MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CUMBRE, CÓRDOBA, ARGENTINA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Después de la venida de Mi Amadísimo Hijo a Argentina, como Madre de todos y Señora de Luján, vengo a bendecirlos por última vez.

Seguiré orando por ustedes, Mis hijos de Argentina; para que, a pesar de este traumático escenario social del país, sus corazones se reconforten con el Amor que Mi Materno Corazón les ofrece en este momento.

Mis amados hijos de Argentina, deseo que todos los impulsos que recibieron en estos últimos días los lleven en sus corazones, como parte del gesto misericordioso y compasivo de Dios por una Argentina que ya debe prepararse para el Retorno de Cristo.

Mientras tanto, Yo los animo, Mis hijos, a realizar obras de caridad y de bien, y a pensar que cada momento de servicio a los que sufren, lo estarán haciendo como un acto verdadero de reparación, a fin de que de la Argentina sea erradicada la violencia y el maltrato entre los miembros de la familia humana y para que retorne a la Argentina la esperanza, la fortaleza y la fe que ya se disolvió en muchos corazones.

Mis hijos, su Madre y Señora de Luján les pide que sean precursores de la esperanza y de la alegría que les da el Evangelio, porque así más corazones necesitados de Argentina tendrán la Gracia de volver a renacer en el amor y en el bien.

Les agradezco a Mis hijos de Argentina por haber acompañado cada uno de los pasos de Nuestros Sagrados Corazones.

¡Adelante, Mis hijos de Argentina!

Les agradece y los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz y Señora de Luján

 

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES, ARGENTINA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos de Argentina:

Heme aquí, Soy su Madre Celestial, la Madre de Luján, la Virgen Santa del Rosario de San Nicolás.

Vengan a Mí, Mis amados y heridos hijos de Argentina. Yo estoy aquí y He regresado para consolarlos, para decirles que, como su Madre, He acompañado cada momento de sus vidas, como también cada situación del país.

Hijos, tómense de Mi Mano, los quiero llevar a Jesús, en este nuevo encuentro con Su Insondable Corazón Misericordioso.

Hijos, ábranme sus brazos. Quiero tomarlos fuerte, quiero que puedan volver a sentir el calor maternal de Mi Corazón.

Mis hijos, ya no se indignen. Que el aborrecimiento se convierta en esperanza, que la injusticia que sus ojos puedan ver se convierta en compasión.

Mis hijos, no hay otra salida que volverse hacia Dios y confiar, porque en esta herida y maltratada superficie del planeta no encontrarán perfección ni transparencia.

Queridos hijos, no se permitan sucumbir, eleven sus voces hacia Mi Amado Hijo para que Él, lleno de Misericordia, los guíe y los conduzca hacia el Reino de Su Paz y Quietud.

He venido a recordarles que los amo.

He venido a pedirles que recen de verdad, porque su pueblo necesita muchas oraciones, ya que el discernimiento y la transparencia han desaparecido.

Estoy aquí para apoyarlos en este decisivo y tenso momento de su nación, que necesita, a través de la fe y de la confianza en el Padre, poder recuperar los principios originales de su propósito.

No se olviden, Mis hijos, de todas las Sagradas Reliquias que guarda la Argentina en lo más profundo del interior del planeta.

Vuélvanse hacia lo que es verdadero y esencial, y aquí retornará la paz.

Como Madre de la Misericordia, les doy Mi Paz, que es la eterna e inmutable Paz de Cristo.

Les agradezco a todos los que hicieron posible este nuevo y esperado reencuentro con Mi Amado Hijo. Él también les agradece.

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos:

Hoy Mi mirada de Madre se vuelve hacia la Argentina, momento en el cual todos Mis hijos argentinos enfrentan su propio calvario individual y grupal.

Como la Señora de Luján, hoy vengo para decirles a Mis hijos de Argentina que no permitan que la fe se apague en los corazones.

Yo cargo junto a ustedes la pesada cruz de la desigualdad y de la injusticia.

Camino a su lado, como pueblo trabajador e incansable que, una y otra vez, se levanta del suelo para poder seguir caminando.

Rezo por todas las familias de Argentina que perdieron a sus seres queridos en este tiempo de pandemia y de profundo dolor.

Queridos hijos, que su ejemplo de persistencia en la oración se vuelva como un gran espejo que pueda reflejar, para todos sus hermanos, los atributos que las almas necesitarán en este tiempo para enfrentar este temido y desconocido combate.

A través de la apertura de la ley del aborto, Argentina comprometió sus caminos. Como Madre de la vida y de los inocentes, les pido que se arrepientan por los que no se arrepienten. Esto no es por religión, sino por discernimiento y sabiduría.

Hijos Míos, rezo, día y noche, junto a ustedes; en sus hogares y familias. 

Soy la Madre que nunca los abandonará, porque este es el tiempo de la purificación.

Que su fe en Cristo nunca se acabe. Ahora, llegó el momento de que cada uno tome su propia cruz y lo siga.

Esta es la hora en la que Mi Hijo sabrá con quien contará verdaderamente hasta el final.

Mis amados hijos de Argentina, Mi Paz con ustedes y con todo su país. 

Estoy aquí y los escucho. Este es el ciclo del gran final. Prepárense.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz 

 

 

MENSAJE DIARIO DE MARÍA ROSA DE LA PAZ Y SEÑORA DE LUJÁN, TRANSMITIDO EN EL BALNEARIO EL CÓNDOR, RÍO NEGRO, ARGENTINA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos:

Hoy nos volvemos a encontrar en esta Peregrinación por la Paz para unirnos y elevar nuestras oraciones a Dios, a fin de que se puedan derramar muchas más gracias sobre la Argentina.

Ayer les revelé Mi apelo por el Brasil, hoy les pido también por la Argentina, para que su patria preserve los valores de la cristiandad, más allá de los dirigentes de la Iglesia y de sus cometidos.

Les pido que coloquen su confianza en Dios para que, guiados por esa Sagrada Unidad que ustedes deberán aprender a vivir, se establezca dentro de cada alma la presencia del Reino de Dios.

Con la presencia de Dios en ustedes por medio de sus oraciones, hijos, permitirán que la Argentina también sea guiada por una verdadera justicia, igualdad y solidaridad, atributos tan necesarios para mantener el orden y la armonía en toda la nación argentina.

Pero, hijos Míos, de ustedes deberá nacer el interés y el impulso interior para que, mediante el servicio, la oración y la unidad, también se mantenga el patronato de la Señora de Luján, patronato que algunos quieren desterrar de la consciencia de los argentinos.

Para eso, hijos, en este ciclo en que son llamados para asumir conscientemente una vida de oración verdadera por la Argentina, les pido que en sus casas y en sus grupos de oración establezcan la sagrada imagen de la Señora de Luján para que no solo sus hogares estén protegidos y amparados por Mí, sino también que en las familias argentinas se proteja la devoción a la Madre de Dios.

De esa forma, hijos, con Mi Presencia en sus hogares y en sus familias, como su Madre, Yo podré interceder ante situaciones de grandes injusticias sociales en toda su nación.

Deseo, hijos, que ese amor que existe y que está guardado en cada corazón argentino ustedes puedan ofrecérselo, en bien y en solidaridad, a la Madre de Luján para que en la Argentina nunca falte la divina gracia y el sagrado discernimiento.

Su país y su gobierno deberán seguir bajo el amparo de la Virgen de Luján.

No permitan, hijos, que destierren a la Madre y Patrona de su nación.

Únanse a Mí en oración y el amor vencerá, así como él venció en la Cruz.

Estoy al lado de cada hijo Mío de la Argentina, a la espera de que despierte en sus consciencias la importancia de mantener el Reino de Dios en todo este pueblo.

Les agradezco, hijos Míos, por todo lo que sucedió en esta Peregrinación por la Paz, porque el espíritu de su patria se está sosteniendo por la consciencia de todos los orantes de la Argentina, eso permite evitar algunos acontecimientos en su nación.

No olviden, hijos amados, de llevar adelante la consagración de la Argentina a Mi Materno e Inmaculado Corazón todos los días 13, durante seis meses, porque en esa alianza entre sus almas y Dios, entre el Cielo y la Tierra, mantendremos el país en el mayor orden posible, a pesar de todo lo que suceda.

Con un infinito amor, hijos Míos, les agradezco a todos por haber concretado esta Peregrinación, les doy las gracias, porque eso es importante para Mí.

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Señora de Luján

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN BAHÍA LÓPEZ, BARILOCHE, RÍO NEGRO, ARGENTINA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

A 101 años de la última Aparición en Fátima, su Madre Celeste regresa a la Argentina para bendecirla y para recordarle la importancia de volver a buscar su pureza original, a fin de que en las almas de este hermoso país esté presente el espíritu divino de la Gracia de Dios, el que tornará digna en el Señor a toda esta nación.

Hoy su Madre Celeste recuerda la última Aparición sucedida en Fátima el 13 de octubre de 1917, lugar que fue testigo físico del inconmensurable Amor de Dios y del descenso del poder del Universo Celestial a través del Milagro del Sol.

En la Argentina deberá restablecerse el sagrado sentimiento de devoción a la Señora de Luján, a fin de que, como país y como pueblo, cuenten con la protección espiritual necesaria para los tiempos de definición.

De manera especial, y con amor materno, la Madre de Dios hoy une dos lugares en un mismo tiempo y en un mismo plano, para que especialmente la Argentina reciba el potentísimo caudal de la Pureza de Dios.

Fátima y Bariloche hoy se unen en esencia y en espíritu a través de Mi Inmaculado Corazón, para que en Mis hijos de Argentina surja la confianza absoluta en poder cumplir el destino prometedor de su país y de su pueblo.

Para que eso sea posible, durante los próximos seis meses, en cada hogar, en cada ciudad y dentro de cada ser, Argentina deberá reconsagrarse a Mi Materno e Inmaculado Corazón, a fin de que la gran Abogada del Cielo pueda interceder por un país con desigualdad e injusticia, para que aquí se establezca el espíritu de la transparencia y de la verdad, atributos que harán de Argentina una patria celestial.

Por esa razón, durante los próximos seis meses, en los días 13, cada corazón orante de Argentina ofrecerá uno de los misterios del Santo Rosario con el fin de que se establezca la paz en cada corazón humano, así como en cada alma del país, trayendo del Cielo a la Tierra los atributos de la verdad, la justicia, el amor y la hermandad para que Argentina pueda seguir la sagrada aspiración de Dios de ser un pueblo bendecido por el Espíritu Santo y pueda cumplir con la Voluntad Divina del Padre Celestial.

Si cada alma orante de Argentina asumiera de verdad este ejercicio de reconsagración de la nación al Inmaculado Corazón de la Virgen de Luján, la Madre del Altísimo tendrá el permiso y la autoridad para proteger el país de grandes e inesperados desequilibrios naturales.

Aún más, si esta reconsagración fuera ofrecida al Corazón Materno de María por los próximos años que vendrán, muchas familias de Argentina serán contempladas por la Misericordia expiatoria de Dios y cientos de mujeres del país serán perdonadas por haber abortado, alterando esas pequeñas vidas.

Por esa razón, vengo a pedirles a Mis hijos de Argentina que retomen el sentido de su pureza original para que, a tiempo, la fe del pueblo argentino sea su testimonio de aceptación de la segunda venida de Cristo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice con todo el amor del Sagrado Santuario de Fátima,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Señora de Luján

MENSAJE PARA LA APARICIÓN ANUAL DE SANTA MARÍA DE AURORA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

En gloria, júbilo y celebración, hoy, los reúno en el cenáculo de Mi Corazón Inmaculado para dar honra y gracias al Dios de la Redención, Quien desde el principio los reunió para vivir el camino de la conversión y del perdón.

Demos gracias a su infinita Presencia en los corazones puros y simples que escucharon el llamado de la Reina del Cielo, de Santa María de Aurora.

Hoy se cumple el cierre de un ciclo universal en la obra de la Madre de Dios con sus hijos de la humanidad.

Hoy, los Cielos se abren para encontrar a las almas devotas y humildes que han respondido al llamado de la Paz.

Dichosos sean todos los que están presentes en este Reino Mayor de Redención y de Amor; porque el 8 de agosto de 2007, el Cielo tocó la Tierra a través de la bendición de la Madre Universal, y sus atributos fueron revelados por medio de sus Faces en el ciclo de las veintidós Apariciones de agosto de 2011.

En esta síntesis que hoy Yo les entrego, Mis queridos hijos, quiero y deseo que tengan consciencia de los acontecimientos que se guardarán mucho tiempo después que Yo no esté más aquí entre ustedes; pero no los dejaré solos, Mi Corazón Inmaculado será su fortaleza y motivo principal para llegar a Jesús, el Cristo.

Como mediadora y Madre, en el fin de los tiempos, Yo los llamo queridos hijos, a este nuevo ciclo, a reunir las fuerzas internas del corazón para que crucen el umbral infinito hacia los Cielos. Allí, podrán vivir en paz con ustedes mismos y entre sus familias, a pesar de que vivan en este mundo que sufre.

El 8 de agosto de 2007, Yo vine para establecer en el Uruguay y el Cono Sur, la devoción a la Madre de la Divina Concepción de la Trinidad; despertando una devoción más profunda en Argentina por la Madre y Señora de Luján, en Uruguay por Nuestra Madre de los Treinta y Tres, en Brasil por Nuestra Señora de Aparecida. Mi Corazón Universal tocó las puertas de los corazones de la República de Venezuela, a través de Nuestra Señora de Coromoto, para rescatar a las consciencias de los pueblos originarios de América, junto al Poder Divino de Nuestra Señora de Guadalupe.

En el mundo, Yo he instaurado la devoción a Mi Corazón Inmaculado, porque es el portal para la salvación de las almas perdidas y distantes del Dios del Amor.

Queridos hijos, que hoy su celebración interior sea profundamente devocional y mística, permitiendo que el Amor de Dios los transforme a través de Mi Presencia.

Mi principal agradecimiento es para todos Mis hijos, creyentes o no creyentes, sanos o enfermos, alegres o tristes, que fueron llamados a Mi camino de Paz y Redención de las almas.

Hoy,  la luz de los Centros Marianos brilla de manera especial en el mundo, porque Mi Consciencia maternal aparecerá a sus amados hijos que con fe confiaron en la Señora del Cielo.

Recuerden, queridos hijos, que Yo oro  día y noche por sus misiones consagradas a Dios Padre.

Por cuánto Me han dado, Yo les agradezco ahora y siempre.

Yo soy la Aurora que puede amanecer en cada interior.

Paz y Misericordia para el mundo entero,

Vuestra Santa Madre María, Señora de Aurora

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Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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