Viernes, 30 de junio de 2017

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO DURANTE EL VIAJE ENTRE LAS CIUDADES DE SAN ESTEVE, MONTSERRAT, Y BURGOS, CASTILLA Y LEÓN, ESPAÑA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Cuando tu corazón y tu alma estén buscando una salida para los abismos de tu propia consciencia, únete al Espíritu de Dios y clama por Misericordia.

Cuando tu corazón se aflija no solo por el mundo, sino también por lo que encuentras dentro de ti, únete al Espíritu de Dios y clama por Misericordia.

El Creador no espera de Sus hijos más que espíritus rendidos, conocedores de su propia ignorancia y de su necesidad de Misericordia.

El Creador no espera de Sus hijos más que corazones humildes, que claman y que se unen a Él para convertir sus materias corruptas y sus cuerpos enfermos.

Estar en este mundo, hijo, es al mismo tiempo una Gracia y un gran desafío. Depende de cada criatura saber abrazar esta Gracia y superar los desafíos, para encontrar en su propio interior, el potencial de Amor que le permite permanecer vivo, que sustenta este mundo, como también a cada corazón humano.

Únete verdaderamente al Espíritu de Dios como un hijo Suyo, necesitado de Su Misericordia, para retornar a lo Sagrado, que un día reinó en tu esencia.

Dios no espera de ti más que un corazón rendido, que reconoce la grandeza y el misterio de Su Proyecto y que lo ama, aun sin conocerlo, para que él pueda un día expresarse en tu propio interior.

Ama, entonces, la Voluntad del Creador para ti y clama todos los días por el establecimiento de esa Voluntad. Deja que el Rayo de Dios atraviese tu espíritu y te devuelva la paz que un día perdiste, por estar distraído del Propósito Divino. Deja que el Creador rehabilite y cure a tu pequeña consciencia y la haga grande, por estar unida a Él.

Reconoce tu pequeñez, uniéndote al Espíritu de Dios y clamando, sinceramente, por Misericordia. Yo me uniré a tu corazón y siempre clamaré contigo cuando seas sincero y puro en tus intenciones. 

Tu Padre y Amigo, 

San José Castísimo