Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Queridos hijos, hoy les estoy dando Mi Mensaje en el silencio de sus corazones.
En este momento, pequeños Míos, sientan lo que está por encima de sus seres.
Hoy, Mi Corazón les ha traído el Arca de la Santa Alianza que se guarda más allá de las puertas del Cielo. Espiritualmente, queridos hijos, honren ahora a esta parte de la Consciencia de Dios.
Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Queridos hijos, reciban, en este momento de Gracia, cada código de Misericordia derramado por Mi Hijo Jesús. Hoy, les traigo, ante sus seres, cada pasaje de la vida de Mi Hijo, para que cada uno de sus corazones lo pueda imitar.
Mis queridos, están ante un gran misterio, un momento único en cada una de sus vidas, porque hoy el Señor Dios les concede una Gracia como jamás la concedió en el universo.
Hijos Míos, el silencio de Mi Corazón es para que puedan profundizar en ese misterio, para que se permitan revivir la vida de Cristo en este tiempo, para que puedan encontrar en este tiempo definitivo el camino seguro a la redención que todas las almas deben vivir.
En este momento, todo Mi Reino contempla a la Tierra, para que sus almas puedan alcanzar el Corazón de Dios a través de Su Hijo.
Hoy, Mi Corazón espera poder preparar a cada uno de ustedes para los días que vendrán, para que en el momento que tengan delante de ustedes los grandes misterios desvelados, sus corazones sigan confiando en Dios.
Hoy, vengo como la Señora del Santo Silencio, para que el silencio que existe en Mi Reino impregne sus vidas y sus corazones; porque en el silencio, hijos Míos, podrán comprender los tiempos en los que viven, que ya no son tiempos normales.
Es tiempo de contemplar el Corazón de Cristo, de adorar Su Faz Gloriosa, porque al contemplar Su verdadera Faz, hijos Míos, podrán reconocerlo en Su Retorno.
Guarden este día en sus corazones; porque hoy, una vez más, les anuncio que Mi Hijo retornará. Este es un anuncio definitivo para sus vidas.
Contemplen este silencio y sientan Mi Paz, mientras los secretos del Señor descienden sobre cada uno de ustedes, porque en poco tiempo, hijos Míos, todo lo que hasta hoy fue un gran misterio, una gran incomprensión para sus corazones, ya no lo será.
Llegará el momento en que Dios no tendrá más secretos con la humanidad, porque desea ver crecer a Sus hijos.
Mientras contemplan Mi silencio, hijos Míos, sus corazones pueden orar dentro del corazón:
Te entrego mi corazón, Señor,
para que Tus secretos
se hagan vida en mi ser.
Te entrego mi corazón, Señor,
para que Tus misterios
sean revelados en mí.
(tres veces)
Si sus corazones Me preguntan: “¿Qué quieres de mí, Señora?”, Yo les responderé: “Quiero que vivan Mis Gracias y se santifiquen bajo el Espíritu de Dios, porque esta es la Voluntad del Señor”.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Vivan los Mandamientos de Mi Hijo porque ya es la hora.
Hoy, vengo del Cielo y les he traído una gran parte de ese Cielo del Señor para compartir con sus corazones la Gracia que están recibiendo.
Queridos hijos, estar delante del Arca de la Santa Alianza es el símbolo y la revelación de un gran misterio, donde el Gran Amor de Dios se guarda como un núcleo sagrado en el universo.
Quiero que puedan comprender esto como una gran aspiración para sus vidas: si viene a la Tierra el Espíritu Santo, las señales de la Santa Arca también serán reveladas a la humanidad.
Ahora, les cabe a todos Mis hijos comprender lo que invocan y llaman. Esta Santa Arca de la Alianza les trae el advenimiento de lo nuevo a través de los impulsos del Espíritu Santo.
Para que ustedes entiendan, queridos hijos, no solo Dios se manifiesta a través de Mis Palabras maternales y de las Instrucciones de Mi Hijo, también Dios se manifiesta en sus vidas, especialmente en este día, ante esta Arca de Luz que transformará a la humanidad, cuando llegue desde el Cielo la Nueva Jerusalén que todos podrán ver.
Nada tiene secreto en el universo, todo es conocido en la medida de la apertura del corazón.
Ahora, en este nuevo ciclo que ustedes están viviendo y después de todos estos meses preparatorios en los que Mi Corazón los ha instruido, con la venida gloriosa de Mi Hijo Jesús, vendrán hacia la Tierra todas las Glorificaciones de Dios.
Él manifestará todas Sus Faces y todos podrán conocer quién verdaderamente los creó desde el origen, porque todos los pueblos en la antigüedad han conocido a esa gran Consciencia Suprema.
Dios guarda Su Amor no solo en las criaturas, sino también en esta Arca de la Santa Alianza, que está en el Cielo y que traerá los nuevos códigos de Paz, los mismos que Yo recibí cuando estaba en la Tierra, y todas las Gracias que recibió Mi Hijo cuando ascendió a los Cielos.
Todas esas señales de Nuestros Sagrados Corazones están guardadas dentro de esa Arca; entonces, queridos hijos, no solo son llamados a tener consciencia de la tarea de la oración, sino también de todo lo que está guardado en el Cielo, de los tesoros que les ha hablado Mi Hijo en Sus Parábolas, que son una realidad en todo el universo.
Por eso, hoy, hijos Míos, les estoy aproximando muy cerca el Universo de Dios, para que conozcan Mi Mensaje universal, que trae nuevos códigos de paz que brotan como un manantial desde el corazón de esa Arca Santa, de esa Gran Consciencia de Dios manifestada.
Hoy, los universos están abiertos para ustedes y, en consecuencia, hijos Míos, están siendo partícipes de los coros celestiales que alaban y acompañan a esta Arca de la Luz que espera hace mucho tiempo poder decirlo, desde el génesis, para que pueda descender esa Luz hacia la Tierra.
Pero, primero, la humanidad debe vivir la Misericordia, redimirse, perdonar y reconciliarse con el Señor del Universo, para que siendo dignas criaturas puedan participar y presenciar los tesoros del Cielo.
Dios les quiere revelar su verdadera Faz, pero aún Mis hijos están inmaduros.
El Señor Me envía, al igual que a Mi Hijo, a preparar sus corazones en este último tiempo.
Si esa Arca de la Luz quiere descender a la Tierra en un próximo tiempo, hoy podrán comprender, queridos hijos, que Dios Me ha enviado a lo largo de los tiempos no solo para advertir a la humanidad, para corregirla, para que siga el verdadero camino de la Luz, sino también para que todos Mis hijos conozcan estos grandes tesoros celestiales que los esperan hace mucho tiempo.
Un gran tesoro, que les es presentado a ustedes como oferta, es Mi Inmaculado Corazón; porque a través de Mi Inmaculado Corazón podrán volver a nacer a la vida y en Mi Corazón Materno conocerán estos Misterios de la Divinidad, del Todopoderoso.
Les agradezco, queridos hijos, por guardar esta Luz en sus corazones.
Y ahora, desde el Cielo, Mis Pies comienzan a caminar en peregrinación hacia Montevideo, donde Mi Corazón intentará reparar esencias y corazones, como muchas veces Yo lo he hecho en Mis peregrinaciones a Buenos Aires.
Sigan Mis pasos en silencio, para que en sus vidas puedan descubrir el único camino hacia Dios.
Los amo, hijos Míos.
Gracias por responder a este llamado y que este día se guarde en sus memorias para siempre.
Recuerden a la Santa Arca de la Luz, la Gran Consciencia de Dios manifestada para todos.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Madre María Shimani de Montserrat:
Estamos sintiendo que hoy comenzamos verdaderamente un ciclo nuevo, en el que los misterios del Cielo serán guardados en nuestro corazón.
Y ahora vamos a escuchar un breve relato, lo que la Madre permitió que los hermanos pudieran transmitir.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Uno aún percibe que está adentro de esa experiencia que no terminó, que esas imágenes que trajo nuestra Madre estuvieran vivas aún dentro de nosotros.
Hoy sentíamos, como dijo Madre Shimani, que estábamos ante un gran misterio, pero nuestra Madre Divina no nos dejó sin comprender ese misterio.
En ese silencio del que Ella hablaba, Ella estaba profundamente todo el tiempo.
Y lo que podemos relatar es lo que sucedió antes de que Ella llegara y mientras estuvo Su Presencia aquí entre nosotros, cuando poco a poco nos fue revelando ese misterio.
El Cielo se abrió más allá de este lugar. Al comienzo, pensábamos que nuestra Madre llegaría por el Portal de la Paz; sin embargo, llegó por encima de este Portal de la Paz.
Veíamos, y se nos mostraba cómo sucedía, un gran movimiento universal en este lugar. Se iban abriendo constantemente muchos cielos hacia fuera del universo, más allá del planeta, y nosotros estábamos aquí en este pequeño lugar delante de esa gran inmensidad.
Hasta ese momento no entendíamos qué estaba sucediendo. Cuando las puertas de los cielos se fueron abriendo, y fueron más de nueve puertas, los coros comenzaron a aparecer, comenzaron a preparar la llegada de nuestra Madre.
Dos ángeles se aproximaron muy cerca de aquí, de este lugar. Cuando aparecieron estaban con sus cabezas hacia el suelo, arrodillados, orando y dijeron lo siguiente: “Prepárense por que la Madre está llegando”, y allí desaparecieron.
Ahí, estuvimos ante esas infinitas puertas abiertas, y se iba profundizando ese camino de luz que iba hacia el cielo. Aparecieron cada vez más ángeles. Nuestra Madre nombró nueve coros diferentes de ángeles, algunos nombres de esos coros Ella los daba en hebreo, decía que esa era la lengua que podía transmitir en este momento y, así, esos coros podían ser reconocidos por nosotros.
En ese momento, llegó Nuestra Señora. Ella apareció en el punto más alto del cielo y fue descendiendo hasta aquí, pasando por cada una de esas puertas celestiales. La contundencia y el poder que Ella manifestaba eran inexplicables.
No solo apareció con Sus Brazos abiertos hacia abajo, irradiando Luz, sino que también apareció con Su Corona de Estrellas, con la forma de una luna en Sus Pies y en Sus Manos sostenía el rosario. Su Mirada se dirigía hacia nosotros mientras descendía. Su Rostro era resplandeciente, vivo, parecía casi materializada, y los ángeles se movilizaban alabando a Dios, cantaban en voz alta “Santo, Santo es el Señor del Universo”, mientras Ella descendía hacia aquí.
Durante la Aparición, Ella nos fue mostrando lo que había en cada una de esas nueve puertas. Fue presentando cada uno de los coros y las tareas que ellos realizaban. Nuestra Madre fue explicando lo que había en esos nueve cielos y decía que hoy traía algo muy elevado para nosotros.
Hasta ese entonces no había aparecido el Arca de la Santa Alianza. Pero, en un momento nuestra Madre la hizo aparecer y no entendíamos mucho lo que significaba esa Arca.
Cuando nuestra Madre hizo aparecer el Arca, Ella nos mostró que el Arca tenía forma de una gran caja de cristal donde se guardaba algo completamente sagrado y divino. Lo que estaba allí adentro se mostraba como una intensa Luz en varios colores.
Mientras nuestra Madre hablaba y presentaba a los coros angélicos, esa Arca se iba iluminando con diferentes tonos, iba irradiando su Luz hacia este espacio, comenzaba a expandir su Luz cada vez más.
Veíamos que no solo esta región era tocada por esa Arca de la Santa Alianza, por los rayos de esa Arca, sino que también iban más allá de este país. Y, cuando la Madre permaneció un gran tiempo en silencio, Ella colocó una de Sus Manos sobre el Arca de la Santa Alianza. Vimos que Ella tenía el Arca de la Santa Alianza en Sus Pies y cuando hablaba y dirigía Sus Palabras, esa Arca cada vez más transmitía su Luz y sus códigos y, en un momento, cuando Ella comenzó a hablar después de Su silencio, dijo: “Bienvenidos al Cielo”.
Y, le preguntamos: “¿Es que estamos en el Cielo Madre?”. Ella respondió que hoy había traído una gran parte del Cielo hacia ustedes, una gran e importante parte del Cielo, de la Consciencia de Dios.
Entonces, comenzó a transmitir lo que escuchamos en el Mensaje que fue hablado. Cuando Ella dirigía las Palabras sobre el Arca de la Santa Alianza, fue la primera vez que vimos cómo el universo se movilizaba de una forma diferente, hasta la actitud y los gestos de los ángeles eran diferentes. Ellos imprimieron una gran reverencia ante lo que estaban viendo.
En ese momento era como si comenzaran a despertarse muchos atributos, que eran expresados por los ángeles, como la reverencia, la devoción, el amor. Todo lo transmitían a través de actitudes, de gestos, mientras nuestra Madre hablaba sobre el Arca de la Santa Alianza.
Pero también cuando Ella dijo: “Bienvenidos al Cielo”, abría Sus Brazos hacia nosotros, ofertándonos ese símbolo del Arca de la Santa Alianza. Sabíamos que estábamos ante algo desconocido para nuestra consciencia.
Aparte del Mensaje que hoy transmitió la Madre, pudimos experimentar otro tipo de diálogo con nuestra Madre Divina que se daba a través de Su silencio profundo.
Ella estaba en una actitud de adoración ante esa Arca, tal vez no entendíamos bien lo que estábamos viendo frente a nuestros ojos, pero nuestra Madre en Su silencio transmitía un Mensaje profundo, un sentimiento que traía mucha reverencia, mucha claridad, mucha paz y pudimos comprender que ante esa señal que la Madre nos trajo, Ella también nos dijo que hoy nos había traído muy cerca nuestro a una parte de la Consciencia de Dios.
Hermana Lucía de Jesús:
Antes de que Ella se elevara, le pregunté si quería que transmitiéramos alguna cosa y Ella respondió:
“La única cosa que Yo quiero es que todos sepan que, a partir de hoy, llevan en sus corazones un gran secreto que se revelará a medida que el corazón de cada uno se abra”.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Hace algunos días, fuimos participes como grupo de una Gracia que nuestra Madre nos anunció.
Estábamos, una mañana, orando el Santo Rosario con Madre Shimani en el Monasterio y nuestra Madre apareció extraordinariamente y, con mucha claridad, nos transmitió a todos que Ella había recibido de parte de Dios un pedido, por el que Ella le hablaría y le transmitiría Su Mensaje a una hija más; y que esa tarea comenzaría a partir del lunes de la próxima semana.
Esa hija que Ella consagró a esta nueva tarea, con nuestra Madre Divina, es Madre Shimani. Entonces, nuestra Madre nos explicaba que un nuevo ciclo comenzaría.
Madre María Shimani de Montserrat:
Vamos a cantar.
La Madre hizo un pedido especial de un cántico que aprendimos aquí en Aurora y que se llama “Descubrir el Amor”. Invitamos a todos los miembros de Aurora a cantar con todo su amor y con todo el corazón.
Agradecemos la música a un grupo de niños que se llama Libera, y la letra se la agradecemos a la oración de un hermano.
¡Gracias, Madre, por cuánto nos das!
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Nuestra Señora nos pide que oremos por las intenciones del Cielo y por las soluciones en la Tierra.
Por la Luz que derramó Tu Inmaculado Corazón,
que convirtió a los corazones del mundo,
Divina Señora, ruega por nosotros.
Amén.
(21 veces)
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Queridos hijos, Mi Alma busca corazones abiertos y disponibles a continuar.
Estamos en el tiempo de un llamado urgente que viene desde el Cielo. Como Reina de la Paz, una vez más, los estoy llamando a meditar más.
El Señor los necesita fuertes y valientes para continuar el camino. Para eso, queridos hijos, tienen Mi Corazón como un gran escudo y ahora tienen también el Corazón Sagrado de Mi Hijo.
Desde los Cielos, los coros celestiales agradecen este momento y el Padre se alegra por este presente que le han dado a Mi Corazón.
Hoy, no comprenderán lo que Yo les digo, queridos hijos, pero en la próxima vida lo sabrán todo, porque Mi Corazón les contará todos los detalles de este encuentro.
Así como vendré en marzo a Medjugorje; hoy, vengo aquí por ustedes. También iré a Salta para fortalecer Mi Mensaje Maternal. Deben comenzar a leer en los acontecimientos, lo que hoy Yo les estoy dictando.
Queridos hijos, los tiempos preparatorios ya están terminando. Ahora, Mi Hijo les pide la formación de nuevos apóstoles, los verdaderos apóstoles que vivirán a partir del corazón, que les podrán dar ejemplos de vida a todos.
Queridos hijos, Yo no les pido que sacrifiquen sus vidas; solo les pido que oren, ayunen y se confiesen habitualmente. Esto es muy contemplado por Dios, cada pequeño sacrificio de cada corazón tiene grandes efectos en los Cielos.
Con esto quiero decirles, hijos Míos, que los estoy invitando a ingresar en las Leyes Universales para que sus corazones se puedan reparar antes de que todo acontezca.
Los Libros Sagrados se abrirán y se cumplirá lo que está escrito. Hoy, Mi Corazón no viene a causarles ningún miedo, sino a revelarles la profundidad de Mi Amor por ustedes, Mi Amor Inmaculado por cada uno de ustedes.
Oro constantemente por ustedes, queridos hijos. Estoy necesitando de su perseverancia en estos tiempos, para que puedan caminar Conmigo por el nuevo camino que Mi Corazón les quiere revelar.
El mundo debe ser ayudado por ustedes. Por eso, Mi Voz se multiplica en Medjugorje, en Salta, aquí y en otros lugares donde Mi Presencia no es reconocida.
Hoy, les estoy revelando Mi Omnisciencia Celestial para que puedan ver, en estos tiempos, el Poder de Dios. No es necesario que todos Me puedan ver como ahora Me ven Mis hijos, es importante que puedan sentir Mis Palabras en el corazón.
Por eso, queridos hijos, nuevamente los invito a meditar sobre Mis Mensajes anteriores, para que puedan renovarse a través de cada una de las llaves que allí se encuentran; porque así, hijos Míos, no solamente podrán transformarse, sino también encontrar el alivio que ustedes necesitan, viviendo las Palabras que Mi Corazón proclamó a lo largo de estos últimos tiempos.
Quiero corazones sinceros, verdaderos y puros. Para que ustedes puedan entrar en las Leyes del universo es necesario que sus corazones se liberen del pecado y de las faltas, y así puedan ser renovados por Mi Espíritu Maternal.
Queridos hijos, nadie llega a los Cielos sin antes convertir su corazón a Dios.
Este es Mi importante llamado en este tiempo, aquí como en Medjugorje: la conversión del corazón.
Lo repito, queridos hijos, porque es necesario que sus células lo recuerden, así podrán estar preparados para el nuevo tiempo y sus corazones serán participes de la llegada de Mi Hijo.
Queridos hijos, espero tanto poder estar con ustedes en cada momento que, cada segundo, contemplo sus oraciones cuando son sinceras, porque Mi Corazón los escucha y así los podré ayudar cuando ustedes lo necesiten.
Paren de sufrir, queridos hijos, alivien sus corazones a través de Mi Amor Maternal. Deben saber que el Corazón de Amor de Mi Hijo recibe llagas todos los días, pero si ustedes se animan a conocer Su Misericordia, a entrar en Su Misericordia, en el gran océano de la conversión y de la fe, podrán estar preparados para lo que sucederá.
No estoy anunciando tiempos malos para el mundo, sino tiempos venideros de Luz y de Paz, en los que las nuevas comunidades de la Tierra se volverán a formar, como se formaron los pueblos antiguos en el desierto.
Queridos hijos, deberán comenzar de nuevo a aprender a amar a Dios, a vivir Su Voluntad sobre todas las cosas y a reconocer que sin Él nada es posible en este mundo.
Ustedes son partícipes, desde hace mucho tiempo, de un gran Proyecto de Amor de Dios y ese Proyecto comenzará a revelarse cuando los corazones oren lo suficiente y estén preparados para escuchar los anuncios que les traerá Mi Hijo desde el universo.
Ahora es el tiempo de la conversión; para eso, están a tiempo, hijos Míos, de poder escuchar las Buenas Nuevas que les serán presentadas a la humanidad en poco tiempo.
Sus corazones deben dejarse permear por la Luz, para que así Yo los pueda consolar.
Mi Hijo Me entregó a todos ustedes. ¿Cómo podré estar más tiempo con ustedes, hijos Míos, si ustedes aún no vienen a Mis Brazos?
El mismo Amor que Yo derramé sobre Jesús, quiero derramar sobre cada uno de ustedes. Así, podrán confiar plenamente en el Señor y vivirán la misma experiencia maternal que Yo viví estando en la Tierra, amar a Dios sobre todas las cosas y aprender a amar al prójimo.
Cuando Yo los invité, queridos hijos, a vivir en la caridad es porque el servicio abnegado transformará sus corazones. Muchas dolencias espirituales desaparecerán y encontrarán en el prójimo la Paz de Mi Hijo, presente en cada corazón que sufre, que espera ser aliviado y que se le quite la sed que le dé ánimo para poder seguir adelante.
Muchas Gracias derramó Mi Corazón a lo largo de este último año y esas mismas Gracias que ustedes recibieron, hijos Míos, deben ser difundidas a todos.
No crean, queridos hijos, que sus corazones no se están purificando. Cada vez que Yo vengo del Cielo, Mi Maternidad los acoge y Mi Corazón los alivia en cada prueba que están viviendo.
¡Ánimo, queridos hijos! Levanten los brazos hacia el Señor, sientan la Paz que viene desde el universo. Queridos hijos, no se involucren con las cosas del mundo.
Les pido que oren por esta humanidad, así como Yo lo pedí a lo largo de los siglos.
La oración será su fortaleza en este fin de tiempo y para que sea su fortaleza, queridos hijos, deben creer en ella, porque así recibirán el Poder de Dios.
Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Queridos hijos, cuando Mi Corazón escogió esta nación para realizar Mi tarea maternal es porque deseo consagrar definitivamente a cada uno de sus corazones a Dios. Pero antes de que Mi tarea se realice en este lugar, queridos hijos, necesito que sus corazones estén unidos unos con otros y oren con fervor para que Mis Planes se cumplan.
Este mes de marzo, hijos Míos, será de gran gloria en los Cielos porque el mundo reconocerá, primero internamente y después físicamente, que Mi Corazón es uno solo en todas las partes del mundo.
Quiero, en el final de este día, pedirle a cada uno de sus corazones que Me ayude a concretar Mis Planes de Paz y de Unión con una oración verdadera, que nazca a partir de sus corazones, por todos los Centros Marianos, por todas Mis manifestaciones en el mundo.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Así, hijos Míos, cuando ustedes oran Conmigo todos los días con sinceridad y verdaderamente, Mi Manto Celestial se extiende hasta sus hogares, guardando dentro de Mí, debajo de Mi Manto y dentro de Mi Corazón Maternal, a cada uno de sus familiares.
Si ustedes responden a Mi llamado todos los días, hoy les revelo, queridos hijos, que Mi Corazón intercederá por sus familiares ante los Tronos de Dios para que, en el tiempo venidero, ellos también puedan despertar a Mi Amor y al Amor de Cristo.
Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Bendigo a cada uno de sus pequeños corazones, derramando sobre ustedes la Gracia de Dios para que la irradien al mundo y sobre todo a este lugar, a esta ciudad, preparando la venida de Mi Corazón por segunda vez.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Queridos hijos, después de que Iván esté aquí, en marzo, difundiendo el llamado de Medjugorje por Gracia del Padre y por Mi intercesión, Mi Corazón retornará aquí, en abril.
Los espero, hijos Míos.
Les agradezco infinitamente, queridos hijos, por recibir Mi llamado por la paz.
¡Les agradezco!
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Canción: "Magnificat".
Madre María Shimani de Montserrat:
En este momento, queremos hacer algunos comentarios sobre el Mensaje de la Madre.
Hemos estado observando que el Mensaje de la Madre, a nivel mundial, está comenzando a tener los mismos anuncios en todos los lugares.
Hoy, estuvimos leyendo algunas indicaciones que la Madre les hizo a los videntes de Medjugorje. A todos, Ella les pide lo mismo que a nosotros: oración, ayuno, confesión y conversión.
Y una de las cosas que nos llamó la atención es que, en estos últimos Mensajes de la Madre en Medjugorje, Ella también llama al apostolado de Cristo.
Y nosotros, como Ella nos pidió, debemos aprender a ver en los acontecimientos. Si nosotros podemos unir en nuestro corazón todos los Mensajes que Nuestra Madre está transmitiendo, a lo largo y ancho del mundo, nos vamos a dar cuenta de que el Mensaje es único, solamente que utiliza diferentes canales, en diferentes lugares del mundo, para diferentes personas.
Ella está intentando, a través de algunos de esos canales, llegar a toda la colectividad cristiana y, con otros canales, está intentando abarcar a aquellos que no son cristianos y forman parte de otros movimientos espirituales; pero el Mensaje es exactamente el mismo.
Ella intenta que nosotros podamos comprender que es la Madre de todo el mundo y que, por lo tanto, todos somos hermanos como nos enseñó el Maestro hace tanto tiempo.
Entonces, el mensaje que recogemos de este comentario es que la Divinidad espera que por fin podamos comprender el Mensaje de Amor que hemos recibido hace tanto tiempo y que nos podamos unir por medio de todo lo que nos es común que es el Amor de Nuestro Padre y de Nuestra Madre, y que dejemos de lado lo que creemos que nos separa.
Por eso, los invitamos a todos a orar; a ayunar, aunque sea una vez por semana porque es saludable y fortalece mucho nuestra voluntad; y a confesarnos como cada uno lo sienta, confesarnos con Cristo, por medio de un sacerdote, porque eso nos liberará de mucha presión interior y colaborará con los Cielos para que otras personas puedan tener también el impulso de hacerlo.
Hoy, aprovechando que han llegado muchos hermanos aquí, a Montevideo, vamos a colaborar para fortalecer los grupos de oración.
Y para que los grupos de oración se motiven y comiencen a reunirse nuevamente, las Madres que fueron coordinadoras del Monasterio de la Misericordia van a venir una vez al mes a reunirse con todos para trabajar, orar, conversar, para volver a reunir energías y prepararnos para marzo y abril.
Así, iremos construyendo lo que Nuestra Madre espera construir en Uruguay.
Nos vemos en el Corazón de Nuestra Madre.
Gracias a todos por haber compartido esta Aparición con nosotros.
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más