Sábado, 22 de enero de 2022

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN FÁTIMA, PORTUGAL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Que el Sagrado Manto Protector de Mi Hijo cure y proteja, en este momento, a cuantos continúan atravesando esta pandemia.

Mi consuelo y amor de Madre están en cada corazón que vive, en este momento, la enfermedad y el sufrimiento.

Por eso, hoy, pido de manera especial que el Manto Sagrado de Cristo cure y alivie a los que necesitan ayuda espiritual y física, porque las almas deberán salir fortalecidas después de esta experiencia con la pandemia.

Mi Corazón y Mi Vida rezan por ustedes en todo momento, pidiéndole y rogándole al Padre que envíe a Sus ángeles curadores para que estén al lado de las personas enfermas y para que, a través de la ayuda angélica, las almas tengan fuerza suficiente para atravesar esta nueva escuela que toda la humanidad, desde hace dos años, atraviesa.

Como Madre, también rezo por otras causas que agravan la situación del planeta y de la humanidad. Rezo por todo el movimiento que la naturaleza ferozmente realiza para que, en los planos internos, se establezca el orden y la paz, a fin de que el cambio climático ya no sea el motivo o la causa de miles de desplazados y desfavorecidos.

También, ruego a Dios por los más vulnerables y solicito que el Bendito Manto Protector de Cristo proteja y resguarde a los que, violentamente, viven el fin de los tiempos.

Este momento, queridos hijos, lleva a cada uno a mirar y a pensar en el otro, no como un problema, sino como una necesidad de llevarle amor, amparo y refugio, no solo espiritual, sino también material.

Cuando realmente exista una consciencia fraterna en esta humanidad, Yo les aseguro que muchas situaciones serán resueltas; mientras tanto, los más vulnerables están sometidos por los que se sirven del caos y lo diseminan en el mundo.

Oremos con más fervor. Que Dios escuche las oraciones de todos Sus hijos.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz