MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Contempla el Corazón Eucarístico del Señor y, observando con la profundidad de tu mirar espiritual, encuentra el Sagrado y flagelado Corazón de Jesús.

En cada pulsar de este Corazón, gotas de Misericordia, de piedad y de compasión son derramadas sobre la Tierra a través de todos los sagrarios del mundo. Esos dones divinos fluyen del Corazón de Cristo y llegan a los que más los necesitan a través de las almas que adoran y comulgan del Cuerpo y de la Sangre de Cristo, trayendo Su Presencia redentora a la Tierra.

Contempla en adoración los altares celestiales donde pulsa constantemente el Sagrado y flagelado Corazón de Jesús, renovando Su oferta y Su entrega por todas las almas, eternamente, hasta que la piedad, la Misericordia y la compasión sean realidades vivas en el interior de los seres, y ya no sea necesario verterlas sobre la Tierra, porque los propios hijos de Dios serán fuentes vivas de Su Gracia, en la expresión perfecta de Su Creación.

Contempla y adora al Sagrado y flagelado Corazón de Jesús, para que recibas de Él, en nombre de toda la humanidad, los códigos espirituales que recuerdan a tu consciencia el verdadero propósito de tu existencia.

Deja que tu alma y tu espíritu reconozcan ese camino y lo vivan en sabiduría, para que sepas dónde estar y qué hacer en cada instante de la vida sobre la Tierra.

El Corazón de Jesús te revela y te recuerda quién eres verdaderamente. Si estás buscando un sentido para tu vida, contempla y adora al Corazón de Jesús escondido en la Eucaristía, y allí, hijo, todo te será revelado.

Tienes Mi bendición para esto.

Tu Padre y Amigo, 

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Los que ofenden y avergüenzan Mi Corazón por sus pecados, faltas u omisiones, no son los que están a Mi lado y persisten, son los que por diferentes razones se alejaron de la guía de Mi Mano y de Mi Voluntad para poder realizar la propia.

Eso Me hiere más que todos los pecados que las almas que están a Mi lado pueden generar.

En verdad, Mi Misericordia se expande hacia los más miserables e imperfectos; pero ella no se derrama sobre los traidores o los injustos, porque todo parte de una Ley que es inalterable y autónoma y, como toda rectitud y bien surgen de esa Ley, su Maestro y Señor se rige por ella y no puede alterarla.

La vergüenza que Mi Corazón siente es por los que una vez estuvieron Conmigo y ahora Me dan las espaldas, no creyendo en Mis Palabras y menos en Mis actos.

Y por más que su Maestro ya sabía el destino de esos ingratos, el Amor de Mi Corazón manso no dejó ni un momento de amarlos, a fin de que algún espacio de sus consciencias se movilizara para despertar y aprender a amar verdaderamente.

Pero ahora ellos están con caras de barro, a punto de caerse por su propio peso.

Les pido, compañeros, que aprendan pronto de todo esto, para que en la hora más culminante nada los sorprenda.

Si en verdad y de corazón se entregan a Mí, nada les sucederá.

Ni piensen en actuar o en hacer todo como los de cara de barro que salieron despedidos por sí mismos, que no consiguen un lugar, y ni siquiera logran retornar.

Hoy les hablo con claridad porque espero que esto no se repita en ninguno de ustedes.

Gracias al Padre, el nido de cobras ya fue expulsado a su propio abismo, ya que en verdad ellos, de manera soberbia, aman más estar allí y menos Conmigo.

¡Les agradezco por encarnar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice,

Vuestro Maestro, Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Contemplen, queridos hijos, Mi Materno Corazón flagelado por todos los errores del mundo y por todos los pecados de indiferencia y omisión.

Contemplen, queridos hijos, Mi Materno Corazón flagelado y vean cuánto peso carga para ayudar a transmutar a la humanidad.

Contemplen Mi Materno Corazón flagelado y alívienlo de todas las ofensas que cometen las almas del mundo para con Dios.

Contemplen Mi Materno Corazón flagelado al ver a los sacerdotes de Mi Hijo en una profunda indiferencia y soberbia.

¿Quiénes guiarán a los rebaños de Mi Hijo?

Contemplen Mi Materno Corazón flagelado por todos los malos pensamientos emanados por aquellos que cerraron su corazón al Amor de Dios.

Contemplen Mi Materno Corazón flagelado lleno de espinas de ingratitud y de maldad generadas por las almas que se comprometen día a día con Mi adversario.

Contemplen, Mis hijos, Mi Materno Corazón flagelado por las acciones de poder sobre la vida, realizadas injustamente por la humanidad y por los más conscientes.

Contemplen Mi Materno Corazón flagelado, cargando con el peso del error de todos los que en su ilusión espiritual creen estar haciendo lo correcto y se olvidan de lo imprescindible, de Cristo.

Contemplen con amor Mi Materno Corazón flagelado y repárenlo en esta hora en donde será necesaria mucha misericordia para no despertar la Ira de Dios sobre las consciencias. En esa hora, queridos hijos, entremos en oración para que todo sea aliviado.

Contemplen Mi Materno Corazón flagelado y compartan Mi dolor, para que Mi llanto se detenga y Mis lágrimas puedan ser el más puro ofrecimiento de reparación por todas las malas acciones cometidas.

Contemplen Mi Materno Corazón flagelado y no se olviden de estar en Mí.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los ama,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

APARICIÓN DE CRISTO JESÚS DURANTE EL PROGRAMA EL SAGRADO LLAMADO, EN LA CIUDAD DE FATIMA, PORTUGAL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo,
os adoro profundamente y os ofrezco
el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Jesucristo,
presente en todos los Sagrarios de la Tierra, 
y en reparación por los ultrajes, 
sacrilegios e indiferencias con que Él es ofendido, 
y por los méritos infinitos de Su Santísimo Corazón 
y del Inmaculado Corazón de María,
os pido la conversión de  los pobres pecadores.

Amén.
 

Cuando Mi Corazón es flagelado, Él siente el horror del mundo y la persecución que viven las almas perdiendo la vida en este planeta.

Cuando Mi Corazón es flagelado, Él siente la indiferencia de los hombres después del propósito vivido por Mí, y por cada uno de ustedes.

Cuando Mi Corazón es flagelado, las almas deben consolarlo con buenas obras de amor y de caridad, recordando como importante, al prójimo.

Cuando Mi Corazón es flagelado, siente la transgresión de los hombres y la perdición que viven las almas por no venerar Mi Sagrado Corazón.

Hoy les revelo Mi Corazón flagelado, porque necesito que esté presente en sus vidas, para que el mundo totalmente no pierda la paz.

Este manso Corazón se ofreció a ustedes, para generar la salvación de los tiempos, la rendición de las almas, y la rehabilitación de los corazones perdidos a través de todos los tiempos y de todos los siglos.

Este manso Corazón se ofreció a ustedes, para vivir la indiferencia de los hombres, para soportar el pecado de la humanidad y todos los ultrajes que serían realizados hasta los días de hoy.

Vean entonces, compañeros, aún cuánto carga Mi Corazón flagelado el pecado del mundo, y la indiferencia de las almas, que es muy grande en estos tiempos. Por eso los invito a que Me vivan y a que Me consuelen, porque así consolarán a Dios, que cubre Sus Ojos con Sus Manos, para no ver lo que Sus criaturas están haciendo en este tiempos.

Los ángeles, postrados al  suelo, suplican a Dios por Su infinita Misericordia, y para que Su Ley no se precipite sobre los ingratos y en todos los que son indiferentes.

Yo vengo a mostrarles Mi Sagrado y Flagelado Corazón para que lo puedan contemplar.

En ustedes apoyo Mis Obras, los pilares de la nueva humanidad, en todos los miembros de Mi Iglesia, en todos Mis seguidores, en todos Mis nuevos apóstoles, que Yo invito a que retornen al camino que perdieron de vista, el camino hacia Mi flagelado Corazón.

Su amor puede ser el bálsamo para Mi Corazón. Dios les dio a cada uno de ustedes la esencia del amor y de la unidad, que está siendo gravemente transgredida por la condición humana en estos tiempos, así como en todos los Reinos de la Naturaleza.

Así la Jerarquía Celestial, expande Su Obra en el mundo, para que todos los corazones escuchen el clamor de los Sagrados Corazones que vienen a implorar por penitencia y arrepentimiento, por confesión y comunión, por cada una de las almas que no quiere mirar a Dios, ni Su Santa Bondad.

Hoy Mis ángeles no cantan aleluya, pero tampoco dejarán de cantarlo.

Hoy Mis ángeles están haciendo penitencia por cada uno de los hechos cometidos en este mundo, en cada una de las naciones, en cada uno de los pueblos que vive su propio terror y su propia indiferencia.

Entren en penitencia, al menos ofrézcanmelo un día; pero sepan que no estarán siendo castigados, sino vivirán esa penitencia por cada uno de los que no se arrepiente en este mundo.

Hoy les traigo esta revelación de Mi Corazón ultrajado para que me puedan acompañar, amados Míos, en esta transición que vive la Tierra y toda esta raza en omisión.

Quisiera que esta indiferencia fuera transmutada por cada uno de ustedes, en el ayuno, en la oración, en la comunión, en el ejemplo de una vida crística y en la búsqueda permanente de una alianza perfecta entre hermanos, tan diferentes los unos de los otros, pero que pueden estar unidos en una sola hermandad; esa hermandad que Yo los invito a vivir en estos tiempos, y que la humanidad ha olvidado completamente.

Viviendo esta penitencia Conmigo y ofreciéndola a Dios a través de Mi Corazón, muchas almas se salvarán y los Reinos de la Naturaleza también serán ayudados.

Hoy los invito a abrir la consciencia hacia este estado de Mi Consciencia Universal, pues Mi Corazón aún padece por cada uno de ustedes, especialmente por los que no Me escuchan ni me contemplan en la Adoración del Santísimo.

Dichosos de aquellos que lo hacen todos los días, porque Mi gracia estará cerca de ellos y no les faltará consuelo para sobrevivir en estos tiempos, en los tiempos finales que se aproximan.

Yo los invito a vivir la Ley y a no olvidarla, a ser justos los unos para con los otros, compasivos y misericordiosos entre sus semejantes; esa es la Ley primera, es la tónica de este tiempo para cada uno de ustedes, compañeros.

Los invito a hacer ese esfuerzo por aquellos que no lo hacen, por aquellos que niegan a Dios, por aquellos que hacen el mal a sus hermanos del planeta.

Si Yo di Mi Sangre por cada uno de ustedes en la perpetua flagelación de Mi Corazón, flagelación que Yo viví durante la pasión, ya no debería correr sangre en este mundo, y tampoco deberían haber muertes injustas que hicieran activar la Ira de Dios. No conocen compañeros lo que esto significa.

Pero Yo los invito a tener más conciencia en esta hora crucial, en donde la batalla está presente en el mundo, cumpliendo así el tiempo del Armagedón.

Que Mi Sangre no se derrame impropiamente, que Ella  sea contemplada por todos para que reciban los códigos de Mi Paz y sus vidas se transformen en el modelo perfecto que Yo tengo para cada uno de ustedes.

Hoy Mi Mensaje para el mundo es de contrición y de profunda penitencia.

Recuerden que estuve tres días en el sepulcro salvando a la humanidad, y cerrando los infiernos que la humanidad había creado, trayendo una nueva oportunidad divina, para aquellos que no la merecerían.

Por eso, con tres días de penitencia muchas cosas podría resolverse; cada uno sabe lo que me puede dar en esta hora en que Mi Corazón implora para que estén más despiertos y vigilando conmigo, así como lo dije a Mis apóstoles en el Huerto Getsemaní. 

En ese momento les quise decir a cada uno de ustedes, vigilen unidos a Mi siempre, orando para que no sean tentados, como es tentado el mundo en su materialismo, en su propiedad, en su falso poder que ejecuta a muchas almas del mundo.

Ese es también el flagelo de Mi Corazón, la Llaga principal de Mi Espíritu que aún no ha sido curado y que ofrezco a Dios por cada uno de Mis apóstoles y de Mis seguidores que está unido a Mí en este tiempo de purificación  y de gran tribulación para el mundo.

Recuerden todos los días a Mi Sagrado Corazón y no se olviden de orar Conmigo por todas las almas de la Tierra, más por aquellas que están alejadas de Dios y que son presas de Mi adversario.

Quien busca Mi Corazón solo tendrá paz y no se arrepentirá nunca más de vivir en Él, a pesar de lo que suceda en este tiempo. Quien confía en Mí se fortalecerá.

Quisiera decir a Mis consagrados que en esta hora, en donde Mi Corazón vive su gran martirio por el mundo, el gran flagelo interior que recibe de las almas ingratas, les pido que no Me abandonen, que no Me dejen solo en este momento en que la barca de Mi Luz, en una gran tormenta de desesperación y de dolor, intenta salvar a los corazones del mundo. Tomen los remos que Yo les entregue y no se cansen de remar.

La victoria de Mi Corazón en ustedes esta próxima, pero sus corazones deben estar limpios y deben aceptar la purificación.

Todos los consagrados del mundo a Mi vida de religiosidad, no pueden abandonarme en este momento. No quiero que ocasionen una herida en Mi Corazón. No estarían siendo justos después de tantas gracias recibidas.

Aférrense a Mi Manto, besen Mis Pies y permanezcan allí todo el tiempo, Yo les daré las fuerzas para seguir adelante, en medio de cualquier tribulación. Recuerden que ustedes, y todas las almas que siguen Mi Sagrado Corazón en este tiempo, tienen responsabilidad por muchas almas más del mundo.

¿Quién se justificara ante Mi Padre cuando suceda el juicio final?

Mi Sagrado Corazón es el mediador entre ustedes y Dios, es la potencia máxima del amor que ampara a cada uno de los corazones, cuando estos viven Mis Atributos Celestiales.

No quiero que sientan pena por lo que está sucediendo en este momento. No ingresen en el mar de la amargura del mundo. Bastante sufre Mi Corazón flagelado, por las almas que desesperan y aún no miran a Dios.

Cuánta grandeza hay en el Cielo, cuánta gracia y misericordia podría brotar en los corazones del mundo, cuánto poder y plenitud vivificaría a los corazones en esta Sagrada Misión que Yo los invito a vivir Conmigo, todo el tiempo.

En este día viernes compañeros, Me siento a la mesa de cada uno de los Monasterios de esta Orden que intenta cumplir Mi Propósito, y consagraré los elementos para que consuelen Mi Corazón flagelado, el Corazón de Mi Padre, por todos los horrores del mundo y todas las indiferencias que son cometidas en este tiempo.

Repitan a Mi Padre, la oración del Ángel de la Paz, la que Él les enseñó para que todo pueda ser restaurado a tiempo, antes de que la Ley se avecine al mundo.
 

Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo,
os adoro profundamente y os ofrezco
el Preciosísimo Cuerpo,Sangre, Alma y Divinidad de Jesucristo,
presente en todos los Sagrarios de la Tierra,
en reparación por los ultrajes,
sacrilegios e indiferencias con que Él es ofendido,
y por los méritos infinitos de Su Santísimo Corazón
y del Inmaculado Corazón de María,
os pido la conversión de los pobres pecadores.

Amén
 

 

Fray Elías del Sagrado Corazón:
Vamos a cantar unidos a Cristo, “Vigilad unidos a Mi siempre orando”.

 

Cuando Mi Corazón los purifica, las puertas del Cielo se abren para que los corazones encuentren la Gracia de Dios; aquella Gracia que siempre deben buscar hasta el fin de sus días, para que Mi Proyecto se cumpla en cada uno de sus espíritus.

Y ahora en el nombre del Padre, de Su Amado Hijo y del Espíritu Santo, consagraré la Santa Comunión para cada uno de ustedes.

Recuerden compañeros, reparar Mi Sagrado Corazón.

En estos simples elementos se encuentra la vida para cada una de las almas, y así,  Yo constituyo la Obra de Mi Divina Misericordia en todos aquellos que, en verdadero arrepentimiento y en suprema penitencia, comulgan conmigo, estableciendo así los dones y los códigos de Mi Luz, en todos los corazones.

Padre Nuestro en arameo.

Así, Yo ofreceré por un alma los santos Sacramentos, para que en el nombre de ella muchas almas más, en esa dolorosa condición de estar perdidos en el mundo, solo por ella, al menos la mayoría reencuentre Mi camino, hacia la redención y hacia la paz.

Yo Soy el que sacio a los corazones. Soy la verdadera savia para sus vidas. Soy el Sagrado Corazón de Jesús y les dejo Mi Paz, les entrego Mi Corazón para que lo guarden,  lo adoren y lo contemplen.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén.

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Hijos del Dios Altísimo:

La agonía del mundo no terminó, y el Corazón de Cristo sigue siendo flagelado todos los días por las acciones injustas de la humanidad. Abran los ojos y vean a su alrededor que el Apocalipsis se precipita en el mundo. Transformen sus vidas, vivan del bálsamo de la oración y den de beber de esta agua de vida, que es la unión con Dios, a las almas sedientas y desamparadas.

¡Que la humanidad escuche el llamado definitivo de los Mensajeros de Dios! Que todos aquellos que se consideran despiertos y conscientes caminen a grandes pasos en su transformación.

¡No pierdan más tiempo con las mezquindades de la vida! Reconcíliense con aquellos que no les permiten vivir en el espíritu de la paz. Amen a sus enemigos y que estos ya no existan entre hermanos de una misma raza, unidos por un único Propósito Divino.

Perciban que ustedes ya están transitando los últimos tiempos del planeta y que ya no es hora de pensar en sí mismos, ni de concretizar planes ni aspiraciones personales. ¿De qué les valdrá construir un proyecto de una vida material si aquellos que no se sustenten en la fortaleza del espíritu desaparecerán en medio de la tormenta del caos y del mal?

Queridos compañeros, les hablo con palabras claras porque naciones enteras se están perdiendo por el avance de la oscuridad. ¿En dónde están los soldados de Dios? ¿Qué están haciendo los que se comprometieron con Cristo?

Ya no es hora de emociones ni de entrega a medias. Oren con el corazón, con el espíritu y vivan como verdaderos discípulos de Cristo. Demuéstrenle al mundo que hay una única salida para la tribulación en que vive el planeta, y esa salida es el Corazón Infinito de Dios.

Ustedes fueron traídos hasta aquí, hasta este mundo, para vivir el amor y el perdón; entonces, vívanlo. Mi corazón de padre les advierte, porque, en el Cielo, el Creador aguarda la respuesta de los seres humanos para darles nuevas indicaciones sobre el desarrollo de Sus Planes.

No permitan que el tesoro más precioso del universo se pierda. Ustedes aún están a tiempo de corregir los errores de sus vidas, pero sean rápidos y estén dispuestos a responder al llamado de los Mensajeros de Dios.

Oración, conversión y fe es todo lo que el mundo necesita.

San José Castísimo, en la conducción de las almas para los tiempos de definición y entrega.

APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN, DURANTE EL PRIMER SAGRADO LLAMADO

Mi Corazón está llagado por esta humanidad.

¿Quién tendrá el coraje de curarme internamente en este día?

Ofrezcan a Dios vuestra reparación para que el Gran Consolador venga a vuestro auxilio.

 

Fray Elías toma el cuaderno y comienza a escribir el primer Mensaje mensual.

Al terminar, Cristo Jesús continúa transmitiendo sus palabras:

 

En esta noche, Yo traigo la oportunidad de vivir en Mi Misericordia.

En esta noche sagrada, invitaré a algunos hermanos a que eleven hacia Mi sagrado Altar la oferta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, en honor de todos aquellos que mueren y de todos los inocentes para que Mi infinita Misericordia pueda seguir derramándose sobre el mundo.

Mi Corazón está en ustedes cuando tan solo lo permiten. Hoy Mi Corazón necesita estar más adentro de ustedes. ¿Me lo permitirán? Vivan en Mi Misericordia.

Estoy aquí con ustedes, pero también con el mundo. Observo lo que sucede en vuestro alrededor y también en toda la humanidad.

Mientras me elevan la oferta de consagración de estos Bienes Celestiales, canten a Mi flagelado Corazón para poder aliviarlo.

“Un hombre llamado Jesús” será el cántico.

Después de consagrar, queridos compañeros, Me despediré de ustedes.

 

Cántico: Un hombre llamado Jesús.

 

Suben al palco los hermanos convocados para hacer la oferta de los elementos para la consagración.

Cada corazón sostiene, entre sus manos, la oferta para Mi Sagrado Corazón.

Quiero que sepan que, en este momento, Dios los escucha en nombre de esta humanidad. Que cada uno de ustedes, en Mi Nombre, realice una oferta al Creador por una causa necesaria de este planeta, para que la Divina Misericordia permee todos los espacios y a todas las consciencias. Silenciosamente, los escucho.

Recojo en Mi Corazón vuestras súplicas y recibo de vuestros corazones todo el amor que Me pueden expresar. Con todo el amor de este mundo, aquel que proviene de las almas buenas, Yo reconstruyo esta humanidad, transfigurando ese amor en la esencia de Mi amor misericordioso, y lo vuelvo a derramar sobre la humanidad, así como es en este momento.

 

Recemos.

Padre Nuestro (en arameo).

 

Recordando, en vuestros internos, el pasaje de Mi Última Cena, traigan a vuestras memorias el momento de la importante consagración que Yo realicé por esta humanidad, en honor al Padre Supremo y a todos los Padres Creadores que se unieron a ese principio de transubstanciar el pan en Mi Cuerpo sagrado, el vino en Mi Sangre preciosa.

Reverencien en este momento los Rayos que brotan de Mi Corazón.

Oración (se repite tres veces):

Agua, Sangre, Vida y Redención
que brotaron del bendito Corazón herido de Jesús,
ten Piedad, Misericordia y Compasión por todos nosotros.
Amén.

 

Y así, en conmemoración de Mi Presencia eterna en el mundo, como fue en aquel tiempo, entre todos Mis apóstoles del pasado, del presente y del futuro, Yo bendigo estos Sacramentos bajo la imposición poderosa, luminosa, redentora y misericordiosa del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Celebren con amor Mi Eucaristía.

Vayan en paz.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Cántico:

Un hombre llamado Jesús.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón:

En verdad, ¡gracias, Señor!

Y a pesar de que el Mensaje de Cristo hoy fue muy fuerte, Él nos reveló Su Corazón flagelado nuevamente. Él no dejó de decirnos que nos amaba profundamente, así como cada uno de nosotros es. Él necesita de cada uno de nosotros, porque Él nos decía que cada uno de nosotros escuchamos Su Llamado, y Él necesita ese amor que cada uno de nosotros puede expresar por Cristo, porque será la única forma que Él tiene de poder derramar ese Amor nuevamente sobre la humanidad.

Él nos llamó, también en este día, a renovar nuestra confianza en Jesús. A no bajar los brazos a pesar de las cosas que están aconteciendo en el planeta. A fomentar nuestra esperanza y nuestra fe. Por eso, al final Él derramó Sus Rayos sobre nosotros y llamó a cada uno de esos hermanos que sustentaron esas bandejas, dentro del público, porque Él también reconoce en todos a Sus discípulos, no solamente en los que estamos consagrados, porque Él ve nuestra consagración internamente.

Él intentó, a través de esta consagración del Cuerpo y de la Sangre, que entre todos nos pudiéramos unificar en Cristo.

Él necesita que cada Sacramento, que cada oración que realicemos sea ofrecida a Él en reparación de las cosas que suceden en el mundo.

Él dice que es lo único que puede hacer en este momento, así evitará la Justicia del Padre, porque hoy Él nos mostró que el Padre tiene Su Corazón de Luz muy dolorido.

Pero si entre todos nos unimos y multiplicamos esa oferta de amor a Cristo, realizando cada cosa que hacemos en nuestro día por Cristo, Él prometió elevar a los inocentes al Cielo.

 

Para finalizar, se compartió el primer Mensaje mensual.

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Mi Paz y Misericordia llegan al mundo para apoyarlo en los nuevos cambios que se aproximan para todas las consciencias. Por eso será tan importante la humildad y vacío de sí ante las situaciones que se verán en el mundo en este tiempo y que la humanidad no considerará una grave ofensa a Dios. Aférrense a las Escrituras y enseñanzas del Evangelio para que menos almas se distancien del único y verdadero Camino del Pastor.

Hoy Mi Corazón se alegra por los que en la fe prosiguen trabajando por la redención y la conversión del corazón; pero Mi Corazón se acongoja por los hechos que día a día los hombres cometen en nombre del bien común.

Atentos, orantes, para que la vigilia sea el verdadero escudo que proteja sus hogares y familias. Mi Corazón Misericordioso se abre para acogerlos dentro de Mi Templo Sacerdotal, Mi Luz se difunde a través de aquellos siervos que dan todo en este tiempo.

Estoy llamando a los rebaños para que una vez más alivien Mi Corazón Flagelado, Corazón que recibe las graves ofensas que lastiman el Corazón del Padre.

Conviértanse. Conviértanse. Conviértanse porque aún están a tiempo. Oren. Ayunen. Reparen en la Santa Comunión todas las causas que transgreden la Ley del Altísimo.

Si así lo hacen, Mi Corazón Misericordioso una vez más intercederá por todos los que niegan la presencia del Amor del Padre. Cuanta más oración, más reparación. Cuanto más pecado, más Justicia Divina.

Recen con el corazón y ofrezcan a Mi Sagrado Corazón todo el amor que guardan por el Padre; esto reparará las causas que lo ofenden.

Bajo la Gracia de Dios, sean misericordiosos.

Gracias por reparar Mi Sagrado Corazón.

Cristo Jesús
 

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Queridos Míos:

Con los brazos abiertos hacia el mundo, derramando inmensa Misericordia, hoy los llamo a contemplar de nuevo el flagelado Corazón de Jesús, el que recibe ofensas de parte de muchas almas negadas a la vida del Gran Espíritu de Dios.

Mis hijos, les pido que oren como todos los días para que Mis demás hijos también puedan recibir la Gracia de la salvación. Ustedes ya están dentro de la Gracia de Dios teniéndome a Mí todos los días a vuestro lado. Pero, queridos hijos, hoy deben saber que muchos corazones se desvían porque son tentados por los embates y por las trampas del enemigo, por lo que, Mi Inmaculado Corazón se dispone a luchar por la salvación de todos antes de que Mi Hijo descienda del Cielo por segunda vez.

Queridos hijos, en esta misión de salvación, ustedes pueden ayudarme orando por los que más necesitan de Luz y de Redención. Ha llegado el momento de auxiliar a todos los corazones que día a día se pierden por las modernidades del mundo.

Hijos Míos, ustedes tienen como alianza y como protección a Cristo, el Redentor; en Él podrán dar los pasos hacia la donación y la caridad por los demás.

Hoy les muestro una realidad del mundo que muchos, por ignorancia, no quieren ver.

Yo los llamo a colaborar con toda la humanidad y con vuestra casa, que es este mundo.

Queridos hijos, abriendo vuestros ojos al llamado serán invadidos por la Luz de Mi Espíritu Maternal, para que, con firmeza, caminen rumbo a la misión orante que Mi Corazón les pide.

Ustedes, los más despiertos, pueden ayudar a consagrar, de nuevo, el mundo al Creador.

Obremos en nombre de la paz.

¡Les agradezco!

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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