Viernes, 20 de enero de 2023

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

¿Cuán importante es para ti, hijo, la transformación de la consciencia humana?

¿Cuán importante es para ti, el padecimiento de los Reinos de la Naturaleza?

¿Cuán importante es para ti, el sufrimiento de los que viven en las guerras?

¿Cuán importante es para ti, la inocencia y la pureza arrancadas de los niños ultrajados?

¿Cuán importante es para ti, el don de la vida?

¿En el algún momento de tu día, pensaste que este puede ser tu último día en esta Tierra?

Haz valer la pena cada segundo, reparando tus errores, corrigiendo tu camino, curando lo que te causa arrepentimiento, revisando tu mundo interior.

¿Cuántas veces pensaste en los que no tienen nada, en las familias divididas, impregnadas de odios y de rencores? ¿Tu familia será una de esas?

Comienza, hijo, cada día, como si fuera el último. Vive plenamente, con pleno amor.

Haz que tus días valgan el sacrificio de Dios por ti. Haz que tu vida sea de reparación y de méritos por las almas más perdidas.

Clamar por Misericordia tiene un poder incalculable. Ser Misericordia tiene un poder insondable para la consciencia humana.

Orar abre las puertas para que Dios toque la Tierra. Actuar une las dimensiones para que Dios sea en la Tierra, a través de sus hijos.

Permite entonces, hijo, que, en tiempos de caos, de disociación, de confusión, tu ser no sea solo un instrumento pasajero con el que Dios, por un momento, pueda tocar el mundo y Su Creación.

Sé un instrumento constante en las Manos de Dios y, actuando con tu corazón como si este fuera el último día, percibirás cuántas llaves puedes girar, cuántos umbrales eres capaz de cruzar, cuántos misterios puedes develar cuando tan solo unes tu voluntad, tu aspiración, tu intención y tu amor a la Consciencia Divina.

Pregúntate, entonces, con sinceridad: ¿Si este fuera mi último día, que haría con él? ¿Cómo bebería la última gota de vida en la mayor escuela de amor del universo?

Vive con plenitud, plenitud espiritual, plenitud divina.

Tienes Mi bendición para esto.

Tu padre y amigo,

San José Castísimo