Sábado, 27 de julio de 2013

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL RECIBIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA SANTÍSIMA MADRE DEL CORAZÓN DE DIOS A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Queridos Míos:

Renacidos en el Amor en la Fe, sean diariamente aquellos que aspiran responder a Mi llamado en cualquier circunstancia.

Hoy Mi Corazón desciende del Cielo, para fortalecer un poco más los corazones del mundo, especialmente los corazones de Mis grupos Marianos de la Red-Luz.

Hijos Míos, a pedido de Dios Todopoderoso, les advierto que llegarán tiempos difíciles para vuestras vidas, como forma de fortalecer y madurar los corazones en la Fe, la Sabiduría, el Discernimiento y el Amor.

Para todos los que dijeron “sí” a Mi Corazón llegarán pruebas enviadas por el Cielo, permitidas por el Señor, para confirmar la adhesión de vuestros corazones al Plan Mayor de Dios para esta bendita Tierra.

Mis amados, no vengo para causar temor en vuestros corazones, sino que vengo para ayudarlos a estar más fuertes frente a los obstáculos de la vida y para que sepan que cuentan siempre con el auxilio de Mi Corazón.

Muchos impulsos de luz están siendo enviados al mundo a través de Mis grupos Marianos. Muchas almas están despertando la Devoción a Mi Corazón y a una confianza plena y concreta en el Corazón de Dios.

Quiero que sepan que cada paso de Mis grupos es acompañado al detalle por Mis ojos y por Mi Corazón, y que Mis manos están preparadas para ir en auxilio siempre que Me llamen y pidan por Mi Inmaculada Presencia.

Agradezco la respuesta amorosa de los grupos de Uruguay, que inician una trayectoria de unión con Mi Corazón y a estos hijos Míos, les digo que en poco tiempo descubrirán en su interior un Amor que desconocen, un Fuego que todo lo vivifica y da Luz a los acontecimientos de la vida.

Vuestras almas tendrán sed infinita de responder a Mi Llamado, porque cada vez que un soldado de Mi ejército se presenta para prestar un servicio a Dios, el Señor envía sobre él una armadura del Espíritu Santo y, cuanto más el responde y más se expande su misión sobre la Tierra, mayor es la presencia del Espíritu de Dios, para traerles las nuevas herramientas de Luz, tales como la Alegría, el Amor, la Fe, la Persistencia, la Sabiduría y el Don de Consejo.

Así, de a poco, paso a paso, ustedes se tornarán intercesores de Dios junto a Su Sierva Fiel; serán brazos del Señor sobre el mundo, en esta Misión de despertar a las almas.

Hoy, Mis queridos, a todos los que escuchan Mi voz, les pido una vez más que sepan perseverar y que solo clamen por Mi auxilio y por el auxilio de Mi Hijo Jesús. Sepan que vuestros corazones están siendo acompañados por el Corazón de Dios. Solo es necesario ser obedientes a las indicaciones del Cielo y seguir escuchando la Voz del Señor, que jamás deja de hablarles al corazón.

Cuenten con la Fraternidad que Mi presencia construyó en vuestras vidas y ayúdense unos a los otros siempre. Mi Corazón también les habla a través del prójimo y Mi Paz también llega a vuestras vidas por medio de la presencia hermana de aquellos que los acompañan en esta trayectoria de Paz.

Sigan con Alegría y en Paz, siempre.

Guío vuestros corazones y les agradezco por estar hoy Conmigo.

María, Madre y Reina de la Paz