Lunes, 20 de agosto de 2018

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

A donde ni los ojos ni la mente consiguen llegar, allí habita el Corazón de Dios.

A donde solo las almas, los espíritus y los corazones, elevados en adoración, consiguen entrar, allí habita el Corazón de Dios.

Mirada que abarca la Vida y que a todo contempla. Amor que se renueva a sí mismo, segundo a segundo y fuera del tiempo. Espíritu que anima, sustenta y ampara todo lo que fue creado.

En las esferas más sublimes de la Existencia, a donde parece que la multiplicación de la Vida nunca existió y la Unidad es una realidad eterna, allí habita la Consciencia Divina.

Permitan, en este ciclo, dejarse elevar y conducir hacia las esferas superiores de la Existencia, para que encuentren la verdad sobre sí mismos y no se dejen envolver o engañar por las superficialidades del mundo.

Ustedes existen como criaturas divinas, manifestadas en este mundo por un Propósito superior y, a pesar de que en este tiempo todo parece estar más denso y la condición humana parece estar profundamente inmersa en las ilusiones del mundo, la única forma de vencer las dificultades propias de los ciclos finales sin perderse, hijos, es elevándose hacia Dios y, sin ignorar su condición material, elevarse hacia la Verdad Divina.

Por eso, en este tiempo, los Mensajeros Divinos traen en Sus Palabras revelaciones y un estado interior que se oculta en todo lo que les decimos, para que ustedes alcancen las esferas sublimes, se aferren a la Verdad universal y que la propia Verdad los torne libres de sí mismos y de las cosas del mundo.

Yo los bendigo y los guardo en Mi Corazón.

San José Castísimo