Miércoles, 8 de agosto de 2012

Apariciones extraordinarias
APARICIÓN ANUAL DE LA VIRGEN MARÍA, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el segundo día del Encuentro de Oración en Aurora, un grupo de mil cien personas se reunió en oración en el Jardín de María, donde se encuentra el naranjo de las Apariciones, a la espera de la Madre Divina.

Madre Shimani hizo una pequeña introducción.

 

Madre Shimani: Bienvenidos a la Celebración de los cinco años de Apariciones con nuestra Madre Divina. Hemos hecho un gran recorrido en estos cinco años y que solo podría haber sido realizado bajo la guarda de nuestra Madre. Todo esto que ustedes pueden disfrutar hoy (se refiere a Casa Redención) es obra de Su Amor. Lo único que nosotros podemos hacer es agradecer a Dios la posibilidad de que Ella esté con nosotros guiándonos, dando este impulso para nuestra humanidad.

Esperamos que todos puedan abrir su corazón y recibir todas las Gracias que Ella tiene para cada uno de nosotros.

Hoy es un momento muy importante, como vimos en la noche de ayer en la apertura del Encuentro. Este 8 de Agosto, en el que se inicia una etapa de este final de ciclo de 2012, estamos en los últimos momentos en que la Divinidad intenta colocar en nuestras consciencias, códigos de luz que nos asistan y colaboren con nosotros en los momentos de transición. Por eso es tan importante lo que vamos a vivir; a pesar de que no tenga nada fenomenológico, es un evento espiritual sin precedentes. Necesitamos colocarlo en nuestro corazón y dejar que nuestro espíritu se adhiera a la energía de la Madre Divina, y así, en los planos internos, muchas cosas pueden suceder.

Ahora vamos a orar y a cantar, y a medida que pasa el tiempo percibiremos como se va consolidando esto que construiremos, que es una condición, y lo podemos imaginar como un camino de luz que va desde aquí hasta los Cielos, un camino por el cual la Madre llegará con todos Sus ángeles para transmitirnos algunas cosas, en una fecha tan importante como la de hoy.

 

Comenzó el trabajo de oración que se prolongó, más o menos, por una hora y media. En el último cántico, mientras todos entonaban “Misericordia, ¡oh María!”, la Madre Divina apareció sobre el naranjo. Fray Elías y Madre Shimani se colocaron de pie y se aproximaron a la Ella. Mientras todos cantaban se escucharon 33 campanadas.

Después de un largo tiempo, se pidió para guardar silencio y se volvieron a escuchar 33 campanadas más.

Fray Elías solicitó, a pedido de la Madre Divina, que dos monjas se aproximarán al árbol y se colocarán junto a él y a Madre Shimani. Estas hermanas participaron de la primera aparición que la Madre Divina hizo el 8 de agosto del año 2007.

La Madre Divina transmitió un pequeño mensaje a ese grupo, pero antes pidió que hicieran la siguiente oración algunas veces:

 

Venid Jesús,
      venid a nuestra vida,
      y Sé el pan de Vida Eterna.
    Amén

 

Fray Elías: La Madre Divina dice:

En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén

 

Fray Elías transmite al pequeño grupo algunas que está al frente las palabras que la Madre dice, y luego de algunos minutos se inicia la transmisión del mensaje.

 

Fray Elías: La Madre Divina dice:

Hoy estoy aquí para celebrar la comunión con el Rey del Universo. Por este motivo hijos Míos, hoy les agradezco por su respuesta.

Mi Corazón maternal está con cada uno de ustedes y eso significa que el Reino de Dios está en el planeta, más aún en aquellos que necesitan de la Luz Celestial.

Queridos hijos, hoy no conmemoran Mi Presencia, sino la presencia de Dios en sus corazones. Hoy los invito a recordar esa presencia permanentemente; esa aspiración los fortalecerá para el tiempo que llegará.

Querido hijos, hoy también los contemplo desde Mis oraciones; el Señor ha escuchado también todas sus plegarias. Esta es una respuesta muy positiva para este tiempo final, y muchos de Mis hijos están siendo ayudados en este mismo momento.

Ustedes hoy están dentro del Reino de Mi Paz, así como otros de Mis hijos; por ello los invito, en este tiempo, a persistir en la oración.

Con inmensa alegría, queridos hijos, nuevamente les digo: ¡Les agradezco! ¡Les agradezco! Que Mi Paz eterna esté en sus corazones para que Yo pueda hacerles encontrar con Cristo. El Rey del Universo los espera a cada día, por eso no solo abran sus corazones, sino también sus brazos para recibir la luz que viene desde Él y que con amor esta donando al mundo.

Hoy dejo a ustedes una señal, un símbolo para la eternidad: el rebaño de Mi Hijo. Cada uno de ustedes forma parte de ese rebaño, incluso aquellos que se distancian día a día de Él. Mi tarea maternal es hacerlos retornar a Cristo. Cada una de sus oraciones cuenta para esa salvación. Contemplen esto como algo cierto, por que Dios siempre los escuchará cuando vuestras plegarias sean verdaderas y nazcan del corazón.

Hoy los estoy invitando nuevamente a la oración, a continuar orando por el mundo; el mundo lo necesita y ustedes lo saben. La Gracia que hoy les estoy entregando, no la conocen, por que ella nace desde el corazón. Esa Gracia que Yo les quiero enseñar se llama Amor de Mi Hijo, Amor Redentor y Amor Salvador.

Queridos hijos, continúen por este camino para que en muchos años más sus vidas se transformen en el ansiado templo, donde Dios espera entrar.

Estoy contemplando en este momento a muchos que necesitan de ayuda y a todos ellos les dijo: oren, oren con el corazón, porque estarán en comunicación Conmigo y Mi flor maternal, la oración de todos Mis hijos será colocada a los pies del Señor para que así Yo pueda interceder y a su tiempo los pueda ayudar.

Confíen en lo que están haciendo, no teman transformar sus vidas; teman sí a no poder consagrarlas al Señor. Eso es lo que Yo les pido: una sana transformación que nace desde el corazón y que se expresa como un instrumento precioso en la vida de todos Mis hijos que necesitan mucho de Dios.

Por eso Yo, como mediadora de las almas, los invito a estar en Mí, para que Dios pueda estar en ustedes. Quiero que sigan peregrinando Conmigo mediante la oración, mediante el perdón entre ustedes y sobre todo, en el amor, que en este tiempo tan importante debe prevalecer en sus vidas y en sus esencias.

En este día, traigo a todos la contemplación a Mi Inmaculado Corazón, el que los podrá iluminar en cada decisión de sus vidas y en cada paso que ustedes se animen a dar en la consagración del corazón.

En las palabras simples, queridos hijos, se encuentran los grandes misterios. Sepan que a lo largo de todo este tiempo, y de la misma manera que Mi Corazón lo hace en Medjugorje, Yo les quiero enseñar cómo estar en Dios a pesar de las circunstancias de la vida, confiando en lo desconocido, en aquello que ustedes no pueden tocar pero que si, está al alcance de Dios.

Queridos Hijos, confíen en eso que es desconocido, para que la verdad se pueda expresar en vuestras vidas, verdad que se llama fe y que los elevará hacia lo Alto.

Hoy estoy con ustedes y estoy con el mundo, derramando Mis Gracias silenciosamente. Abran sus manos y sus corazones para que el palpitar de Mi Inmaculado Corazón, sea la llama que flamee eternamente en vuestro interior.

Ahora, en este tiempo de definición, Yo les pido que se reúnan y oren Conmigo, para que Mi Corazón los pueda guiar y la llama eterna de Mi Hijo, Su Sagrado Corazón, los pueda acompañar en cada paso que ustedes den en esta vida.

El silencio les promete un conocimiento mayor de la esencia de Dios, por eso el silencio, queridos hijos, es también oración.

Hoy vengo aquí para absolverlos y abrirles la puerta del Reino de Mi Padre. Oremos:

 

Fray Elías: Vamos a repetir la siguiente oración que la Señora está enseñándonos en éste momento, es una oración muy simple.

 

    Escúchame Redentor, por que confío en Ti.

Amén

 

Se realiza la oración varias veces, frase por frase.

 

Fray Elías: La Señora está diciendo:

Mi escuela de oración, les enseña a orar con determinación. Coloquen vuestros espíritus en las palabras, para que ellas puedan ser escuchadas.

 

Fray Elías: Ahora Ella nos pide que oremos todos juntos, al mismo tiempo.

 

    Escúchame Redentor, por que confío en Ti.

Amén.

 

Se realiza la oración varias veces más.

 

Fray Elías: La Madre Divina dice:

Recuerden que las oraciones y el canto abren los Cielos para que la cura de Dios descienda.

Ahora, en agradecimiento a cada uno de ustedes, derramaré un poco más de Mi luz, para despedirme.

 

Madre Shimani: La Madre Divina está pidiendo que cantemos “María, Virgen Madre”.

 

Todos cantan por un largo tiempo, hasta que se pide silencio y Fray Elías continúa con la transmisión del mensaje.

 

Fray Elías: La Madre Divina dice:

Sepan que, como Madre, Mi mayor propósito es la Paz en todos Mis hijos.

¡Les agradezco!

Y recuerden que nunca deben separarse de Dios, búsquenlo en sus corazones, porque Él vive allí.

Gracias, queridos hijos.

En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

* Fin de la Aparición *

 

Madre Shimani: Como hacemos siempre después de cada Aparición, vamos hacer un breve relato de todo lo que sucedió durante la oración y durante la Aparición. Aquellas cosas que ustedes no escucharon, aquellas cosas que la Madre le explicó a Fray Elías.

Les quería comentar, que la Madre llamó primero a dos hermanas que participaron con nosotros aquí, porque ellas formaron parte del grupo que recibió a Nuestra Señora por primera vez hace 5 años, el 8 de agosto del año 2007. La Madre nos pidió algunas cosas y nos invito a estar más unidos a Ella, con algunas otras tareas. Nos pregunto si aceptábamos y nosotros le dijimos que sí; fue un momento muy fuerte para nosotros. Trajo muchos recuerdos de cómo, de forma tan simple, nos reunimos en aquel tiempo y estuvimos con Ella por primera vez. Como lo que hablábamos ayer, en la apertura del encuentro, de dar un paso hacia lo desconocido. Ella nos dijo algunas cosas: que esta manifestación era un poco la respuesta a eso que entre todos los que estamos aquí, hemos llevado adelante, confiando en Ella y Ella en nosotros.

Fray Elías: Con sinceridad para mi fue la Aparición de la alegría, porque Ella estaba muy hermosa.

Durante la preparación hubo algunos movimientos que queremos relatar. En un momento, se manifestaron en el Cielo varias coronas de estrellas doradas. En otro, hubo una gran asistencia de los ángeles custodios a todos los presentes; los ángeles liberaron muchos nudos que existían alrededor de las personas, se veía cuerdas con varios nudos que, con mucha delicadeza, eran desatados.

También, durante la preparación, tuvimos la visita especial del Maestro, de Cristo, como el Sagrado Corazón de Jesús, que vino acompañando a Nuestra Señora. Él traía en Sus brazos una representación del planeta Tierra. Él mostró el planeta e indicó con Su mano izquierda algunos continentes, especialmente el Continente Americano, el cual se veían iluminado por una energía dorada. Explicó que la tarea de oración permitió que este continente se encendiera. En ese momento nuestra Señora desapareció para que Cristo hiciera una tarea especial con nosotros. Él abrió el Reino de los Cielos y una energía de color celeste comenzó a descender sobre Su cabeza como una gran columna de luz. Esa columna se expandió, irradiando su energía a todos y tocó todo este lugar y otros lugares.

Luego Nuestra Señora apareció nuevamente. Ella descendió desde los Cielos con muchos ángeles custodios e imprimía en nuestras consciencias la imagen de Su Glorificación, pero en este momento en vez de elevarse, Ella descendía hacia nosotros haciendo también descender esa luz desde los Cielos. Dos de los ángeles custodios, que estaban junto a Ella, traían cada uno un cáliz.

Con esa imagen comprendimos que se estaba llevando adelante una Ceremonia, una Comunión interna con Su consciencia.

En cierto momento Ella indicó a los ángeles que se ubicaran en distintas partes del campo.

Nuestra Señora vino vestida de Blanco, pero en tres momentos cambió de atuendo. El primero era blanco, el segundo era rosa y el tercero era gris. El gris apareció al final, cuando Ella hizo la bendición con Su luz.

Cuando nuestra Señora llamó a las hermanas que habían participado de la primera Aparición en el año 2007, Ella nos solicito que oráramos una pequeña oración. Luego transmitió algunas palabras y pidió que no hubiera micrófono pues estaba dirigiendo esas palabras para las hermanas. En otro momento cuando hubo un ruido del micrófono, le pedimos perdón y Ella respondió diciendo:

No se preocupen porque Mi mensaje no será alterado. Permanece en Paz.

Fue más o menos eso.

 

Madre Shimani: Vamos a agradecer cantando la canción que entonamos aquella noche del 8 de Agosto de 2007 “La Mujer que nos guía”.