MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

El triunfo del corazón es el resultado visible de un ser arrepentido ante el Señor y es ese arrepentimiento que lleva a ingresar en el camino de la rehabilitación. Mientras en las almas no emerja el espíritu del arrepentimiento, el Cielo y todo el Universo no tendrán cómo auxiliar a los corazones.

El acto del arrepentimiento no puede ser forzado ni fingido, el verdadero arrepentimiento nace de una expansión de amor que es capaz de mover, ante el Universo Celestial, el estado y el principio de todas las Leyes que lo rigen.

El triunfo del corazón es el efecto de una humillación consciente, que tiene el resultado inmediato de cambiar una justicia severa por una Misericordia reparadora y redentora.

Por eso hijos, el arrepentimiento de cada ser podrá ser la puerta segura para que triunfe una vez más el amor del corazón. Son invitados a vivir este acto de arrepentimiento para que la condición espiritual precaria de la humanidad al menos encuentre un nuevo camino para poder vivir el surgimiento de la nueva humanidad.

Hijos amados, que el triunfo del corazón no sea una teoría o un deseo, sino que sea un acto de consciencia y de reflexión, capaz de colocar en primer lugar el amor como emblema de redención y de perdón.

Como vuestra Madre Celeste piadosamente deseo conducirlos por los caminos de la rehabilitación de la vida y de toda la consciencia; las Puertas del Cielo no se cerrarán cuando tan simplemente confíen en Mi llamado.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los convierte a través del Amor de Dios,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE GOIÂNIA, GOIÁS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Hijos Míos:

Desde el Cielo contemplo las necesidades de redención del mundo y las causas que impiden a la humanidad alcanzar esa redención.

Por eso, queridos hijos, día y noche rezo por todos ustedes, para que los que más transgreden la Ley de Dios, al menos reciban su redención en el día definitivo.

A través del apostolado, que es el verdadero testimonio del amor a Cristo, la humanidad nuevamente recibe un llamado para que recuerde la Misericordia y el Amor del Creador; así las puertas de la conversión y de la reconciliación se abrirán para guiar a las almas por los caminos de la Santa Paz.

Ahora hijos, día a día los fundamentos del Evangelio de Mi Hijo y de Su Santa Palabra son el camino urgente para reencontrar la unión con el Padre Celestial, antes de que el mundo desencadene el tiempo de su purificación más aguda, en el que toda la Tierra se liberará de las deudas que durante siglos la oprimieron.

En este tiempo, en el cual Mi adversario despierta en las almas pecadoras ambiciones de conquista, aniquilación y muerte, Yo los llamo a buscar la serenidad, la oración y la paz. De esa forma hijos, permitirán que la Divina Justicia pueda actuar como el Universo lo prevé.

Hijos, recen Conmigo, quedándose todo el tiempo a Mi lado, así reconstruiremos esta vieja humanidad en una raza de esperanza y de perdón.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado a la perpetua oración!

Los une al Amor Universal,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Hijos Míos:

La negligencia ha llevado a la humanidad entera a tener acciones y actitudes contrarias al Plan del Creador, porque por detrás de cada estado interior, conocido o desconocido por ustedes, se encuentra un motivo que no está de acuerdo a la necesidad del Plan Mayor.

Por eso, hijos, su Madre Celeste, Madre de la Justicia de Dios, viene al mundo para desterrar estos estados que llevan al camino del error y del estancamiento del espíritu en cada ser.

Atentos a todo, abiertos a escuchar lo irreconocible y simples para recibir la instrucción del Cielo y de la Tierra; ustedes, Mis hijos, podrán percibir los diferentes grados de la condición humana y de su decadencia a lo largo de los tiempos.

Pero para que ese patrón de conducta, que fue gestado como algo normal, pueda cambiar, la constancia y el esmero en descubrirse a sí mismo serán las llaves que abrirán la puerta para poder liberar todas las condiciones humanas.

Para formar parte de la nueva sagrada familia de la humanidad, aunque estos estados internos y ocultos actúen y se manifiesten por sí solos, sin posibilidad de mantenerlos neutros; la oración, la instrucción y la perseverancia por encima de ustedes mismos, los ayudarán a encontrar el camino del vacío de sí, a pesar del gran desierto que enfrentan en estos tiempos.

La hora de su purificación marcará el momento de poder limpiar y curar todas estas cosas que como la negligencia, hasta los días de hoy, llevan a la humanidad por el camino incierto de una ilusión “renovadora y deseada por muchos”.

El manto de la humildad los protegerá de todo y sepan, hijos Míos, que en el momento de percibirlo todo, Yo estaré desde el Cielo alentándolos a la liberación de sí y a que reposen en los brazos de Mi sagrado recogimiento.

Cuando comiencen el camino de su purificación, será la hora de poder redimir todos los hechos y todas las acciones que ya no son parte de una vida santificada en el Señor.

Su unión inmediata y su amor al prójimo, a pesar de las diferencias, los harán libres y dichosos para recibir la Gracia del Reino de Dios. Pero mientras su búsqueda de todo lo que está equivocado queda visible ante los ojos internos de los valientes, no se desanimen hijos, esta escuela que viven promete la inserción en el camino espiritual del corazón, en el camino crístico de Mi Hijo amado.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los instruye, en consciencia y amor,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

 

Maratón de la Divina Misericordia
APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, DURANTE LA 20.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA, EN EL CENTRO MARIANO DEL NIÑO REY, RIO DE JANEIRO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

En nombre de los ingratos, canten al Padre Celestial, así alegrarán Mi Corazón: Adonai Espíritu Santo.

Mientras hoy estoy aquí con ustedes, nuevamente, el mundo circula por una gran transición.

Las acciones que comete la humanidad cada vez son más graves. ¿Quién se ofertará a transmutar estos estados como muchos seres lo hicieron en el pasado, en el total silencio del corazón y de la voz?

El tiempo que fue escrito, ya comenzó. Pero muchos no consiguen ver estas cosas.

A través de la Gracia que Dios Me concedió, vengo en esta tarde de Misericordia a abrir sus ojos internos. Porque en cada nuevo día espero que estén renovados por Mi Luz y que no sean las mismas personas ni las mismas consciencias, sino que sean transfigurados por Mi Amor Redentor a través de los Sacramentos Sagrados que Yo les entrego.

El tiempo seguirá pasando y las cosas se complicarán cada día más, pues muchos deberán sufrir por lo que han hecho. Muchos no conocen Mi insondable Misericordia.

Por eso, Yo los llamo, amados Míos, para que sean testigos de Mi Corazón Misericordioso, al menos algunas almas de este mundo, principalmente aquellas que se aproximan a sus caminos, encontrarán el aliento que tanto buscan y la fuerza interior que perdieron, por solo conocer Mi Misericordia.

Yo les marcaré la señal de Mi Retorno. Será muy evidente para los corazones abiertos, principalmente para aquellos que oren a Mi Misericordia.

Mi Voz hoy se pronuncia a todos y espero que ella haga frutos en sus seres, pues deseo profundamente, queridos Míos, que los apóstoles del nuevo tiempo puedan nacer.

Esto es algo verdadero, ya no es solamente espiritual. Necesito de testimonios vivos y de obradores de Mi Misericordia, que profesen la paz y el bien, a pesar del mal que circunda el mundo.

Yo nunca dejaré solos a Mis rebaños, pues en el silencio del corazón sigo sus pasos, hasta el cumplimiento de la misión final, para aquellos que se arriesguen transformarse y vivir plenamente Mi Divina Voluntad.

Como hoy consagraré estos Sacramentos, también consagraré sus espíritus, impregnando sus seres de una Luz Mayor para que, de una vez por todas, sean gratos y cumplan amorosamente con lo que Yo les pido.

Porque si aún hoy estoy aquí, entre ustedes, es por algo mayor, por una Voluntad Mayor. Espero que puedan percibir algún día lo que eso significa para estos tiempos.

Muchos mueren sin ver la Luz del Creador. E insisto con estas cosas porque siguen sucediendo como si nada pasara. Pero el tiempo de la liberación y de la Justicia Divina ya está llegando al mundo y esto no tiene reversión.

Así como lloran los niños, lloran nuestros corazones. Así podrán entender, Mis compañeros, la falta de consuelo que tiene Mi Corazón.

Ustedes son Mi fuerza reparadora, el motivo principal de Mi venida al mundo, como tantos otros servidores que solo buscan Mi Espíritu entre las tribulaciones de la humanidad.

Consagremos ahora con el corazón y la consciencia.

Repitamos:

Padre Glorioso y Eterno
te ofrezco con todo mi corazón y consciencia,
la unión perfecta y predilecta
que he establecido con Tu amado Hijo.

Y por los Poderes Celestiales
que brotan de Su Corazón Misericordioso,
ten piedad, Padre Mío, por esta humanidad,
por todo este planeta, por los siglos que vendrán.
Que así sea.

Amén.

Hoy, de nuevo, les entrego Mi Sangre.

Hoy les entrego amorosamente Mi Cuerpo lleno de ultrajes y espinas de los corazones infieles e impuros.

Reparen las ofensas de sus semejantes y proclamen a Dios el momento de su redención.

Beban de Mi Sangre y coman de Mi Cuerpo pensando, todo el tiempo, en la energía sublime de la restauración. Eso es lo que el mundo necesita para este tiempo, la restauración de Dios, así nacerá la Misericordia.

Les agradezco por haber compartido Mis Gracias con esta necesitada región, que debe despertar al Principio de la Redención.

Cierren sus ojos y llévenme a su interior, en comunión perfecta con Mi Espíritu, donde el mal no yace, sino el Amor absoluto del Creador.

Multipliquen sus oraciones y hagan feliz a Dios, por todo los que Él les dio, y por sus hermanos ingratos. Así glorificarán a Mi Corazón y estarán en eterna comunión Conmigo.

Nunca olviden de que Yo he pasado por aquí, pues esta es Mi última vez.

Paz para todos. Misericordia para los más necesitados. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN, DURANTE EL PRIMER SAGRADO LLAMADO

Mi Corazón está llagado por esta humanidad.

¿Quién tendrá el coraje de curarme internamente en este día?

Ofrezcan a Dios vuestra reparación para que el Gran Consolador venga a vuestro auxilio.

 

Fray Elías toma el cuaderno y comienza a escribir el primer Mensaje mensual.

Al terminar, Cristo Jesús continúa transmitiendo sus palabras:

 

En esta noche, Yo traigo la oportunidad de vivir en Mi Misericordia.

En esta noche sagrada, invitaré a algunos hermanos a que eleven hacia Mi sagrado Altar la oferta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, en honor de todos aquellos que mueren y de todos los inocentes para que Mi infinita Misericordia pueda seguir derramándose sobre el mundo.

Mi Corazón está en ustedes cuando tan solo lo permiten. Hoy Mi Corazón necesita estar más adentro de ustedes. ¿Me lo permitirán? Vivan en Mi Misericordia.

Estoy aquí con ustedes, pero también con el mundo. Observo lo que sucede en vuestro alrededor y también en toda la humanidad.

Mientras me elevan la oferta de consagración de estos Bienes Celestiales, canten a Mi flagelado Corazón para poder aliviarlo.

“Un hombre llamado Jesús” será el cántico.

Después de consagrar, queridos compañeros, Me despediré de ustedes.

 

Cántico: Un hombre llamado Jesús.

 

Suben al palco los hermanos convocados para hacer la oferta de los elementos para la consagración.

Cada corazón sostiene, entre sus manos, la oferta para Mi Sagrado Corazón.

Quiero que sepan que, en este momento, Dios los escucha en nombre de esta humanidad. Que cada uno de ustedes, en Mi Nombre, realice una oferta al Creador por una causa necesaria de este planeta, para que la Divina Misericordia permee todos los espacios y a todas las consciencias. Silenciosamente, los escucho.

Recojo en Mi Corazón vuestras súplicas y recibo de vuestros corazones todo el amor que Me pueden expresar. Con todo el amor de este mundo, aquel que proviene de las almas buenas, Yo reconstruyo esta humanidad, transfigurando ese amor en la esencia de Mi amor misericordioso, y lo vuelvo a derramar sobre la humanidad, así como es en este momento.

 

Recemos.

Padre Nuestro (en arameo).

 

Recordando, en vuestros internos, el pasaje de Mi Última Cena, traigan a vuestras memorias el momento de la importante consagración que Yo realicé por esta humanidad, en honor al Padre Supremo y a todos los Padres Creadores que se unieron a ese principio de transubstanciar el pan en Mi Cuerpo sagrado, el vino en Mi Sangre preciosa.

Reverencien en este momento los Rayos que brotan de Mi Corazón.

Oración (se repite tres veces):

Agua, Sangre, Vida y Redención
que brotaron del bendito Corazón herido de Jesús,
ten Piedad, Misericordia y Compasión por todos nosotros.
Amén.

 

Y así, en conmemoración de Mi Presencia eterna en el mundo, como fue en aquel tiempo, entre todos Mis apóstoles del pasado, del presente y del futuro, Yo bendigo estos Sacramentos bajo la imposición poderosa, luminosa, redentora y misericordiosa del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Celebren con amor Mi Eucaristía.

Vayan en paz.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Cántico:

Un hombre llamado Jesús.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón:

En verdad, ¡gracias, Señor!

Y a pesar de que el Mensaje de Cristo hoy fue muy fuerte, Él nos reveló Su Corazón flagelado nuevamente. Él no dejó de decirnos que nos amaba profundamente, así como cada uno de nosotros es. Él necesita de cada uno de nosotros, porque Él nos decía que cada uno de nosotros escuchamos Su Llamado, y Él necesita ese amor que cada uno de nosotros puede expresar por Cristo, porque será la única forma que Él tiene de poder derramar ese Amor nuevamente sobre la humanidad.

Él nos llamó, también en este día, a renovar nuestra confianza en Jesús. A no bajar los brazos a pesar de las cosas que están aconteciendo en el planeta. A fomentar nuestra esperanza y nuestra fe. Por eso, al final Él derramó Sus Rayos sobre nosotros y llamó a cada uno de esos hermanos que sustentaron esas bandejas, dentro del público, porque Él también reconoce en todos a Sus discípulos, no solamente en los que estamos consagrados, porque Él ve nuestra consagración internamente.

Él intentó, a través de esta consagración del Cuerpo y de la Sangre, que entre todos nos pudiéramos unificar en Cristo.

Él necesita que cada Sacramento, que cada oración que realicemos sea ofrecida a Él en reparación de las cosas que suceden en el mundo.

Él dice que es lo único que puede hacer en este momento, así evitará la Justicia del Padre, porque hoy Él nos mostró que el Padre tiene Su Corazón de Luz muy dolorido.

Pero si entre todos nos unimos y multiplicamos esa oferta de amor a Cristo, realizando cada cosa que hacemos en nuestro día por Cristo, Él prometió elevar a los inocentes al Cielo.

 

Para finalizar, se compartió el primer Mensaje mensual.

MENSAJE PARA LA APARICIÓN MENSUAL EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, TRANSMITIDO POR LA SEÑORA DE LOS DOLORES AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Hijos:

Sigan orando el Santo Rosario todos los días, porque será a través de los misterios que fueron vividos por la Sagrada Familia que en la oración se revelará el camino de la redención y de la paz.

Hoy, Mis pequeños y amados hijos, Me vuelvo a presentar a ustedes como la Señora y Madre que soporta los ultrajes y los dolores del mundo; Me presento como la Madre que junto a ustedes carga con la cruz de la aniquilación y del martirio. Ayuden a vuestra Madre Celeste para que, al menos por vuestros sacrificios, pedidos y súplicas, Mi Gracia infinita pueda interceder por todos.

Cuando la humanidad enfrenta, de ciclo en ciclo, pruebas duras y difíciles, Mi Inmaculado Corazón se prepara, en nombre de Cristo, para orar por ustedes y ayudarlos amorosamente a corregir vuestros desviados caminos.

En este tiempo, Mis hijos, el mundo camina rumbo a un desastre espiritual y planetario; por eso Mi Corazón asumió los siete principales dolores del mundo con el fin de aliviar a los inocentes y de revertir, mediante vuestra oración, los padecimientos que nunca terminan.

Necesito en este momento de vuestra consciencia misionera disponible, la que sea capaz de renunciar a sí misma y donarse completamente, en la esperanza de colaborar y de revertir a tiempo las consecuencias de una humanidad camino a la decadencia total.

Muchos de los hechos que hoy suceden son parte del Armagedón, de un Apocalipsis que despierta y se desarrolla rápidamente a la par de las acciones injustas de la humanidad. Si al menos se respetara la ley y se amara la Vida Divina de cada alma, muchas de las dolorosas experiencias que enfrenta vuestro mundo podrían disolverse de la realidad de los hombres y convertirse en paz a través de la oración inmediata de todos.

Pero lo que ha de venir, aún no llegó; el arrepentimiento y la penitencia es algo que la humanidad nunca ha practicado de corazón. Pero no será necesario vivir flagelaciones propias, ya basta con todo lo que hoy Mis hijos enfrentan injustamente; el verdadero arrepentimiento deberá brotar de vuestros corazones, como un acto de amor reparador y de equilibrio interno ante las atrocidades humanas que hoy suceden.

De no haber un cambio urgente en la actitud de los hombres, les digo que los ángeles de la Justicia Divina de Dios se aproximarán al mundo para poner orden en todo lo que es apocalíptico e injusto.

Rezo por ustedes desde Mi Reino Maternal y espero, hijos amados, que se recuesten sobre Mis brazos para que Yo los alivie de esta fatiga y cansancio que nunca termina.

Recuerden que el amor vence todo mal; Yo les he enseñado a amar la vida, a amar a los semejantes y a amar vuestros trabajos. Ahora es momento de reflejar el amor en este mundo, como una flor que se abre a los rayos del sol.

Generen la Fuente del Amor, vivan en el Corazón de Mi Hijo y ayuden para que Mis siete dolores se conviertan en redención y amor para todos. ¡Sigan Mis pasos!, pues solo deseo llevarlos a Jesús, a los brazos del Gran Amor Redentor.

¡Que las almas escuchen Mi llamado!

¡Que los corazones sean portadores de la Misericordia de Dios! Yo siempre los esperaré en oración.

Les agradezco por aliviar Mis siete dolores.

¡Gracias hijos Míos por hoy responder a Mi llamado!

Los auxilia, los redime y los ama,

Vuestra Madre María, Señora y Madre de los Dolores  

MENSAJE PARA LA APARICIÓN MENSUAL EN LA CIUDAD DE BRASILIA, DISTRITO FEDERAL, BRASIL, TRANSMITIDO POR MARÍA SANTÍSIMA, MADRE DEL SOL Y DEL COSMOS, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Como un rayo fugaz proveniente del universo, Mi Consciencia Maternal desciende y se aproxima a este mundo para que nuevamente la humanidad dormida despierte al llamado de Dios Altísimo.

Llego hasta vuestras vidas para que Me recuerden como vuestra Madre querida, como la Bondadosa y Prodigiosa Mujer de Dios, la que ha hecho milagros y conversiones espirituales en vuestras vidas.

Pero cada vez que Yo desciendo desde el Cielo hacia vuestro mundo, Mi Corazón Victorioso no puede dejar de ver la ignorancia y la indiferencia de muchos de Mis hijos, los que han pasado por Mis caminos, Me dan la espalda y no Me escuchan. Es esta indiferencia la que el enemigo propaga como veneno en el corazón de los hombres, es esta indiferencia y crueldad de muchos hijos Míos, las que llevan a la perdición de las almas.

Por eso, para que la Sabia Justicia sea evitada, Yo vengo del cosmos para suplicarles que hagan algo por esta destruida humanidad. Sepan que no solo las almas sufren, sino también Mis benditos Reinos de la Naturaleza, los que día a día son ultrajados sin amor ni misericordia, hasta retirar de ellos la última gota de vida; eso provoca la ira de Dios y promueve consecuencias irreversibles en todos los que destruyen el Proyecto Creador.

Por eso, Mis hijos, abran los ojos a la sabiduría y sientan en el corazón la oración que Yo cada vez más les pido que realicen, eso ayudará a que se eviten desgracias en los más injustos.

Por encima de todo busquen la Misericordia de Dios, para que ustedes y el mundo sean perdonados de los constantes pecados de necedad y vanidad. A través de Mi Bendita Pureza Yo les entrego el poder cósmico de Mi Gracia, estado que los repara y los conduce por el camino de la redención.

Mientras Mi Hijo ve día a día los horrores y las acciones injustas que se cometen contra el Corazón del Padre Celestial en este mundo enfermo, Yo los coloco dentro de este tiempo apocalíptico como si ustedes no participaran de él. Pero es el poder de la oración y de la consagración diaria de vuestros corazones a Mi Inmaculado Corazón de Madre, lo que permitirá revertir vuestras faltas y las faltas de muchos.

Quiero que todos sepan que a través de Mi llamado encontrarán la salida y aunque el enemigo los golpee fuerte, él nunca conseguirá derrumbar el amor que Yo he colocado en vuestros corazones. Sean sabios y así no se confundirán evitando seguir otro camino, otro movimiento espiritual que no sea el de Mi Hijo Amado.

Glorifiquen a Dios y pidan por cura y misericordia. El mundo sigue sin comprender que debe cambiar antes de que las malas acciones sean liberadas por la Justicia de Dios.

Yo los animo en este tiempo a amar. Yo los llamo a ser humildes y transparentes, así Me ayudarán a equilibrar el eje planetario, el ecuador de este mundo, antes que él se desequilibre a causa de la densidad y de la maldad humana.

Pero aún en este mundo material existen corazones como los vuestros, determinados a seguirme hasta los días de la santa muerte; de esa forma vuestra devoción y fe harán siempre triunfar Mi Inmaculado Corazón.

¡Bendigo en este día al grupo de Brasilia por haber escuchado y respondido a Mi llamado!

Mi Hijo agradece por haber acogido a Mis Misioneros.

Los protege ante todo,

Vuestra Santísima Madre María, Madre del Sol y del Cosmos

Mensaje extraordinario
MENSAJE EXTRAORDINARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Recuerda, en este último tiempo, Mis Palabras de Luz y abrázate fuerte a Mí para que Mi Amor disipe las confusas ideas del mal.

Por eso, te pido que cada día confíes un poco más en Mí y que recuerdes estos últimos momentos de amor que, en Mi Gloria Celestial, has compartido Conmigo.

No demores, el tiempo pasa y Mi campanario sideral está llamando a las últimas ovejas antes de que llegue el tiempo de la Justicia Divina.

Anímate y entrégate. Mi absoluta confianza ha descendido sobre tu ser. Y en todo este precioso misterio se guarda Mi Amor por las almas.

Por eso, con determinación y vacío de tus propias voluntades y expectativas, pon atención a lo que Yo te digo, pues tienes la Gracia suprema de ser digno ante Mi Padre y de recibir todos los días Mi infinita Misericordia.

Si caminas hacia Mí, la oscuridad del sendero no te tocará ni te abrazará.

Sé inteligente y decídete a buscar las cosas que vienen de Mi Voluntad. Así sabrás qué camino correcto seguir y te librarás, por Mi Gracia, de que tus semejantes se pierdan.

Abre tu corazón, pues aún no lo has hecho. Abrirme tu corazón significa renunciar todo el tiempo a tus propios deseos. Cuídate de ti mismo más que de tus opositores. El puro sendero es construido con base en la unidad perfecta que establezcas con Mi Reino.

A lo largo del tiempo, Yo te he dado Mi Paz y Mi Misericordia. Sé agradecido y bueno. Escucha Mis Palabras a través de tus hermanos.

Recuerda que Yo estoy presente en los sagrarios y en todos los templos orantes de los seres. Si aún no has reconocido Mi sabia y pura Voluntad, hoy te la muestro y esta es Mi petición espiritual: sígueme y renuncia a tus proyectos. 

Yo Soy el único portal hacia la salvación y la redención de tu pequeñísima vida terrestre. 

Ya no es tiempo ni momento de que tus pies estén en dos barcas. Deja de naufragar en tu propio mundo y reconoce humildemente a Quien ha venido a llamarte y a redimirte.

Cuando abras tu pequeño corazón ya estarás amando las cosas del Cielo. Mientras busques tu propia realización solo serás para Mí una parte del pecado de este mundo cruel.

Resígnate e implora Mi Misericordia. Las Tablas de la Ley ya están a los Pies del Creador y ellas pronto serán reveladas por los coros celestiales antes de Mi Retorno.

He venido durante tanto tiempo y tantos días, para que algún día puedas renunciar y unirte al espíritu de Mi santa Humildad.

Que esta Maratón misericordiosa, después de tantas realizadas, sea el momento de que cada ser recapacite por todo lo que recibió directamente de Mi Sagrado Corazón de Luz.

Cuando hayan recapacitado, meditando sobre Mi Pasión, les aseguro que se darán cuenta de todo lo que les he dicho en nombre de Dios.

Recen y no busquen otra cosa que rezar. Pidan perdón por vuestra inmensa soberbia y decídanse a ser, ahora y siempre, dignos en el Señor.

Por vuestro gesto de humillación y reverencia, les agradezco.

Bajo el perdón infinito de Dios, sean bienaventurados.

Gracias a los que Me adoraron, de corazón, en el Santísimo Cuerpo de Cristo.

Vuestro Maestro, Cristo Jesús

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN, CON MOTIVO DEL ANIVERSARIO DE LOS MENSAJES SEMANALES

¡Ay de aquellos que no reconozcan Mi llegada!, porque perderán el camino por haber creído en sus propias fantasías. Por eso, día y noche, Yo los llamo a la santificación de sus vidas para que, en verdad, algún día, sean dignos de recibir Mi Legado.

Cuando llegue el día de la gran oscuridad, no deberán temer. Yo estaré con ustedes hasta el fin de los días, estaré con todos los que verdaderamente reconocieron a tiempo Mi Voluntad. También, Yo estaré con los que fueron capaces de renunciar a sí mismos y de olvidarse de sus propias preferencias, para que Mi Plan se cumpliera en sus semejantes.

Cuando llegue el tiempo de la tribulación, muchos recordarán estas Palabras, que serán el sostén en los momentos críticos y especialmente en los días del Gran Juicio Final, en el que los ángeles de Dios abrirán el Libro de la Vida de todos los seres de la Tierra y, ante los Tronos de Dios, el Padre Eterno llevará adelante Su Juicio Universal.

Aquellos que comulgaron Conmigo, en humildad y amor, lo sabrán en esos días, antes de Mi Retorno en Espíritu de Paz, y podrán reconocer que Mi Presencia era verdadera,

Dichosos los que se hayan esforzado para cumplir Mis Voluntades, que son la Voluntad de Dios.

¡Ay de aquellos que, convencidos de su propia verdad, seguirán otros pasos que no son los Míos!

¿Quién dará una moneda por ellos?

¿Quién dará la vida por los que fueron injustos?

Yo deseo todo el tiempo hablarles de las cosas bellas del Cielo, pero ahora debo decirles las cosas injustas del mundo.

A los que buscan experiencias con lo Divino, que no se engañen, que procuren cada vez más rezar de corazón y sin expectativas por lo que sucederá en el futuro.

Dios les da Sus grandes Herramientas a los más simples, la mayor Sabiduría a los más puros y la divina expresión del Amor a los más vacíos de sí. Si aún no tienes esto en tu corazón, escúchame y lee las Palabras que te he dado a lo largo de un año entero y, así, sabrás qué es lo que Yo quiero de ti y no lo que tu deseas todo el tiempo.

De esta forma, Mis compañeros, hoy resumo en este Mensaje las llaves de Misericordia que Yo les He dado durante un año entero.

¿Acaso has contemplado Mis Palabras con sinceridad y sin orgullo?

Todos los Mensajes recibidos y transmitidos por Mi Santa Palabra son las últimas gotas de Misericordia que Yo estoy derramando sobre el mundo en vísperas de la Justicia Divina.

Les agradezco por persistir.

Mi Luz también se recogerá de este mundo, pero Yo estaré presente en los corazones simples y verdaderos en su intención.

Recen amorosamente por los que Me han sido ingratos.

Bajo la Misericordia de Dios, sean bienaventurados y justos.

¡Gracias a los valientes por morar en Mi Corazón Misericordioso!

Cristo Jesús Glorificado
 

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EXTRAORDINARIA EN LA CIUDAD DE PUNTA DEL ESTE, MALDONADO, URUGUAY, TRANSMITIDO POR MARÍA, MADRE Y REINA UNIVERSAL A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Que Mis ojos sean el sol vivo que ilumina vuestros caminos. A través de Mi presencia en vuestras vidas, jamás existirá oscuridad que los confunda o falta de fe que los separe de Dios.

Mis amados, que los rayos que provienen del sol del mundo sean los mismos que provienen del Corazón de Dios, por intermedio de Su Sierva.

Sientan esos rayos del sol de este mundo, que representan Mi Fuego y el Fuego del Corazón de Mi Hijo, que llegan al mundo para liberarlo de todo mal.

Vengo entre las nubes, revestida de Luz Celestial, para anunciar un nuevo tiempo de grandes cambios, tiempo en el cual deben ingresar conscientemente.

Llego a esta ciudad, para mostrarles que ni la mayor belleza construida por las manos de los hombres se compara a la grandeza celestial.

Todo lo que pueden ver a vuestro alrededor, construido por las manos humanas, son ilusiones que aprisionan el corazón a la materia y a los deseos materiales; mientras todo lo que proviene de la Creación Divina libera al alma y la hace salir de sí misma para que se funda con la Fuente de la Creación.

Mis amados, Mi presencia llega a esta ciudad, como una última esperanza, para que esta nación pueda despertar definitivamente a su misión.

Sé que muchos piensan que existen ilusiones mayores en el mundo, mayores riquezas, mayores perdiciones. Mas Yo les digo, Mis queridos, que esta nación representa para Dios uno de los pilares de Su proyecto redentor y debe cumplir con su misión primordial en este tiempo. Por eso, aquí, en esta nación, instauro una de Mis principales casas en el mundo, para que pueda irradiar la conversión y el despertar de todos.

Espero encontrar aquí un grupo fuerte de oración, capaz de equilibrar, a través de la fe, toda falta de unión que existe con Dios. Pero para eso, hijos queridos, necesito almas que se comprometan verdaderamente con el Propósito Divino y que no duden en abandonar todas las ilusiones y deseos mundanos, para dedicar su vida al cumplimiento del Plan de Dios.

Hoy quiero dejarles un impulso para la consagración total de vuestras vidas a Dios; así podrán equilibrar las faltas de este mundo.

En este tiempo que llegará, solo una consagración verdadera y plena podrá equilibrar los males del mundo. Será necesario que, además de la oración, exista la consagración de las almas que se entregan completamente a Dios y renuncian a todo lo que este mundo les puede ofrece, para vivir una vida que contraría todas las corrientes humanas, que las purifica y renueva así, poco a poco, esta humanidad deberá tornarse sagrada.

Mis amados, Mi voz resuena en este mundo con suavidad y pureza, con amor y con perdón, pero llegará el tiempo de la Justicia, y aquellos que no se reconciliaron con Dios deberán vivir las consecuencias de su unión con el mal.

Yo los advierto en este tiempo, para que no haya dudas en vuestros corazones. Como Su Madre, Me cabe decirles la verdad. Por eso agradezcan a Dios por Mis palabras y sean consecuentes con lo que dictan vuestros corazones.

Yo los amo y los guiaré siempre que quieran seguir Mis pasos.

Que esta nación se consagre y esta ciudad se redima, por la oración y la consagración de los corazones que son fieles a su Creador.

Los bendigo hoy y para siempre.

María, Madre y Reina Universal

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA APARICIÓN MENSUAL EN LA CIUDAD DE CUIABÁ, MATO GROSSO, BRASIL, TRANSMITIDO POR MARÍA, SANTA SEÑORA DE GUADALUPE, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

De Mi pecho retiro con Mis manos el Corazón Purísimo de Dios, para ofrecerlo como Fuente de Gracias y de reparación para el mundo entero.

Hijos Míos, de Mi Esencia surge la bondadosa compasión, la cual Yo les traigo en honor al Dios Altísimo y en nombre de la Misericordia de Mi Hijo. Así, con todo este amor, Yo los abrazo fuerte y los tomo de las manos para que no se caigan en vuestros caminos, los caminos de Dios.

Como Madre y Reina de las Américas, vengo a pedir a todo el Mato Grosso, y especialmente a toda esta región que tanto ha padecido el dolor, el sufrimiento, la persecución y la muerte, vengo a pedirles la consagración de vuestras vidas a Mi Corazón Inmaculado. De esta forma, Yo misma derramaré las Gracias que tanto esperan hace mucho tiempo y, en consecuencia, evitaré la gran Justicia Divina sobre esta parte del mundo.

He venido aquí para recordarles que Yo Soy el Centro del Amor Materno de Dios para las Américas y el mundo. A través de Mi Gracia Suprema, y bajo la intercesión que Yo he ofrecido por todos Mis hijos de Mato Grosso, vengo con la intención espiritual de despertarlos al llamado de la oración por la paz, en este lugar y en el mundo, y del servicio abnegado, para que manifiesten de inmediato la caridad que muchos de ustedes no viven.

En Mis simples palabras se encuentra la presencia y la voz de Dios, Padre Amado, que aguarda que todos Sus hijos regresen a Él para que vivan en el Universo de Su Infinita Misericordia.

Yo Soy la Madre Guadalupana, Soy la gran Señora y el Portal del Sol que viene desde el Universo para interceder por todos Sus hijos de la Tierra; vengo para volver a unir a los pueblos y a las razas, Yo vengo para que los que aún no creen en Dios ni en Mí, acepten la ayuda divina que el Cosmos de Cristo les trae por la ofrenda de Mi Corazón Inmaculado.

Oro por ustedes, sin tiempo y sin espacio, y espero que vuestras voces orantes puedan ser escuchadas en la Tierra como en el Cielo. Cuantas más almas respondan a Mi llamado a la paz, al perdón, a la cura y a la reconciliación, el Apocalipsis no se cumplirá y la raza podrá ser redimida en el momento del Retorno de Mi Hijo al mundo.

Para que eso suceda Yo les pido, queridos hijos: ¡despierten!, ¡despierten!, ¡despierten a la Voluntad de Dios!, al llamado supremo de un cambio profundo en la consciencia humana y en la vida de todos los seres que hoy viven sobre la Tierra.

Para evitar que la Justicia de Dios descienda en este mismo momento sobre algunas partes del mundo, Yo necesito que vuestro espíritu de oración y de apostolado esté al servicio de Mi Corazón Sacratísimo, porque si así lo hacen, Yo podré colmarlos con Mi Luz, con Mi Amor, con Mi Paz y con la Misericordia de Dios.

Mi Corazón necesita despertar a tiempo en vuestras vidas, con la finalidad de que ustedes perciban la gran emergencia en el final de este tiempo.

Agradezco a todos Mis hijos de Cuiabá por haber respondido a Mi llamado por la Paz y deseo que, en esta noche, todos los grupos de oración recen juntos el Santo Rosario por la Misericordia y la salvación de las almas de Mi Sagrado Medio Oriente.

Les pido que así lo hagan antes de Mi llegada a Mato Grosso; el Cielo les agradecerá.

¡Gracias por acompañarme!,

Vuestra Madre María, Reina y Señora de las Américas

Paz para todos

Fray Elías del Sagrado Corazón:

Al final del mensaje Nuestra Señora como Señora de Guadalupe nos saluda en idioma Azteca diciéndonos:
 

QUE CHUA TLAN NUMKAT SOLKT
       “Que el Universo de Dios siempre los acompañe”
 

Y luego dijo:

“Les digo esto en lengua Azteca”.

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA APARICIÓN DE LA SANTÍSIMA MADRE DE DIOS, LA VIRGEN MARÍA, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE CUIABÁ, MATO GROSSO, BRASIL, A MADRE MARÍA SHIMANI DE MONTSERRAT

Mis pequeños amados:

Hoy, traigo, desde el Cielo, Gracias para todos Mis hijos, Gracias que Dios Padre ha permitido derramar sobre los espíritus que están sedientos y que aspiran a encontrar en Mi Corazón un lugar de refugio y de renovación.

Por eso, hoy, de una forma simple, ruego en oración que todos Mis hijos, presentes aquí y en sus hogares, abran nuevamente el corazón a la Madre del Cielo que viene a auxiliarlos y a traerles la Buena Nueva del Retorno del Redentor.

Amados Míos, que han estado alejados de Dios sin percibirlo, inmersos en las modernidades del mundo y dormidos espiritualmente, Yo vengo hoy para ofrecerles Mis brazos de Madre corredentora, aquella que quiere darles Su Corazón para que el Amor de Dios sea un hecho en sus vidas.

He venido hasta aquí para rescatar a Mis hijos del sueño en el que están inmersos, sueño que no les permite ver la Luz de Dios en sus mundos internos.

Para aquellos que quieren salir del letargo en el que se encuentran, Yo tengo una Gracia para sus vidas y la de sus familias. La Gracia que lo convertirá en un servidor del Plan de Dios para esta humanidad; la Gracia de convertirse en un soldado mariano, un alma que ore junto a Mí y junto a sus hermanos por la redención de esta Tierra y de toda su raza, para que aquel acto de Justicia Divina, que está escrito para la humanidad, se pueda aliviar.

Hijos queridos, Mis lágrimas expresan Mi dolor por ver cómo Mis queridos hijos se pierden todos los días sin siquiera percibirlo, en la ignorancia y el sufrimiento, y la maldad poco a poco se va apropiando de sus vidas.

Pero mientras Yo esté con ustedes, nada deberán temer, solo deberán estar unidos a Mí en confianza, que Yo colocaré Mi Manto maternal de amor y protección sobre ustedes.

Quiero que comprendan, hijos queridos, que este planeta está naufragando en el mar de la ilusión y que necesita de un gran despertar que disuelva esa ilusión y devuelva al corazón de Mis hijos esa unión sagrada con el Padre Creador, esa unión que se ha perdido.

¿Quién de ustedes responderá al llamado de Mi Corazón?

¿Quién de ustedes Me abrirá la puerta de su ser, para que Yo pueda amarlo y protegerlo, instruirlo y convertirlo en un soldado de Mi ejercito mariano?

¿Quién de ustedes permitirá que lo lleve de la mano hacia el Corazón bendito de Cristo, el Redentor y Salvador, que llegando está?

¿Quién de ustedes se animará a comenzar una nueva vida, llena de desafíos espirituales y de una gran esperanza, la de que en Dios todo puede cambiar?

¿Quién de ustedes querrá trabajar arduamente para que los que vienen detrás puedan vivir en una Nueva Humanidad, donde la fraternidad verdadera, el amor a Dios y a toda Su Creación, sea la premisa de la evolución para esta raza?

¿Quién, hijos Míos, quién Me dará un sí pleno de confianza para que Mi poder liberador toque su alma y le de una vida nueva?

Acércate a Mi Corazón, querido hijo, querida hija, que aquí está tu Madrecita del Cielo que viene a recordarte que eres un hijo de Dios al servicio de Su Plan de Paz y de Amor.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado de Madre y por estar hoy Conmigo!

Los amo y los bendigo siempre,

María, Madre de Dios y Reina de la Paz

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA SANTÍSIMA SEÑORA DE AURORA, LA VIRGEN MARÍA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Conságrate a Mi Corazón, para que Yo pueda llevarte al Reino de los Cielos en corazón y en consciencia y así tu alma sea un instrumento de Dios.

Conságrate a Mi Corazón, para que a través de ti, toda la humanidad viva la santidad y la consagración de su esencia.

Conságrate a Mi Corazón, para que este mundo esté unido perpetuamente al Corazón Sacratísimo de Mi Hijo, este que traigo como un regalo celestial para la humanidad.

Conságrate a Mi Corazón, todos los días para que tu alma no corra el riesgo de perderse en este camino tan lleno de sombras y de engaños.

Conságrate a Mi Corazón, entregándome tu vida y todas las virtudes, para que Yo pueda disponer de ellas para la salvación de todas las almas.

Conságrate a Mi Corazón, y sé un ejemplo de vida para las criaturas.

Conságrate a Mi Corazón, y sé el hilo que conduce la evolución de los Reinos Menores, que encontrarán en ti el camino para la evolución.

Conságrate a Mi Corazón, incansablemente, para que no te venzan las tentaciones de este mundo.

Conságrate a Mi Corazón y sé la alegría del Corazón de Dios, para que encuentre en ti el motivo para interceder por la humanidad.

Conságrate a Mi Corazón y no bajes los brazos; sé un soldado incansable de este ejército de Paz.

Conságrate a Mi Corazón, hijo Mío, hija Mía, para que así se cumpla el Plan de Dios para este mundo.

Camina rumbo a la consagración de la vida permanentemente.

Cuenten siempre con el auxilio de Mis brazos maternales, cuando caigan en el piso y sinentan que la opresión de este mundo es mayor que vuestra capacidad de levantarse.

Hijos queridos, quiero que den ejemplo de consagración en este mundo, para que a través de aquellos que responden a Mi Llamado, todo este planeta se encienda y las almas despierten a la consagración al Divino.

Hoy traigo en Mis manos el Corazón Sacratísimo de Mi Hijo que con amor entrego al mundo, para que puedan fundirse con Él, por los siglos que vendrán.

Pido a este planeta y a todas las almas que Me escuchan que no se aparten de Dios, que no finjan no escuchar Mi Llamado, porque cada uno de los que Me escucha tiene un compromiso mayor Conmigo, una misión entregada a Dios, un propósito que vivir.

Mis amados, Mi Corazón llega al mundo en este tiempo para revelar verdades que estuvieron ocultas por mucho tiempo y que pocos corazones pudieron develar los misterios que las ocultaban. Pero para que Mis manos retiren los velos que cubren los ojos de la humanidad, necesito almas que puedan auxiliarme y que puedan sostener el Poder de Mis palabras.

Hijos queridos, es necesario que existan almas consagradas al Señor, para sustentar el peso de Su Justicia Divina y también el Poder de Su Misericordia; que puedan sujetar a los que están caídos y levantarlos otra vez.

Por eso quiero que sean fuertes como un brazo de Dios en este mundo, que sean firmes y decididos; que no haya dudas ni temores en vuestros corazones; que no sean tibios, que no sean débiles sino que entreguen al Padre vuestras flaquezas y abran el espacio en vuestros corazones, para que el Espíritu Divino del Creador ingrese con toda Su Gloria y Majestad y que se tornen incansables e invencibles en el Corazón de Dios.

Sepan que de Dios proviene todo el Poder del Universo y aquel que está en Su Omnipresencia, no perecerá.

Por el Poder curador del Reino Celestial y por la Cura que emerge del interior de este mundo, Yo los bendigo y los protejo. Yo los guardo y los conduzco al Reino de Dios, a Su Corazón.

María Señora de Aurora y Reina de la Paz

Mensaje extraordinario
MENSAJE ESPECIAL DE CRISTO JESÚS EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, CON MOTIVO DE LA REUNIÓN ANUAL DE LA ORDEN GRACIA MISERICORDIA

Mi Corazón es la Eucaristía Viva para las almas del mundo. Mi Corazón disipa las sombras que viven en el interior de los hombres. 

A través de la unión con el poder de este Sacramento, las consciencias se redimen y santifican los pasos de su caminar hacia Dios. Bendito sea el corazón sincero que comulgue con este Sacramento Eucarístico, porque tendrá la vida eterna cuando todos los días solo busque el camino a la perfección. 

Envío a Mis ángeles celestiales para que en todo el mundo derramen los códigos crísticos que fueron alcanzados por Mí durante la Pasión, así Mi Gracia evita que el poder de las Leyes caiga sobre los justos, porque aún en la Tierra moran almas preciadas por Mi Padre. 

Así, a través de Mi Cuerpo y Corazón Eucarístico, Yo estableceré en el mundo la devoción al Sagrado Corazón de Jesús. De esta forma, aquellas consciencias que, todos los días de sus vidas, Me hayan buscado con sinceridad, superando y trascendiendo los límites de la materia, el día de la Justicia Divina, estas almas no serán causa de Mi Justicia, mas serán mediadoras para la salvación de otras almas que en esos tiempos serán prisioneras del mal. 

Dichosos todos los que hayan buscado el camino de la Adoración. Los templos del corazón estarán preparados para llevar adelante obras universales de paz en la miseria y el caos, porque Yo, a través de la efusión del Espíritu Santo, realizaré Mis últimas obras magníficas sobre el consciente de la humanidad; así muchos sabrán quién en verdad Ha sido el Hijo de Dios. 

Por eso, antes del gran momento universal, Mi Fuente Espiritual preparará a los rebaños. Llegada la hora de la gran revelación celestial en toda la esfera de la humanidad, aquellos que acompañen el transcurso de Mis Caminos serán como lanzas de fuego, que traspasarán el mal y liberarán, solo por su presencia, toda oscuridad. Pero nadie sabrá quién lo hará, colocaré un velo sobre todo este misterio, solo el amor y la humildad en los simples demostrará el poder de este gran misterio creador. 

Y, aunque los espíritus impuros estén sueltos como lobos feroces en el actual mundo, los adoradores, que forman parte de Mi Cuerpo Místico, defenderán el poder de Mi Gloria y de Mi Retorno.

Los ángeles del Cielo serán las estrellas resplandecientes que guiarán el camino de los vigilantes y de los guardianes del Evangelio de Cristo, así llegará el momento de que Mi Iglesia Espiritual será solo una.

No será necesario que ningún hombre o ser sobre la Tierra reine en Mi Nombre, porque cuando Yo retorne revelaré el poder del Reino de Emmanuel a los que escucharon Mis Palabras con los oídos del corazón y del alma. 

Entonces, los justos deberán ser compasivos con los injustos. Llegará el momento de ejecutar las obras de misericordia y de caridad, que librarán a los inocentes de envolverse con los enfrentamientos que muchos vivirán. Serán victoriosos aquellos que se hayan convertido en adoradores de Mi Divina Misericordia. 

El Reino que se aproxima modificará la miseria espiritual y la indigencia injusta del desequilibrio corrupto que vive la humanidad. Pues Mi Luz Celestial corroerá con el poder del Fuego Divino todos los actos y los modos que llevaron a la perdición de millones de esencias en la humanidad. 

En ese tiempo, nada quedará oculto, la vida entre hermanos se volverá como espejos que reflejarán la verdad que siempre se ha ocultado. Por eso, les pido a los valientes determinación rápida en la entrega, así pronto se liberarán del código corrosivo de las pasiones humanas y el espíritu inmaculado de cada ser establecerá el Reino Divino en todas las cosas. 

El verdadero paso para la consagración se encuentra en el camino de la permanente fe del corazón, que les dará confianza y suma plenitud para vivir el universo desconocido. Los más simples sobrevivirán a las catástrofes que llegarán como purificación y fuego sobre la humanidad rebelde; así, cuando todo haya sido purificado, como el grano que es pisado en el granero, Yo vendré para restablecer Mi Reino Mayor, aquel que late perpetuamente en el corazón de este Universo Celestial.

Ahora, Mis peticiones se extienden a todos aquellos que quieran escuchar lo que el mundo ha generado. El tiempo próximo indica el camino de la superación de sí y esto será más verdadero cuando la constancia de vivir Mi Reino sea el propósito verdadero para los servidores. En todo paso y superación, Yo Me encontraré intercediendo e irradiando Mi Paz Celestial. 

Volveré con el propósito de recuperar los caminos perdidos y confusos de todos los que una vez se quedaron atrás por las acciones y las actitudes de los otros, de aquellos que creyeron estar haciendo las cosas correctas; pero ahora ellos deberán pagar el mismo precio de lo que fue fracturado, molido y herido en el espíritu de los que fueron engañados. 

Mi Reino es de Verdad. Yo les enseño, a través de Mi Amor, a ser luz suprema para el mundo, liberando de esa forma los códigos corruptos que se guardan en las células de la herencia humana. Por eso, Yo los reúno para vivir un camino de transparencia y de servicio inmediato al Plan del Padre Celestial. Necesito la rectitud de los servidores, que forjará, en sí mismos, los frutos y los potenciales que se resisten a donarse por un acto de suma apropiación. Pero de a poco, como una Buena Madre, Yo despierto los talentos divinos que servirán de socorro y de ayuda para el actual ciclo de la humanidad. 

Hoy, les hablo con esta rectitud, porque todos los seres que ya responden a Mis Comandos están prontos para escuchar en la madurez de la consciencia. 

Vigilen Conmigo y encontrarán la respuesta en todo lo que sea necesario aclarar. La Sabiduría de Mi Corazón hoy les derrama Infinita Misericordia. Recuerden que Mi Amor por ustedes es inmediato e inconfundible. 

Abrazo a los que una vez Me dijeron sí y llevaron Mis Palabras al centro de su corazón, que ahora será el camino para la liberación de sí mismos. 

Ámense crísticamente.

Únanse cósmicamente.

Trabajen fraternalmente, así Me agradarán. 

Les agradezco por acompañarme en la Eucaristía, junto a los ángeles mayores.

Paz para todos, la Paz de Dios.

Bajo el Amor de Dios, sean bienaventurados.

Cristo Jesús Misericordioso

 

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA VIGILIA DE ORACIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, TRANSMITIDO POR LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA, SEÑORA DE LA FIGUEIRA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Entra en Mi Corazón de Luz, porque allí encontrarás las respuestas que tanto buscas para las dudas y cuestiones que perturban tu pequeña vida.

Entra con confianza en la protección de Mi manto; es allí, bajo el resguardo de Mi esencia maternal, que estarás seguro para crecer y madurar la consciencia.

Hijos Míos, Me alegra retornar a esta Mi casa y encontrar corazones fortalecidos por los aprendizajes de la vida. Me alegra ver que, por medio de la oración, muchos despertaron para la vida del espíritu y para la vida del alma. Algunos ni siquiera lo perciben, pero ingresan cada día más en la esencia de Mi Reino.

Mis pequeñitos, este es un sagrado trayecto; es el que fue escogido por vuestras almas que despertaron a tiempo para construir en el interior la fortaleza de la oración y aprender, a través de la unión con Dios y del servicio al prójimo, el Amor que tanto se necesita en el mundo.

Mientras muchos niegan a Dios y buscan flagelar Su Sacratísimo Corazón, Yo recorro el mundo en la Divina Esperanza de despertar la mayor cantidad posible de almas y, mediante la intercesión de quienes oran con fervor, poder rescatar a los que claman día y noche por auxilio.

Hijos Míos, hoy les digo que gracias a vuestras más sinceras oraciones, Mi Luz redentora se está expandiendo por el mundo y, por vuestros constantes esfuerzos, Mi presencia maternal podrá llegar a los que están perdidos.

Quiero que sepan que de vuestra respuesta depende la expansión de Mi tarea mariana sobre el mundo. Cada vez que un alma da un paso firme en dirección al Corazón de Dios, recibo del Señor el permiso para estar un tiempo más sobre la Tierra y equilibrar situaciones que muchas veces parecen que no tienen solución.

Quiero que sepan que Mi materno Corazón acompañó la reunión que tuvo lugar en el Centro Mariano de Figueira y observó con atención los frutos, convertidos en transformación, que surgieron en los corazones y en las consciencias por medio de la instrucción recibida en los últimos días. Contemplé con alegría el paso interior que dieron en dirección a una comprensión mayor; de esta forma, se aproximan al Propósito de Dios para este tiempo.

Hijos Míos, sepan que cuando una gota de la Verdad Universal se derrama y se plasma sobre una consciencia, todo el planeta recibe la posibilidad de despertar a la vida Universal. Por eso cuento con el apoyo de aquellos que les develan Mis palabras, que saben leer en las entre líneas de Mi Verbo Divino y que, de esa forma, permiten que toda la humanidad reciba la posibilidad de descubrir un poco más sobre las Verdades Divinas que están disponibles para los que las buscan con el corazón.

Mis amados, como Nuestra Señora de la Figueira, recojo en Mi Corazón los bellos frutos que nacieron en los últimos tiempos y les pido que sigan profundizando en esta senda que los conduce al encuentro con el Espíritu de Cristo; de esta forma generarán méritos para que todos vuestros hermanos, que viven en la ignorancia, puedan tener en sus vidas una rendija de luz que ilumine el corazón y le traiga al alma la Paz que necesita para salir de la oscuridad y del perpetuo sufrimiento.

Oren mucho y descubran en la oración el verdadero poder del verbo que Dios entregó para Sus criaturas. El mundo necesita de la intercesión de todos los seres, y sus sinceras oraciones pueden cambiar los acontecimientos que están previstos y que, por Justicia Divina, ya descienden sobre la Tierra. Por eso les pido, Mis amados, oren, oren mucho y busquen con determinación encontrar el poder de la oración en vuestras vidas.

Les agradezco por unirse a Mí en esta intercesión por las naciones del mundo.

Oremos, porque el mundo así lo necesita.

Los amo y los amaré siempre,

Vuestra Santísima Madre, María, Señora de la Figueira

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

¿Por qué temes?

¿Ya no has recibido Mi Insondable e Infinita Misericordia por casi 365 días seguidos?

¿Por qué temes a Mi Santa Justicia? Ella nunca te condenará ni te apartará del Amor de Mi Padre. Mi Justicia, aquella que vendrá al mundo después de Mi Misericordia, será compasiva y salvadora; ella reordenará las consciencias que se alejaron de Dios, porque Mi Justicia dará vida a lo que estaba muerto y resucitará lo que estaba muerto en vida.

Acepta el abrazo de Mi Corazón y sacia tu amarga sed en Mi Dulce Fuente de Amor y de Cura.

Ven a Mí, Yo te liberaré. No dejes guardada en tu corazón ninguna amargura; bebe de la Sangre Preciosa que brota de Mi Costado, lava tu rostro en los Códigos de Mi Luz y déjame actuar como Yo lo tengo previsto.

Estoy aquí en nombre de una Gracia Especial para sus vidas porque, después de todos estos días, quedarán grabados en la memoria universal estos encuentros Conmigo. Yo los preparo para el apostolado. Yo les enseño cómo amar y perdonar.

Búscame cuando sientas soledad, vacío o desesperación. Tengo algo precioso para encomendarte: vive en Mi Corazón y te diré en verdad quién eres y para qué has venido. Nunca te canses de buscarme, siempre estaré para escucharte, confesarte y darte Mi Perdón Infinito.

Agradece al Padre por reencontrar a tu verdadero Maestro Interior. Sé todo el tiempo en Mí, así podrás salir de ti mismo y el Espíritu de la Humildad estará en tu pequeñísimo espíritu.

Bajo el Amor Bondadoso de Dios, sean bienaventurados.

Gracias por buscar Mi Corazón.

Cristo Jesús

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN BRASILIA, BRASIL, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos hijos:

Vengo al mundo a darles la Paz, principalmente a aquellos que se unen a Mí a través del Rosario.

El Señor Me ha pedido que sobre la Tierra haya nuevos precursores de la Paz, nuevas llamas de Paz que puedan encenderse en este caos que hay en el mundo para poder transformarlo, liberarlo del corazón de los hombres, para que todos Mis hijos también alcancen esa Paz.

Hoy, los invito a amar la Ley de Dios; por más que la desconozcan, podrán conocerla a través de los Mandamientos. Si ustedes así lo viven, podrán acercarse a la Justicia de Dios, Justicia de la que el mundo se ha separado, porque la Justicia de Dios es Amor, es Compasión, es Misericordia.

Como Reina del Cielo, vengo a traerles el Universo del Padre. Sobre la Tierra, nuevas estrellas deberán reencenderse, nuevos soles que están a oscuras deberán volver a encenderse, y esto será posible a través de la oración y de la vivencia de los Sacramentos con Mi Hijo Jesús.

Queridos hijos, vengo a Brasilia para darles a conocer la Justicia de Dios, que muchos temen, porque la Justicia de Dios es una justicia que repara y restaura a los corazones que se han perdido.

La Justicia de Dios los quiere llevar a conocer la Vida Eterna, el principio universal de la Voluntad; pero es necesario, queridos hijos, que verdaderamente aspiren a amar esa Ley, que es la Ley del Amor y de la Verdad, la que muchos de Mis hijos han desconocido a lo largo de la historia por querer vivir las leyes de la Tierra.

Pero hoy, les vengo a dar a conocer la verdadera Ley de Dios que se encuentra en la esencia de sus corazones, en los pasos que ustedes pueden dar hacia el Señor a través de su confianza infinita en Su Amor y de la plenitud segura en Su infinita Misericordia.

Queridos hijos, antes del Regreso de Mi Hijo, vengo a abrir las puertas de sus corazones. 

La Nueva Jerusalén debe emerger como existió en el pasado entre los sagrados pueblos del desierto que, junto a Moisés, obedecieron las Leyes de Dios; y algunos de ellos, en el espíritu, encontraron la Tierra Prometida. 

Esta Tierra, de la cual Yo les hablo, es el Paraíso. Aquel Paraíso que vive en sus corazones, aquel Templo interior que muchos no buscan por estar distraídos en otras cosas, que el mundo provee como tentación y deseo, lo que hace apartar a Mis hijos de la verdad de la Ley.

Todos los Universos Celestiales, donde están los Ángeles y Arcángeles, quieren aproximarse a sus vidas.

Queridos hijos, es momento de que a través de la oración del corazón puedan conocer a sus Ángeles de la Guarda, invisibles presencias que Dios les concedió para acompañar sus pasos hacia la única meta definitiva, que es que ustedes se puedan fundir en la esencia del Amor de Dios en el próximo mundo.

Mientras el mundo aún sufre, muchos corazones deben encontrar esa Verdad, buscarla a través de la oración y de la fe para que sus corazones se puedan curar y la redención de sus almas pueda suceder, así como el Padre lo prevé desde el principio.

Toda la Creación del Padre, incluyendo a este planeta de amor, deberá vivir el nuevo Proyecto de Dios; esos esperados años de paz que muchos buscan y que, como una semilla interior, podrán empezar a cultivarse en sus corazones, y esa luz interior se expandirá a través de ustedes por medio de la oración y de la paz.

Por eso, queridos hijos, Yo los invito a buscar esa verdad. No busquen un misterio que no conocen, amen el Misterio de Dios para poder saberlo. Él se encuentra en todas las cosas manifestadas, en sus hermanos, en sus ciudades, en el planeta y en los Reinos.

Vean cuánta necesidad hay en el mundo y cuán pocos servidores se proponen servir a Dios para ayudar en este tiempo definitivo a la humanidad a través de las Leyes del Señor. Aquellas que vivió la Sagrada Familia de Nazaret podrán restaurar la Tierra, pero es necesario que existan instrumentos que puedan cumplir esta simple meta que Yo les pido: ser almas en oración eterna que puedan verbalizar la Palabra Sagrada de Dios para que las vibraciones sutiles puedan transformar a la Tierra y en consecuencia a los seres humanos que, día a día, se apartan de Dios siguiendo otros caminos que no llevan a la Paz ni al Amor.

Por eso, como Madre Universal y Reina de la Paz, Me comprometí ante Nuestro Padre en este último siglo, en este último siglo XXI, a abrir los corazones para que puedan ver la Verdad. 

Por eso, los invito a unirse a Mi Corazón como ya lo pido hace tanto tiempo en Medjugorje. Porque, después de estas Apariciones, esperaré que Mis hijos puedan concretar la consagración interior de las Américas a Mi Inmaculado Corazón. 

Así, ustedes permitirán que se abran nuevas puertas para que las Leyes puedan restaurar a los hombres, para que los nuevos principios de la Creación puedan emerger como nuevas flores en los corazones y pueda surgir la Nueva Humanidad que, desde hace mucho tiempo, Dios tanto espera que pueda despertar.

Queridos hijos, no les prometo felicidad, victoria o poder; Yo les prometo sacrificio, entrega, caridad, fe y amor, y mucha oración para estos tiempos tan difíciles.

Contemplen, en sus corazones, las necesidades que existen en este mundo. Es tiempo de hacer algo, queridos hijos, y ayudar a los Planes del Padre. En este tiempo, ustedes tienen las llaves para poder hacerlo: únanse a Mi Corazón Inmaculado. 

Proclamen definitivamente que pertenecen a Dios para que los falsos dioses puedan decaer y se establezca la victoria del Corazón de Mi Hijo en todos los corazones del mundo; pero para que eso suceda, hijos Míos, es hora de despertar.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Espero no causar temor en sus corazones, porque no es necesario temer a la Justicia Divina. Solo les traigo un impulso del Reino de los Cielos para que, a través de Mi Presencia, encuentren un camino seguro de consagración.

Mis queridos, hoy les digo que la oración activará la devoción en sus corazones y, a través de la devoción y del amor, que nace en lo profundo de sus seres por el Corazón de Dios descubrirán que simple es cumplir con las Leyes del Señor.

Hoy, les digo, Mis amados, que es necesario tener mucha voluntad y determinación para seguir este camino, porque deben derribar las barreras construidas hace tantos siglos en la consciencia de la humanidad, barreras que alimentan al mundo material y que hacen olvidar la vida del espíritu. Hoy, pueden ver a su alrededor lo que construyeron con esta aspiración de crecer solo en la materia.

Hoy, les digo, Mis queridos, que el mundo sufre y también el Corazón de Dios sufre por todas las causas que la humanidad creó en el mundo. Por eso, en esta noche, les pido que estén dispuestos a equilibrar este mal, viviendo esta Ley de amor, de fraternidad y de oración.

No se permitan, hijos Míos, alimentar la discordia y la falta de amor entre las criaturas, sino sigan con fe y con confianza por este camino de unidad, camino que la Sagrada Familia depositó en la vida sobre la Tierra y que dejó como ejemplo y como verdad para que todos los seres humanos, a lo largo de los siglos, pudieran imitarlo.

Hoy, hijos Míos, si encuentran a la Sagrada Familia distante de la realidad de sus vidas, no entristezcan sus corazones, porque este es un camino largo, un camino de definición, de persistencia, un camino que se construye a través de la fe de sus corazones, porque la fe moverá todo aquello que está arraigado en sus conciencias, y lo que les parece imposible de ser transformado, por Obra y por Gracia del Espíritu de Dios se transformará.

Por eso, es solo necesario que quieran vivir esa transformación; que aspiren, con toda la voluntad de sus corazones, a seguir este camino de conversión de la vida y que, a través de la conversión de sus vidas, se dé la conversión de toda la humanidad.

Hoy, les pido, Mis queridos, que también vivan en comunión con los Reinos, como vivieron los santos y bienaventurados sobre la Tierra, para equilibrar toda la destrucción que la humanidad causó a lo largo de los siglos.

El amor que irradian a los Reinos repara al Corazón de Dios y transforma el destino de la humanidad, para que la Madre Naturaleza no necesite volverse en contra del corazón humano para equilibrar las faltas causada contra ella.

Mis queridos, hoy, les digo que aún hay tiempo de equilibrar espiritualmente las faltas causadas, a través de las oraciones fervorosas y verdaderas, a través de las acciones fraternas y amorosas, que crean unidad con los Reinos y con el prójimo.

Mis amados, si solo intentan vivir este camino, las puertas se abrirán delante de sus vidas y, paso por paso, descubrirán cuán simple era, desde el principio, vivir la consagración de sus corazones. Por eso, vengo a lo largo de los siglos a decirles que es posible que el corazón humano pueda crear en amor y en verdad y cambiar las situaciones del mundo, transformando toda la oscuridad que existe en una Luz que se expande por el planeta, la Luz del Corazón de Dios, que es irradiada a través de Sus Criaturas.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Yo los invito, queridos hijos, a orar en esta noche Conmigo, para que Dios reciba en Su Reino las súplicas de todos Sus hijos de esta humanidad.

A través de Mi bendición y de Mi intercesión, abriré la Fuente de la Cura para que toque profundamente sus corazones. 

Recuerden, queridos hijos, que hoy los invito a la Esperanza, que está invitación permanezca en sus memorias. Si buscan la Divina Esperanza nadie perecerá, sino que se levantarán del suelo cuando caigan, para que puedan seguir caminando firmes en Cristo. 

Como Yo le he dicho a la Hermana Lucía: un árbol que es rasgado, que muere por la mano de los hombres, es igual a una madre que pierde a su hijo; los minerales que son ultrajados, son como una grieta que se abre en el corazón de la Tierra; el agua que es contaminada, es como la pureza que se pierde en los corazones.

Por eso, queridos hijos, los invito a orar con devoción por los Reinos; porque ellos forman parte de la Vida Suprema sobre la Tierra y a través de ellos, queridos hijos, encontrarán también la Verdad y el Amor.

Recemos en esta noche la oración que Yo ayer les enseñé:

 

Madre del Cielo, Madre Tierra,
intercede por nosotros y por los Reinos.
Amén.

(11 veces, en portugués)

 

Recen, ahora, queridos hijos, por el Reino Marino en el Pacífico, que está muriendo extensamente, sin que nadie haga algo.

Como Madre de todos los elementos, como Virgen Santísima, contemplaré la necesidad de estos hijos que forman parte, desde el principio, de la Creación amorosa de Dios.

Recemos:

 

Madre del Cielo, Madre Tierra,
intercede por nosotros y por los Reinos.
Amén.

(ocho veces, en portugués)

 

Que la Voluntad de Dios se cumpla y la salvación acontezca.

Recemos, día y noche, día tras día, por su humanidad.

Gracias, queridos hijos, por atender a Mi llamado. La bendición se ha posado en sus corazones.

Y antes de elevarme al Cielo y guardar Mi Corazón en sus memorias, les pido en esta noche que todos los que han traído estas imágenes, representando a Mis Faces a lo largo de la historia, las tomen para que Yo las pueda bendecir.

Y el Espíritu Santo, queridos hijos, será su Fiel Intercesor en estos tiempos, el Gran Auxiliador de los corazones y de las almas que busquen verdaderamente vivir en Sus Dones.

Escucharé amorosamente “El vuelo del Espíritu Santo”.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Rezaremos el Ave María.

Nuestra Señora regresa en este momento para realizar la bendición.

 

Oración: Ave María (cinco veces, en portugués).

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Ante la Presencia de los Tres Sagrados Corazones: de Jesús, de José y de María; queridos hijos, guarden en su corazón a la Sagrada Familia. Aquella Suprema Consciencia que está a su pleno servicio para gestar en la humanidad a los nuevos seres que celebrarán en el Reino del Padre el encuentro interno con Dios.

Bendigo, en esta noche, estos sagrados elementos, que ellos sean el símbolo perfecto de su unión Conmigo, que ellos irradien la Luz de Mi Corazón Inmaculado para que Mi Amor se pueda expandir en sus hogares y familias.

Queridos hijos, en esta noche los bendigo, ante la Presencia de Mi Hijo y de San José, que extraordinariamente han venido a visitarlos; porque sepan, hijos Míos, que el nombre de Brasil significa en el Reino de Dios, la puerta de Luz que abren los hijos para recibir la Misericordia de Dios.

Que, con esperanza y alegría, sus corazones se eleven; y recuerden, hijos amados, que siempre contaran Conmigo por los siglos de los siglos.

Los amo y los bendigo.

Canten “María de Nazaret”. Eleven sus velas para que la Llama del Espíritu Santo permee sus consciencias y la Luz de Dios pueda permanecer en todos los espacios de este mundo.

¡Les agradezco!

En nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

A veces Yo permito que ustedes naden en contra de la corriente porque solo de esa forma sabrán enfrentar los vientos contrarios. Cuando no encuentren una respuesta positiva de parte de un hermano, será el momento indicado de volverse misericordiosos.

El universo de las imperfecciones y de los errores circunda la vida planetaria y, solo a través de los buenos actos de reparación y de misericordia los defectos de sus semejantes se curarán en su interior. Nunca esperen respuestas grandiosas de nadie, porque la verdadera respuesta se encuentra solo en el Amor del Señor.

Ahora están enfrentando el tiempo de las grandes corrientes contrarias; a medida que Mi Luz se aproxima al mundo, mayor es la fuerza de la tribulación que anticipará el tiempo del Juicio Universal.

Por eso, dediquen tiempo a obras de caridad, para que al menos los que duermen en las ilusiones puedan despertar y reconocer que es tiempo de vivir la fraternidad.

Quiero decirles algo: la Misericordia tendrá un tiempo más para ser derramada sobre el mundo, y luego será impartida la Justicia Divina.

Examinen día y noche sus consciencias para que siempre emerjan de ustedes pensamientos y actitudes puras.

Sigan adelante.

Bajo la Luz del Padre, sean bienaventurados.

Gracias por vivir Mi Mensaje en su interior.

Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Un urgente llamado maternal

Queridos hijos:

Con el rosario entre Mis manos, oro para que Mis hijos despierten a tiempo.

Oro por todas las almas que se alejan de Dios.

Oro para que el mundo alcance la Gracia de la Paz.

Oro por todos aquellos que no oran.

Oro para que la fe pueda despertar a tiempo en vuestros corazones.

Oro para disolver las dificultades que muchos hijos están viviendo.

Oro por este tiempo de prueba y confirmación.

Oro para que todos Mis hijos se perdonen y se rediman a través de Mi Hijo.

Queridos hijos, perpetuamente oro por este tiempo definitorio en que las almas se postulan para estar en el rebaño de Mi Hijo o se postulan para estar fuera del rebaño de Mi Hijo.

Por eso, como Madre Intercesora, oro para que nadie se pierda, ni siquiera la más pequeña de las esencias.

Oro para que todos alcancen el perdón.

Oro en este tiempo de Misericordia porque está brotando la Justicia Divina.

Oro para que Mi Amado Hijo Jesús esté entre ustedes.

Oro, suplicándole, para que Él los guíe nuevamente.

Oro por todo lo que observo en este mundo.

Oro por el nuevo ciclo que llegará.

Oro para que la reconciliación se pueda vivir en cada criatura como una emanación del espíritu de la paz. Oro para que la confianza en el Único pueda fortalecerse en los que se han entregado al Plan Divino.

Oro con esperanza por toda la humanidad.

Oro para que todos Mis niños tomen consciencia de que ya no son tiempos normales, que es necesario rezar con el corazón todos los días y no olvidar fácilmente el alimento que provee el poder de la oración.

Oro por todos ustedes para que el Espíritu Santo descienda sobre cada uno de Mis hijos.

Oro por los que no escuchan Mi llamado y por los que desmerecen las palabras de Mi Inmaculado Corazón.

Oro para que se manifieste la verdad en vuestras vidas.

Como Reina de la Paz, oro por su salvación.

Por eso hoy, queridos hijos, oremos por todas las intenciones, porque es necesario que sus corazones estén en constante servicio. Oremos por la Presencia de la Paz de Dios porque ella será la que sostendrá al mundo.

¡Les agradezco!

Gracias por responder a Mi urgente llamado por la paz.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Mientras el mundo y la humanidad definen su camino hacia la eternidad de Dios, el tiempo de la Justicia Divina se aproxima para revertir todas las causas que se han generado en la humanidad.

Por eso, queridos hijos, en estos tiempos de emergencia, los llamo a todos a ser pacificadores y difusores del Propósito de Dios en la Tierra. De esa manera y mediante la oración del corazón, habrá más tiempo para que la Misericordia pueda seguir obrando en el corazón de todos Mis hijos.

Como Madre de la Justicia Divina, Yo les pido, queridos hijos, que no pierdan tiempo y abran vuestros corazones, porque como en Medjugorje, estos son Mis últimos avisos para que la consciencia de todos Mis niños reflexione y despierte a la realidad de este tiempo.

Queridos hijos, no vean a la Justicia como un castigo; la Justicia Divina ordenará lo que los hombres han desviado de la Voluntad de Dios.

Por eso, pequeños hijos, ¡oren!, ¡oren! y ¡solo oren! para que el Amor de Dios pueda tocar a todos Mis niños. Sepan que vuestra honesta y sincera oración del corazón definirá, como lo fue en Fátima, el próximo camino de la humanidad.

Como Mediadora, les pido que vuestras voces orantes socorran a la humanidad colocando cada una de vuestras súplicas a los pies del Creador.

Queridos hijos, un gran mediador es Mi Hijo Jesús; por eso, unan vuestras almas a la voluntad de Mi Hijo para que vuestros corazones encuentren una guía verdadera. En Jesús resucitarán a la vida. En Jesús remediarán el dolor del pasado. En Cristo seguirán por el sendero de la Misericordia y de la Redención.

No sientan miedo porque hoy Yo estoy entre ustedes y con todos los corazones del mundo, llamándolos a orar por la paz y la conversión de toda esta humanidad.

Rediman, a través del perdón, todo el pasado y, en alegría, junto a Mi Hijo, sacien vuestra sed de amor. Sean consecuentes los unos para con los otros, porque para el fin de este ciclo en el mundo, ha llegado la hora de manifestar las sagradas enseñanzas que Mi Hijo les entregó:

- Amar es perdonar

- Donar es entregarse

- Confiar es vivir en la fe.

¡Les agradezco por responder en este día a Mi llamado!

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

La Virgen María retomó la transmisión diciendo:

Hijos Míos, he visto y he considerado dentro de Mi Plan de Amor que, por los tiempos de emergencia, Mi Voz debe seguir teniendo eco en los corazones que aún no Me escuchan. Por eso, a partir de hoy, todas las apariciones mensuales serán públicas y abiertas a todos para que Mi mensaje reverbere en las consciencias.

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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