MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA FRONTERA ENTRE RUSIA Y FINLANDIA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Ríos de sangre inundan la superficie de la Tierra; así como este océano, frente a sus ojos, inunda la vida.

¿Quién se hará cargo del precio de la inocencia que fue destruida?

¿Quién se hará cargo, hijos Míos, después de que la Preciosa Sangre de Mi Hijo fue derramada, gota a gota, para poder redimir y salvar al mundo?

Hoy, Yo vengo hasta Rusia, también como la Madre de esta nación, que tiene otro Propósito Espiritual y no el que está manifestando en estos tiempos.

Si todas las naciones del mundo hubieran cumplido su Propósito Espiritual desde el principio, les aseguro, hijos Míos, que no existiría la guerra, el hambre, el exilio ni la impunidad.

Pero este Proyecto de Dios, en la superficie de la Tierra, se desvió del camino que estaba previsto. Por eso, Dios Padre nos envía al mundo como Sus Mensajeros a despertar la consciencia de la humanidad.

¿Cuánto más deberá suceder en esta superficie, hijos Míos, para que algo cambie en el ser humano?

Aunque la mayoría no tiene la responsabilidad de las decisiones equivocadas que toman muy pocos y que repercuten en millones de almas en el mundo, Yo les pido, Mis amados hijos, que su escuela profunda de oración, en estos tiempos críticos y desafiantes, se profundice aún más, para que esta escuela de oración, que es una invocación permanente al Reino de los Cielos, pueda tocar el Corazón de Dios, un Corazón ofendido y lastimado por Sus Hijos.

Pero Yo vengo a ofrecerle al mundo el Relicario de Mi Corazón Inmaculado para que las almas ingresen a Dios a través de Mi Corazón, y las situaciones difíciles y complejas que se viven en estos tiempos puedan ser reparadas por la oferta de las almas buenas, de las almas que buscan a Dios incesantemente, de las almas que viven el don del Temor de Dios, no como una justicia, sino como la imperiosa necesidad de estar en Él y por Él, sirviendo en esta superficie de la Tierra.

Aún las armas siguen siendo activadas. Aún los hombres viven en la guerra, y las almas que, en esta superficie, están bajo esas difíciles condiciones de vida, se atemorizan y se aterrorizan por lo que escuchan y por lo que ven, día a día; desde Mis hijos más pequeños que son los más inocentes y puros, hasta Mis hijos más adultos y ancianos que están sometidos por la soberbia y por el poder de unos pocos.

Infelizmente, en este mundo existe una red infernal que condiciona a muchas poblaciones del planeta; pero esto no podrá seguir así, hijos Míos, porque los signos del parto planetario siguen aumentando. La Tierra seguirá temblando, los volcanes seguirán erupcionando, la naturaleza mostrará su furia y su poder por no haber sido cuidada y respetada.

¿Ustedes se imaginan, hijos Míos, tan solo por un momento, cuántos estarán bajo esta condición?

Solo nos resta orar de corazón y de verdad, sin permitir que ni un solo día deje de ser permeado por la luz de la oración.

Como Madre de la oración perpetua, que reza por todos Sus hijos del mundo; como Madre de la Misericordia, ante tantas injusticias y errores; como Reina de la Paz, ante tantos conflictos y guerras que son cometidos; Yo vengo a pedirles, hijos Míos, una vez más, que atiendan al apelo de Mi Corazón, porque les aseguro, queridos hijos, que muy pocos están preparados para el final de los tiempos; tan pocos están preparados como el número de ángeles que hoy Me acompañan.

¿Comprenden la urgencia de estos tiempos?

No vengo a darles temor ni miedo, porque eso no es de Dios. Hoy, vengo a rogar, de rodillas, para que Rusia se convierta a Mi Corazón Inmaculado, para que no se cumpla el Tercer Secreto de Fátima, para que la maldad y la impunidad no se siga expandiendo en el mundo.

Mi Corazón Espinado es presionado por las espinas del dolor de Mis hijos y Mi Corazón derrama la Sangre en este día, así como Mi Hijo derramó Su Sangre en la Cruz.
Que esta Sangre, que derrama el Corazón Inmaculado de María, sea reparada por la oración sincera de Sus hijos, los que ya saben que orar no es una obligación, los que ya saben que orar es una necesidad y una emergencia, porque bajo la luz de la oración estarán protegidos y amparados por Mi Manto de Luz inmaterial y universal.

Mis Manos hoy no dan abasto para ayudar a todos los que necesitan. Las huestes de Luz, sagrados ángeles del Padre Eterno, tampoco dan abasto para atender tantas emergencias y necesidades que no son solo físicas, sino también son espirituales, porque las necesidades espirituales son las más urgentes.

¿Quién se decidirá a dar el paso para asumir, junto con la Madre de los Dolores, esta cruz planetaria?

¿Quién ya no se distanciará más de la cruz y será el nuevo cireneo que, a través del silencio, de la persistencia y de la fe, cargará junto con Mi Hijo todos los pecados del mundo, con la ardiente aspiración de ayudar al Señor?

¿Quién se decidirá, de una vez y para siempre, a ser un espejo de la oración en la Tierra, a entender que ya no es el tiempo del egoísmo y del individualismo, a entender que ya es el tiempo y ya es la hora del “nosotros”, en los que vibra toda la Hermandad Celestial?

Con pesar, los errores seguirán siendo cometidos en el mundo, y esto será así hasta que Mi Hijo retorne. Él lo sabe. Él lo observa en Su más absoluto silencio; pero Su Amor no juzga, Su Mente no cuestiona, Su Gobierno Espiritual no presiona, Su Luz irradia, Su Compasión se establece más allá de las fronteras de este plano material.

Pero no pierdan la fe, afirmen en ustedes la Divina Esperanza. El mundo necesitará, cada día más, que existan buenos instrumentos de Dios, para que Su Amor se deposite y Su Luz se derrame en todos los tabernáculos de la Tierra, que son las almas sinceras que se ofrecen para entrar en comunión con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, en la ciencia sagrada de los Sacramentos y de la sublime adoración al Sagrado Corazón Eucarístico de Jesús.

Que todos los Santísimos se abran, en estos tiempos, para que la Luz de Cristo se multiplique en el mundo, para que el equilibrio se establezca, para que la paz colme los espacios y las consciencias.

Como Madre de Rusia, les pido que oren por la religión de este país, tristemente condicionada, vacía de espíritu por sus compromisos que no son con Dios. Muchas, pero muchas almas dependen de esto.

Ahora, ¿entienden Mi aflicción? Ahora, ¿sienten Mi Corazón?

Les agradeceré por atender a Mis pedidos espirituales, porque no tienen que hacer nada diferente de lo que ya hacen. Solo deben ser más conscientes de la realidad y del tiempo de emergencia, para que las naciones no se sigan comprometiendo con el mal y para que millones de personas no estén bajo esta condición.

Yo vengo a pedirles, una vez más, que oren por la consagración de Rusia a Mi Corazón Inmaculado.

Hoy, vengo aquí a dar este Mensaje especial porque Dios Me lo ha permitido. Haré todo lo que sea posible y un poco más por Mis hijos, a fin de que no pierdan la paz y la unidad con el Padre Eterno.

Ahora, su Madre Celeste se recogerá en el silencio y, así, invita a Sus hijos a recogerse en el sagrado silencio, para que Mis Palabras no pasen desapercibidas ni las almas las olviden de un momento para otro, porque es Dios que Me envía a dar este Mensaje, es la Voz de Dios que resuena a través de Mis Palabras y de Mis Labios, para que Su Amor haga eco en el mundo.

Les agradezco por estar hoy aquí Conmigo, en este lugar, rezando de rodillas junto con la Madre de Dios.

Que el Amor y la Luz de Mi Hijo los bendiga a todos.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN MADRID, ESPAÑA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos:

Las huellas de la Señora de Finlandia, como huellas de Luz, comienzan a marcar los caminos internos, para que Mis hijos misioneros sean orientados en esta próxima Peregrinación por la Paz. Lo mismo sucederá milagrosamente en Polonia, Suiza y Francia, este último país muy necesitado de amor y de redención.

Queridos hijos, hoy la Señora de Finlandia se presenta con esta Faz por primera vez a ustedes, para que internamente sigan a la Madre de Finlandia en esta importante tarea que, espiritualmente, intentará aplacar la injusticia y la falta de paz entre naciones hermanas, hoy divididas por el conflicto, por el odio y por la guerra.

La Señora de Finlandia se colocará ante todo el mal generado para que, a través de un sublime soplo, sea disipado de las ideas de conquista y de poder sobre millones de almas inocentes. Y ustedes, con valentía y fe, Me acompañarán junto con el Ángel de Finlandia, Hellem-El, para que junto con el Ángel de Portugal intervengan por orden de la Santísima Madre.

Pero todo esto no será a través de enfrentamientos o de batallas espirituales, sino que en el nombre de la Preciosísima Sangre de Cristo se restablecerá la pequeña semilla de la gratitud que los países en conflicto perdieron al desviarse de lo que era esencial e inmediato.

Por eso, a través de la insondable presencia de los ángeles de algunas naciones, su Madre Celeste, como Señora de Finlandia, volverá a hacer emerger los valores originales que formaron parte de los países nórdicos y más allá de ellos.

Yo los invito a tener un corazón abierto y vacío en esta peregrinación; porque no solo ustedes, sino también la Jerarquía, tomarán contacto con un legado que aún no fue revelado al mundo.

Por ese motivo, la Señora de Finlandia se presenta como la primera Celadora de los valores que hicieron de los pueblos más antiguos, del norte del planeta, representantes del Linaje de los Guerreros.

Oremos conscientemente para que cada paso de esta peregrinación sea benéfico, no solo para Finlandia, sino también para el mundo entero.

Les agradezco a todos los que, una vez más, confiaron en Nuestros pedidos e hicieron posible esta extendida y necesaria peregrinación.

Los amo y los acompaño,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz y Señora de Finlandia

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos:

Hoy, como Madre de la Misericordia y ante el océano infinito de la Misericordia de Mi Hijo, recojo de los corazones las ofertas y las oraciones que son dirigidas a Cristo, a fin de que, en este tiempo, Él transforme la miseria humana en Misericordia y en Compasión.

Por eso, hijos Míos, una vez más, la vida y el espíritu de cada uno de ustedes está delante del umbral de la Divina Misericordia, esperando que la Ley de la Expiación actúe en la humanidad ante tantos acontecimientos que se viven en el mundo.

Que sus almas sean depositarias del Amor de Mi Hijo y de Su Misericordia Insondable.

Que sus actos, gestos y acciones sean misericordiosos para que esta civilización, de los tiempos de hoy, recupere su contacto con la esencia del Amor-Sabiduría, para que la maldad, el odio, la venganza y la impunidad se disuelvan en el corazón humano, y para que cada hijo Mío recuerde que puede regresar a Dios y conocerlo dentro de sí mismo, en lo más profundo del silencio y de la oración suplicante.

Queridos hijos, aún la Divina Misericordia necesita ser conocida en el mundo, necesita ser practicada y vivida por todos; porque mientras no hayan almas misericordiosas, no habrá paz en el mundo, la guerra no se detendrá.

La Misericordia es la puerta de salvación que Mi Hijo abrió en Su Costado, en donde los afluentes del Agua y de la Sangre son misterios de expiación y de perdón para los que se rinden al Amor de Jesús.

Hijos, que la Misericordia sea el anuncio de la esperanza y de la paz para el mundo herido.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz
 

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL NÚCLEO-LUZ SAGRADO CIELO, EN BELO HORIZONTE, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Me alegra reencontrarme con Mis fieles y amados hijos, en este Sagrado Cielo azul, en donde muchas experiencias fueron vividas por ustedes, Mis hijos. Noches oscuras fueron atravesadas, momentos de alegría fueron vividos y compartidos y, hoy, están aquí Conmigo, en fidelidad y en amor.

Quisiera que sepan que los tiempos que llegarán no serán buenos, pero si las almas se arrepienten de corazón y se entregan con fe al Inmaculado Corazón, todo se podría evitar.

Ahora, que sus pies están cansados de esta trayectoria y de este camino, renuévense. 

Yo estoy aquí y Soy su Madre, la Madre que nunca los abandonará, la Madre que siempre los recibirá y les entregará la Paz que tanto necesita el mundo entero.

Alégrense, porque estoy aquí para concederles una vez más Mis Gracias, para otorgarles el Perdón de Dios y la renovación de sus vidas en este ciclo definitivo, en el que el esfuerzo será la gran llave maestra entre todas las llaves; la llave que abrirá la puerta para el descenso de la Misericordia de Dios.

Por eso, hijos Míos, que sus mentes se expandan, que sus corazones se abran mucho más de lo que están abiertos, para que las consciencias que se han autoconvocado puedan llegar aquí, como está previsto en la Aspiración del Padre Eterno.

Todo lo que aprendieron, a través de los tiempos, ha sido para este momento, hijos Míos, para esta hora definitiva, en la que deben aprender a caminar en el sacrificio por amor a Dios y por amor a Mi Hijo; porque Él nunca les entregará una cruz tan pesada que no la puedan llevar por sí mismos.

Él les entregará la cruz de la liberación y de la redención, así como la cargó de forma valiente hace mucho tiempo, por cada uno de ustedes. Por eso, sigan participando en esa fidelidad a Dios y a Mi Corazón Inmaculado.

Agradezco desde siempre, el canal ofrecido en este lugar, para la Vigilia y la Adoración.

Hijos Míos, es hora de reconstruir las bases espirituales de esta humanidad, a través de ese importante ejercicio de Adoración al Cuerpo Eucarístico de Mi Hijo, porque mientras eso no sucede ustedes saben que las almas se pierden y se pierden; y Mi deseo es llevar a todos hacia Dios, no solo a los que ustedes desconocen, sino también a sus familias, a sus seres queridos, a todos los que están próximos a sus vidas. 

Todos necesitan conocer la Misericordia de Dios. Y ese Misterio se reveló y fue entregado en la Cruz a través de la Sangre derramada de Mi Hijo, en cada gota que Él derramó por el mundo. 

Hoy, para esta renovación, Mis Gracias les traen los Códigos de la Sangre de Cristo para que, después de lo vivido en estos últimos años, sus consciencias se puedan sentir curadas y renovadas, puedan asumir con madurez y entusiasmo la cruz que Mi Hijo les entrega, por amor a la humanidad y al planeta.

Y desde ahora, hijos Míos, su Madre Celeste ya sabe, todo los que ustedes harán para poder recibirme el próximo 13 de octubre, porque ustedes ya aprendieron a servir y a donarse.

Quiero que, a los pies de Mi Altar que elevarán en ofrenda a Mi Inmaculado Corazón, no solo estén las flores que siempre Me colocan a los pies, sino que sus vidas, en estos próximos días y en los tiempos que vendrán, sean esas bellas flores de la conversión, del perdón, del amor y de la redención, que Yo podré recoger con Mis propias Manos para entregárselas a Dios y confirmar que el Plan de Mi Hijo en este mundo es posible.

Hoy, abrazo con Mi Manto a todos los que lo necesitan. Hoy, coloco sobre Mi Pecho a todos los que necesitan sentir el latir de Mi Corazón, para que recuerden que la Madre Consoladora y Corredentora está siempre aquí presente, en Espíritu y en Divinidad.

Alégrense, porque el fin del cautiverio llegará no solo para ustedes, sino también para el mundo entero; porque cuando Mi Hijo retorne, Él todo lo renovará y lo transformará por los méritos alcanzados en Su Pasión, Muerte y Resurrección.

Que este día, sus almas resuciten en espíritu bajo el Amor de Dios, bajo la Presencia de la Madre del Espíritu Santo y ofrézcanle a Dios lo mejor que puedan darle, por más pequeño que parezca que sea verdadero y sincero; porque es en lo pequeño y no en lo grande, en donde Dios obra, a través de las almas y de los corazones abiertos a Su Amor Consolador.

Y así, como he hecho en estos últimos días, en estas últimas semanas, en esta especial Peregrinación de reencuentro con Mis queridos hijos, volveré a ofrecerles el Sacramento de la Unción, para que la señal de la Cruz de Emmanuel los santifique, los proteja, los sane y los acompañe en esta nueva etapa de renovación y de refundación de las bases del Propósito de este Núcleo y de este punto de Luz Espiritual en esta parte del planeta.

Hijos, no le tengan miedo a la cruz, Yo estoy aquí y Soy su Madre, la Madre de toda la humanidad y del planeta. Recuerden que aquí Yo encuentro la fuerza interior en los que adoran, oran, vigilan y sirven a Dios.

No solo Mi Hijo busca un lugar donde reposar y repararse, su Madre Celeste también busca ese lugar en los corazones que sirven a la Obra de Dios en este planeta.

Coloquen a Mis Pies sus intenciones en el silencio del corazón, que Yo se las llevaré a Dios.

Oren y no dejen de hacerlo, por su protección y por la protección de sus familias. Únanse a Dios a través de la oración.

Hagamos la oferta a Dios, desde lo más profundo de Mi Corazón, en este momento.

Padre Celestial, 
que a todos conduces,
acepta nuestra oferta de entrega a Ti.
Guíanos, por el Camino del Amor,
para que Tu Voluntad sea hecha.
Amén.

Yo les agradezco por haber respondido a Mi llamado, de forma tan inmediata, porque cuando eso sucede, hijos Míos, la humanidad deja de sufrir.

Y ahora, vayamos a los pies del Altar de Cristo, ustedes como Sus compañeros y apóstoles, y ofrezcamos no solo el pan y el vino para que se conviertan en el Cuerpo y en la Sangre de Cristo, sino también ofrezcan sus corazones, para que esta renovación llegue a sus vidas y a sus familias, a través de la bendición del Espíritu Santo.

Estén en paz.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN FÁTIMA, PORTUGAL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Hijo:

Hoy, te coloco en Mis brazos para que, envuelto en la Sagrada Sábana de Cristo, tu ser se restaure a través de los poderosos Códigos del Redentor.

Deja que tu Amada y Servicial Madre Celeste te envuelva con la Sagrada Sábana de Cristo para que, al igual que Mi Hijo Jesús, cada célula y átomo de tu consciencia sean purificados, transformados y reparados por los preciosos Códigos de la Sangre Divina de Cristo.

Hoy, les traigo a ti y a cada hijo Mío, la Sagrada Sábana del Redentor, para que no solo las almas se curen de todas las agresiones de estos tiempos, sino para que también cada corazón humano crea en el poder espiritual y curador de Mi Hijo Jesús.

Hoy, te envuelvo con la Sagrada Sábana de Cristo, así como tu Humilde y Silenciosa Madre lo hizo con Su Hijo en el Sepulcro.

Quiero que cada parte de tu consciencia crea en el poder de la Resurrección, a fin de que la humanidad se redima.

Hijo, al igual que Jesús, contémplate envuelto en la Sagrada Sábana de Cristo, para que no solo tu ser se sane profundamente, sino para que toda la humanidad se cure, viviendo en sí misma los Códigos de la Sangre de Jesús.

Este es el tiempo de reparar todo el género humano; es la hora de curar, de sanar, para que el Amor de Mi Hijo se haga carne en todos, para que Su Amor Divino triunfe.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice, 

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos:

Que la profunda e inmutable Paz de Jesús esté en sus corazones.

Sé que este tiempo es el más difícil para todos Mis hijos, es el tiempo del dolor y del sufrimiento.

Yo los llamo a penetrar en el misterio del Amor de Mi Hijo en esta Semana Santa.

Les pido que, en esta próxima semana, ofrezcan todo como algo sagrado, sus actos, sus pensamientos y sus sentimientos, así como pequeñas obras de Misericordia, para que Mi Hijo tenga la autoridad de interceder por todos, ante el caos mundial.

Cada gesto que se vuelve sagrado, por más concreto que parezca, santifica la vida y la hace más próxima del Reino de Dios.

Imploro por Mis hijos para que, en esta Semana Santa, por el poder de la Sangre de Cristo, muchas más situaciones que parecen irreversibles sean aliviadas y contempladas por la Gracia Divina.

Mis hijos, deseo ardientemente que cada uno de ustedes recoja los códigos de la victoria de Jesús, esos códigos de fortaleza y de fe que harán de sus vidas espejos que reflejarán la Voluntad del Padre.

En este duro desierto que atraviesa la humanidad, Yo los llamo a buscar la paz dentro de sí mismos y a no esperar resultados externos.

Sepan que, día y noche, estoy en oración con ustedes y por ustedes.

Cristo me confío sus vidas a los pies de la Cruz y hoy nuevamente estoy aquí.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Aprendiendo a cargar con su propia cruz de estos tiempos, los invito, en nombre de Mi Hijo, a acompañarlo con la memoria de Su dolorosa Pasión, para que la Sangre derramada por Cristo vuelva a tener el valor y la veneración que merece de parte de todos Mis hijos en el mundo.

Así, los ángeles del Señor traerán, entre sus serviciales manos, los cálices sagrados de la reparación para que su Luz sea derramada sobre la consciencia espiritual de este mundo, a fin de que el sufrimiento sea aliviado y disipado de los corazones que padecen las consecuencias de estos tiempos.

Yo los invito a perseverar en la fe y en la confianza. Los invito a ingresar conscientemente en las filas de los últimos apóstoles de Cristo, los que se dispondrán a servirlo incondicionalmente y prepararán Su Retorno en las almas que aguardan Su llegada.

Queridos hijos, sean testigos de este momento y no lo desaprovechen. El mundo está en su transición final y el amor deberá triunfar en ustedes y en cada rincón de esta sufrida humanidad.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado! 

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

 

 

MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Hijo Mío:

Deja que las señales de Luz de la Pasión de Mi Hijo te puedan curar.

Deja que la Sangre que brota de Su Corazón incansable, te lave completamente y que tu espíritu pueda ser confortado.

Deja que la Luz que brota de Su Corazón Eucarístico, alimente tu alma con nuevos dones, para que estos estén al servicio del Señor.

Deja que la victoria espiritual de la Cruz de Mi Hijo te libere de toda adversidad, para que puedas reencontrar la fortaleza y seguir adelante.

Deja que la sabiduría que brota de Sus humildes Palabras, te haga reconocer el Amor de Dios en cada momento.

Vacía tu corazón de ti mismo y entrégate con confianza a los misterios insondables de la Pasión de Mi Hijo. Así comprenderás la vida como un verdadero sentido de propósito y de misión.

Deja que la paz, que nace del Corazón de Mi Hijo, inunde tu interior para que aprendas a ser un embajador de Su Paz y de Su Palabra en el mundo.

Solo deja que cada uno de los misterios de Mi Hijo te puedan completar para que, en el desprendimiento de ti, alcances las metas que Cristo coloca en tu vida.

Reconoce cada momento como una grandiosa oportunidad de donarte y de servir, para que el Proyecto del Redentor se cumpla en ti y en el mundo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Deja que tus miserias sean transformadas en Misericordia.

Deja que el poder espiritual de la Sangre de Mi Hijo vaya removiendo las impurezas de tu consciencia a fin de que la Luz Divina de Su Sagrado Corazón encuentre espacios profundos para poder ingresar y transformarlos.

Las miserias son residuos acumulados de los pecados, de los errores, de la indiferencia.

Permite que la Gracia redentora del Agua de Cristo te lave y te purifique, porque para que algo nuevo pueda entrar, algo viejo debe salir.

Estás en ese momento, a las puertas de la rendición de tu ser y de tu consciencia.

Deja que el impulso transformador y misericordioso de Mi Hijo redima tu ser y haga de ti un vaso nuevo.

Deja que la infinita Misericordia te consagre definitivamente y te convierta en la aspiración que tiene Dios para tu ser.

Estoy a tu lado para acompañarte. Este es el gran momento para que eso suceda. 

Tu fe tiene que ser inquebrantable.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Desde Su crucifixión y por la eternidad, del Corazón de Cristo brotan Sangre y Agua, goteando poco a poco sobre el mundo y sobre la Creación. Siempre que oran a Su Divina Misericordia, siempre que viven bajo esa Ley, siendo misericordiosos, esas gotas de Sangre y Agua tocan a las almas, lavan sus ojos para que puedan ver un nuevo camino y lavan su corazón para que puedan ser dignos de caminar sobre él.

En estos tiempos, hijos, necesitan aprender a contemplar y a amar las señales de su salvación, como lo son la Sangre y el Agua que brotan del Corazón de Cristo.

Para mantenerse con el corazón en equilibrio, creciendo en la vida espiritual con fundamentos verdaderos, no basta vivir de los propios esfuerzos y conocimientos o de toda la Gracia recibida, también necesitan experimentar la rendición y el amor que la contemplación del sacrificio de Cristo los conduce a vivir.

Hay un poder único en la Sangre de Cristo: el poder de restaurar, curar y redimir lo que es imposible. La Sangre de Cristo es la base de toda redención, es el sentido de la espiritualidad en este mundo, es el secreto para la santidad, la puerta para la rendición, la revelación de los misterios de Amor más profundos de toda la Creación.  Y, para profundizar en este misterio, basta que clamen sinceramente por Misericordia, que contemplen espiritualmente la Cruz de Cristo, siempre alzada a los niveles internos de la consciencia humana y, reviviendo Su Pasión repetidas veces, reencuentren el sentido de sus vidas.

Contemplando la Sangre de Cristo encontrarán los Dones de Su Espíritu, la unidad de un Dios Trino que Se entrega por Amor a cada instante; revivirán la humildad de saberse pequeños ante un Amor inmenso y, al mismo tiempo, la Gracia de saberse llamados a imitarlo.

Oren por la Misericordia y vivan las bases de toda espiritualidad verdadera. En la Sangre de Cristo está la base de toda la vida religiosa. Oren unos por los otros, contemplando la Sangre de Cristo y, sobre todo, ríndanse a los pies de Su Cruz y comprenderán lo que les digo.

Tienen Mi bendición para esto.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Aprende a contemplar y a adorar la Sangre de Cristo, sabiendo que cada gota derramada por el Señor representa Su ilimitado Amor por cada ser y por la propia vida.

Pon tus ojos sobre el Cristo del Calvario y sabe que Su Amor, aun sin la Cruz, ya superó y renovó toda la Creación, pero Su oferta fue más allá y, derramando Sangre y Agua, perpetuó la Gracia de la salvación y de la redención para todos los seres de la Tierra y más allá de ella.

Que tus ojos puestos sobre la Sangre derramada de Cristo te concedan la comprensión y la experiencia de lo que es la rendición y la entrega, de lo que es dar todo por amor.

El Agua que fue derramada por Cristo representó la ilimitada Misericordia que, además de verter toda Su Sangre, vertió también Agua para dar todo de Sí, en la materia y en el espíritu. 

Juntos, Sangre y Agua representan el misterio de un Amor aún incomprendido por los hombres; Amor al que son llamados a renovar y a superar para que todo se recree y la evolución encuentre un nuevo comienzo, una vida mayor de unión con el Padre Creador.

Comienza, entonces, contemplando en tu corazón la Sangre de Cristo y el Agua que fue vertida de Su Cuerpo, para que así penetres en Sus Misterios y ellos te inspiren y conduzcan a una imitación más verdadera del Amor de Cristo.

Tienes Mi bendición para esto.

San José Castísimo

Mensaje extraordinario
MENSAJE ESPECIAL PARA LA 83.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA, RECIBIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, TRANSMITIDO POR CRISTO JESÚS GLORIFICADO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

El Sagrario de Mi Corazón desea estar presente en todos los Centros Marianos y Monasterios de esta Orden.

En el Sagrario Me podrán encontrar, así como en la Adoración al Santísimo. 

Mi Presencia en el Sagrario es eterna, y es allí en donde las almas deben buscarme y reconocerme para poder sentirme en su interior.

La Luz de Mi Sagrario no es reconocida por muchas almas en el mundo. 

En el Tabernáculo de Mi Corazón, tengo un espacio preparado para cada alma: un propósito.

Antes de partir y dejar el mundo, deseo que cumplan este pedido, porque no es solo por su religiosidad, sino también por las almas del mundo que, en este momento, necesitan descubrir el misterio que guarda el Sagrario de Mi Corazón.

En esta Ermita, que ha sido erguida en Mi Nombre, también deseo ver un Sagrario; así como en todas las casas religiosas de su Orden y en los Centros Marianos, porque el Sagrario de Mi Corazón es la señal visible del ecumenismo y de la paz entre las religiones.

Ante el Sagrario de Mi Corazón, podrán recogerse en los momentos más difíciles, así como en el Santísimo Sacramento. 

El Santísimo y el Sagrario de Mi Corazón son el mayor legado que he dejado para la humanidad a lo largo de los tiempos. 

Muchas almas buenas se han convertido ante el Sagrario de Mi Corazón, y Yo Me he comunicado con ellas a lo largo de los tiempos, en presencia del Sagrario de Mi Espíritu y de Mi Divinidad.

En el Sagrario de Mi Corazón, las almas se podrán consagrar, aunque no vivan una vida religiosa, porque quien se consagra es el alma de ustedes. Esa debe ser la aspiración de sus vidas dentro del universo de la consagración.

Muchas situaciones difíciles, que vive el mundo, podrían estar resueltas si las almas veneraran el Sagrario de Mi Corazón, en donde Yo también los podré sacramentar con Mi Espíritu y con Mi Paz.

Hoy les revelo, a través de Mi Pecho, el Sagrario de Mi Corazón, la Luz de la Gracia que desciende al mundo por los méritos de la Pasión de Su Señor y Redentor.

En el Sagrario de Mi Corazón está la síntesis de Mi experiencia y de Mi vida en la Tierra, desde que nací hasta que ascendí a los Cielos.

Sé que las almas, a veces, no colocan su atención en el significado del Sagrario de Mi Corazón; pues hoy se los revelo y se los comparto, porque en los Centros Marianos y en sus casas religiosas será en donde podrán encontrarme.

El Sagrario de Mi Corazón es un puente hacia los Cielos, hacia el Universo, hacia la Vida Mayor. 

En el Sagrario de Mi Corazón no vivirán la adversidad ni tampoco la perturbación.

Ante el Sagrario de Mi Corazón sus ideas quedarán claras y tendrán discernimiento por el impulso de Mi Gracia y de Mi Sabiduría.

Yo necesito que el mundo comprenda el significado del Sagrario de Mi Corazón, porque aún las almas no saben lo que guardo dentro de él. Allí no solo está Mi Cuerpo y Mi Sangre, sino también está la vida espiritual de Su Señor, que es una vida omnipresente y eterna. 

Juan, el Apóstol, conoció el Sagrario de Mi Corazón en la Cruz. Mi Madre permitió que él lo supiera en el momento más culminante de Mi agonía, cuando en las entrañas más profundas de Mi Ser estaba la soledad y el abandono de los hombres. 

En la mayor oscuridad y sufrimiento en la Cruz, emergió el Sagrario de Mi Corazón como una forma espiritual y divina. Y eso irguió de los abismos a las almas caídas y muchas almas alcanzaron la victoria de la redención por el precio de Mi Sangre. Aunque eso sucedió hace más de dos mil años, aún está vivo.

El Sagrario de Mi Corazón hoy está aquí para que sea venerado y adorado por las almas buenas y humildes. 

En el Sagrario de Mi Corazón podrán encontrar la humildad y la entrega que necesitan para vivir y atravesar estos tiempos tan desconocidos e impredecibles.

Alrededor del Sagrario de Mi Corazón, que podrá estar presente en los Centros Marianos y en sus casas religiosas, así como está presente en las iglesias del mundo, es en donde los ángeles contemplan a Dios en Su segunda persona, el Hijo, el que dona a las almas y a los corazones la filiación con el Padre Eterno, la reconciliación y el perdón.

Quien tenga fe y Me adore en el Sagrario de Mi Corazón se curará espiritualmente y las enfermedades del cuerpo desaparecerán de forma inexplicable. 

Hay almas en el mundo que vinieron a servirme a través de su sufrimiento. El alma de las personas tiene miedo de vivir esa experiencia porque es algo semejante a lo que Yo viví, desde el Huerto Getsemaní hasta la muerte en la Cruz. 

No descansaré hasta que aprendan a superarme en el amor y en el servicio.

Antes de cerrar Mi ciclo con ustedes, les dejo el mayor legado del universo espiritual, que es el Sagrario de Mi Corazón, para que la Santa Eucaristía no solo sea adorada, sino también reconocida y amada por los hombres.

El Sagrario de Mi Corazón es el refugio para sus penas, el alivio de sus agonías, la cura de sus heridas, el amor para sus consciencias, la sabiduría en sus confusiones, la claridad en sus caminos, la entrega eterna de sus almas.

En el Sagrario de Mi Corazón está toda Mi vida y Mi existencia.

El Sagrario de Mi Corazón está lleno de Misericordia para las almas.

Mi Ser está lleno de Luz para los corazones, pero muchos no la aceptan.

Que esta última Maratón que vivirán Conmigo no solo sea una síntesis, sino una oportunidad de recordar lo que vivieron Conmigo durante estos años, desde los sagrados pinos de Aurora, pasando por todas las ciudades que visitó la Peregrinación por la Paz.

En cada momento, este misterio del Sagrario de Mi Corazón estuvo presente, acompañándolos y sirviendo a las almas más necesitadas, especialmente aquellas que, aparentemente, no lo necesitaban.

Ante el Sagrario de Mi Corazón, ustedes son cristalinos. Todo lo puedo ver y reconocer, no existen límites ni apariencias.

Ante el Sagrario de Mi Corazón, sus almas los pueden gobernar y aprender a hacerlo en estos tiempos críticos.

Ante el Sagrario de Mi Corazón, ustedes no olvidarán el compromiso en los momentos de mayor prueba, porque Yo mismo Les haré recordar que vinieron a servirme y lo que vinieron a ofrecerme.

Es a través del Sagrario de Mi Corazón que dejaré a Mis representantes en la Tierra, todos los adoradores y los que veneran Mi Sagrado Cuerpo en la Eucaristía. 

A través del Sagrario de Mi Corazón, encontrarán el Reino Celestial y se fortalecerán en la paz, para los momentos de mayor tribulación.

Ahora, deseo tener dentro del Sagrario de Mi Corazón sus experiencias de amor y de perdón, porque eso hará recrear a la Creación en esta escuela del Amor Divino y a la expansión de la consciencia por medio del impulso que trae el Amor de Dios al mundo. 

Lo último que quiero decirles, compañeros, es que den valor a todo lo que han recibido de Mi Persona y de Mi Divinidad, durante estos últimos tiempos.

Que este momento de despedida de Su Maestro y Señor sea una oportunidad de asumir definitivamente su compromiso Conmigo, en el trabajo del servicio y de la oración, porque el ejercicio espiritual de la oración de la Misericordia continuará.

Ahora, ha llegado el momento de asumir y de responsabilizarse como adultos en el camino espiritual. Hasta ahora, todo fue una preparación.

No solo Me retiraré porque Mi Padre Me ha llamado para prepararme para Mi Retorno, sino porque ustedes ya aprendieron a cómo sostener Mi Plan de Amor en la humanidad.

Definitivamente, sean el Amor que Yo les he entregado en los Sacramentos y a través de cada palabra, de cada mensaje e instrucción. Así, desde los Cielos, tendré un lugar y un espacio en sus almas en donde poder espejarme y refractar la Luz de Mi Misericordia.

Les agradezco a los que se comprometieron Conmigo durante estos años de oración misericordiosa, y a los que lo seguirán haciendo, comprendiendo más allá de sí mismos, lo que esto significa para este momento del planeta y de la humanidad.

Yo solo puedo estar en lo que es simple, austero y humilde. Es a donde puedo retornar, para que las almas Me encuentren y Me vivan. 

La donación de Su Maestro es eterna e incondicional, así deben ser sus vidas y consciencias, porque hoy no comprenderán lo que esto significa, pero mañana lo sabrán. Es una promesa. 

Que sus vidas, experiencias y oraciones sigan siendo escritas en los Libros de la Sabiduría de Dios, para que la humanidad aún tenga la chance de redimirse. Que así sea. 

Oremos en esta Maratón como si fuera la primera vez, sabiendo que Yo estaré atento a cada uno de ustedes y esperando que Me respondan de la misma forma que cuando los llamé por primera vez para este ejercicio espiritual, sabiendo que Me serviré de este momento de oración para ayudar al planeta y a las almas, a fin de que se cumpla la salvación de los corazones. 

Que Mi Paz se refleje en ustedes. Que sean portadores de Mi Paz. Que Mi Paz se multiplique y se expanda por el mundo.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén

MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Que en este tiempo de definición sus corazones estén dirigidos todo el tiempo hacia el Corazón de Dios; así estarán diciéndole a los Cielos que aspiran a seguir recibiendo las Gracias que necesitan para que sus vidas se rediman y se santifiquen.

En la unión imprescindible que ustedes pueden tener con Mi Hijo, Su Divina Misericordia, la Sangre y el Agua de Su Corazón, justificará muchos de los errores y de las adversidades que sigue viviendo el mundo por alejarse cada vez más de Dios para satisfacer sus placeres humanos.

Este es el último tiempo en el que el Padre Celestial estará atento a las oraciones y a las súplicas de Sus hijos. Será el tiempo en el que la humanidad, antes de lo que llegará, podrá colocar la cabeza en el suelo para pedir perdón y vivir un verdadero arrepentimiento.

Yo los invito, Mis hijos, a tener eso presente. Ahora, las oportunidades son únicas y no se repetirán, porque ya son las últimas.

Estará siendo concedida una última Gracia al mundo para que muchas almas abandonen el caos en el cual viven e ingresen en el universo de la paz.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Hijo:

Haz de las humillaciones una oportunidad para que tu consciencia comprenda lo que verdaderamente tiene sentido y valor en la vida.

No estás en la Tierra para ser honrado, elevado o glorificado por los ojos de los hombres; sino estás en la Tierra para vivir un amor que transciende el entendimiento y los sentidos, que trasciende las lógicas y los límites, que trasciende todo amor alcanzado en el mundo y más allá de él.

Por eso, cuando seas humillado, deja que se quiebre en ti toda necesidad de reconocimiento, de gloria, de retribuciones humanas por tus esfuerzos, por tu amor. Permite que tu corazón se coloque en lo que es real, en lo que es eterno, en el Amor de Dios que no se basa en los merecimientos humanos, y permanece allí, en la experiencia de la humildad que cada situación de la vida te conduce a vivir.

Con tu ejemplo, da a conocer al mundo el Amor de Dios. Sigue los pasos de tu Señor que, como respuesta a la flagelación y a la Cruz, vertió Sangre y Agua, perdón, redención y Misericordia para todos los seres, sin distinción. Ese es tu eterno ejemplo, no quieras otro.

No quieras estar elevado como los santos a los ojos de los hombres, porque lo que hace a la santidad de los seres no es la opinión de los hombres, pero sí el sacrificio, el amor y la unidad con Dios, muchas veces vivida en el anonimato, en la ignorancia del mundo. 

Por eso, toma tu cruz, abraza esa cruz con amor, ora y pide la Gracia de saber imitar a tu Señor cada día. Y, cuando seas humillado, no mires hacia los tronos del mundo, alcanzados con las glorias humanas. Mira hacia el Trono del Cielo, en el cual está sentado Aquel que fue ultrajado, incomprendido, humillado, flagelado y muerto en la Cruz, pero que Se elevó, no por lo que recibió de los seres, sino por el Amor insondable que emergió de Su propio Corazón. 

Cristo retornó al Padre, no por lo que recibió del mundo, sino por lo que supo dar, porque dio todo, todo de Sí, por amor. Este es tu Camino, tu Verdad y tu Vida. 

Tienes Mi bendición para esto.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Poemas al Inmaculado Corazón de María

Vigesimosegundo poema

Poderosa e invencible Señora,
pisa con Tus pies 
lo que causa dolor y oscuridad.

A través de los poderosos Rayos
que emana Tu purísimo Corazón,
libéranos de la perdición.

Rompe las cadenas de la ilusión
de nuestras consciencias.

Corta con Tu Espada de Luz los lazos con el mal, 
para que, por el poder de la Sangre de Cristo,
que fue derramada sobre la superficie de la Tierra,
las almas consigan volver a levantarse
 y así, encuentren las Huellas de Cristo.

Poderosa Madre del Mundo,
Espejo Celestial de Luz y de Sabiduría,
condúcenos hacia el gran portal de nuestra libertad, 
para que podamos redimirnos
conforme lo indica la Palabra Sagrada.

Queremos y aspiramos 
a ser apóstoles de Cristo,
parte fundamental de Su Cuerpo Místico;
así sabremos y conseguiremos representar, en este mundo,
la Obra de la Redención y de la Divina Misericordia;
sabremos sostener, con responsabilidad y adhesión,
el gran Proyecto de Cristo en el planeta.

Madre de la Luz,
haznos conscientes de cada paso 
que demos hacia Tu amado Hijo.

Madre,
haznos merecedores 
del Amor de Dios por el mundo.

Amén.

 

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Mientras caminaba con la Cruz, en el Corazón de Cristo, además de sufrimiento y dolor, había paz y compasión.

Ese era un ejercicio constante de Su Espíritu Divino en un cuerpo humano, trascender a cada segundo las dimensiones del caos, de la ignorancia, de la maldad, en las que los seres que lo rodeaban estaban absorbidos por la oscuridad, e ingresar en las dimensiones de paz, de compasión, de sabiduría, de Verdad, en donde Sus Ojos podían ver cada acontecimiento como era y no como parecía ser.

Los Ojos del Cristo del Calvario contemplaban el mundo y veían una realidad más compleja, más profunda; miraban la maldad de los seres y veían esencias presas del yugo de esa maldad; conocían al espíritu del mal que conducía cada acción de los que lo maltrataban y sabían que la forma de liberar esas esencias era el Amor, el Amor no solo de la Cruz, sino el Amor de toda la eternidad; el Amor que comenzaría a nacer con Su ejemplo, como una naciente que surgiría de la última gota de Sangre que se derramaría de Su Cuerpo, pero que se tornaría afluente a través de las almas que, a lo largo de los siglos, responderían a Su Llamado e imitarían Su ejemplo, renovando y multiplicando ese Amor.

En cada obstáculo de la vida, hijo, que tus ojos sean los Ojos del Cristo del Calvario, contemplando la Verdad y no la ilusión, colocados en las dimensiones de paz y no de odio, sabiendo que la cura proviene del Amor vivo, en el ejemplo de cada segundo de la vida.

Así es como cumplirás el Plan de tu Padre Celestial y serás uno con Él en todos los tiempos.

Tienes Mi bendición para esto.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Quédate a los pies de la Cruz del Redentor, para que comprendas en dónde comenzó a ser sellada la Alianza entre tu corazón y el Corazón de Cristo.

Quédate a los pies de la Cruz del Redentor, para que allí recuerdes Su llamado y sepas porqué hoy Él te vuelve a llamar en lo profundo de tu corazón.

Quédate a los pies de la Cruz del Redentor, en donde no hay honra, sino aquella escondida en Su Sangre; en donde no hay gloria, sino aquella que se guarda en el misterio de Su Sacrificio.

Y es así, hijo Mío, que a los pies de la Cruz comenzarás a comprender la Voluntad de Dios para ti. Él te quiere allí, siempre en adoración a Su Corazón, siempre unido a Su Sacrificio e imitando Sus pasos.

Él te quiere allí, en donde tú desapareces y Él resplandece, en donde la gloria del mundo se desvanece y da espacio a la Gloria de Dios; en donde las ansias por la honra se disuelven en la única necesidad de justificar Su Sangre con la renovación del amor en tu propia vida. 

Quédate a los pies de la Cruz del Redentor, y todas tus preguntas serán respondidas. Sabrás que el miedo de la cruz es en verdad el miedo de entregarte con locura, de perder este mundo para ganar el Infinito, de dejar de ser uno para ser Todo.

Quédate a los pies de la Cruz del Redentor, porque ya llegó el tiempo de retomar, con plenitud, lo que Él comenzó en el Calvario.

Tienes Mi bendición para esto.

San José Castísimo 

MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Dios bajó del Cielo y se hizo hombre entre los hombres para ser crucificado, humillado y agredido por aquellos que recibieron Sus milagros y bendiciones.

Dios derramó cada gota de Su Sangre, a través de Su Hijo, y esa misma Sangre redimió y redime, hasta los días de hoy, a todos los que la invocan para ser purificados.

Dios derramó Su Agua, a través de Su Hijo, para que la humanidad fuese nuevamente bendecida por el Santo Espíritu Consolador, y luego Su Espíritu descendió en Pentecostés.

Solo un Amor tan grande, paciente, humilde y misericordioso podría haber hecho lo que hizo y, en este tiempo, lo vuelve a hacer porque Dios ama a Sus hijos a través de Cristo. 

Por eso, en estos días, el Crucificado vuelve a padecer y a sufrir, esta vez a través del sacrificio de Su Espíritu por la humanidad, para que las almas reencuentren el camino de retorno al Padre Celestial.

Y mediante ese camino que Cristo ofrece, por medio de los Sacramentos, que los corazones recapaciten y vean que sin fraternidad y sin solidaridad será imposible seguir adelante con este amado Proyecto de la Creación que es la raza humana.

La consciencia y la fe de los que creen en Cristo los harán vivir ese cambio, y las puertas de la Gracia se mantendrán abiertas para que se cumpla lo que está escrito y previsto.

Por eso, hijos, permitan que la Pasión de Cristo los haga comprender la pasión que hoy vive el planeta y así, la mayoría consiga traer el alivio por el que clama toda la Tierra.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice, 

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Estoy junto a los ángeles y arcángeles, a los pies de la Cruz de Cristo, recogiendo toda la Sangre y el Agua derramadas para la redención de la humanidad y de toda la Creación.

El manantial de la Misericordia fluye hacia todas las almas, inagotable e insondable, misterio que no tiene fin, guardado en la Sangre y en el Agua de Cristo.

Esta Sangre ya se derrama sobre el mundo, sobre la sangre y la vida de todas las criaturas, convirtiendo su genética y su corazón a semejanza de Cristo.

La Sangre de Cristo ya se derrama sobre el mundo y sobre todos los seres, no solo para redimir, sino también para transformar y restaurar la vida.

Finalmente, la humanidad conocerá el Pensamiento de Dios y vivirá, en su interior, lo que es sentir y experimentar a Cristo Vivo.

La Sangre de Cristo desciende sobre la Tierra, transformando toda sangre y toda vida. Su Pasión se tornó Eucaristía viva para todo el planeta, y Su entrega ya no redime solo a las Tribus de Israel, sino también a todas las criaturas, a toda vida, a toda esencia.

El sacrificio de Cristo se hace comunión espiritual y celular y, como un milagro divino y una Gracia espiritual, las almas son tocadas y transubstanciadas por la Sangre de Cristo, así como el trigo y la uva en el altar.

La humanidad será el Altar de Cristo en este tiempo del planeta, y todo aquel que ore en nombre de Su dolorosa Pasión será Eucaristía viva en unidad con Cristo.

Este es el don del sacerdocio extendido sobre la Tierra.

Este es el milagro de la Gracia y de la Misericordia Divina que toca a toda criatura.

Mediten en Su Pasión y rediman sus corazones. Vivan la unidad con Cristo.

Tienen Mi bendición para esto.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Permite que tu alma sea arrebatada por el Amor de Cristo. No temas, no te resistas. Entrégale a Él tu vergüenza, tus miedos, tus aspiraciones más profundas, tus metas y todo lo que eres, entre miserias, destrezas y virtudes.

Está llegando la hora de ser lavado por la Sangre de Cristo, de ser permeado por Su Amor y renovado por Su entrega y, más que estar delante de la memoria de Su Pasión, estar delante de Su propia entrega, de Su Amor y de Su Cruz. 

Por esto, hijo, ha llegado el tiempo de la definición, de la madurez en Cristo, para profundizar en tu consagración y no tener miedo de crecer en Él y por Él.

Deja que seas barro nuevo en las Manos del Alfarero, porque Él conoce el Propósito de Dios para tu vida y puede moldear tu consciencia según la Voluntad Divina.

Ora y pronuncia con amor los Poemas* que el Señor te entregó, porque a través de ellos, Él te enseña el sentido espiritual de la rendición y de la humildad. Así, un alma rendida se comunica con Cristo.

No temas vivir la experiencia de la entrega. Y en lo que resta de esta Cuaresma y de este desierto profundo, comienza a caminar, en tu corazón, con pasos decididos hacia Jerusalén, confirmando y reconfirmando, cada día, tu entrega a Cristo.

Tienes Mi bendición para esto.

San José Castísimo

 

*San José hace referencia a los Poemas de un alma al Sagrado y Bendito Corazón de Jesús, transmitidos por Cristo Jesús en los meses de julio y agosto de 2018.

Páginas

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

SEA VOLUNTARIO

Contacto