APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO EN EL SEXTO DÍA DE LA SAGRADA SEMANA, EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Nunca puede faltar, en los hijos de Dios, el Don de la Luz, porque al faltar esta Luz en el mundo, reinan las tinieblas en muchas consciencias sumergidas por el caos y el mal.

Hoy, con todo el fervor de Mi Corazón, invoco para cada uno de ustedes el Don de la Luz, que hoy se enciende a través de esta Menorah como un símbolo de la trascendencia y de la transfiguración de las consciencias, así como hoy Me muestro a ustedes como el Cristo Transfigurado y Glorificado, como la propia victoria de la Cruz.

Les traigo a las almas estos Dones que se encuentran dentro del Don de la Luz, porque el Don de la Luz de Dios está basado en Su Amor Eterno y en Su Divina Unidad.

Estas dos poderosas corrientes del universo permiten que las almas despierten de la ilusión; así como la propia Luz de Dios, que encarnó a través de Su Hijo, hizo despertar, en aquel tiempo, a todos los que estaban dormidos, los despertó hacia el verdadero camino espiritual, el camino de la transformación, el camino de la cristificación.

Que esta Luz de Dios, que hoy necesita el mundo, impregne todos los espacios del planeta y de las consciencias; que extirpe de los seres humanos los códigos de los pecados capitales, que llevan a la perdición y a la distracción a las consciencias.

Hoy, a través de Andrómeda, les traigo este Don para que se animen a transfigurarse, a trascenderse y a elevarse, así como el propio Hijo de Dios se transfiguró y se elevó por un solo fin: por amor a todos.

Que esa sea la causa de sus vidas: estar dispuestos, abiertos y disponibles a vivir Mi Camino, el Camino de la Voluntad que intento trazar a través de sus consciencias. Un camino que no termina con la muerte, un camino que continúa a través de la vida eterna y de las experiencias y aprendizajes que ustedes podrán vivir en esa trayectoria evolutiva, entre las dimensiones y los planos de consciencia.

Sería muy limitado pensar que la vida termina aquí. Sus esencias recibieron estos cuerpos que ustedes tienen para poder desplazarse y aprender, para llevar en lo más profundo de sus células todos los códigos de perdón y de amor que puedan alcanzar en esta vida. Porque al fin de todo, la trayectoria de cada uno de los Míos será volcada en la Fuente Primordial para que, a través del triunfo del Amor y de la Redención que Cristo les proporciona en estos tiempos, ustedes, a través de sus experiencias y aprendizajes, puedan ser el resultado que Dios espera.

Sean las consciencias que se animen a recrear esta Creación, para que todo se pueda reparar y sanar.

Con esta puerta que les abro hacia lo desconocido, hoy los invito a subir, no al Monte Calvario, sino al Monte de la Victoria de Cristo, el Monte de los Bienaventurados, la Montaña de los Nuevos Cristos, desde donde podrán vislumbrar y contemplar la llegada de la Nueva Tierra, de la Nueva Raza, de una Nueva Humanidad que ya no estará vinculada con las puertas del mal, sino que estará redimida y también consagrada al Plan Divino; un Plan que no finaliza aquí, un Plan que no finaliza con la transición de la Tierra, porque es un Plan que continuará siendo escrito a través de la evolución de todas sus consciencias y de las consciencias de sus hermanos.

Ahora, podrán comprender ampliamente que la evolución no termina aquí, que los aprendizajes no terminan aquí, porque si su propio Maestro encarnó en el mundo, predicó en el mundo, murió en este mundo y ascendió a los Cielos, al Corazón del universo, la gran Constelación de Andrómeda, ¿acaso creen que no seguí aprendiendo?

Esto es lo más precioso de la evolución y de la Creación, que las consciencias no se acomoden en el camino espiritual o en el camino del servicio, porque la verdadera meta para cada uno de ustedes se encuentra en la Eternidad, en lo que llamamos Eterno Presente, en donde no existe el pasado ni existe el futuro, en donde existe lo que aquí, en el universo llamamos de cuarta dimensión.

¿Se animarán, interna y conscientemente, a expandir sus consciencias hacia el Universo Mayor, para ingresar en el Real Tiempo del universo, en donde está escrita su verdadera trayectoria del pasado y del futuro?

Ustedes son como piezas preciosas de este gran puzle de la Creación Universal, en el que el Padre Eterno aspira a tenerlos como joyas preciosas dentro de las moradas que Él tiene preparadas para cada uno.

Por eso, la vida no termina aquí. Es una constante elevación y esfuerzo por medio del ímpetu de vivir el Propósito, por medio del esfuerzo de vivir la Voluntad de Dios y por medio de la determinación de vivir la Verdad.

Por esa razón, Yo estoy aquí, porque sé que pueden seguir caminando, se pueden liberar del pasado, de aquellas cadenas y amarras que no los dejan caminar. Yo vengo a cortar con Mi propia Espada esas cadenas y vengo a liberarlos de los grilletes de la perdición para que, a través de la Consciencia del Arcángel Miguel, cada uno de sus espíritus se forme como un guerrero de la Paz, que sea capaz de contemplar y de celar por la Llama Sagrada del Divino Propósito que está viva y latente como un terafín en el corazón de Andrómeda.

Postúlense a ser discípulos de la Jerarquía Universal, vaciando sus corazones, purificando sus vidas, expandiendo sus consciencias hacia el Universo Sideral, porque allí está el verdadero sentido y la verdadera razón de todo lo que vivió su Maestro y Señor en la Pasión y en la Cruz.

Todos ustedes, en el fin de estos tiempos, y después de todo lo que han escuchado y aprendido a través de los años, ya tienen la capacidad y también tienen la razón para poder comprender la expansión de la Consciencia de Cristo después de Su Ascensión a los Cielos.

Porque si ustedes están en ese nivel de consciencia y con esa actitud, no solo permitirán que los Códigos de Mi Pasión se derramen sobre el mundo o que ustedes mismos se postulen como los Nuevos Cristos, sino que también Me permitirán, como el Gran Gobernante del Universo, como el Gran Espíritu de la Humildad de Dios, que despierte a las consciencias que necesitan despertar y recordar lo que verdaderamente fueron y no los errores que cometieron, porque Yo siempre les concederé el perdón y la reconciliación, siempre y cuando sean consecuentes con las Leyes y principalmente Conmigo.

Porque aquí, Yo no vengo como un juez. Yo vengo aquí como el Abogado de Dios, como el Intermediario y el Mediador de los corazones y de las consciencias que en estos tiempos deben reencontrar su origen, para que nada ni nadie los pueda derrotar ni vencer, ni siquiera Mi enemigo que también será vencido por Mí en algún momento. Pero no como muchos piensan o creen, porque será una entrega que Mi Corazón hará, semejante a lo que fue en la dolorosa Pasión.

Ahora, ¿pueden comprender el sentido oculto de Mi Venida a la Tierra? 

Porque no solo fue anunciado y profetizado, o escrito en las Escrituras Sagradas. No solo reaparecí después de haber muerto en la Cruz, revelando el Poder de Mi Resurrección, sino que también traje un Mensaje más amplio a todas las consciencias que fueron fieles a Mí hasta el último momento. Una Gracia que Yo concedí, una promesa que Yo realicé hasta el último momento, a todos los que estuvieron a Mi lado sin comprender por qué Yo Me fui a los Cielos.

Si no hubiera ascendido al universo, ¿cómo podría haber concebido la unión de Mi Gobierno Espiritual con toda la Creación de Mi Padre?

Todo lo que estaba escrito, todo lo que estaba profetizado, hasta aun lo que era desconocido, ya estaba previsto y ha sucedido, se ha cumplido. Por eso, este momento y este tiempo que ahora ustedes viven Conmigo conscientemente, sin dar lugar a ninguna duda o a ningún cuestionamiento, ya estaba previsto.

¿Ahora comprenden que están dentro de Mi tiempo de revelación?, en donde los Sellos del Apocalipsis no solo se están abriendo, sino también el Relicario de Mi Corazón. El Templo de Mi Alma y Divinidad se muestra al mundo a través de estas Palabras y de estos impulsos que solo intentan hacerles recordar que su propia cruz puede convertirse en el triunfo que Yo tanto espero.

Por eso, les pido que ya no reclamen. Por eso, les pido que no escapen de su responsabilidad y de su compromiso, porque no habrá otro momento ni otro tiempo para que lo puedan vivir o cumplir. El tiempo y el momento es ahora.

Por eso, con valentía y coraje, amen su propia cruz. Con valentía y coraje, carguen su propia cruz, no con victimismo o pesimismo, sino con la madurez de un espíritu que comprende lo que es estar en Cristo, que no cede a fragilidades o a debilidades, que no se deja golpear tan fácilmente por cualquier viento contrario, sino que con su corazón abierto y sus brazos abiertos sostiene el estandarte de Mi Paz y de Mi Luz en el mundo, así como Yo sostengo sobre el centro de sus corazones, la poderosa Cruz de Emmanuel.

Yo siento que, en verdad, están abiertos para vivir el cambio de estos tiempos. No le den fuerza a aquello que no pueden hacer, denle fortaleza a aquello que sí pueden alcanzar, porque si hoy están encarnados y están aquí, a Mi lado, escuchándome una vez más después de dos mil años, ¿acaso el Padre se ha equivocado?

Comprendan que este es un tiempo de gran reconciliación y de perdón. Perdónense a ustedes mismos y aprenderán a perdonar a los demás. Ya no se juzguen a ustedes mismos y aprenderán a no juzgar a nadie más.

Por eso, les vuelvo a decir, como les dije a Mis apóstoles en la Última Cena, que es la Ley primera de todas las Leyes: Ámense los unos a los otros, así como Yo los amo en este momento.  

Si sus consciencias se elevan a través de una amnistía inexplicable y extraordinaria, la consciencia arcaica de la humanidad también se eleva. Crean que eso es posible, Yo lo estoy diciendo.

Tengan fe y no perecerán. 

Tengan fe y aprenderán a caminar correctamente hacia Mí. 

Tengan fe y sabrán lo que es un guerrero de la Paz. 

Tengan fe y sabrán qué es un guardián del Propósito Divino. 

Porque llegará el tiempo en el que deberán unir sus espadas con la Mía para que ese Sagrado Propósito descienda, exorcizando y expulsando las corrientes del mal que, junto con las Huestes del Arcángel Miguel, liberaré y redimiré de este mundo para que los Cristos vuelvan a erguir sus cabezas y eleven su mirada hacia el universo. Y así, de una forma tan simple pero misteriosa, vean venir a Cristo en Su Retorno.

Las almas aún necesitan de los objetos sagrados para comprender Mis Misterios y eso no significa algo menor, sino que a través de los objetos sagrados las almas acceden a la develación de esos misterios espirituales e internos, que Mi Corazón le ofrece al mundo por medio de la Fuente de Gracia y de Misericordia que proporciona los méritos de la Pasión, vividos por su Maestro y Señor.

Por eso, como en todas las Sagradas Semanas y los Viernes Santos, vengo a bendecir estos objetos sagrados que hoy Me ofrecerán, para que puedan estar en contacto físico Conmigo a través del espíritu sagrado de la reverencia, de la devoción y de la paz.

Elévenlos.


“Señor y Padre del Universo,
que has concebido a Tus criaturas
a imagen y semejanza de Tu Corazón y Vida,
por los méritos de la dolorosa Pasión de Cristo,
por los méritos de Su Resurrección y Ascensión a los Cielos,
concede a través de estos objetos sagrados
la unión perfecta y predilecta de Tus hijos
con Tu Glorioso y Poderoso Corazón,
para que unidos a Tus Rayos de Amor y de Misericordia,
las almas alcancen la consagración y la cura de sus vidas,
a fin de que se establezca el tiempo de la redención y de la rehabilitación.

Que todos los que tengan fe en los objetos sagrados
 se sientan en este momento protegidos
y también amparados bajo el Manto Poderoso de Cristo
que los hará invisibles ante las interferencias y asedios del mal.

Concédeles, Señor, las Gracias de Tu Reino
y que a través de estos objetos sagrados
las almas siempre vean el camino de la Luz,
por la victoria del Retorno de Cristo.

Amén”.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Vamos a pedir ahora, a los hermanos sacerdotes, que vengan aquí con el incienso y el agua para bendecir los objetos sagrados de todos los hermanos que están presentes. Y vamos a colocarnos de pie también para acompañar en este momento la bendición de los aceites que están siendo ofrecidos al Redentor para la unción de los enfermos y para el exorcismo de los cuerpos.

El Señor dice que le trajeron muchos aceites. Él está mirándolos.

Pueden venir aquí Madre María del Salvador, Madre María Fidelia, Madre María del Huerto y Madre María Shimani.

Vamos a participar juntos en este momento de la bendición de los aceites, de los santos óleos del Señor.

 

“Así como fui ungido por el amor de Mis esposas y Madres,
Santo Señor del Universo,
Padre de la Paz y de la Misericordia Divina,
Curador de toda la Creación,
Sanador de todas las heridas,
a través de la Fuente de Tu Amor Altísimo,
¡oh, Santo Padre del Universo!,
haz descender Tu Espíritu en este momento,
así como hiciste descender Tu Espíritu en el Huerto Getsemaní
para aliviar los tormentos de Tu Señor, de Tu Predilecto Hijo.

De la misma forma hoy Te pido, Padre Celestial,
que en nombre de estos objetos sagrados
puedas bendecir a la humanidad con Tu Presencia
y que como un Padre Amado,
Bondadoso y Prodigioso, Amoroso y Eterno,
tomes de la mano a Tus hijos
para guiarlos y conducirlos a Tu Reino Celestial,
a fin de que se cumpla Tu Voluntad
por los tiempos que vendrán. 

Amén.

 

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén”.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Puede descender, Fray, a bendecir los objetos de los hermanos.

 

Y ahora, debo retornar al Cielo.

Hoy, vivimos juntos, en nombre de la humanidad, una comunión muy especial e íntima para Mí, que es la Comunión de Espíritu con el Espíritu de Dios.

Por esa razón, quisiera que Me despidieran cantando “¡Oh, Supremo Curador!” para que siempre recuerden que Dios les dará la Cura, les dará la Paz, les dará Su Amor. Siempre deben abrirse a esto y confiar.

¡Les agradezco, por hacer triunfar la Cruz del Redentor!

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Desde Su crucifixión y por la eternidad, del Corazón de Cristo brotan Sangre y Agua, goteando poco a poco sobre el mundo y sobre la Creación. Siempre que oran a Su Divina Misericordia, siempre que viven bajo esa Ley, siendo misericordiosos, esas gotas de Sangre y Agua tocan a las almas, lavan sus ojos para que puedan ver un nuevo camino y lavan su corazón para que puedan ser dignos de caminar sobre él.

En estos tiempos, hijos, necesitan aprender a contemplar y a amar las señales de su salvación, como lo son la Sangre y el Agua que brotan del Corazón de Cristo.

Para mantenerse con el corazón en equilibrio, creciendo en la vida espiritual con fundamentos verdaderos, no basta vivir de los propios esfuerzos y conocimientos o de toda la Gracia recibida, también necesitan experimentar la rendición y el amor que la contemplación del sacrificio de Cristo los conduce a vivir.

Hay un poder único en la Sangre de Cristo: el poder de restaurar, curar y redimir lo que es imposible. La Sangre de Cristo es la base de toda redención, es el sentido de la espiritualidad en este mundo, es el secreto para la santidad, la puerta para la rendición, la revelación de los misterios de Amor más profundos de toda la Creación.  Y, para profundizar en este misterio, basta que clamen sinceramente por Misericordia, que contemplen espiritualmente la Cruz de Cristo, siempre alzada a los niveles internos de la consciencia humana y, reviviendo Su Pasión repetidas veces, reencuentren el sentido de sus vidas.

Contemplando la Sangre de Cristo encontrarán los Dones de Su Espíritu, la unidad de un Dios Trino que Se entrega por Amor a cada instante; revivirán la humildad de saberse pequeños ante un Amor inmenso y, al mismo tiempo, la Gracia de saberse llamados a imitarlo.

Oren por la Misericordia y vivan las bases de toda espiritualidad verdadera. En la Sangre de Cristo está la base de toda la vida religiosa. Oren unos por los otros, contemplando la Sangre de Cristo y, sobre todo, ríndanse a los pies de Su Cruz y comprenderán lo que les digo.

Tienen Mi bendición para esto.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Cuando el alma mira hacia el Cielo, fortalece el propio espíritu, la propia fe, retoma sus aspiraciones más puras y renueva sus votos con Dios. Pero, cuando vuelve sus ojos hacia la Tierra pierde sus esperanzas, se encuentra con lo que cree que es la realidad y no consigue percibir en sí misma ni en el prójimo la forma de manifestar lo sagrado que la aguarda en el infinito. El alma busca fuerzas, ora y pide la Gracia de saber cómo llegar a eso que contempla en el universo.

Y hoy les digo, hijos, que cuando comiencen a mirar no solo hacia el Cielo, sino también hacia lo que verdaderamente son, descubrirán que la materia y el infinito se unen en la consciencia humana. Barro y espíritu se tornan uno cuando los seres despiertan a lo que son, y no será necesario morir para resucitar en la eternidad, sino que podrán descubrir la verdadera vida y la eternidad dentro de ustedes; dádiva revelada al corazón que ora, que adora y que no encierra a la verdad divina en su mente ni tampoco en lo que ya fue dicho, porque a pesar de que todo ya fue dicho, muy poco fue comprendido y vivido. 

Por eso, busquen lo sagrado en el propio interior. No lo busquen solo mientras oran, quieran corresponder a él mientras viven. 

Tienen Mi bendición para esto. 

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Un alma que aspiraba a conocer la Eternidad y el Paraíso, y que cada día buscaba méritos para llegar a merecer un lugar en el Cielo, le cuestionó al Señor sobre cuál sería el camino para merecer estar a Su lado, diciéndole: “Señor, la vida en la Tierra, a pesar de ser sagrada, es poca para mí. Mi alma aspira ardientemente a estar Contigo en el Paraíso de Tu Eternidad. Dime entonces, Dios amado, ¿cómo hacer para permanecer a Tu lado en el Infinito?”.

Y con profundo amor y sabiduría, el Señor le respondió: “Alma pequeña, ¿qué es el Paraíso para ti? ¿Cómo piensas, en tu corazón, que hay vida en Mi Reino? Yo te creé para habitar en ti; de esta forma, quiero hacerte comprender que no necesitas desear estar en el Cielo para estar a Mi lado, sino descubrirme en tu interior. Feliz y bienaventurada es el alma que sabe encontrar en la propia esencia la unidad Conmigo, aquella que no busca afuera de sí, sino adentro, en lo profundo del propio interior.

Tantas son las almas que dicen querer estar Conmigo, pero ¿cuántas son las almas que, en silencio, se detienen para encontrarme en su propia esencia?

Muchas son las almas que dicen preferir Mi Reino al mundo, pero ¿cuántas son las que dejan de lado las cosas del mundo, aun por un instante, para buscar Mi Reino en el propio corazón y saberse ese Reino?

Muchas son las almas instruidas en Mi Conocimiento, que saben Mis Palabras y dicen amarlas, pero ¿cuántas son las que, después de ser instruidas sobre algo, no se detienen para conocerlo ni buscan una experiencia sobre lo que aprendieron?

Alma pequeña, Mi Reino está en ti, así como Yo también estoy en ti, y el camino para encontrarme es simplemente buscándome de verdad, con sinceridad y con amor. Cuando simplemente te detengas para encontrarme en ti, verás que Mis Misterios no estaban ocultos en las estrellas. Mi Paraíso no solo está en el Cielo, también está en tu interior”.

Que este diálogo, hijos, los inspire a buscar a Dios en el propio interior, y no solo a conocer Sus Misterios, sino también a experimentarlos cada día.

Tienen Mi bendición para esto.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Un alma que creía en Dios, en Su Existencia Infinita, pero que no podía comprender los misterios de la oración, le cuestionó al Señor, diciéndole: “Señor, sé que existes y que eres el Dios de la vida y de la eternidad, pero sé que existen leyes que mueven esta vida y que existe el libre albedrío que nos da la libertad para que estemos en ella. Siendo así, Señor, no comprendo el misterio de la oración y no consigo creer que un Rosario o un simple diálogo Contigo transformen las leyes de la Tierra”.

Sintiendo el Señor la sinceridad de sus cuestionamientos, le respondió, diciéndole: “Alma pequeña, lo que ignoras en verdad no es el poder de la oración, es Mi Poder y Mi Amor por ti. Es la capacidad que tienes de unirte a Mí y la potestad que Yo te doy cuando oras en Mi Nombre, porque eres una hija querida y amada. Y como un hijo le pide a su padre y recibe de él lo que necesita, así Yo, que puedo todas las cosas, también les doy a Mis hijos aquello que necesitan.

Sin embargo, el misterio de la oración es aún más profundo, porque no espero que Me pidan solo aquello que necesitan para permanecer en el mundo como almas del mundo. Lo que Yo espero es que ustedes Me pidan aquello que hace de este mundo una parte de Mi Reino. Y, cuando se rinden ante Mí y abren sus corazones, Yo les concedo el perdón, les revelo el Amor oculto en sus esencias y les doy la potestad de transformar las leyes y la vida, como lo hacen los Ángeles y los Arcángeles al recrear Mi Creación.

No solo el misterio de la oración te es desconocido, alma pequeña, sino también el misterio de tu propia vida y el misterio de Mi Amor aún te son desconocidos. Por eso, aunque no comprendas, ora y rinde tus incomprensiones a Mis Pies, a los pies de Mi Altar, porque cuando Yo encuentre en ti un corazón abierto, no solo te haré comprender, sino saber y vivir todas esas cosas”.

Que, a través de este diálogo con Dios, hijos, sus almas sean inspiradas a orar y a clamar cada día más por la transformación del mundo.

Tienen Mi bendición para esto.

San José Castísimo 

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Mientras caminaba con la Cruz, en el Corazón de Cristo, además de sufrimiento y dolor, había paz y compasión.

Ese era un ejercicio constante de Su Espíritu Divino en un cuerpo humano, trascender a cada segundo las dimensiones del caos, de la ignorancia, de la maldad, en las que los seres que lo rodeaban estaban absorbidos por la oscuridad, e ingresar en las dimensiones de paz, de compasión, de sabiduría, de Verdad, en donde Sus Ojos podían ver cada acontecimiento como era y no como parecía ser.

Los Ojos del Cristo del Calvario contemplaban el mundo y veían una realidad más compleja, más profunda; miraban la maldad de los seres y veían esencias presas del yugo de esa maldad; conocían al espíritu del mal que conducía cada acción de los que lo maltrataban y sabían que la forma de liberar esas esencias era el Amor, el Amor no solo de la Cruz, sino el Amor de toda la eternidad; el Amor que comenzaría a nacer con Su ejemplo, como una naciente que surgiría de la última gota de Sangre que se derramaría de Su Cuerpo, pero que se tornaría afluente a través de las almas que, a lo largo de los siglos, responderían a Su Llamado e imitarían Su ejemplo, renovando y multiplicando ese Amor.

En cada obstáculo de la vida, hijo, que tus ojos sean los Ojos del Cristo del Calvario, contemplando la Verdad y no la ilusión, colocados en las dimensiones de paz y no de odio, sabiendo que la cura proviene del Amor vivo, en el ejemplo de cada segundo de la vida.

Así es como cumplirás el Plan de tu Padre Celestial y serás uno con Él en todos los tiempos.

Tienes Mi bendición para esto.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

El Sábado de Aleluya fue marcado por el silencio y por el vacío, en el cielo como en la Tierra. El Corazón y el Verbo del Creador se silenciaron, y el propio Dios se recogió en lo profundo de Su Corazón. Allí se gestaba el poder de la Resurrección de Cristo, la sabiduría de la eternidad, el renacimiento y la renovación del Amor.

Ya no sería por la ciencia que el universo conocería la eternidad y el prolongamiento de la vida. La resurrección espiritual era algo nuevo, nunca vivido en toda la Creación de Dios; y hasta aun los sabios y los arcángeles acompañaron en silencio el movimiento de amor que, en todas las dimensiones, hacía resurgir la vida de Cristo.

Su Espíritu, que había entregado todo de Sí, tocó al Padre con su experiencia y volvió hacia la Tierra para que pudiera renovar Su Amor.

Dios acompañaba, en profundo silencio, el Amor que nacía de Su Hijo. Hasta el propio Creador aprendía de Su entrega y de Su Resurrección.

Por el poder perfecto del Amor, Su Alma, Espíritu, Divinidad y Cuerpo humano y material se encendieron y se reconstruyeron. El Amor era el aire que volvía a circular en Sus células. El código de la cristificación dio vida a Su Sangre, a Sus órganos físicos y espirituales. La vida recobraba su sentido.

El Amor de Cristo permanecía expandiéndose más allá de los niveles materiales. Su entrega siguió creciendo y penetrando dimensiones desconocidas, tanto en el cosmos como en las dimensiones más oscuras de la vida material, los llamados infiernos terrestres.

Como una ola que caminaba en todas las direcciones del mar de la Creación, el Amor de Cristo recorría los universos y las manifestaciones de la vida. Al mismo tiempo que tocaba a todas las criaturas, la propia experiencia de Amor hacía que Su Cuerpo reviviera y se renovara en una nueva vida, imperecedera, una vida omnipresente y omniabarcante. Una vida que no tiene una dimensión propia y que al mismo tiempo habita en todas las dimensiones, vida eterna por ser vida en Dios, en la unidad con el Creador.

Así como el Padre está en todas las cosas, también el Hijo lo está. Su Cuerpo se podría manifestar en la materia como en las supradimensiones. Y donde no hay materia ni colores y sonidos, solo la existencia silenciosa e invisible, allí también está el Hijo de Dios. Todo se une en Su Amor.

La Resurrección de Cristo no se explica con palabras o con ciencias, porque trasciende todas las ciencias, todo entendimiento y toda sabiduría. El propio Creador, en el Sábado de Aleluya, se renovaba y con Él, toda la Creación. 

El silencio es la única explicación para lo que allí acontecía. En el silencio podrán experimentar ese Amor que todo abarca. Plenitud, omnipresencia, vida, todo se hizo nuevo en el Sábado de Aleluya y se manifestó en el Domingo de Gloria.

Mediten, sientan y experimenten los códigos de esta experiencia divina.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Que todos los días sean para ti el día de recordar la Pasión de tu Señor; día de recogerse en Sus Brazos y en Su Corazón; día de estar en la presencia de Su Sangre y de Su eterna entrega; día de aprender a amar como Él amó y ama para siempre.

Que todos los días sean para ti la subida al Calvario, donde debes ver los obstáculos como oportunidades para amar, las caídas como oportunidades para renovarse, las humillaciones como oportunidades de estar en el vacío y allí ser llenado por Dios. 

Que todos los días sean para ti el día de superarte en el amor para aproximar tu consciencia, cada vez más, al Amor de Cristo.

Que todos los días sean para ti el día de tu entrega, de tu rendición, de tu oferta, porque la eternidad te será poca para seguir los pasos de Cristo, y tus pasos nunca deben detenerse. 

Por eso, hijo, hoy recuerda y revive la Pasión de tu Señor, para que tu consciencia comprenda que todos los días son días de imitar los Pasos de Cristo. Todos los días son días de ver un nuevo Cristo nacer.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo 

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Desde Su nacimiento hasta Su vida adulta, Jesús tenía pleno conocimiento de la vida universal y de la vida profunda de cada ser. Sabiendo del Propósito de la humanidad en la Tierra, Su Corazón siempre se sustentó en la esperanza del advenimiento de la nueva vida, en la manifestación de la Nueva Humanidad.

La Verdad de Dios vivía en Su interior y, durante el Calvario, ella fue la base de la sabiduría que despertó el Amor Crístico en Su Corazón y renovó el Amor de Dios.

Hoy, hijo, deja que las revelaciones de este tiempo sean para ti la sabiduría que viene como base para el calvario del mundo y, sobre todo, para el despertar y la renovación del Amor.

Recibe con gratitud las ciencias que te son enseñadas, el conocimiento superior del que la humanidad siempre estuvo tan ignorante.

Deja que la sabiduría despierte en ti la certeza de la eternidad y de la redención de todas las almas para que, con esa Verdad viva en tu corazón, puedas tornar pequeñas las pruebas de este final de ciclo.

Ennoblece y fortalece tu corazón con la sabiduría y con el conocimiento. Permite que la Verdad Superior se aproxime y con ella, lo que verdaderamente eres. Así tendrás bases firmes por las cuales caminar para retornar a Dios.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mi tiempo final se aproxima, momento en el cual su Maestro y Señor dará y entregará Sus últimos impulsos, los que terminarán de concretar el ciclo de la manifestación, aunque todo esté sucediendo en el planeta.

Por esa razón, compañeros, llegará el momento de colocar en práctica, en la vida, todo lo que amorosamente les enseñé; será el tiempo en el que todo se definirá.

Yo los preparo para que cuando les llegue el momento de tomar una decisión sea consciente y con discernimiento; por eso en esta última etapa vengo para entregar las últimas llaves, instrucciones que abrirán la puerta de sus consciencias para que puedan dar pasos en el amor y en la unidad.

Pero, aunque todo esté sucediendo en poco tiempo, no permitan que su fe oscile o cambie. Al contrario, permitan que Mi Amor, que es incondicional y eterno, los ayude a sobrellevar todo lo que verán y conocerán.

Este es el tiempo y la hora de prepararse, de entregarse y de confiar, siguiendo la luz de Mis pasos hasta poder encontrar el portal hacia lo eterno y lo mayor.

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice,

Vuestro Maestro, Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO DURANTE A VIAJE DESDE LA CIUDAD DE SAN PABLO, BRASIL, HASTA BUENOS AIRES, ARGENTINA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Mientras a tu alrededor el mundo agoniza, que tu corazón esté en oración, que tus sentimientos estén en paz, que tu mente esté en Dios y que tu espíritu esté en el Propósito Divino, el que se diseña en las estrellas para después plasmarse en la vida material.

Cuando tu condición humana, en plena purificación, pareciera sucumbir y perder la esperanza, concentra tu atención en el espejo que hay en la esencia de tu ser y sabe que guardas en ti una puerta hacia el Cosmos, hacia la Eternidad, hacia la verdadera vida, amparada y guiada por el Pensamiento Divino.

Con los ojos fijos en el espejo de tu esencia, concentra tu atención en buscar el Amor de Dios y Su Gracia. Siente la presencia de las estrellas y de todas las fuentes de vida y de energía que habitan en ellas. Sabe que ese espejo que guardas en tu interior no es el único ni está solo, sino que es parte de una red que se creó desde el principio de la vida para que todos los hijos de Dios encontraran el camino de retorno a Su Corazón.

Permite que el espejo que habita en ti esté vivo y activo, a través de la oración y de la transformación de tu ser. Abre el camino para que el Creador refleje en tu espejo interior Su Verdad y que tú puedas ser un vehículo de esa Verdad para el mundo.

Nutre tu ser, uniéndote al espejo de tu interior y a los Espejos del Cosmos, pero, más que eso, permite que ese instrumento de Dios en tu corazón sea una luz que guía en la oscuridad, sea una señal para que tu Señor encuentre a los autoconvocados en este tiempo.

En el espejo de tu corazón se refleja la Verdad, el Camino y la Vida, porque él es parte de la Presencia de Cristo en tu interior. Por eso, hijo, no pierdas la dádiva de tener en ti esa herramienta divina que puede hacer de tu ser un instrumento en las Manos de Dios.

Hoy, ocúpate en descubrir este misterio del espejo de tu corazón, a través de una vida de oración y de unión con la Hermandad para que, mañana, cuando todo parezca perdido, puedas mirar hacia tu interior y recobrar la fe y la esperanza.

Te dejo hoy una clave y un misterio para develar. En oración, comprende lo que te digo.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

La vida pasa, efímera y simple en lo que les es palpable, para revelar una eternidad y una Verdad sublime. Toda expresión de vida que no es material no perece y perdura, para demostrarle a los hombres en donde debe estar su corazón.

Las memorias, los aprendizajes, los ejemplos, las enseñanzas, los verdaderos sentimientos de amor, todo eso permanece vivo, dentro y fuera de los hombres y también en el Corazón de Dios y en los Libros Sagrados, como parte de la historia de la humanidad, como parte de la historia de la renovación del Corazón del Padre.

La vida pasa de forma tan ligera para revelar una Verdad y un misterio que trasciende el cuerpo y el entendimiento humano: hay una realidad que excede a toda la sabiduría que la humanidad ya conoció; hay una Vida que trasciende todo lo que hoy ustedes comprenden como vida.

Vean, hijos, como el Eterno toca a sus puertas para que entren en el Tiempo del no tiempo, en el Tiempo Real.

Dejen que este momento no sea para ustedes una pérdida, sino un hilo con la Verdad, porque su Instructor en la Tierra deja el mundo para alzarlos hacia el Universo. Todo lo que él aprendió en vida los elevará hacia una Vida Mayor, y los aprendizajes sublimes que vivirá en el Universo él se los revelará al corazón, como una enseñanza superior.

Por eso, abracen este momento como un paso hacia el Infinito. Dejen que este nuevo ciclo de su Instructor y Maestro, de esta y de muchas vidas más, los eleve hacia nuevos ciclos, como Obra y como seres en evolución.

Aquel que acompañe este momento con gratitud dará un paso hacia el Infinito y colocará no solo su corazón, sino a una parte de la consciencia humana, más cerca de Dios, en Su Eternidad.

La Eternidad, hijos, no es la muerte. La Eternidad es la Vida revelada.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO DURANTE EL VIAJE DESDE MÁLAGA, ESPAÑA, HACIA FÁTIMA, PORTUGAL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Primera Serie de Poemas
Décimo poema de un alma al Sagrado y Bendito Corazón de Jesús

Sálvame, Jesús mío,
de mí mismo, de cualquier acción,
hecho o pensamiento
contrario al Tuyo.

Sálvame, Señor,
de mis ideales
y de mis propios juicios de valor,
para que pueda representarte
según Tu Voluntad.

Sálvame, Señor,
de toda adversidad
interior y exterior.

Sálvame de toda oscuridad
que pueda reinar dentro de mí,
y disuelve con Tu Poder
todo lo que sea contrario
a Tu Luz y a Tu Amor.

Déjame, Señor,
que te pueda reconocer
dentro de mi corazón,
como ese amor y esa paz inalterables,
perpetuos y eternos,
rayos que provienen de Ti
y que todo lo renuevan.

Permíteme rendirme a Ti, Señor,
cuando más lo necesite
y hazme conocer el poder
y la sabiduría amorosa
de Tus misterios.

Déjame a Tu lado,
para que pueda sentir
el perfume de Tu Amor
y, sobre todo,
el latir constante de Tu Corazón.

Que en cada sacrificio,
mi vida se renueve
y sea una victoria más
para la humanidad y el planeta.

Que en cada entrega
todo sea ofrecido en honra
a Tu Divino y Eterno Corazón.

Amén.


¡Les agradezco por guardar las palabras de esta alma en sus corazones!

Los bendice,

Vuestro Maestro, Cristo Jesús

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE BAD VÖSLAU, AUSTRIA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Que Mi Corazón de Paz sea la guía que los lleve a Cristo

Hijos Míos:

Vengo en un tiempo de caos, de ignorancia y de indiferencia para con Dios, para con Su Plan y Su Verdad, para abrir los ojos de una generación que se está perdiendo en las heridas y en las memorias del pasado.

Vengo para revelarles un Propósito Divino que borra para siempre de sus consciencias los obstáculos que los separan de Dios.

Y ese mismo Propósito les revela no solo lo que el Corazón del Padre les ofrece, sino sobre todo, hijos, los aproxima a la Verdad del Corazón de Dios. Verdad que estuvo oculta a lo largo de toda la evolución humana y que ahora debe revelarse.

Vengo como la Madre del Mundo, como su Madre Universal, para que comprendan que no solo la eternidad, después de esta vida, está llena de misterios, sino que la vida en sí guarda secretos que aún no fueron revelados, guarda verdades que están comenzado a emerger en este tiempo, como una última oportunidad de despertar para las almas.

Mi Corazón no les ofrece nada más que el despertar al camino de la oración, de la entrega, del servicio y del sacrificio. Y es ese mismo camino el que abrirá en sus vidas las puertas a lo nuevo y traerá, finalmente, el sentido que sus almas esperaban conocer sobre la existencia de la vida sobre la Tierra.

Ya pueden sentir y percibir la propia ignorancia, no solo ante el Universo y la Creación, sino también acerca de sí mismos.

Lo que vengo a hacer en estos tiempos, hijos Míos, es a abrir sus ojos mediante el poder de la oración para que, transformados bajo el espíritu de la humildad, puedan adentrar en la verdad que habita dentro de sí, un Universo tan vasto y tan amplio como el que ven en una noche estrellada en el cielo de la Tierra.

Como la inmensidad del Cielo, como la infinidad de las estrellas, así también es dentro de cada uno de Mis hijos, porque Aquel que los creó a Su imagen y semejanza, es infinito y desconocido.

La semejanza con Dios no se limita a la apariencia del hombre. La semejanza con Dios se guarda en un misterio profundo que habita en sus corazones y que guarda en sí el verdadero motivo por el cual Dios creó a esta humanidad.

Cada ser de esta Tierra, hijos Míos, es un potencial renovador de la Consciencia Divina. De sus más profundas y sinceras experiencias de amor, el Creador extrae su renovación, la recreación de Su Creación Divina.

Sé que este es un misterio casi incomprensible para las criaturas de la Tierra, pero esto es así debido a la gran ceguera e ignorancia de la humanidad.

Para adentrar en los Misterios celestiales deben tener un corazón humilde y simple, y su Madre Celeste les concede ese corazón mediante la oración que los transforma, por dentro y por fuera, que transforma sus vidas y, como consecuencia de eso, la vida sobre la Tierra.

Vengo como su Madre Divina para conducirlos de la mano hacia un Propósito Superior.

Quiero, hijos Míos, que en este último tiempo de despertar no solo conozcan a Cristo, sino que sean en Cristo aquello que Dios pensó para sus vidas y para este mundo.

Aún están a tiempo de transformar a este planeta en un planeta sagrado, de construir y de habitar las Islas de Salvación que servirán como principio de lo nuevo cuando llegue el tiempo.

Pero eso, hijos amados, comienza en lo pequeño y en lo verdadero; comienza con el rosario en sus manos y el corazón en Dios; comienza con el servicio sincero y el verdadero interés de que sus hermanos también reciban lo mejor; comienza escuchando las Palabras de Dios a través de Sus Mensajeros y siguiendo y viviendo esas Palabras, porque cuando menos lo esperen ellas estarán vivas y consolidadas en su mundo interior.
Y será allí cuando todos los ojos que los vean encontrarán un ejemplo y todos los corazones, que los sientan, sentirán a Dios porque ustedes serán llamados Sus instrumentos, Sus compañeros.

Hoy les revelo un camino y les tiendo Mis Manos para que Me permitan conducirlos hacia lo nuevo, al eterno e insondable Corazón de Cristo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado y por seguir Mis pasos de Madre y Peregrina!

Las almas que despiertan están en júbilo y el planeta siente alivio en su corazón.
Todo esto se da por el esfuerzo de cada uno de Mis hijos.

Yo los bendigo,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL MONTE ACONCAGUA, MENDOZA, ARGENTINA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Olam, la Sagrada Eternidad de Dios

Queridos hijos:

Uno de los Aspectos de Dios, Olam, lleva a la consciencia de la humanidad terrestre hacia la elevación del espíritu y de los sentidos.

Olam representa en este Universo la posibilidad de que cada criatura, creada a Su imagen y semejanza, descubra dentro de su universo interior el aspecto de la inmortalidad, es decir, lo que es eterno, lo que nada lo disuelve.

Olam trae la vida eterna, el eterno servicio a la Creación y la consagración a la Vida suprema de la existencia divina.

Dentro del Universo, el aspecto espiritual de Olam ayuda en el camino correcto de la evolución, ayuda a que cada ser humano se mantenga dentro del sendero del despertar y de la evolución de la consciencia.

Por eso, Olam representa en este tiempo, el tiempo de la corrección de las esencias del Universo y de volver a encaminarlas hacia el umbral de la Vida eterna, lugar en donde el espíritu de cada criatura guardará para siempre el recuerdo del Amor de Dios y de Su divina Ciencia espiritual de la Alquimia divina, que concibe en las esencias los nuevos patrones de la eternidad y de la ascensión.

Olam trae en este tiempo la readecuación de las consciencias de la Tierra al ciclo del final de los tiempos. Este Aspecto sagrado de Dios favorece la filiación íntima de cada alma y de cada espíritu con el Padre Celestial.

Olam significa ese fuego que, siendo eterno, sublime y divino, purifica a la consciencia humana y la eleva de plano hacia un nivel espiritual y único.

Olam es la esencia de nuestra resurrección interior a la luz del Universo Espiritual y Mental.

Olam es el camino para encontrar la Morada de los Elíseos.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Maratón de la Divina Misericordia
APARICIÓN DE CRISTO JESÚS DURANTE LA 44.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA, EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Que la paz esté en este lugar y todo lo que no pertenece a Mi Padre se desvanezca. Que así sea.

Del Universo he venido a traerles Mi Mensaje, pues es hora de que las esencias despierten.

Por eso hoy manifiesto para todos Mi Sagrado Corazón, el Corazón humano de Cristo; aquel que recibió la lanza para derramar la Misericordia de Dios, en todos los confines de la Tierra y para destituir al enemigo y a su reinado de superficie.

Y aunque sus fuerzas se muevan en esta esfera planetaria, Mi Corazón siempre triunfará, y ustedes lo harán triunfador cuando adoren Mi Espíritu y abran la consciencia a Mi Llamado.

Pongan atención a lo que Yo les estoy diciendo, porque no solo son palabras, ni tampoco decretos, también son energías retransmitidas por la Fuente Divina a través del Verbo del Hijo de Dios.

Vengo así a separar a Mis rebaños del mal, para que todos entren al establo de Mi Corazón, porque allí siempre existirá la salida que Mi Mano poderosa les indicará, hasta el Reino del Padre.

Lo que coloniza a la humanidad no es evolutivo. Por eso vengo en este tiempo a desmitificar todo, porque el corazón de cada uno de ustedes, como el de cada uno de sus hermanos, debe estar en el lugar correcto, según su libertad y su elección.

Ayer les dije, compañeros, que en este tiempo todo está permitido, no solo en la Tierra sino también en el Cosmos. Estamos en el ápice de un gran Armagedón.

Mientras las puertas de la Luz se abren para poder vencer, Mi enemigo también vence en los perdedores.

Yo vengo por esos que se pierden, porque sé que pueden ser en Mí y Yo en ellos, hasta que algún día alcancen el espíritu incondicional.

Ustedes, los presentes, que han seguido a través de los tiempos tantas maratones, ya tienen la llave para abrir la puerta al espíritu incondicional que está dentro de cada uno de ustedes, porque será ese espíritu el que, incondicionalmente, hará concretar Mi Proyecto en la humanidad.

He alcanzado nuevos códigos genéticos, que esperan ser depositados en las consciencias de la superficie.

La Pasión que Yo viví lo permitió. Por eso, no solo fue una Pasión, una transmutación del sufrimiento y del pecado del mundo.

Dios creó esas condiciones en aquel tiempo para que la humanidad aprendiera sobre el amor y cómo, a través del amor, alcanzar la consciencia crística.

Ustedes son portadores de una esencia primordial que proviene de grandes estanques del Universo, en donde los Padres Creadores, más allá de su séptima dimensión de consciencia, trabajan para recrear esta Creación.

Hoy los invito a recordar su origen, porque solamente en su origen alcanzarán la Redención. Todo lo que acontezca a su alrededor será superfluo, no tendrá importancia ante la necesidad de que venza el Proyecto del Cristo.

Despierten esos códigos en ustedes, no solo a través de la oración o de la adoración. Eleven sus consciencias hacia lo Divino y serán portadores de nuevos dones que esperan despertar en ustedes como nuevos talentos; aquellos talentos de los que una vez Yo hablé en las parábolas.

Es este, Mi Corazón, el que se donó por ustedes en aquel tiempo,el que en este mismo tiempo y en esta misma Era no solo prepara Su Retorno a la humanidad, sino también el retorno dentro de ustedes, más allá del alma y del espíritu; más allá de la esencia.

Si ustedes, compañeros, se animan a comulgar con esos códigos divinos por medio de los ejercicios en la vida espiritual, estarán en el camino correcto para poder encontrarme y reencontrarme todas las veces que sea necesario.

Por eso vengo a despertar su consciente derecho; ese que es el gran velo para sus consciencias, el que el Maestro del Amor viene a retirar con Sus propias Manos para que despierten a la verdadera realidad de estos tiempos.

Abandonen la vida superficial y encamínense a la vida del espíritu, porque serán sus espíritus los que no perecerán y no dejarán perecer el cuerpo bajo las energías terrestres, pero sí estarán firmes para ser portadores de los nuevos códigos que hoy les traigo, de donde toda la vida, la vida del Infinito ha surgido.

Desde la Fuente, desde Abba, Yo traigo para todos lo que a muchos les falta.

Crean que es posible esa transformación interior, porque así las nuevas puertas se abrirán para que recorran los recintos internos, en donde sus cuerpos estarán vivos, plenos en el Amor de Dios y en Su Gracia, guiados por hermanos de otrora, que solo esperan que ustedes extiendan sus manos hacia ellos, para que ellos los eleven hacia la Consciencia del Amor Universal.

Quiero que escuchen más de una vez este mensaje que hoy les traigo, porque solamente Mi Misericordia permite en esta hora una gran Gracia desconocida por todos, y que es concedida por Mi Amor ante tantos pecados en el mundo, tantas indiferencias y omisiones.

Así Yo les muestro que Mi Ser no es solo Jesús, o un Corazón que solamente pueden amar.

Mi Consciencia se ha expandido por ustedes, desde la Ascensión.

Muchos dicen que Yo fui al Cielo, pero siempre estuve entre ustedes manifestando el poder de Mi Amor y los milagros de la vida.

Si creen que Yo Me encuentro en un Cuerpo a través del pan; si también creen que Mi Sangre Divina se encuentra a través del vino, después de ser consagrados, ¿por qué temen a la trascendencia interior?

Yo les doy la base para que vivan los impulsos y siempre se renueven bajo el espíritu de la fe.

En el Universo hay moradas que los esperan a todos, hay espacios en donde sus almas pueden ser felices, porque ha sido la Voluntad de Mi Padre crear todas esas expresiones de Amor en el Universo.

Por eso intento, compañeros, que sus consciencias se eleven y salgan de la inercia de estos tiempos. La inercia los llevará solamente a sufrir. Sean valientes, amigos Míos, y únanse de corazón a Mi Gran Portal.

Los arcángeles les muestran el camino a aquellos que aspiran a vivir su transformación.

Todos los Santos Padres Creadores esperan que gran parte de la humanidad despierte de su sueño profundo, para que este Proyecto en la Tierra, así como tantos otros en el Universo, alcancen el tiempo real, el eterno presente en donde no hay dolor, ni tampoco sufrimiento; lo que ustedes llaman “eternidad”.

Entonces, compañeros, piensen por un momento: ¿por qué hoy vuestro Maestro del Amor les entrega tantas llaves?

Aún espero que suban a las montañas de este mundo para poder encontrarme. ¿Acaso Dios las creó por Su deseo personal? Son el símbolo, para ustedes, de su elevación, de la constante persistencia y de la profunda fe, de siempre poder alcanzar la meta que sus espíritus vinieron a cumplir en esta sagrada misión.

Es así que hoy les traigo el Cosmos, para que no solo sea contemplado en el Universo Material, sino también en la esencia del Universo Espiritual.

Las Leyes actúan en este momento, de forma inexplicable y misericordiosa, para que las almas se eleven y reencuentren el camino que perdieron hacia la Gran Luz.

Dios expresó en estos Centros Marianos muchos atributos.

Esos atributos fueron la base para este gran despertar.

¿Recuerdan cuando los invocaban, cuando los pronunciaban de corazón?

¿Acaso, compañeros, alguna vez pensaron que a través del canto de los atributos, estaban uniéndose a nuevas leyes?

Eso siempre sucedió aquí, en este Centro Mariano, en esta comunidad, que es la madre de muchas otras en el plano del espíritu.

Es por eso que Dios envió a sus Mensajeros aquí y no a otro lugar en el mundo.

Estoy mostrando para todos, en esencia, cuál es la verdadera Iglesia, la que Yo enseñé hace dos mil años atrás, la bendita Iglesia Celestial, que está repartida en todas las criaturas de la Tierra, a través de su esencia interior.

Esa es la Iglesia que Yo necesito reconstruir; pero sé que aún la raza necesita de algo formal para comprenderlo.

Por eso traigo tantos símbolos y señales a través de los tiempos,por medio de tantas Apariciones de los Mensajeros Divinos, para que cada ser, en su escuela, viva su evolución según el grado de su aprendizaje y despertar.

Hoy quiero entregarles a través de estas palabras, la verdadera enseñanza que existe en el Universo.

No están aquí en el mundo solamente para sufrir o perecer.

Sean más inteligentes que Mi adversario y salgan de ese punto de ser víctimas.

Reactiven el Rayo de su Inteligencia interior para que surja el Rayo del Amor-Sabiduría y tengan sed de descubrir, más allá de ustedes, el Universo; el Universo que existe dentro de ustedes, que es sabio y rico, bondadoso y muy prodigioso, así como el Universo que existe en este Universo Material.

¿Están preparados, compañeros, para que durante la Sagrada Semana conozcan Mi verdadera Faz? ¡Respondan!

Los presentes dicen “sí”.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón:

Dice que no sabemos lo que estamos diciendo.

 

Yo no solo soy un pescador de almas, sino un llamador de esencias, de esencias que vinieron a cumplir un Proyecto y llevar adelante una gran misión en el fin de estos tiempos y después de tantas, pero tantas experiencias.

Cuando les digo que sean más inteligentes que Mi adversario los invito a salir del punto del sufrimiento, para que ingresen en el Universo de la Gran Consciencia, en donde todo se puede elevar y liberar más allá de la materia y también del espíritu.

Me han pedido un tiempo para revelarles estas cosas.

Mi Padre todo lo sabe, todo lo ve, al punto de saber hasta dónde se expanden sus corazones con este conocimiento.

Yo Soy ese glorificado Rey que viene a mostrarse al mundo, para que a través de Mi Corazón todos conozcan su Universo Interior y todo lo que existe en este Cosmos.

Ustedes son estrellas que descendieron a la Tierra, que fueron deportadas a este mundo para vivir un Proyecto, pero no como ustedes piensan.

Toda la Creación está contenida en el Amor de Dios y todo lo que existe dentro de esa Creación es bendito, aunque cualquier consciencia, en este Universo o en otro, esté en su mayor aflicción o en su gran prueba, para luchar contra las fuerzas del caos, venciendo en el amor y en la verdad.

La dualidad está en esta humanidad. Esa es la causa, compañeros, de que ustedes tengan libre albedrío y esa ley defina su destino para siempre.

Por eso, antes de tomar una decisión, mediten. Invoquen la poderosa sabiduría de Mi Corazón, para que después no sufran innecesariamente.

Sean adultos en la vida espiritual y serán receptáculos de lo nuevo.

Por hoy ya he dicho mucho.

Aspiren a prolongar este conocimiento en estos días.

Sigan orando de corazón y con fervor, para que no solo sus consciencias sean trabajadas, sino también la consciencia de la humanidad, que es una sola y que no puede perder esta última Gracia.

Mientras, consagraré estos elementos, para que las almas se vivifiquen y encuentren nuevamente el amor.

Quiero que canten a Mi Corazón.

Imploren por Mi ayuda, porque el Rey está con Su Reinado en ustedes y espera que este Reinado se realice en el fin de estos tiempos.

Aquí está la Gloria de toda la Creación.

Dichosos son aquellos que participan de este Sacramento, porque no solo alimentan su espíritu y su consciencia con la energía divina del Amor, sino que también la materia resplandece cuando la Santa Comunión ingresa en sus bocas y comulgan del Amor Universal.

Alégrense y crean que esto es verdad, porque si Yo estoy aquí, compañeros, es porque Dios Me ha enviado para que durante un tiempo, que fue marcado por Él, Yo esté entre ustedes expresando Mi Divina Misericordia y Mi Gloria.

Bendigo estos elementos bajo la autoridad celestial de Dios, de todos los ángeles y arcángeles, de toda alma de buena voluntad que habita este planeta, para que triunfen el amor, la misericordia, la compasión y la paz, en todas las consciencias del mundo. Que así sea.

Haremos juntos, compañeros, respondiendo a Mi pedido, la Santa Cruz, la gloriosa señal de vuestro Redentor.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. (x3)

Gloria a Dios en las alturas y Paz en la Tierra a todos los seres de buena voluntad.

Les agradezco.

Cántenme como si Me hubieran encontrado por primera vez.

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Renuévate todos los días, aunque la vida parezca pasar y los años se reflejen en la apariencia de tu rostro.

Renuévate en un tiempo que no pasa, en el fluir de leyes que se transforman solo para generar nuevas posibilidades de evolución para las criaturas.

Renuévate en espíritu y permite que tu ser redescubra cada día el sentido de la vida, para que cada vez más te aproximes a la Voluntad de Dios para ti.

Sirviendo a un Dios que es movimiento constante, cambio y renacimiento permanentes, no puedes quedar aprisionado a una idea, a un viejo pensamiento ni reflejo de lo que es la Voluntad del Creador para tu vida. Por eso, hijo, renuévate; lánzate a lo nuevo y renueva tus planes de acuerdo con el fluir de las Leyes divinas.

No te apegues a las metas que tenías cuando eras un niño, en cuerpo y en espíritu. Todo lo que es vivo cambia; la transformación y la renovación en el Creador son una ley.

Renuévate como criatura, como alma, como hijo de Dios. Disuelve en tu corazón las imposibilidades y busca dentro de ti la posible y alcanzable perfección en Cristo.

Si te reconoces tan hijo de Dios como Su Primogénito, vive como Él, bajo leyes que pertenecen al Padre y no al mundo.

Renuévate comenzando todos los días como un pequeño niño; mira al mundo como si nunca lo hubieses visto; mira a cada ser humano como si no supieses nada sobre él y permite que tu corazón supere los errores del pasado, las ideas fijas sobre la conducta del prójimo y ame a cada uno de una forma nueva todos los días.

Renuévate respirando el aire como si fuera la primera vez; viendo la lluvia, el sol, los Reinos de la Naturaleza como si fuera la primera vez. Por un instante, permite que tu ser encuentre un estado de renovación desconocido para ti y, aunque te parezca loco o imposible, renuévate.

Olvida el tiempo, el pasado, las metas del futuro y también el presente. Entra por un instante en el tiempo del no tiempo y renuévate. Di: “Señor, hazme de nuevo”.

Si no te renuevas, hijo, los patrones del viejo hombre envejecerán tu consciencia y morirás en vida, sin saber de la existencia de la eternidad. Vivirás para cumplir una meta que la sociedad colocó dentro de ti cuando aún eras un niño, mientras la vida del espíritu, que es la verdad, será siempre para ti una ilusión, el segundo plano, el universo paralelo.

Por eso, renuévate y redescubre la vida todos los días. Hazte hijo de Dios y no de los hombres. Vive bajo las leyes que provienen del Padre y no solo del mundo.

Aquel que te impulsa a la renovación,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

¡El Señor resucitó! Y disipó la oscuridad, el temor y la soledad absoluta de los corazones de los hombres.

¡El Señor resucitó! Y podrá resucitar todos los días en el interior de los muertos de espíritu que, despiertos por el Amor de Cristo, acepten la redención.

¡El Señor resucitó! Para demostrarle a la humanidad y a todo el universo que aquel que está unido a Dios trasciende las leyes de este mundo, incluso aquellas más materiales, que rigen el curso natural de la vida humana.

¡El Señor resucitó! Para demostrar que el amor no tiene límites y que aquellos que entregan la vida por amor reciben, a cambio, la eternidad con Dios.

Todos los seres vivientes son herederos naturales del Poder de Dios y de toda Su Gracia. Solo es necesario que acepten vivir como Sus hijos y que se reconozcan como tales, viviendo para manifestar Su Voluntad, sin importar cuál sea.

El Creador es el gran dueño de esta empresa de la vida universal. Para llevar adelante Su Obra, tendrán que servirlo y seguir Sus Pasos, para que un día sean uno con el Padre y tengan, por Gracia, la posibilidad de llevar adelante Su Plan.

¡Den Gloria y Gracias al que les muestra el camino por medio de Su Resurrección! Crean en la Presencia Viva de Cristo entre todos, guiando de cerca la Obra del Padre en la Tierra. Únanse a Él y a los códigos de Su Vida, de Su Pasión, de Su Muerte y de Su Resurrección, pues es tiempo de que los códigos dejados por la experiencia de Cristo se multipliquen y encuentren nueva morada.

Su padre y amigo,

San José Castísimo

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR MARÍA, ROSA DE LA PAZ Y REINA DEL VERBO DIVINO, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Mientras el mundo duerme un sueño profundo de ilusión, Yo los llamo al verdadero despertar.

Mientras muchos ven que se abren los infiernos y arden en el fuego del eterno sufrimiento, Yo vengo a mostrarles el Reino de los Cielos y les entrego llaves simples que los conducen a la Eternidad de Dios.

Mientras el mundo demanda esfuerzos de los seres humanos para vencer en la competencia con el prójimo, Yo les pido que luchen para vencerse a sí mismos y para ser derrotados por el Poder de Mi Hijo.

Mientras el mundo les pide que sufran para adquirir bienes materiales y que entreguen hasta la última gota de sudor de vuestros rostros para construir el propio reinado material, Yo vengo del Cielo para decirles que nada de lo que acumulen en este mundo ingresará en Mi Reino y aquel que quiera seguir Mis pasos deberá despojarse de todo y dejar para la vida de ilusión lo que de ella proviene y solamente a ella pertenece.

Yo vengo al mundo para cambiar las leyes y reformar los conceptos humanos. Vengo como Reina del Cielo, como Madre y Señora de la Creación, para colocarlos otra vez en el camino que los lleva a la Consciencia de Dios.

Estoy aquí para hacer que desaprendan, que mueran para el mundo y renazcan para la vida del espíritu. Pero muchos prefieren seguir aferrados a la propia voluntad y a sus tendencias que seguir la Voz de Dios, manifestada en la Tierra por medio de Sus Mensajeros.

Muchos creen que están siguiendo el camino dictado por Dios por el simple hecho de escuchar Mi voz y Yo vengo para decirles que mientras no vivan Mis palabras, no estarán recorriendo ningún camino y se estarán engañando a sí mismos al estar ante Mi presencia, creyendo que es suficiente con venir a Mi encuentro.

Hijos, hoy les digo que, a lo largo de la historia de la humanidad, muchos estuvieron delante Mío, pero la imperiosa necesidad de seguir las propias aspiraciones fue mayor que la voluntad de seguir Mis pasos. E incluso hoy, después de tantos siglos de existencia, la humanidad sigue corriendo el riesgo de no cumplir con los Planes de Dios y la mayoría de los hombres no teme perder su evolución, porque ni siquiera reconoce la existencia de este camino evolutivo.

Con todo esto, les quiero decir que no solo espero verlos delante Mío, porque eso no es suficiente. ¿De qué sirve venir a Mi encuentro si después de algunos minutos nuevamente están sumergidos en las energías de este mundo y no son capaces de elegir la fraternidad antes que la competencia, la comprensión antes que la ira, el amor y el perdón antes que la indignación?

Vivir Mis palabras, Mis amados, no es realizar grandes obras heroicas de sacrificio y conversión.

Quiero verlos eligiendo el camino de Dios, cuando el adversario intente convencerlos para que sigan sus pasos de disociación. Quiero verlos diciendo "no" a las ilusiones de este mundo y "sí" al cumplimiento de los Planes de Dios. Quiero encontrarlos buscando con todas sus fuerzas el camino de la Luz, siendo un faro para los que habitan en la oscuridad y no cayéndose en los mismos abismos que sus semejantes.

Mi voz no resonará en el mundo por mucho tiempo. Dios Me pide que anuncie a los seres la llegada de los tiempos de transición, momento en que la humanidad deberá elegir, por si sola, seguir los Planes de Dios y no los propios. Solo será en ese momento, cuando el poder del amor por el Creador sea más grande que las fuerzas del caos en el propio interior, que Su Hijo cruzará los Cielos y descenderá de las nubes, anunciando Su victoria definitiva.

Mis amados, no jueguen más con el camino de la evolución, porque no hay más tiempo. Es tiempo de que se definan.

Yo los amo, los guio y los despierto a la manifestación de los Planes del Altísimo.

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Reina del Verbo Divino

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EXTRAORDINARIA EN LA CIUDAD DE BRASILIA, DISTRITO FEDERAL, BRASIL, TRANSMITIDO POR MARÍA SANTÍSIMA, ROSA DE LA PAZ, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Que se abran las puertas de los Reinos de los Cielos y las esferas sublimes y celestiales desciendan en Gloria al reino de este mundo para transformar y despertar a todas las criaturas de esta Tierra bendita.

Mis amados, alégrense y regocíjense todos, pues de forma extraordinaria desciendo al mundo para derramar, una vez más, un río de Gracias sobre la humanidad.

Mientras el mundo duerme, que aquellos que están despiertos amen el sacrificio y la entrega absoluta.

Mientras el mundo deja que se apague la propia llama interior y la fe se desvanece de la consciencia de la humanidad, que aquellos que están a Mi lado sean inquebrantables y que no existan dudas extrañas que les quiten la fe que deposité en sus corazones.

En tanto la angustia y el miedo toman los corazones de aquellos que no cumplen con los designios del Creador, que Mis soldados se alegren e incluso ante la gran tribulación planetaria, sean fuertes, firmes y confíen en el cumplimiento de los Planes Celestiales.

En tanto el mundo teme el colapso de un sistema material, que los discípulos de Cristo solo esperen confiados Su retorno y observen cada acontecimiento como la señal verdadera de que ese retorno se aproxima.

En tanto el mundo se preocupa con el tiempo que pasa y la muerte que llega, que aquellos que Me acompañan abran sus consciencias para trascender los tiempos e ingresar en el tiempo infinito, donde solo existe la eternidad, la unidad con Dios y toda Su creación.

Mis amados, vengo a invitarlos en este día a trascender las leyes de este mundo y todas vuestras predilecciones. Los convido a apartar el corazón de los amores terrenos y materiales, que abrazan solamente lo que este mundo les ofrece, para que entonces conozcan un amor sublime, que todo sabe en profundidad, que vive y ama para cumplir los Planes de Dios y manifestar Su Creación, tal como Él pensó en Su Espíritu Sacratísimo.

Mis queridos, estos son tiempos de salir de la vida común y luchar con el corazón para perseverar en un camino que, en poco tiempo y de forma absoluta, irá contra todas las tendencias y energías de este mundo.

Deberán estar fortalecidos por el poder del verbo de los Mensajeros Divinos y nunca dejarse conmover por los procesos internos que vivirán otros o por la purificación del propio planeta.

Abran los ojos a una realidad que la mayoría de la humanidad no es capaz de ver y sepan que, por detrás de todas las pruebas de este mundo, existe un Gran Propósito que busca fortalecerlos y confirmar vuestros espíritus en la adhesión al Espíritu Sacratísimo de Dios Todopoderoso.

Que la fe en vuestros corazones jamás se disipe. Que la esperanza en el retorno de Mi Hijo se fortalezca y crezca, como una verdad que no perece en el interior de Sus discípulos y apóstoles.

Muchos solo creerán en Su retorno al verlo cruzar el Cielo y colocar Sus Pies en el suelo de esta Tierra, así como lo fue en Su Resurrección. Sin embargo, bienaventurados serán aquellos que saben que Él vive, así como sabían que Él era el Mesías; y saben que Él retornará, así como sabían que vencería la muerte. Esos serán los que perpetuarán Su Presencia en el mundo.

Eleven hoy, a los Cielos, la infinita gratitud de vuestros espíritus por estar siendo guiados directamente por Dios y por aquellos que son el eco de Su Voz y la manifestación espiritual de Su Voluntad para todo el Universo.

Mis amados hijos, les dejo Mi bendición y Mis más preciosas Gracias para que, con amor y valentía, puedan transitar por las pruebas que vendrán.

Que Mi amada hija que hoy se renueva en Mi Corazón sea fortalecida por el poder de Mi Amor.

Únanse unos a los otros y ámense siempre. Vivan los principios del Reino de Dios.

Yo los amo y espero encontrarlos con fe y paz interior.

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Páginas

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

SEA VOLUNTARIO

Contacto