugares en donde yo pueda servir cada vez más a Tu Corazón”.

Y, sabiendo el Señor del ímpetu sincero de esta alma por servir y entregarse, con amor le respondió: “Alma pequeña, no busques solo servir más, busca servir mejor. No busques en las grandes cosas la oportunidad de manifestar Mi Obra, porque Yo no quiero de ti un mártir en la historia de la humanidad, no quiero de ti un alma revolucionaria que será recordada en los libros de este mundo. Yo te llamo a transformar la condición humana de adentro hacia afuera.

No te llamo a servir más, sino te llamo a servir mejor, a pulir en cada instante de tu vida lo que te separa de Mí. No te llamo a ser memorable para los hombres, pero sí para toda la Creación, porque Mi Proyecto se cumple cuando él triunfa en el interior de los seres, en sus consciencias, en sus almas y en sus espíritus.

Cuando sirves mejor en las pequeñas cosas, en la excelencia de tu entrega, en el amor al prójimo, en la sinceridad de tu oración, en la transparencia de tu expresión en la vida, en la vivencia de los Dones de Mi Espíritu, es entonces, alma pequeña, que una gran obra se cumple.

Cuando sirves mejor, naturalmente servirás más, porque la propia energía de la vida te conducirá a responsabilidades mayores que no siempre serán materiales, sino que muchas veces serán internas, ocultas e invisibles a los ojos de los hombres, porque la atención de los seres humanos está en el exterior, pero la mirada del Universo está en lo que se realiza en la esencia de los hombres, porque es así como se manifiesta Mi Plan.

Por eso, alma pequeña, que tu ímpetu de servir esté siempre vivo, llevándote a servir mejor, más profundamente, más sinceramente, de forma pura y transparente, en un servicio que sucede dentro de tu corazón, entre tu corazón y el Mío; y Mi Voluntad se cumplirá en ti”.

Que este diálogo les enseñe, hijos, a cumplir la Voluntad de Dios de forma sincera y plena, y a servirlo cada vez mejor, de adentro hacia afuera.

Tienen Mi bendición para esto.

San José Castísimo