- Inicio
- Blog
- Mensajes
- Oración por la Paz en las Naciones
- Calendario
- Oraciones
- Impulsos Diarios
- Libros publicados
- Pinturas e Imágenes
- Objetos Sagrados
- Música
- Galeria de fotos
- ¿Quiénes somos?
- Centros Marianos
- Campaña por la Paz
- Redes Sociales
- Contacto
Queridos hijos:
Que la Paz de Jesús esté en sus vidas.
Nuevamente Me encuentro con ustedes para decirles que, mientras el caos avanza sobre la humanidad, Mi enemigo intenta destruir los planes que tengo preparados para los mundos internos de algunos de Mis hijos.
Él intenta infiltrarse para generar desestima en los corazones que hacen el esfuerzo correcto para cumplir con los designios de Mi Hijo.
Pero cuando las almas se colocan a orar, los planes que tiene Mi adversario se desvanecen, porque el poder del verbo es desconocido hasta mismo en el plano espiritual.
Por eso, queridos hijos, para este momento mundial, en donde la incertidumbre y la falta de paz golpean a millones de hijos Míos, Yo les pido que se sigan sosteniendo a través de la más pura y verdadera oración, porque ella siempre los guiará, mismo en situaciones de adversidad.
Así, Yo podré pisar la cabeza de la astuta serpiente y ella no atacará con su veneno ni tampoco tentará a Mis hijos de formas inimaginables.
Estén firmes y no permitan que los embates de estos tiempos destruyan su morada interior.
Yo estoy aquí y siempre seré su Madre.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz
En estos tiempos, hijos Míos, los designios de Dios para la humanidad se transforman en cada instante. Su Propósito es el mismo, inmutable ante los acontecimientos, pero la forma de cumplirlo se transformará, segundo a segundo, de acuerdo con la respuesta de la humanidad y con los acontecimientos materiales y espirituales que se precipitan sobre la Tierra.
Solo les pido que sean obedientes, que sepan renunciar cuando sea necesario, que siempre sepan moldear los propios planes y voluntades según el Plan y la Voluntad de Dios.
La obediencia y la adhesión interna, humana y espiritual, a todos los comandos de la Jerarquía serán la tónica de este tiempo.
Para no equivocarse, sigan la Voz de Dios.
Para cumplir Su Plan hasta el fin y ser triunfos de Su Corazón, déjense guiar y transformar por Él.
La fe en sus corazones será su fortaleza, la paz será su sustento y la oración constante mantendrá el equilibrio en sus mentes, almas y corazones, para que nada los haga perecer.
Sean mansos de corazón y firmes de espíritu, sean precisos en obedecer y fieles en caminar sin mirar hacia atrás.
Cada instante será conducido por su Creador, porque esta es Su Obra, y sus vidas deben ser instrumentos en las Manos de Dios para que todo se cumpla.
Tienen Mi bendición para esto.
San José Castísimo
Recoge tu corazón, con Cristo, en lo profundo del Corazón de Dios.
Recoge tu consciencia, tu vida, tu mente, tu alma y tus emociones más profundas en el Corazón de Dios.
Recoge tus planes, tus aspiraciones, tus metas, tus comprensiones más internas, tus victorias más altas, tus caídas más bajas, todo lo que eres, recógelo en el Corazón de Dios.
Recoge en el Corazón de Dios tu humanidad, los registros internos de vidas y vidas llevadas adelante en busca del Amor de Dios y del cumplimiento de Su Plan y de Su Voluntad.
Recoge también tu espíritu, misterioso y silencioso, tu parte más próxima a la Verdad y al Tiempo de Dios. Deja que todo esté en el Corazón del Padre, que retorne a Él y allí tome su tiempo para recrearse, transformarse, curarse, restaurarse y ser nuevo.
Permite, hijo, que todo se haga nuevo en el Corazón de Dios. Suelta las riendas del aparente control de tu vida. Deja que tu alma traspase las piedras del sepulcro profundo y oscuro de la condición humana, de sus certezas e ilusiones, de sus medias e imperfectas verdades y que, elevada en alto vuelo, tu alma llegue al Corazón de Dios y aprenda dentro de Él lo que es resurgir.
Experimenta, en tu interior, esa ciencia espiritual y divina del vacío, de la muerte para la vida eterna, de la resurrección.
Tienes Mi bendición para esto.
San José Castísimo
Las esferas celestiales deben estar, cada día, más vivas dentro de ti. Tú, hijo, debes ser el portal hacia el Infinito, el puente hacia la Consciencia Divina.
Mientras el Tiempo de Dios no llegue a ocupar el lugar del tiempo del mundo y las almas permanezcan en la ilusión de sus confusas vidas, habrá batallas y habrá conflictos entre los planos y las realidades que cohabitan en el planeta.
Por eso, te digo que tu unión con lo que es real se debe consolidar desde adentro hacia afuera, desde lo profundo de tu ser, para después llegar al mundo.
Cuando oras, cuando buscas a Dios en silencio, cuando te unes a los sonidos de lo sagrado, cuando adoras a tu Señor en Espíritu y en la Eucaristía, creas caminos y formas para que tu consciencia profundice en vibraciones más elevadas y para que tu esencia pueda reconocer y expresar las esferas celestiales.
Por eso, mantén tu corazón en lo Alto. Permite que se profundice en ti el contacto interior con el amor, la Gracia y la realidad divina.
Que se abran los ojos de tu espíritu y el sentir profundo de tu corazón, porque siendo así, hijo, estarás en paz y fuera de las dimensiones del conflicto que se expanden por el mundo.
Tienes Mi bendición para esto.
San José Castísimo
Era una vez, en el tiempo eterno, un Propósito infinito y amoroso del Único, en el que quería reflejar Su experiencia a través de una Creación formada y constituida por muchos tipos de vida.
Así, se crearon primero los Universos, sus galaxias, soles y estrellas; luego se crearon las nebulosas y, dentro de ellas, ya habitaban las dimensiones y los planos de consciencia.
Más tarde, cuando esa primera Creación había madurado, vibratoria y espiritualmente, el Padre con todo Su Amor, fijó Su mirada en un punto del Universo, en donde un planeta, el que más había brillado, generó una condición espiritual mayor que era capaz de albergar y de recibir un Proyecto.
Para eso el Padre pidió que ese tesoro del Universo, que se estaba expresando espontáneamente, recibiera uno de los elementos y fluidos más especiales de la Creación: el elemento agua, para que lo que sucedería después, tuviera el apoyo necesario para poder desenvolverse y evolucionar.
Ese elemento traería para la consciencia humana, que fue el último proyecto realizado, la capacidad interior y también material de recordar su origen no solo desde el vientre materno, sino también su origen superior.
El elemento agua es la base fundamental para el equilibrio emocional y sentimental del ser humano. Por eso, en la creación del planeta Tierra, el Padre le quiso conceder a Sus hijos la mayor cantidad de océanos y de mares para que no sintieran la desconexión espiritual del vientre materno.
Es así, que el Proyecto humano fue acompañado desde el principio, y ha sido el Proyecto genético más privilegiado porque el propio Proyecto, para poder ser corregido y redimido, recibió la encarnación del Hijo de Dios para que la raza humana encontrara un camino directo por donde poder retornar a su verdadera esencia.
Fue así que otros seres humanos se ofrecieron para que el Proyecto pudiera perdurar y alcanzar el mayor grado de perfección, lo que fue posible por todo lo que enseñó Cristo, que fue el camino del Amor y del Perdón.
Por eso todos los seres humanos bajo cualquier condición tienen la posibilidad, dentro de todo el Universo, de vivir y de experimentar el Amor de una forma directa y sin grandes esfuerzos; un Amor que proviene del espíritu, un Amor que trasciende los errores y que pacifica, que amplía la consciencia y que abre los sentidos internos para poder vivir conscientemente el Plan y la Voluntad de Dios.
Este pequeño planeta azul, dentro de la Creación, es la escuela predilecta en donde otras consciencias universales pueden aprender sobre cómo el Amor verdadero por el Creador, por el Padre Supremo, puede mover los acontecimientos y puede conceder milagros de vida y de redención.
La llave está en vivirlo y en confiar en el poder del Amor Mayor.
¡Les agradezco por responder a Mi Llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Vengo a Austria para concederle el perdón que necesita por el pasado vivido y que aún no fue resuelto.
Por eso, he pedido con anticipación una Maratón de oración a fin de ayudar a los que todavía están prisioneros espiritualmente.
Su Maestro, a través de una gran puerta, trasladará a las almas que fueron partícipes de planes retrógrados y que cambiaron el destino de millones de almas para siempre.
Esa es la razón por la cual vengo a Austria y después vendrá Mi amada Madre para restaurar espiritualmente todo lo que ha sucedido.
Pero primero, todo deberá purificarse y exorcizarse a través del Rayo de la Liberación, el que Yo activaré ante la presencia de los Míos.
Mediante la oración de la Misericordia, el Señor del Amor y del Universo, liberará de las cadenas de los errores a los que se arrastran por los propios abismos desde hace décadas.
Para eso traeré Mi Gracia a fin de conceder la Misericordia y luego la Paz.
¡Les agradezco por unirse Conmigo en esta sagrada tarea!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
Quinto día de la Novena
Sumergiendo en Mi Misericordia a las almas que son engañadas por los proyectos del mundo a través de los planes genéticos y humanos, ellas no solo reciben Mi Gracia, sino también Mi consuelo.
La Fuente de Mi Misericordia repara toda la consciencia a nivel profundo y, especialmente, a nivel espiritual.
La Misericordia de Mi Corazón puede llegar especialmente a las almas que, por absoluta ignorancia y ceguera, caen en tentación y destruyen por sus propios medios lo que Dios concibió en el seno de las mismas.
Cuando las almas más inocentes son abortadas significa que la decisión tomada por sus propias madres representa el desvío total de la Ley del Amor y de la Compasión.
Todas esas almas que hoy no viven en la Tierra, por haber sido extirpadas de los vientres de sus madres, están en sufrimiento y agonizan por no haber conseguido continuar su evolución humana y espiritual.
En este sentido, la Ley principal de la Creación es alterada y se genera un gran débito que deberá ser resuelto por medio de la Misericordia que las almas orantes invocan a Mi Corazón.
En estos tiempos la transgresión de la Ley de la Vida genera catástrofes regionales y hasta mundiales. Los Reinos de la Naturaleza al ser transgredidos, en su ciclo de vida y de evolución, reaccionan por medio de fenómenos que perjudican a la humanidad.
La importancia de invocar la Misericordia por los no nacidos ayudará a disolver los proyectos humanos invasivos que alteran la evolución del ser humano y del planeta.
Las almas de los no nacidos son reconducidas, por medio de Mi Misericordia, hacia nuevas Fuentes de Luz para que en otras partes del Universo vivan su camino y su despertar.
En verdad, la Misericordia es la tabla de salvación para estos tiempos.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
Quédate con tu Madre Celeste y abandona tus conceptos
Quédate, hijo Mío, con tu Madre Celeste, a Su lado, acompañando cada paso de Su Obra de Maternidad y de Misericordia, y abandona todos tus conceptos.
Quédate con tu Madre Celeste y deja que el propio Universo de Dios obre en ti y no que tú obres en el Universo.
Abandona todos tus conceptos, ideas y proyectos de querer mejorar un destino que ya está escrito en el Corazón de Dios.
Quédate con tu Madre Celeste y acompáñame, hijo Mío, en cada nueva misión, despojado de tus creencias o de tus pareceres.
Deja que Mi Hijo te vacíe como el odre, para que Él te pueda llenar con Su Paz y Su Voluntad.
Abandona, en este momento, todos tus conceptos e intenciones de perfeccionar las cosas.
Anímate a vivir la pulcritud, primero en la dignidad del espíritu para que después se refleje en la materia.
Quédate, hijo Mío, con tu Madre Celeste para que en este nuevo año que comenzará abandones tus viejas costumbres, tus hábitos de vida que no hacen a la unidad, ni al amor.
Quédate con tu Madre Celeste para que Yo pueda indicarte el camino justo, y no para que tú escojas por dónde caminar.
Confía plenamente en todo lo que no está al alcance de tu consciencia o de tu realidad.
Acepta, hijo Mío, el primer paso, que será curar tu vida y tu consciencia humana, para que después se pueda curar el corazón y todo pueda cicatrizarse.
Retira, con Mi ayuda, el odio y el rencor de tus entrañas; ya no veas que todo está degradado a tu alrededor, sumérgete dentro de tu verdadera realidad y verás que primero deberás despojarte de ti mismo para que, finalmente, el mundo como un todo, se pueda despojar.
Quédate con tu Madre Celeste y ya no coloques tu mirada en los defectos sino en las virtudes y en los esfuerzos amorosos de tus semejantes.
La vida es muy bella, solo el ser humano puede oscurecerla o hacerla brillar según sus intenciones.
Quédate con tu Madre Celeste y darás pasos en el verdadero amor.
No retrocedas más.
Adelanta tu camino para poder encontrarte con el Señor.
Deja, hijo Mío, que el Padre te muestre Su Voluntad, y derrota la propia.
Deja que tu corazón herido se abra para que los Rayos de Mi Corazón te puedan curar.
Quédate con tu Madre Celeste y ya no tomes decisiones precipitadas.
Ábrete, interiormente, a la guía y a la Instrucción que te envía el Cielo, así serás un alma nueva, así serás un espíritu al servicio de la unidad y del amor.
Quédate con tu Madre Celeste y acepta la realidad.
Ya no fuerces tus realizaciones. Ya no sometas a tus hermanos según tus placeres o creencias.
Quédate con tu Madre Celeste para que tu niño interior se pueda expresar y salir del constante silencio en el que se encuentra.
Quédate con tu Madre Celeste y las puertas al Amor se abrirán.
Escucha Mis Palabras con gratitud y el odio en ti, desaparecerá.
Quédate con tu Madre Celeste y no sufrirás.
El Reino de Dios se está cumpliendo, aunque no lo parezca.
Deja de sufrir innecesariamente. Deja de amargar tu corazón con todo lo que ya no tiene sentido y, para que eso sea posible, debes entregarte vacío y humilde, manso y pacífico, así el Espíritu Santo encontrará un camino por dónde poder actuar.
Quédate con tu Madre Celeste y te aseguro que no te reconocerás, siempre y cuando tu entrega sea honesta y cristalina.
Deja que las vendas del espejismo y de la ilusión caigan de tus ojos para que pronto puedas ver la realidad.
Deja, hijo amado, que el amor de tus semejantes y el Amor de Dios curen tu agonía.
Que vivas un año en el Señor y no en el mundo.
Que todo se redima dentro de tu ser para que cumplas con lo que Dios quiere.
Finalmente te pido, hijo Mío: sé libre de ti.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de la Divina Concepción de la Trinidad
La entrega de la vida, hijos, no es algo pasajero. La entrega verdadera abarca toda la consciencia y va desde el cuerpo, la mente y el corazón, hasta el alma, el espíritu y la esencia.
Aquellos que se entregan al Creador están poniendo la dirección de sus vidas en las manos del Padre y renuncian a toda meta personal, a sus planes, proyectos y aspiraciones, inclusive la de cumplir con la misión que Dios les encomendó. La entrega debe regirse por el ejercicio constante del vaciamiento de sí mismos y por la búsqueda permanente de no ser nada y no querer nada.
Muchos aspiran a cumplir misiones, que por si solas, exigen la entrega total de sus vidas, como lo es el servicio abnegado e incondicional. Sin embargo, antes de lanzarse a esa entrega, hijos, deben meditar de corazón en lo que ella significa y así, predisponer sus consciencias para algo más profundo, para que ese servicio sea verdadero y para que sus posibles consecuencias sean motivo para consolidar la entrega y no para generar una deuda con Dios, como puede ocurrir en el caso de que pierdan la vida sirviendo .
Les digo esto, porque si en verdad meditan y se lanzan al servicio abnegado y a la consagración, con la consciencia de que la entrega debe profundizarse cada día, solo así podrán convertirse en instrumentos de Dios, y esa condición les dará la Gracia para cumplir su misión con protección y discernimiento correcto.
Sin embargo, si se lanzan a una entrega inconsciente, impulsiva y superficial, corren el riesgo de no recibir la Gracia de Dios y la protección que necesitan y vivirán en constante imprudencia por la falta de discernimiento.
Por eso les digo que no importa la tarea que hacen o el grado de riesgo que corren, sino la profundidad espiritual y consciente de su entrega. Esto es lo que diferenciará al servicio, que tendrá o no la presencia directa de Dios.
Espero que hayan comprendido lo que les dije.
Dejo Mi Bendición a los que se entregarán de corazón.
San José Castísimo
Los Elohim: Ángeles Dorados
En la Esencia del Corazón de Dios, surgió una vez el gran Propósito de crear la vida y los planos de consciencia.
Como les dije ayer, queridos hijos, los Arcángeles, los llamados Resplandecientes, nacieron de la Inspiración Divina, inspiración que permitió concretar y manifestar los seres arcangélicos y angélicos.
Dios expresó en el Universo Mental Sus doce principales manifestaciones, las que surgieron de la Fuente Purísima. Desde allí, los doce Elohim como Rayos e impulsos de fuego nacieron dentro de la consciencia del Universo Mental Superior.
Desde el momento en que el Eterno tuvo la sagrada voluntad que de Su Esencia Purísima nacieran los Arcángeles, el Universo Mental ya era una realidad vital dentro del Universo Espiritual.
Los Elohim fueron designados por el Altísimo para llevar adelante la organización y la manifestación de todos los universos, en donde en el futuro existiría la vida.
Fue así que, desde el momento en que los Elohim se manifestaron dentro del Universo Mental, las primeras legiones fueron creadas sutilmente en estanques de luz, que son grandes receptáculos y canalizadores de energía divina, anteriores a los Espejos.
Veamos entonces, queridos hijos, cómo la historia divina de la Creación anterior a la vida material fue considerada por el propio Dios un Proyecto de amor y de absoluta unidad.
Sobre la base del amor y de la unidad las Jerarquías Angélicas, los llamados Elohim, desenvolvieron el Proyecto del Padre Eterno y dieron continuidad a la Obra de la Creación.
Los estanques de luz también fueron creados a través de la esencia de la Voluntad Divina y fueron los primeros Elohim los que acompañaron la manifestación de estos estados de consciencia, los que guardaban en sí el surgimiento espiritual de la vida angelical.
Cada Arcángel, como Padre Creador, depositó en los estanques de luz una molécula de los doce Rayos espirituales que estuvieron presentes en el momento del nacimiento de los seres angélicos. Una consciencia angélica nace a partir de la expresión del amor en el Universo Mental y a través de un acto de profunda unión que el Arcángel establece con la Fuente Única.
En ese momento, el Arcángel proyecta sobre el estanque un potentísimo caudal de amor y de unidad y, en consecuencia, el estanque, a través de la agrupación de todas las moléculas de los Padres Creadores, emana una consciencia angélica que está dentro de un precioso cristal de color magenta, azul, verde, blanco o dorado. Cuando la consciencia angélica surge del estanque y hasta que termine de constituirse, el cristal queda suspendido sobre él por un período determinado, al igual que la gestación de un niño en el vientre de su madre. Es la energía creadora y divina que gesta interiormente el propósito de esa consciencia angélica.
El cristal puede contener alguno de los doce Rayos para mostrarle al Universo Mental cuál ha sido la Voluntad Mayor para la tarea y el servicio que el nuevo ángel cumplirá.
Es así que, después de su manifestación como consciencia mental y espiritual, el ángel vive una formación que lo ayuda a desarrollar su misión en el Universo Mental o en el Universo Material.
Después de ir formando los ejércitos de luz, los cuales desde su nacimiento viven el servicio incondicional y la unión perfecta con el Eterno, los Arcángeles comienzan con la construcción y la materialización de las Academias de los Rayos, para que cada ser angélico desenvuelva su propósito ante el Padre.
A continuación, se manifiesta la formación espiritual de los Siete Cielos o de los siete estados de Consciencia Divina, en donde los grandes ejércitos comienzan a poblar las dimensiones celestiales.
En ese momento los Arcángeles definen, bajo la Voluntad Máxima, la misión de cada consciencia angélica, lo que determina a cuál de los Cielos o de los estados de consciencia le corresponderá servir eternamente.
A partir de ese momento, los Padres Creadores asumen el gobierno de los Siete Cielos, para que desde el principio se cultive entre las consciencias la Ley de la Jerarquía.
Según como haya sido el surgimiento de la consciencia angélica dentro del cristal, será la misión que vivirá.
Si un ángel surgió del estanque de luz en un cristal magenta, significa que el Padre Creador le asignará la misión de vivir el amor, de irradiarlo y de protegerlo en los universos.
Si un ángel surgió del estanque de luz en un cristal azul, significa que el Padre Creador le asignará la misión de proteger y de vivificar la unidad en todos los universos, como también de ser guardián del conocimiento sagrado de las Leyes espirituales, mentales y materiales.
Si un ángel surgió del estanque de luz en un cristal verde, significa que el Padre Creador le asignará la misión de ejercer la Ley de Cura y de emanar continuamente la armonía en toda la Creación y en donde él se encuentre.
Si un ángel surgió del estanque de luz en un cristal blanco, significa que el Padre Creador le asignará la misión de atraer para sí los más altos grados de pureza y de expandirla como esencia hacia los universos.
Si un ángel surgió del estanque de luz en un cristal dorado, significa que el Padre Creador le asignará la misión de la eterna alabanza al Único, como miembro de los llamados Coros Celestiales, los que atraen hacia los universos los principios de la Fuente de Dios.
Es así que los Padres Creadores envían en misión a todos los ángeles que nacieron de la Fuente a través de los estanques de luz, para que junto a sus regentes arcangélicos asuman la misión de proteger y de amparar la evolución de los universos a través de los diferentes Rayos a los cuales pertenecen.
Los Elohim son parte del Propósito Divino y están representados a través de las doce principales emanaciones de Dios, lo que comprendemos como los arcángeles; a partir de allí, las doce emanaciones formaron los doce gobernantes, y de los gobernantes angélicos surgieron otras doce emanaciones hasta llegar a los ángeles de la guarda.
El Universo Mental no tiene límites y es un estado infinito formado por la Voluntad de Dios. Allí se vive el estado de resplandecencia, lo que significa que cada consciencia angélica genera en sí los más altos grados de amor y de unidad con el Único.
Toda la consciencia angélica existe para proteger y guardar la esencia del Proyecto de Dios dentro de los Universos Espiritual, Mental y Material. Es así que los Elohim pueden penetrar las dimensiones y los planos, aunque sean seres mentales, porque ellos se mueven todo el tiempo por el espíritu de la obediencia y del servicio eterno.
El Padre, desde el principio, concibió a los Elohim como los principales guardianes del Propósito de la Creación y de toda la vida existente en los universos.
Fue así que, a través de los Resplandecientes, surgió la primera experiencia de la Hermandad Cósmica, lo que más tarde se estableció como premisa para todas las consciencias presentes en los diferentes planos.
Los Elohim son considerados también los Mensajeros o los portavoces de la Fuente Primordial para el Universo Material; son los que llevan adelante la concreción del Propósito Divino y son los que impulsan a los ángeles de la guarda para que cada alma viva su misión dentro de la Creación, para así cumplir con la finalidad del Padre.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
En unión a cada ángel de la guarda,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Reina de los Ángeles
La Red de Comunicación de los Espejos Celestes, continuación
Abre tu corazón y vacía tu mente para poder comprender y vivir los misterios de la Creación.
En esa apertura podrás penetrar la esencia del conocimiento, y todo lo que es sagrado en el Universo no llegará a ti solamente como información, sino también como códigos de Luz que despiertan en tu ser para transfigurarte.
Este es el poder de los Espejos, usinas celestes de armonía universal, que concentran dentro de sí todos los atributos de la Creación. Decimos y entendemos como atributos a todos los rayos y corrientes celestiales que los Padres Creadores utilizaron para la manifestación de los planos y de la vida.
Son esos atributos los que permiten, de tiempo en tiempo, renovar la vida universal y todos los ciclos trayendo impulsos positivos que impregnan toda la Creación. Es así, que los Espejos Celestes guardan en ellos el recuerdo de nuestro origen espiritual, mental y material.
En el principio, en el origen, lo que comprenderíamos como la esencia del Pensamiento de Dios, la Fuente creó a los Arcángeles para que ellos crearan a las huestes de luz en el Universo Mental; fue así que en el principio de todo el Universo Mental fue gestado por la existencia de los primeros ejércitos de los Elohim.
Estas Consciencias resplandecientes fueron impulsadas a colaborar con la creación del Universo Material, porque en el Pensamiento y en el Corazón del Padre Eterno existía la Voluntad de que se dieran grandes experiencias de amor que superaran a todas las anteriores.
Los Padres Creadores en el principio crearon, a pedido de Dios, los Espejos Celestes, porque dentro del Universo Material y Mental estos ayudarían en la evolución espiritual de toda la vida universal.
Los Espejos Celestes fueron formados también por doce atributos, doce Rayos o doce corrientes de energía espiritual y divina, que permitirían mantener la historia del origen de la Creación bien guardada y disponible como información lumínica para toda las consciencias que serían creadas a imagen y semejanza de Dios.
Los doce atributos que se expresaron durante la gestación de los Universos Mental y Material emanaron directamente de lo que conocemos como Fuente de la Creación, que es la esencia pura e inmaculada del Padre Eterno.
Desde allí, durante doce ciclos o doce tiempos, los Universos Mental y Material que estaban en formación recibieron estos impulsos espirituales para que se terminara de constituir la vida evolutiva en los diferentes planos.
El primer atributo emanado de la Fuente fue el de la VIDA; Dios en ese momento decretó: Que en todos los planos exista la Vida, la que será visible e invisible, pero que en esencia estará llena de Amor.
El segundo atributo emanado de la Fuente fue el de la UNIDAD; Dios decretó en ese momento: Que toda la Vida que se manifestará a semejanza de la Mía conozca y viva la Unidad para poder alcanzar la Fuente a través del Amor.
El tercer atributo emanado de la Fuente fue el del AMOR; Dios decretó en ese momento: Que el Amor Divino sea conocido por toda la Vida y que la Vida exprese todos los grados de amor para que la evolución avance.
El cuarto atributo emanado de la Fuente fue el de la SABIDURÍA; Dios decretó en ese momento: Que la Sabiduría torne sagrada toda la Vida, que los espíritus ennoblezcan sus consciencias al tener conocimiento del amor y de la unidad.
El quinto atributo emanado de la Fuente fue el de la HUMILDAD; Dios decretó en ese momento: Que toda la Creación sea humilde en su espíritu y constitución, que el verdadero gobierno y evolución lo alcancen los humildes y que toda la vida imite ese sagrado camino.
El sexto atributo emanado de la Fuente fue el de la COMPASIÓN; Dios decretó en ese momento: Que la Compasión absoluta surja en la vida universal, para que las consciencias recuerden que todo está basado en el Amor y en la Misericordia.
El séptimo atributo emanado de la Fuente fue el de la MISERICORDIA; Dios decretó en ese momento: Que toda la Creación viva en esencia la Misericordia y que esa Ley vivifique a quien la contemple en devoción.
El octavo atributo emanado de la Fuente fue el de la POBREZA DE ESPÍRITU; Dios decretó en ese momento: Que la verdadera evolución acontezca en todos los pobres de espíritu, para que nada ni nadie, ninguna tentación los desvíe del sagrado camino.
El noveno atributo emanado de la Fuente fue el del SERVICIO, y Dios decretó en ese momento: Que la cooperación y la ayuda mutua establezcan en los universos el espíritu del servicio; que el amor y el servicio penetren toda la vida para que la fraternidad surja y sea la base de la evolución universal.
El décimo atributo emanado de la Fuente fue el de la PIEDAD, y Dios decretó en ese momento: Dichosas todas las consciencias que imploren a Mi Santo nombre, porque tendré Piedad absoluta de cada una de ellas y así conocerán el poder de la Misericordia de Mi Corazón.
El décimo primer atributo emanado de la Fuente fue el de la ETERNIDAD, y Dios decretó en ese momento: Que todo lo creado conozca, después de su experiencia, la Eternidad; que todos los planos que guardan la vida universal eleven los espíritus para que se fundan con el infinito y así alcancen la inmortalidad.
El décimo segundo atributo emanado de la Fuente fue el de la CIENCIA, y Dios decretó en ese momento: Que toda la Creación y la vida tomen consciencia de las Leyes y que ellas conduzcan, guíen y readecuen toda la vida universal bajo el espíritu de la armonía.
Estos doce atributos fueron guardados esencialmente dentro de los Espejos Celestes, los que también irradian estos principios creadores a todo el universo material.
Los Espejos Celestes son grandes estados de consciencia divina presente en tres planos: material, mental y espiritual, y así se establece en todo el universo un poderoso equilibrio que es sustentado por las consciencias angélicas.
Es así que la Red de Comunicación de los Espejos ayuda en la redención y en la rehabilitación de toda la vida en ciclos y en tiempos diferentes. De esa forma los Espejos Celestes, contando con esos impulsos divinos, se tornan fuentes de emanación de amor y de unidad hacia toda la vida.
La existencia de los Espejos Celestes le recuerda a la vida planetaria que las almas siempre deben aspirar un día a volverse semejantes a un Espejo, no por su potencia, sino para poder espejar lo que el Padre espera de cada criatura, como Él lo pensó en el principio.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Unida al espejo de luz de cada corazón,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Donde Me llaman, allí Yo estoy presente, porque soy la Madre de la Divina Omnipresencia.
Soy la Maestra de la oración que conduce a las consciencias al recuerdo permanente de su propósito ante Dios.
Es así que el Universo se manifiesta a través de la presencia de la Madre Celeste, para que las almas reconozcan en esta hora su importante tarea.
Su Madre Celeste los reúne en este encuentro para que todos reciban los impulsos que se manifestarán desde el momento en que los servidores den sus pasos hacia Dios.
Desde el Universo Celestial los ángeles de la Luz reúnen todos los impulsos espirituales para que estos desciendan sobre las consciencias y para que puedan vivirlos en el plano material.
En este último ciclo, su Madre Celeste encuentra una apertura especial que repercute en las consciencias y también en el Universo, así se establece una comunión espiritual que poco a poco ellas irán percibiendo interiormente, cuando se mantengan en un acto de oración.
El Espíritu Santo también emana Sus Dones para que estos se manifiesten en los corazones simples y humildes, los que podrán atraer hacia el planeta la unidad y el amor tan necesarios en estos tiempos agudos.
Es así que el Espíritu Santo, por medio de los impulsos, podrá estar presente en las consciencias que se abran para reconocer en sí a Dios, hecho fundamental para que la humanidad sea conducida hacia su última etapa de redención y de purificación.
Su Madre Celeste acompaña estos momentos porque el Plan está en una fase de recuperación y está siendo guiado por un nuevo camino que la consciencia humana aún no conoce.
Es así que la Divinidad, el Padre Eterno, está atento a la apertura de los corazones humildes. En este momento, un profundo despertar en la mayoría de las consciencias podría regenerar la consciencia creadora que la humanidad ha destruido.
La Gracia está trayendo una expiación desconocida.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los impulsa a la Consciencia Mayor,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
La recompensa del servidor de Dios es el eterno servicio. El Creador renueva a Sus siervos en el acto de servir, y los nutre con la certeza de estar cumpliendo con Su Plan.
Hijos, la gran escuela de los discípulos de Cristo, en este tiempo, es la eterna renuncia. Sin embargo, les hablo de la renuncia de las cosas del mundo, de las comodidades y de los placeres que la humanidad, en su totalidad, apreció mucho mantenerlos.
Aquellos que temen a la renuncia, es porque, en verdad, jamás conocieron la Gracia de servir a Dios. Porque es renunciando a todo lo pasajero, que se encuentra aquello que es eterno y que nutre al alma, al cuerpo y al espíritu, dejándolos plenos en Dios, más allá de las apariencias del mundo.
Aquellos que quieren sustentarse durante su propia purificación deben encontrar su paz en la renuncia de todo resultado sobre sí mismos, pues sufre mucho aquel que todo el día mira para su propia herida y no permite que cicatrice, por el poder de su pensamiento sobre ella.
Deben reconocer que las heridas están ahí, pero para que el dolor no les atormente la vida ni les impida hacer todo lo que son llamados a hacer en este tiempo, tienen que quitar los ojos de sí mismos.
Es por eso, hijos, que cuanto mayor sea su grado de consagración, mayor debe ser la renuncia, porque se les pedirá un perfeccionamiento profundo y serán llevados a vivirlo más allá de su propia voluntad. Sin embargo, no es eso lo que debe estar en su consciencia, porque el Plan de Dios se manifiesta viviéndolo y no pensando en él.
De esa forma, deben saber que aquel que da todo también recibirá todo y aquel que deja de lado sus propios procesos, sus purificaciones e, inclusive, sus necesidades, para ayudar a los otros, será recompensado por Dios y alcanzará la expresión de Su Plan, sin darse cuenta.
Por eso, hoy les señalo el camino del servicio y de la trascendencia y les agradezco por intentar superarse por amor al Plan del Creador. Es en esa eterna tentativa y en la verdadera aspiración, que él se cumple. Sigan adelante.
Su Padre y Compañero en el camino de la ascensión,
San José Castísimo
Hijos del Dios Altísimo:
La agonía del mundo no terminó, y el Corazón de Cristo sigue siendo flagelado todos los días por las acciones injustas de la humanidad. Abran los ojos y vean a su alrededor que el Apocalipsis se precipita en el mundo. Transformen sus vidas, vivan del bálsamo de la oración y den de beber de esta agua de vida, que es la unión con Dios, a las almas sedientas y desamparadas.
¡Que la humanidad escuche el llamado definitivo de los Mensajeros de Dios! Que todos aquellos que se consideran despiertos y conscientes caminen a grandes pasos en su transformación.
¡No pierdan más tiempo con las mezquindades de la vida! Reconcíliense con aquellos que no les permiten vivir en el espíritu de la paz. Amen a sus enemigos y que estos ya no existan entre hermanos de una misma raza, unidos por un único Propósito Divino.
Perciban que ustedes ya están transitando los últimos tiempos del planeta y que ya no es hora de pensar en sí mismos, ni de concretizar planes ni aspiraciones personales. ¿De qué les valdrá construir un proyecto de una vida material si aquellos que no se sustenten en la fortaleza del espíritu desaparecerán en medio de la tormenta del caos y del mal?
Queridos compañeros, les hablo con palabras claras porque naciones enteras se están perdiendo por el avance de la oscuridad. ¿En dónde están los soldados de Dios? ¿Qué están haciendo los que se comprometieron con Cristo?
Ya no es hora de emociones ni de entrega a medias. Oren con el corazón, con el espíritu y vivan como verdaderos discípulos de Cristo. Demuéstrenle al mundo que hay una única salida para la tribulación en que vive el planeta, y esa salida es el Corazón Infinito de Dios.
Ustedes fueron traídos hasta aquí, hasta este mundo, para vivir el amor y el perdón; entonces, vívanlo. Mi corazón de padre les advierte, porque, en el Cielo, el Creador aguarda la respuesta de los seres humanos para darles nuevas indicaciones sobre el desarrollo de Sus Planes.
No permitan que el tesoro más precioso del universo se pierda. Ustedes aún están a tiempo de corregir los errores de sus vidas, pero sean rápidos y estén dispuestos a responder al llamado de los Mensajeros de Dios.
Oración, conversión y fe es todo lo que el mundo necesita.
San José Castísimo, en la conducción de las almas para los tiempos de definición y entrega.
Ustedes pueden estar más Conmigo, así Yo les daré compañeros de camino, para que juntos busquen en la noche la Fuente que les saciará la sed inmaterial; pues quien realmente está Conmigo recuerda todos los días Mi Presencia, por lo menos al despertar.
En estos tiempos de purificación y de renuncia, Yo los llamo a replantear sus votos Conmigo. Todos tendrán siempre un espacio de luz en Mi Corazón, pero para que Mi Tarea se cumpla, Mis soldados deberán en verdad estar definidos y así Yo los llamaré para tareas mayores o menores, según el grado de su entrega.
En Mis Planes Crísticos no existen diferencias ni privilegios, solo deposito Mis Voluntades en aquellos que más necesitan crecer en consciencia y en experiencia de vida.
Estoy aquí, en el silencio, meditando sobre sus vidas y sobre lo que vendrá dentro de poco tiempo. Yo los invito a asumir los votos de una manera humilde y simple; que cada uno, según como Me perciba, se coloque en el escalón del servicio que le cabe. Mis Ojos Misericordiosos siempre los mirarán con amor y compasión.
En estos tiempos, el camino del discipulado es solo para los que se animen a morir todos los días para sí, porque los verdaderos tesoros se encuentran al entrar en el Reino Mayor.
Que cada uno se confirme, que cada alma Me entregue aquello que verdaderamente Me puede dar en estos tiempos críticos.
Los observaré con detenimiento, y así ustedes se animarán a fortalecer un poco más sus espíritus a través de Mi Corazón Misericordioso.
Bajo el Bien Mayor de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por escuchar Mis Palabras Sagradas con atención.
Cristo Jesús
Yo vengo del Cielo Eterno y Omnipresente para apaciguar sus corazones; Yo vengo con la esperanza de su pronta redención y entrega absoluta a Mi Corazón Misericordioso.
Aquel que en verdad está Conmigo recibirá del Padre todos los tesoros y dádivas que se guardan en el Cielo.
También en las horas difíciles, Yo estoy con los Míos para que puedan madurar en los aprendizajes de la vida.
A las tres de la tarde, Mi Consciencia irradia todos los Rayos que Yo adquirí por medio de la obra de Mi Infinita Misericordia. Estos Rayos, que provienen del Sagrado Universo de Dios, son los Rayos Inmateriales que restaurarán a la humanidad que está en ruinas.
Mediante Mis soldados de la misericordia, espero reconstruir los millones de templos y de moradas internas de aquellos que viven sobre este mundo actual y cuyas almas los abandonaron.
Necesito siempre de las cálidas y devotas oraciones de ustedes, necesito de que se unan a Mí a pesar de las circunstancias y de los sufrimientos porque en verdad les digo: no existe mayor milagro de amor que el Amor de Dios por todas Sus pequeñas criaturas.
Por eso, vayan y sigan firmes por el camino prometido, camino que deberán recorrer ardientemente entre las duras piedras y las espinas del rosal; porque del otro lado de la esfera de la Tierra, en el portal de Mi Corazón Compasivo, se encuentra su amado Dios de la Verdad, de la Unidad y del Amor.
Les pido que no bajen los brazos, elévenlos hacia lo Alto para que sus espíritus puedan alcanzar el camino que han perdido. Allá, en lo Alto, existe la Supraconsciencia del Infinito, la Fuente que siempre los proveerá y les quitará la sed que tanto padecen sus seres.
El Padre escucha y contempla sus necesidades. Sean valientes, aún queda un trecho para la finalización de Mi Camino y para Mi Regreso victorioso al mundo.
Nunca olviden que los amo y que, en el silencio, Yo protejo a Mis ovejas de cualquier asecho.
Estoy con los que se esfuerzan por cumplir con el Plan de Mi Padre. Yo estoy con los trabajadores del Plan Mayor, todos los días de la vida.
Bajo la Misericordia de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por permitir cumplir Mis Designios de amor y de redención.
Cristo Jesús, vuestro Salvador
Yo contemplo a los corazones cansados y a los corazones que descansan en los demás corazones.
En Mi Obra existen los sacrificados y los que intentan vivir el sacrificio.
En Mi Obra existe el servidor y el que es servido por una razón mayor.
Todos pasan por la escuela de la entrega y del sacrificio, así Me relaciono con Mis amigos: a algunos Yo les doy Mi Voluntad y a otros Yo les entrego Mis Aspiraciones de algo bueno y mejor. Todos tienen el mismo lugar en Mi Corazón, porque no existen dos caminos para llegar a Mí, sino solo uno: un camino de renuncia y sacrificio que les permitirá alcanzar el estado de humildad.
Por eso, los que están Conmigo son los que más trabajan por los que están cómodos y por los que están ciegos sin poder encontrar la vida del espíritu. Me sirvo siempre de los mismos; Mi Corazón se ennoblece y se alegra cuando algún discípulo presta un servicio extraordinario, amoroso y abnegado; así Yo estoy viendo los frutos maduros de las semillas misericordiosas que he sembrado en cada ser.
Aquel que lo da todo por Mí y por el cumplimiento de Mi Plan recibirá los dones de Mi Amor. También le entregaré Mi Sacrificio, aquel que Yo viví en la Cruz por todos; le daré una cruz semejante para que la sepa llevar en sus espaldas por aquellos que abruptamente se pierden sin dejar huellas de la presencia de sus pequeñísimos espíritus.
Todo lo que reciban en Mi Nombre les dará la fuerza para amar el poder de la entrega y del sacrificio ofrecido por amor y por la redención de la humanidad; así ustedes verán los frutos y os méritos de su obra en la salvación de los que estaban muertos en vida, apartados de Mi Luz y que por Gracia alcanzarán eternidad y misericordia.
Guarden en sus corazones la esperanza de encontrar, en el Reino de los Cielos, el verdadero tesoro para sus espíritus, porque allá descansarán en Mis Brazos como buenas ovejas redimidas.
Bajo la Luz del Padre, sean bienaventurados de alma y de corazón.
Gracias por meditar sobre Mis Palabras con el corazón.
Cristo Jesús
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más