Jueves, 19 de junio de 2014

Mensajes mensuales
MENSAJE MENSUAL DEL CORAZÓN CASTÍSIMO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Estas palabras surgen de una pregunta de una hija Mía, porque llegó el momento de que aprendan a servir con puro amor.
Quiero que descubran en la caridad el camino más simple y rápido para transformación de los aspectos de la consciencia.

El servicio, Mis queridos, es la puerta para aquellos que decidieron encontrar a Cristo Vivo en su interior y en el interior de todos los seres.

Busquen siempre primero la necesidad del prójimo, siempre, aunque las fuerzas se desvanezcan en vuestros brazos y aunque el cuerpo no les permita seguir. Llegado este momento, entren en el corazón, porque este puede ir a lugares donde el cuerpo no puede llegar.

Cuando ya la última gota de sudor sea derramada, por haber servido a aquellos que golpearon la puerta, entonces sumérjanse en ese espacio que jamás les traerá cansancio, que es inagotable, infinito, donde la caridad se encuentra en su esencia más pura: entren dentro del corazón.

Si Me preguntan cómo servir con alegría, solo les respondo que busquen a aquellos que están realmente necesitados y que traspasan todos los límites del sufrimiento que vuestros corazones pueden concebir; porque para muchos es difícil encontrar la entrada del corazón  ya que el servicio que pueden prestar es el servicio de cada día. Si vuestros corazones aún no se abrieron, vayan hacia a aquellos que tanto necesitan, aquellos que, de tanto sufrir, no solo pagan sus deudas espirituales, sino también las del mundo entero.

Cuando, delante de esos hermanos, hayan vivido el amor que se encuentra en vuestros corazones, porque lo descubrirán en la necesidad de amar, entonces sí, retornen y vean que a vuestro alrededor siempre hay un corazón que necesita de vuestro apoyo.

Vean que siempre están delante de corazones y de consciencias que representan universos guardados en vuestro interior y a estos, como a los que carecen de mucho de amor, sirvan con alegría.

Sirvan por saber que de las obras de caridad surge la unidad para cuya manifestación fue creado este mundo. Sirvan, porque de la caridad brota el amor como fuente inagotable en vuestros corazones y, cuando descubrieran esta fuente, ella jamás podrá esconderse en vuestro mundo interior; estará siempre allí, dispuesta a tornarse mayor e infinita, dispuesta a mostrarles que el amor puede entregarse a todos igualmente y que tan grande es la necesidad del rico que es pobre de espíritu, como la del pobre que muere en hambre y en soledad.

Mis queridos, amando así a todos, harán descubrir al rico que puede suplir la necesidad del pobre y también al pobre, que puede suplir la necesidad del rico, que no conoció la alegría que hay en vivir la simplicidad.

La caridad los conduce a la unidad y al amor y hacia estos principios siempre guiaré vuestros corazones y vuestros seres. Solo dejen que Mis simples palabras resuenen en vuestros corazones y se transformen en fuente de transformación e impulso para que puedan vivir definitivamente esto que vinieron a manifestar en este mundo.

Yo los amo y les agradezco por vivir la alegría de encontrar Mi Castísimo Corazón.

San José