MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Hijo:

Guarda la Luz de Dios en tu corazón. Allí, ella reposará y trabajará silenciosamente hasta cumplir su propósito interior.

Guarda la Luz de Dios en tu corazón, para que ella alcance la meta dentro de ti. Esa Luz desciende para bendecirte y para renovarte.

La Luz de Dios es neutra pero muy compasiva. Su presencia regenera la vida y despierta el amor en el corazón humano.

Esa Luz, que proviene de Su Fuente, es una potentísima Gracia que llega para renovar la vida del alma orante.

La Luz de Dios llega para redimir tus células a través de la elevación interior de tu ser. Así, abrirás espacio para que esa poderosa Luz actúe y obre conforme con el propósito que ella tiene.

Deja que la Luz de Dios transforme tu ser y aquellos espacios dentro de ti a donde aún ninguna luz llegó.

Confía en el poder de la Luz de Dios y todo se convertirá.

Ella atrae las almas hacia la Fuente Divina.

Ella comulga con el corazón que vive el camino de la oración.

Es la Luz que ilumina el camino de los pies peregrinos.

Es la Luz que revela la verdad interior.

Es la Luz de Dios que despierta a la consciencia y la conduce al discernimiento.

La Luz de Dios interviene en momentos culminantes y en situaciones difíciles.

La Luz de Dios nunca se reduce o desaparece de este espacio-tiempo.

La Luz es omnipresente y su omnipresencia le permite ayudar a muchas almas que necesitan imperiosamente esa humilde Luz del Creador.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE PARA  LA  APARICIÓN DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN TAHLEQUAH, OKLAHOMA, ESTADOS UNIDOS, AL  VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Cuando la Madre de Dios está en silencio es porque algo importante está por suceder y, en este momento, deben comprender ese significado.

Este silencio lleva a la introspección, a la reflexión y al discernimiento.

Es momento de que la humanidad comprenda los ciclos que está atravesando y viviendo en estos tiempos.

Por esa razón, los Mensajeros de Dios llegan a la Tierra para prepararla y guiarla hacia el próximo paso, hacia el próximo ciclo y hacia el nuevo tiempo.

Hoy he venido aquí a traerles Mi mensaje de paz, pero también Mi mensaje de consciencia, queridos hijos.

Hoy, en el mensaje dado por su Madre Celeste para las apariciones un ciclo se cierra y un nuevo ciclo comenzará, a partir del mes de marzo de este año, momento en el cual, ustedes, Me podrán acompañar en este último ciclo que se acerca y que finalizará una etapa importante para todos los mundos internos, y también para toda la humanidad.

Es momento de que comiencen a recoger los frutos de la instrucción y del conocimiento de la Jerarquía; de que puedan aprender a beber de esa Fuente, para que solo dependan de Dios, de Su Gracia y de Su Misericordia.

Y, así, sus almas se fortalecerán en este camino y en esta trayectoria al servicio eterno de Dios, por las almas, por los Reinos de la Naturaleza y por el planeta.

Hoy vengo aquí para anunciarles el fin de este ciclo, el fin de estos mensajes que vengo entregando y que los prepara para cada nuevo encuentro Conmigo, sea en sus corazones o ante Mi Presencia.

Es así, queridos hijos, que podrán comprender, en este momento, la omnipresencia de la Madre de Dios. Esa omnipresencia y poder que le ha dado Su Hijo para llevar adelante esta tarea planetaria en el fin de los tiempos, que es la última y gran tarea para estos tiempos.

Por eso, los invito a tener presente todo lo que les he dicho desde los primeros años en que Me he encontrado con ustedes, para guiarlos, conducirlos y hacerlos vivir el Plan de Dios en sus diferentes manifestaciones y tareas.

Este es el tiempo de hacer la gran y última síntesis. Es el tiempo de vivir el conocimiento de Dios para que puedan aprender a enfrentar lo que llegará, no solo a sus consciencias, sino también a todo el planeta, a la humanidad entera.

A través de cada mensaje, a través de cada palabra e instrucción, su Madre Celeste les ha entregado un impulso, una llave, un don, una virtud y una luz para que se pueda encender en sus corazones y en sus vidas, y para que puedan representar la Obra de Cristo en la Tierra.

Es así, queridos hijos, que Yo los llamo a vivir el apostolado incansable, el apostolado del esfuerzo, el apostolado por amor a todo lo que Dios concibió desde el principio de esta Creación, y para que esta Creación se pueda regenerar, curar y redimir.

Este es el tiempo en el que la humanidad atravesará los últimos momentos, dentro de su transición planetaria. Por eso, Yo los invito a ser conscientes, y también les agradezco por haber respondido a cada llamado.

Habiendo respondido a Mi llamado, han correspondido al llamado de Dios. Ese llamado de Dios es cumplir, en cada etapa, Su Divina Voluntad, Sus aspiraciones, Sus deseos ardientes y Sus metas. Es de esa forma, que Él se muestra, se revela y guía a Sus hijos, para que todos sigan el camino de la fe y de la confianza en Dios, en el cumplimiento de Su Divino Propósito.

Necesito, queridos hijos, que Me ayuden a acompañar el próximo ciclo, porque a partir de que Mi Hijo los visite durante la Sagrada Semana de este año, una etapa más definitiva se cerrará.

Comprendan, queridos hijos, que ahora los ciclos son mensuales y también hay ciclos que son semanales. La Jerarquía ya no podrá esperar veinticinco años, o muchos años más, para que la consciencia humana esté madura y esté en el punto que el Plan necesita para poderse cumplir y realizar.

Por eso, les hago entender la importancia del conocimiento y de la instrucción, que son fortalezas y principios para sus vidas; son direcciones, caminos y sendas para encontrar el Divino Propósito en su diversidad, dentro de la Ley de la Jerarquía, de la Ley del Amor-Sabiduría.

Yo les dejo este mensaje, queridos hijos, este último mensaje que prepara a sus mundos internos para esta Aparición de hoy, momento en el cual cada alma y cada corazón, más allá de lo que esté atravesando y viviendo, tendrá la oportunidad de hacer esa síntesis y de reunir, en su mundo interior, todos los tesoros que ha entregado la Jerarquía, a través de los años y de los tiempos.

Hoy es un momento culminante para todos desde los planos internos, pero también desde los planos espirituales el Padre Eterno estará contemplando esta instancia, en la que nuevamente Sus hijos responderán al llamado de la Madre de Dios, por medio de este encuentro de oración, que intenta fortalecer a todas las almas, a todos los corazones y consciencias para que no tengan miedo, para que aprendan a atravesar el fin de estos tiempos con valentía y con ímpetu, bajo el impulso y la compañía de la Gran Consciencia Crística. 

Por encima de todo, queridos hijos, que siempre esté el amor en ustedes, en sus hermanos y en cada lugar. Es ese amor, el Amor de Dios, que los ha traído aquí para vivir este tiempo, para vivir esta escuela, para vivir este aprendizaje, para servir a Dios. No hay nada que pueda impedir eso. No hay nada que lo pueda obstaculizar ni tampoco intervenir.

Los desiertos son grandes, pero las victorias son más amplias e infinitas.

Retomen la fuerza interior que les da el Sacramento de la Comunión. Afirmen su Bautismo. Afirmen su Unción en Cristo y todo se renovará.

Yo les agradezco por responder a Mi llamado y, bajo la Luz de Mi Corazón, los guío hacia el Propósito Mayor, hasta que ese Propósito se cumpla en ustedes y en el mundo.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén

MENSAJE PARA LA APARICIÓN DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ E INMACULADA CONCEPCIÓN, TRANSMITIDO EN LA COMUNA DE LUZ-SAINT-SAUVEUR, ALTOS PIRINEOS, FRANCIA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

El mundo se preguntará: ¿por qué tendría Yo que venir a un lugar en el cual ya estuve, en donde la fe está viva y las almas buscan Mi Inmaculado Corazón?

Aquí estoy, hijos Míos, para renovar los corazones de los hombres y reorientar sus metas, volver a encender su fe y traerles una cura que va más allá del cuerpo.

Mi Inmaculado Corazón llega para instituir una cura universal, celestial y divina, que llega a lo profundo de los seres y se refleja en sus almas y corazones como un despertar a la vida superior.

La humanidad aún está muy presa de sí misma, hijos; y las cosas de Dios solo le interesan a los hombres si les traen algún beneficio.

Vengo porque Francia necesita despertar. El agua que hice brotar aquí, proviene de Dios, para lavar sus espíritus y sus corazones, no solo sus cuerpos.

La mayor cura que aquí hice nacer, es la cura de la consciencia de una humanidad que estaba ciega a la Presencia Divina. Y retorno aquí porque nuevamente los hombres pusieron vendas en sus ojos y le cerraron las puertas a Dios.

Contemplen a un Dios que está más allá de las acciones humanas, y que se encuentra dentro de sus propios corazones. Un Dios que se muestra a los ojos de Sus hijos en la fortaleza de las montañas, en la pureza de las aguas, en el Espejo del corazón.

Contemplen a un Dios que les habla al espíritu y que despierta en sus interiores el potencial del verdadero amor. Un Dios que está más allá de las instituciones y creencias, y que las une a todas, si se abren a la Verdad y a la Unidad divina.

Contemplen a un Dios que está más allá de este mundo y también más allá de las estrellas. Un Dios que está, al mismo tiempo, en lo Alto y dentro de Sus criaturas. Él muestra, de esta forma, que lo Infinito que Él es, se guarda dentro de Sus hijos.

Contemplen al Dios de la Verdad, que no se limita a la mente humana y a su comprensión. Un Dios que está en los Libros Sagrados, pero que no se encierra en ellos, pues abarca a toda la vida y a lo que desconocen de ella.

Contemplen a un Dios infinito, Único y poderoso, que por Su bondad se hizo pequeño para habitar en el interior de las criaturas. Un Dios que se alegra con poco y que guarda silencio ante los grandes errores de Sus hijos, sin perder la esperanza de que ellos un día puedan retornar a Su Corazón.

Hijos Míos, contemplen con el alma a un Dios verdadero, su Padre Celestial, del cual provienen todas las cosas, y no solo este mundo.

Vean en el horizonte, el firmamento por donde Él espera que un día puedan caminar con sus espíritus redimidos y despiertos a la vida universal.

Contemplen a un Dios tan lleno de misterios como la consciencia humana. Lo que conocen de Él es tan poco como lo que conocen sobre sí mismos. Develen la presencia divina y encuentren en ella la verdad sobre su propio ser. Dejen que el corazón se eleve más allá de las fronteras espirituales y que en una oración verdadera, sienta y sepa aquello que no consigue explicar, pero que puede vivir. Esa verdad es la cura para el mundo. Este despertar a la unión con Dios, es lo que los llevará a conocer la paz.

Mis hijos están enfermos en el espíritu, en la mente y en el cuerpo, porque no conocen a Dios, y así tampoco se conocen a sí mismos ni su propio destino, ni al verdadero potencial que se oculta en su interior.

Aquí estoy, hijos amados, para revelarles que la verdad se encuentra en las cosas simples y sinceras del corazón. Vine para pedirles que aprendan a perdonar y a comprender al prójimo, para que no aparten al Creador de sus vidas, por estar vacías de amor y de sentido.

Vengo por los más jóvenes, que no consiguen encontrar a Dios, porque vinieron al mundo para traer lo nuevo y no consiguen expresarse cuando la fe no se renueva y no les muestra la puerta hacia un camino verdadero. Vengo para mostrarles ese camino, que no es una nueva religión, sino la renovación de la fe en el corazón humano, para que encuentren la Verdad y la vida universal.

Hijos Míos, más allá de todo, estoy aquí por sus esencias, porque una nación sin Dios es una nación sin vida y sin sentido espiritual. Abran los ojos, porque el Creador no se retiró de sus vidas, son los hombres los que cierran los ojos para no verlo.

Abran sus corazones y descubran en lo profundo de estas montañas la presencia divina y, en la pureza de sus aguas, escuchen a Dios que los llama para que retornen a Su Corazón.

Si escuchan Mi llamado, habrá un tiempo de paz para que los corazones se fortalezcan ante la Justicia.

Yo los amo y los bendigo.

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz e Inmaculada Concepción

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Donde Me llaman, allí Yo estoy presente, porque soy la Madre de la Divina Omnipresencia.

Soy la Maestra de la oración que conduce a las consciencias al recuerdo permanente de su propósito ante Dios.

Es así que el Universo se manifiesta a través de la presencia de la Madre Celeste, para que las almas reconozcan en esta hora su importante tarea.

Su Madre Celeste los reúne en este encuentro para que todos reciban los impulsos que se manifestarán desde el momento en que los servidores den sus pasos hacia Dios.

Desde el Universo Celestial los ángeles de la Luz reúnen todos los impulsos espirituales para que estos desciendan sobre las consciencias y para que puedan vivirlos en el plano material.

En este último ciclo, su Madre Celeste encuentra una apertura especial que repercute en las consciencias y también en el Universo, así se establece una comunión espiritual que poco a poco ellas irán percibiendo interiormente, cuando se mantengan en un acto de oración.

El Espíritu Santo también emana Sus Dones para que estos se manifiesten en los corazones simples y humildes, los que podrán atraer hacia el planeta la unidad y el amor tan necesarios en estos tiempos agudos.

Es así que el Espíritu Santo, por medio de los impulsos, podrá estar presente en las consciencias que se abran para reconocer en sí a Dios, hecho fundamental para que la humanidad sea conducida hacia su última etapa de redención y de purificación.

Su Madre Celeste acompaña estos momentos porque el Plan está en una fase de recuperación y está siendo guiado por un nuevo camino que la consciencia humana aún no conoce.

Es así que la Divinidad, el Padre Eterno, está atento a la apertura de los corazones humildes. En este momento, un profundo despertar en la mayoría de las consciencias podría regenerar la consciencia creadora que la humanidad ha destruido.

La Gracia está trayendo una expiación desconocida.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los impulsa a la Consciencia Mayor,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE FLORIANÓPOLIS, SANTA CATARINA, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos Míos:

Vengo en este día para que crean en la existencia de la vida universal, principio de hermandad y amor que se vive en todo el Universo y que lleva a las consciencias a estar dentro del Plan de Dios.

Vivir la vida universal es practicar diariamente los atributos y los patrones de vida que llevan a la consciencia a que esté unida a Dios. Esos patrones los vemos reflejados, por ejemplo, en las acciones fraternas de hermanad y de servicio al prójimo.

En este tiempo, queridos hijos, la vida universal debe ser apreciada para que más consciencias sientan el magnetismo de estar unidas al Plan del Universo.

El mundo de ustedes forma parte de un sistema de vida particular, de un aspecto de la Creación que experimenta cierto grado de Leyes y de Principios llamados fuentes de energía.

La Omnipresencia es uno de los Principios o de esos patrones de vida espiritual en donde la consciencia está presente internamente en varios lugares a la vez. Eso es posible cuando emana el amor por Dios y por toda Su Obra. Es de esa forma que entre las consciencias humanas se puede establecer una comunicación fluida, siempre que predomine la unidad entre las partes.

En el Universo no existen las casualidades, sino que existe la relación interna con ciertas Leyes del Padre que colaboran en la comunicación entre las consciencias y los mundos.

La Jerarquía espiritual es la principal portavoz de todos los impulsos universales, es la encargada de que toda la humanidad ingrese en lo posible al mismo estado de consciencia. La oración es la primera escuela para contactar el Plan del Padre en el universo interior y estar sintonizado con el Propósito por encima de todo.

La vida universal es un camino de permanente esfuerzo, es estar en los Brazos del Padre Eterno todo el tiempo que sea posible. Por eso, en este momento planetario, la humanidad debería estar con su mirada en el Universo para que el auxilio mayor pudiese llegar a todos sin distinción.

Todos los que se consideran orantes tendrán la misión de mantener vivo el Propósito dentro de sí y en el aura planetaria; eso hará que la humanidad entera cuente con la asistencia fundamental que necesita.

En la vida universal se manifiesta la igualdad, Ley de equilibrio, porque todos son considerados miembros del universo material guiados por los Universos Mayores. Es de esa forma, que la perfecta armonía colma al Universo y a toda la galaxia, a la que ustedes pertenecen, la cual vive bajo el Principio de la Paz, aunque en la humanidad sucedan otras cosas. Esto es posible cuando existen consciencias abiertas a recibir los impulsos de la vida universal.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Quien proviene del Universo Celestial,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE MENSUAL DE MARÍA, REINA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Quiero que Mi omnipresencia sea demostrada al mundo y que el poder de Mi Corazón, que es incomprensible para muchos, pueda tocar sus vidas para transformarlas por completo.

Un día, miraré desde el Reino de los Cielos y contemplaré en el mundo los frutos de tantos impulsos enviados por Dios. 

Hoy, quiero calmar sus corazones, para que sepan que los pasos se están dando en sus espíritus y que sus almas están correspondiendo a tantos impulsos que recibieron.

Les digo esto, pues veo muchos corazones que se angustian porque creen que no están respondiendo a Mi llamado; pero les digo, Mis queridos, que sus almas son preciosas ante los Ojos de Dios, que no encuentra en el mundo a aquellos que abren el corazón para vivir Sus Palabras, que descienden de Sus Mensajeros. 

Mientras Mi Voz resuena al unísono en tantos corazones, también ingresa en sus esencias y las fortalece.

Hoy, veo en sus vidas los frutos de la oración, porque la Pureza Divina ya tiene espacio en sus esencias y muchos pueden confirmar lo que les digo.

Mis queridos, por más que los tiempos los coloquen en muchas pruebas y que tanto la vida en la materia como la vida del espíritu demanden cada vez más atención de sus seres, quiero que estén firmes en este camino y que cuenten con Mi auxilio maternal. 

Muchos sufren porque no creen verdaderamente en el poder milagroso de la transformación divina, que convierte el más duro barro en una copa para ser colmada del Amor de Dios y de Su Santo Espíritu.

Mis amados, que el Don de la Esperanza sea una realidad para todos los seres de este mundo, porque es posible vivir en este tiempo un estado especial de Gracia y tornarse un sagrado instrumento de Dios que cumple con Su Plan permanentemente. 

Mis amados, no tengan miedo de curar sus corazones y de entregarme sus faltas. No se avergüencen por lo que un día fueron o por aquello que aún desean ser por los impulsos del mundo; sino que, así como son, caminen en dirección a estos brazos que se abren delante de sus corazones y los invitan a un divino abrazo. 

Que el poder de Mi Inmaculado Amor transforme sus almas y esencias, y les dé coraje y valentía para seguir adelante.

No teman, no se detengan, solo caminen y abandonen el pasado. Yo recogeré lo que dejen en el camino y lo llevaré a los Pies del Creador como muestra de la transformación de la humanidad, para generar así, méritos para que otros reciban la redención. 

Yo los amo con predilección y les agradezco, hoy y siempre, por responder a Mi divino llamado. 

María, Madre y Reina de la Paz

Mensaje extraordinario
MENSAJE EXTRAORDINARIO DE LA VIRGEN MARÍA, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

La consciencia verdadera de lo que es la Vida solo llega al hombre a través del Espíritu Santo. Mi Espíritu Inmaculado y el Espíritu Sacratísimo de Mi Hijo provienen del Espíritu Santo. Pero hoy, quiero revelarles que no es necesario que sean originalmente concebidos por el Santo Espíritu para vivir las Gracias infinitas que vivimos Jesús y Yo hace 2013 años.

El Espíritu Santo transforma todo lo que toca, Su Fuego purifica en Luz todo lo que se aproxima a Él. Un alma que fue tocada por el Espíritu Santo jamás será la misma, aun durante otras existencias en el Reino de los Cielos.

El Espíritu de Dios transforma incluso el destino espiritual de los seres, porque aquel que se abre a recibir un toque glorioso del Espíritu Santo, asume con el Creador el compromiso de servirlo eternamente. 

El Espíritu Santo es un misterio para el mundo porque está en todo, y todos lo buscan sin saber cómo encontrarlo. El Espíritu Santo se manifiesta como Fuego vivificador y Don sobrehumano, se manifiesta como Amor que a todo ilumina, como Perdón que a todo perdona, como Paz que a todos irradia.  

El Espíritu Santo llega cuando menos se espera, porque en el momento en el que menos se lo busca, sin perder la permanente aspiración a encontrarlo, es cuando el corazón abre espacio para que el Espíritu Santo ingrese.

Para que la morada del Espíritu Santo sea eterna en el interior de los seres, la consagración del alma también debe ser eterna, la oferta del corazón debe ser eterna, la aspiración a servir a un único Dios también debe ser eterna. 

El Señor conoce profundamente el corazón de Sus criaturas y sabe cuándo un hijo Suyo se confirma de forma perpetua en la unión con Su Corazón Sacratísimo. Y es en ese momento que el Señor envía Su Espíritu omnipresente para encontrar esa nueva morada. 

Como el corazón de los hombres es imprevisible, incluso para ellos mismos, solo Dios conoce la verdad sobre las intenciones y sentimientos humanos, sobre las ofertas y las aspiraciones. Por eso, la única cosa que deben hacer sus seres es estar en oferta permanente y reconsagrarse todos los días ante el Universo de Dios, con el corazón puro y sincero. 

Busquen sin buscar, porque así van a ser sin percibirlo; y la humildad, que es el primer Don del Espíritu de Dios, llegará a los que no la conocen y no la conocieron jamás. Solo conoce el Don de la humildad aquel que la reconoce en el prójimo, porque el corazón que está verdaderamente pleno del Espíritu Santo está tan próximo a Dios que no percibe los propios avances y las propias virtudes.

Así fue como Jesús, María y José vivieron el Espíritu Santo. Uno reconocía a ese Santo Espíritu en el otro y percibía cuántos Dones Dios había manifestado en aquella familia, plena de caridad y de humildad; pero ninguno de Nosotros observaba en sí mismo la presencia de ese Espíritu. Admirábamos, en silencio y en oración, las virtudes de los demás; y cuanto más percibíamos el Amor que el otro manifestaba por Dios, más plenos de ese Espíritu quedaban nuestros corazones. Y, en Nuestra vida simple, sin embargo llena de misterios, el Espíritu Santo fue manifestándose.

Por eso, hoy les digo que una llave para avanzar es pensar solo en Dios y fortalecer la virtud del prójimo, para que crezca y se desarrolle siempre. Así, aún sin darse cuenta, sus espíritus se irán preparando para recibir al Espíritu de Dios.

Que la paz y la armonía reinen en cada corazón.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad 

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE MARÍA, REINA DEL ESPÍRITU SANTO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA 

Hijos Míos:

Cuando Mi Corazón se aproxima a la Tierra, trae en Su interior al Espíritu de Dios, el Espíritu Santo, porque hoy Yo les digo que la Sierva de Dios es Una con Su Espíritu.

El Santo Espíritu vive y reina en Mi Corazón, y Yo estoy en Él eternamente. De esa forma, cada vez que invoquen a Mi Inmaculado y Santísimo Corazón, sepan que estarán invocando al Espíritu de Dios, santificado por Su eterna Gloria en los Cielos y en la Tierra.

El Espíritu Santo se hizo Uno Conmigo cuando el Hijo de Dios habitó en Mi vientre. Yo fui concebida por el Espíritu de Dios y Él se hizo carne en Mi Hijo a través de Mi Vientre.

Mi Espíritu nació de la Consciencia purísima de Dios con la misión de ser eternamente Santo e Inmaculado. Mi Espíritu fue generado por el Corazón de Dios, porque de Su Corazón nacería el Corazón del Hijo del Hombre, el Hijo Primogénito de Dios.

Es hora de que todos glorifiquen este misterio, porque tantas veces les dije que el Espíritu Santo llegaría a sus vidas, y cuando lo dije, Mi Espíritu ya estaba delante de sus corazones.

El Espíritu Santo es omnipresente y desea hacer Su morada en todos los corazones del mundo. Este Santo Espíritu fue creado para manifestar el Amor de Dios en todas las cosas, y, sobre todo, en todas Sus criaturas santificaría la materia y haría renacer a Dios en el hombre y al hombre en Dios.

Como se manifestó en Mí, el Espíritu Santo deberá manifestarse en todos los hijos de Dios. Aquellos que sean fieles a Dios, como Yo lo fui, abrirán las puertas del corazón y de la consciencia para que el Espíritu Santo pueda anclar.

Ya no será gestado en el vientre de los hombres, pero sí en sus corazones. No nacerá en el hombre nuevo, sino que hará renacer al viejo hombre.

Abran sus corazones a ese sacratísimo misterio, renuévense en lo desconocido, pues este Árbol bendito crecerá en los que hoy se abran a estas semillas que les son entregadas.

Yo soy el Espíritu el Espíritu Santo y Él es en Mí.

Como fuego de transformación para las almas, el Espíritu de Dios sobrevuela el mundo, como Ave Inmaculada y Luminosa, coronada de estrellas y vestida de sol, para perpetuar Su Morada en los corazones que le sepan decir sí.

Yo los bendigo y los guardo en el Corazón de Dios.

Les agradezco por abrirme las puertas del corazón.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad 

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Contemplen la divina belleza de la Creación

Queridos hijos, que desde ustedes brote la esencia del amor y de la verdad para que vuestros corazones estén abiertos a la esencia de la donación. Hijos Míos, nunca dejen de contemplar el Amor de Dios en vuestros corazones. Abracen la esencia del perdón en su interior para que así se siembre en ustedes el nuevo Espíritu de Amor.

Queridos hijos, nunca bajen los brazos, eleven vuestra aspiración hacia el Infinito, aspiren a vivir en el Reino de Dios y aspiren también a vivir la Reconciliación y la Misericordia de Mi Hijo.

Pequeños hijos, nunca pierdan la alegría de estar en Mí y de vislumbrar en ustedes el poder de Mi Amor Inmaculado. Acepten estar en Mi camino. Vuestras almas reconocen de dónde proviene Mi Corazón Maternal, ellas reconocen Mi presencia antes que vuestras consciencias.

Yo soy la Señora de los Cielos, soy la Rosa Mística, soy la Madre que socorre a los peregrinos y soy el Corazón Inmaculado que se dona a ustedes para amarlos y perdonarlos.

Queridos hijos, Mi voz se anuncia al mundo una vez más para que Mis hijos no pierdan el sendero que lleva a la salvación, al rescate del corazón.

Estoy con ustedes en este camino de peregrinación hacia la eternidad. Que en vuestras vidas no pese el dolor, la amargura ni la desolación; que vuestros corazones, colmados por el Espíritu Santo, reciban la Paz, Paz que viene desde el Universo, Paz que emanan los soles y las estrellas, Paz que irradian todas las galaxias, la Paz que viene del Infinito y que ustedes desconocen.

Desde allí llega a ustedes Mi Corazón Maternal para mostrarles el camino que conduce a una vida humilde y pacífica, un camino hacia el Universo, hacia todo lo que el Padre, Adonai, creó por amor a ustedes y para Su Gloria.

Queridos hijos, ¡glorifiquen a Dios!, ¡amen a Dios!, ¡busquen a Dios en vuestras vidas! porque de esa manera vuestras pequeñas esencias y todas las esencias estarán en el Reino Celestial del Universo.

Más allá de vuestra vida terrena existe la eternidad, el eterno presente, la Omnipresencia de Dios en todos los universos. Por eso, hijos Míos, ¡oren!, ¡oren! y ¡oren! Que vuestros labios no se cansen de orar para que la Misericordia de Cristo auxilie a la humanidad.

Agradezco a todos Mis hijos por el amoroso recibimiento en esta Nación Paraguaya.

Amor y paz para todos.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Hoy celebremos la Faz de Mi Inmaculada Concepción surgida una vez en Lourdes. Quiero que ustedes lleguen a Mi Corazón Sagrado para que sus almas encuentren el camino que deben recorrer hacia Dios. En este camino de peregrinación hacia el Padre podrán encontrar Mi Inmaculada Concepción.

Hoy los invito a que cada una de sus vidas y de sus corazones se tornen inmaculados a través de la pureza en la oración. Así sus almas serán llamas vivas para el Señor y ellas hallarán la Paz en el Reino Mayor. Por eso, coloquen sus ojos en Mi Corazón para que ellos descubran los dones sagrados que el Señor entrega a cada una de nuestras almas.

Queridos hijos, hoy les revelo y les recuerdo Mi presencia en Lourdes para que sus corazones vuelvan hacia la Fuente Original de las Almas: Dios Padre Creador. En este tiempo, los dones que permiten consagrar a todas las almas están presentándose a través de Mi Inmaculado Corazón. Yo solo quiero que retornen a Mi Esencia Inmaculada para que los caminos se abran hacia la nueva concepción del corazón que cada uno deberá descubrir.

Queridos hijos, no deben estar tristes, pues Yo estoy entre todos ustedes compartiendo las Gracias que el Padre Me concedió derramar. Aguardo de todas Mis almas orantes no solo la fidelidad a Mi Corazón, sino también la confianza en Mis Planes de Paz y de Redención. La Gracia de la Conversión es para todos los corazones, aún más para los que quieran escuchar el último llamado.

Mi voz clama por ustedes y por el mundo para que la nueva Luz de Dios renueve la vida en todas las almas. Yo estoy allí cuando sus corazones se abren para recibirme. Yo soy Omnipresente y Mis pies dejan las huellas por donde ustedes podrán encontrar el sendero humilde hacia Dios.

Gracias por responder a Mi llamado.

Los contempla desde el Corazón,

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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