Viernes, 13 de enero de 2023

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Que tu corazón esté siempre en Dios.

Mientras tu mente piensa, tu cuerpo actúa, tus emociones son emanadas, que tu corazón esté siempre en Dios.

Mientras tus ojos ven el mundo y su agonía, mientras tu alma padece y crece en cada prueba, que tu corazón esté siempre en Dios.

Ante las miserias y el descontrol humano, ante las acciones de una humanidad perdida, que tu corazón esté siempre en Dios.

Mientras el lodo emerge de tus abismos internos y lo mismo sucede con cada uno de tus hermanos, que tu corazón esté siempre en Dios.

En aparentes derrotas o en aparentes victorias, en este mundo donde la ilusión impregna la consciencia de los seres, que tu corazón esté siempre en Dios.

¿Y cómo estarás en Dios, hijo? 

Con un pensamiento que se eleva en tu interior al decir: "Padre mío, que mi corazón permanezca en el Tuyo".

Con una pausa para una oración simple y sincera, aunque toda parezca estar bien y en equilibrio, que tu boca proclame: "Padre mío, que mi corazón permanezca en el Tuyo".

Cuando estés ante las tentaciones, recuerda dónde debe estar tu corazón y solo pide con sinceridad: "Padre mío, que mi corazón permanezca en el Tuyo".

Y, con un mínimo movimiento de tu ser, el Padre, siempre atento a las súplicas de Sus Hijos, te arrebatará de tus abismos y te conducirá a Su Corazón. Permanece allí, donde hay sabiduría y discernimiento, donde hay paz y calma, donde hay restauración para los espíritus heridos, donde se renueva el Amor.

Aprende, hijo, a permanecer siempre en Dios. Y, si no sabes cómo hacerlo, solo ora: "Padre mío, que mi corazón permanezca en el Tuyo".

Tienes Mi bendición para esto.

Tu padre y amigo,

San José Castísimo