MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

En este día sábado, acompañen el recogimiento del Señor, a fin de que Su Sagrado Corazón sea reparado de todos los males causados al género humano y especialmente a la vida.

Recemos para que las naciones, los pueblos y la sociedad reencuentren el sentido y la razón de pertenecer a Dios, para que las ideologías que incitan al rechazo y a la negación de toda espiritualidad e incluso de toda religión no socaven el camino de las almas, del retorno a la Casa del Padre Celestial.

Por eso, hijos Míos, este es un tiempo atípico, es un tiempo en el que prevalecen ideas propias, capaces de cambiar el destino de una o de varias naciones enteras.

Esta es la razón y es el momento de recurrir al Templo Espiritual de Dios, para orar y para pedir que la sensatez colme a todos los corazones posibles, especialmente a todos los corazones que ya no creen en la existencia del Dios Vivo. Esto también hiere a Mi Corazón de Madre, así como la lanza hirió a Mi Hijo en la Cruz.

Por eso, queridos hijos, deberán tener una vida unida a Dios, porque Él es la Fuente y Él es el alimento espiritual en estos tiempos.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

Maratón de la Divina Misericordia
APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, EN MONTSERRAT, BARCELONA, ESPAÑA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, PARA EL SEGUNDO DÍA DE LA 115.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

El gran océano de Mi Misericordia se abre, pero aún son muy pocas las almas que quieren entrar.

En ese océano, Yo purificaré a esas almas, enmendaré sus errores y faltas, las liberaré del pasado, les otorgaré la vida eterna y las sacramentaré a través del Espíritu Santo que ungirá a esas almas que entran en Mi océano de Misericordia, así como los apóstoles fueron ungidos junto a Mi Santísima Madre en Pentecostés.

El Poderoso Espíritu de Dios volverá a ser difundido en el mundo y los corazones abiertos a Él lo conocerán. Pero antes de que eso suceda, las almas deben aceptar entrar en el océano de Mi Misericordia, para que Yo las pueda justificar ante las Leyes de la Creación.

Esta es la hora en la que la gran puerta de Mi Misericordia comienza a cerrarse en el mundo, porque ha de cumplirse el tiempo de la Justicia Divina, así como fue escrito por Juan el Apóstol en el Apocalipsis.

Llegará la hora en que, durante los tres días de oscuridad, se cumplirá la Justicia Divina, pero no como la humanidad cree. La Justicia de Dios es Amor en equilibrio. La Justicia de Dios es Amor en armonía. La Justicia de Dios es Amor en sabiduría.

Pero antes de que la puerta de Mi Misericordia se cierre al mundo, díganle a las almas que deben volverse hacia Dios, antes de que sea demasiado tarde. Porque cuando Yo deje de estar con ustedes y de hablarle al mundo a través de esta Obra, todo, absolutamente todo, se desencadenará.

Por eso, mientras hay tiempo, muy poco tiempo, deben afirmarse en Mi Misericordia; deben navegar en Mi océano de Luz, a través de la constancia de sus oraciones y súplicas; deben ser el fiel testimonio de Mi Amor para el mundo, especialmente para los corazones que han perdido la fe y la confianza en Dios por todo lo que les sucede, por todo lo que viven, enfrentan y transitan.

Pero, así como una vez Yo vine a Polonia, a través de Santa Faustina, a revelar la infinidad de Mi Insondable y Divina Misericordia; así como Yo vine en la noche oscura de una guerra que se presentaba de forma inminente en Europa, en aquel tiempo; así Yo volveré como la Luz del mundo.

Y, en el horizonte interior, Me sentirán, reconocerán la Faz de Cristo y expulsaré a los anticristos, así como expulsé del templo a los comerciantes. Porque la Casa de Mi Padre es sagrada, en este mundo y en otros. La Casa de Mi Padre es bendita porque es celestial, cósmica y divina, porque Él la ha creado para todos Sus Hijos y Criaturas, para todas las esencias que han surgido de Su Fuente Inmaterial.

Y esa Casa mora en lo profundo del templo de las almas, templos que han sido corroídos por las influencias de este mundo, por las tendencias y las ideologías. Así, el mundo pierde el sentido de la perspectiva al no encontrar a Dios, por estar con su atención en otro lugar.

Por eso, todos los tesoros que Yo les He prometido a ustedes y a sus hermanos, se los He entregado, para que tuvieran parte con Mi Padre en el Reino de los Cielos, para que este mundo conociera que en el Amor está la superación de todo, de cualquier trauma o dolor, porque Yo vengo en nombre del Amor de Dios, de ese Amor inmutable e inconfundible, de ese Amor que tiene un caudal desconocido para el mundo y la humanidad.

Esa es la razón por la cual estamos aquí con ustedes, hace tanto tiempo. Porque esperamos que aprendan de ese Amor que el mundo y la humanidad ya no tiene, que aprendan de un Amor maduro y consciente, de un Amor que es capaz de aceptar y de acoger al semejante, a aquel que nadie quiere ni nadie acepta porque aparentemente es un problema.

Pero, si Yo acepté a los doce apóstoles como eran, así como en este tiempo Yo los acepto a ustedes como son, ¿dónde está el Amor que les He entregado para que Me representen en este mundo y en esta humanidad?

El Amor de Dios es la base de todo el camino espiritual y de toda esta trayectoria terrestre; porque en el Amor está la felicidad de Dios y Su alegría, el júbilo del reencuentro con el Padre Eterno, la cura de todas las heridas.

Yo vuelvo a entregarles este Mensaje con otras Palabras, porque deben tener amor por todo lo que han recibido y por todo lo que les fue ofrecido desde el comienzo, en el que sus consciencias fueron despertadas al Conocimiento Universal y Divino, a las Leyes Inmateriales y a las Corrientes Universales.

Antes de que Me despida de ustedes en este ciclo, y en el mes de agosto, Mi imperiosa necesidad es que existan almas y personas que asuman los tesoros de la Jerarquía, presentes en los Retiros Internos del planeta; porque no solo ustedes, sino también sus hermanos del mundo los necesitarán para todo lo que llegará.

¿Qué más es lo que necesita la humanidad para poder cambiar?

Cuánta abundancia Mi Padre les ha dado a través de Su Creación y, sobre todo, a través de la vida: que puedan ver nacer el sol en cada amanecer; que puedan respirar la pureza de la naturaleza y de los océanos; que puedan tener una familia, a pesar de cómo sea, y la aprendan a amar así como Dios los ama a ustedes desde el principio; que puedan aprender a servir para salir de ustedes mismos, cada día un poco más, y abandonar ese empedernido ego que solo coloca a las consciencias en obstáculos y en caminos sin salida.

Dios les ha dado Su Amor, porque Su Amor es Su Poder y no la autoridad. Su Amor para las almas y la Creación es Su Gobierno Espiritual.

Sin Amor no existiría la Compasión y la Misericordia, derramada por Su Amadísimo Hijo en la Cruz cuando fue traspasado por la lanza en Su Costado. Aun Yo, sin vida, muerto en la Cruz, les di el Amor de Dios hasta los límites de Mi Consciencia, a través de Mi Sangre y de Mi Agua; acto sublime que superó todos los errores y todas sus consecuencias durante el Viernes Santo.

Ahora que, en estos últimos años, hemos formado los oratorios y los Rosarios de Luz, es tiempo de que se guarden en sus casas y hogares, oren con fervor a Dios e invoquen el poder del Corazón de María y de Mi Corazón, para que todos estén protegidos y amparados, y muchos más puedan tener la misma Gracia de ser amparados por la Madre de Dios, que extiende Su Manto de Luz sobre el mundo, día tras día.

La Madre del Mundo, en lo más invisible y silencioso de Su Espíritu, toma el Cetro con Su Mano para guiar a las almas hacia el Reino de los Cielos; para que todos estén algún día en el Paraíso, viviendo la misma felicidad espiritual y el mismo gozo espiritual que vivimos con todos los que dijeron sí en algún momento de esta evolución.

Las instrucciones ya les fueron dadas a todos. Mucho tiempo ha pasado, muchas enseñanzas fueron entregadas, todo ya fue dicho.

Ahora, es tiempo de asumir y de comparecer en las filas del Plan del fin de los tiempos. Y, así, cuando lo hagan por ustedes mismos, por el amor que dicen tener por Mí, asumirán su parte, asumirán su servicio y ya no reclamarán. No evadirán la necesidad que les coloca el universo ante sus ojos. Ya no se mentirán a ustedes mismos, no se engañarán, porque harán cada tarea y vivirán cada compromiso, así como Yo lo He vivido por ustedes, desde Mi Origen en la Fuente Creadora hasta Mi Ascensión.

El Plan espera, como les dije, a los consecuentes, a los que ya no deberán ser más empujados, a los que serán conscientes de lo que tienen que hacer, sin que se les diga. Porque quien vive en Mi Amor, es capaz de percibirlo todo y de reconocer dónde está la necesidad en este tiempo crucial, no solo en Mis Islas de Salvación, sino también en el mundo, en donde las almas esperan ayuda, que alguien las escuche, que alguien las acoja, que alguien las pueda amar; así como Yo amo a todos, más allá de los errores, más allá de las negaciones y de las indiferencias que Me ocasiona el mundo.

Es tiempo de reconstruir a la humanidad y esto dará mucho trabajo. Pero tengan fe, porque un Buen Padre nunca se olvida de Sus Hijos y un buen capataz nunca se olvida de sus trabajadores. Porque quien sirve a Dios se renueva, se trasciende y se transmuta. No existe otro camino para la superación de ustedes mismos, compañeros.

Estamos en la fase de preparar Mi Retorno y solo tocaré con Mis Pies este suelo herido, pero también sagrado, cuando pueda vivir en ustedes para siempre, en la comunión más íntima del corazón, de la vida y de la esencia.

Que Mis Palabras permanezcan y no solo pasen. Cielo y Tierra pasarán, pero Mis Palabras quedarán en aquellos que se abran a recibirlas y a reconocerlas como propias, como una tabla de salvación.

Que en este tercer día de encuentro Conmigo, a las puertas de Montserrat, la Comunión sea ofrecida como reparación por los que sufren las guerras del mundo, por los refugiados y desatendidos, por los que son descartados, olvidados y abandonados, sin que un grado de amor se mueva en las consciencias que los ven.

Por eso, la reparación es necesaria para que la Justicia se aplaque; para que la Misericordia, Mi última Misericordia, actúe y obre en las almas.

Que esta Comunión nutra la vida. Que esta Eucaristía fortalezca los corazones y los anime a seguir adelante, así como Su Maestro siguió adelante en cada paso del Calvario hasta lo alto del Gólgota, sin perder la fe de cumplir la Voluntad de Dios, en cada clavo recibido en Mi Cuerpo, en cada látigo que arrancó Mi propia Carne, en la propia Coronación de Espinas, en los insultos y repudios de todos a los que Yo les había hecho milagros.

Todo necesita ser reparado para que llegue el tiempo de la Tierra Prometida, del nuevo Edén.


Oh, Adonai,
Tú que ves los errores del mundo y sus consecuencias,
contempla, por un momento, a todos los que Te siguen
y tienen fe en Tu Insondable Presencia.

Derrama Tu Amor sobre los consecuentes,
pero en especial, Adonai,
derrama Tu Amor sobre los que están condenados.

Que el precio de Mi Sangre no sea en vano.
 
Que los códigos de Mi Amor,
que son los Tuyos y que provienen de la Fuente,
curen, rediman y nutran
a las almas necesitadas de Ti, Señor,
que han perdido la filiación espiritual Contigo.

Adonai, abraza a todos con Tu Manto,
así como este viento de Montserrat
abraza a todos con su suavidad y pureza.

Adonai, no cierres la puerta de Tu Misericordia,
sino que Tu Misericordia se perpetúe en todos
los que suplican Misericordia por Mi Dolorosa Pasión.

Adonai, así como en lo alto del Monte Calvario  
viste la gran ofensa y pecado del mundo,
Tu Amor descendió y actuó con el poder
de todas las estrellas y de todos los soles.

Y así, el universo fue movido
por el descenso de Tu Amor,
y todo fue liberado y cerrado,
para que en la Resurrección de Tu Hijo,
Tú, Adonai, dieras testimonio de Tu Amor
y de Tu Triunfo en el mundo.

Oh, Adonai, Sagrado Padre,
Omnipotente y Soberano Creador,
que todos Te vivifiquen,
que todos formen parte de Tu Existencia Sideral;
que muchos más lo puedan hacer
y tengan la Gracia de poder vivirlo,
para que, en el final de los tiempos,
todos Tus Hijos, junto a Tu Hijo Predilecto,
restablezcan la unión entre el Cielo y la Tierra,
 y los Mil Años de Paz,
a través de la Cena de la Redención,
en la que volveré a partir el pan
y a consagrar el vino en Tu Nombre, Adonai,
para que todo comience de cero
y todo se renueve para siempre.

Amén.

Así, en estos tres días de impulsos y de confesiones de Mi Corazón, los preparo para el mes de agosto.

Vayan en paz.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Poemas al Inmaculado Corazón de María 
Decimosegundo poema

Guardiana y Protectora de la fe,
líbranos de la oscuridad de estos tiempos,
apártanos del camino de la perdición.

Que la Llama Sagrada de Tu Inmaculado Corazón
sea la guía de nuestras vidas.

Madre Celestial,
que nuestros pasos sean acompañados
hasta que podamos encontrar a Cristo.

Que el poder de Tu luminoso y amoroso Corazón
nos conduzca hasta la Casa del Padre Celestial,
porque nos reconocemos como hijos de Dios,
expresiones de Su Proyecto Redentor,
partes fundamentales de Su Obra de Misericordia.

Que nunca nos cansemos de buscar
la unión con el Reino de los Cielos.

Que la gratitud y la reverencia
nos ayuden a percibir la realidad divina
que, día a día, está frente a nuestros ojos.

Que, con Tu divina ayuda, Madre de Dios,
podamos cumplir con lo que establece
la Santa Voluntad de Dios.

Así, aprenderemos,
al igual que Tú, querida Madre,
a permanecer en el vacío de uno mismo,
sin esperar nada a cambio.

Despierta Tu Amor incondicional en nosotros,
para que también seamos incondicionales,
y así, nuestras vidas serán de Dios.

Amén.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

APARICIÓN RESERVADA DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, EN EL MUNICIPIO DE MILLE-ISLES, QUEBEC, CANADÁ, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.

El Universo se compadece por toda la situación planetaria de estos tiempos.

Por esa razón, él envía toda la ayuda posible para que las almas puedan encontrar el Portal de la Cura y de la Liberación.

Es así que todo el Universo se moviliza como nunca antes lo pudieron haber imaginado.

Todo el Universo se moviliza para ayudar a la humanidad y para que la humanidad pueda tener consciencia de lo que significan estos tiempos y el momento que está atravesando.

Por eso, la Jerarquía se reúne en los diferentes planos de consciencia, medita, reflexiona y a algunas consciencias de la Tierra las hace partícipes de la Verdad para que después puedan comunicar al mundo lo que verdaderamente sucede y no lo que se dice en cualquier lugar de la Tierra.

Es importante, hijos Míos, servirse de la verdadera información para que sus consciencias y las consciencias de sus hermanos no sean desorientadas.

Por eso, los invito a utilizar en este tiempo un rayo imprescindible que es el rayo de la neutralidad, para que nada los pueda sorprender, para que nada los pueda conmover y para que tengan sabiduría, en cada momento, en cada prueba que llegará, en cada movimiento que se presentará.

Por medio de Mi Presencia, hoy les traigo este movimiento del Universo y de sus Jerarquías, para que sepan que no están solos, para que sepan que los estamos apoyando y para que, en este momento tan agudo del planeta, se puedan servir de nuestra Luz espiritual, la Luz que es proporcionada por la Fuente de la Presencia Única.

Es allí en donde deben colocar sus consciencias, así como nosotros, sus Jerarquías, colocamos nuestras consciencias a los Pies de Dios; y somos colmados, bendecidos e invadidos por la Fuente del Amor y de la Sabiduría, que es lo que necesita la humanidad en este momento para aprender a tomar decisiones correctas y no precipitadas.

Es así que Yo les quiero enseñar a servirse del verdadero Conocimiento que viene de la Fuente y que desciende hacia todos los Universos, planetas, soles, estrellas y humanidades, para que aprendan a elevar su consciencia y su vibración en este momento planetario y para que no se dejen amedrentar ni perturbar por todo lo que se dice.

No estoy hablando de que sean omisos con lo que verdaderamente sucede, sino de que tengan discernimiento y sabiduría para poder decidir, y sobre todo para poder comprender.

Estos son los tiempos, así como lo ha dicho Mi Hijo, en los que todo se precipitará y muchas, pero muchas almas aprenderán de una forma inesperada a través de las pruebas y de lo que presentará el planeta como estado de consciencia y como naturaleza, como parte de la Creación.

El parto planetario se aproxima, y para que la Nueva Humanidad y el Nuevo Hombre puedan nacer, todo deberá purificarse porque ustedes, como humanidad, saben que se han desviado del Propósito y de la Ley.

Por esa razón, Yo vengo aquí, al mundo, para anunciarles la Palabra de Dios y para que recuerden la Misericordia del Padre en Su infinita manifestación universal, porque aún está abierta esa puerta hacia Su Divina Misericordia, esa puerta que muchas más almas pueden cruzar en este momento planetario, en el que el rescate es necesario para todos bajo el espíritu de la salvación.

Pero también es el tiempo de que las almas puedan servir a sus semejantes, puedan aliviar el sufrimiento, puedan ayudar a los que no tienen instrucción, porque la mayoría no está preparada para lo que llegará en poco tiempo.

Por eso, los llamamos a la oración permanente, ininterrumpida y constante en este momento, en el que todas las almas necesitan de sabiduría y de discernimiento para que, así, puedan ser guiadas y conducidas por el camino correcto.

Como Madre de la Sabiduría, hoy rezo por ustedes; como Madre de la Cura, intercedo por ustedes; porque los tiempos difíciles mostrarán muchos acontecimientos difíciles y es importante que puedan estar preparados e instruidos para esos momentos, en los que la vida material será removida completamente, tanto en el Cielo como en la Tierra, preparando el surgimiento de la Nueva Humanidad, la que ya no tendrá poder personal ni decisión, sino que aprenderá finalmente a vivir en adhesión a la Voluntad del Padre.

Al no cumplir las reglas y los Mandamientos surgen los sufrimientos, surge la decadencia humana, surge la desigualdad. Pero eso terminará, un nuevo tiempo llegará, pero no todos podrán estar en ese nuevo tiempo.

Muchos deberán aprender en otras escuelas lo que no aprendieron hasta ahora, porque el planeta sigue sufriendo y agonizando, así como los Reinos de la Naturaleza siguen sufriendo y agonizando, y el Padre colocará punto final a tanta maldad y sufrimiento; porque el Padre los creó para que fueran felices, alegres y vivieran en Su júbilo desde el principio.

Por eso, todo será reconfigurado para que pueda comenzar nuevamente, así como debió haberse cumplido en el principio y no se cumplió.

Extiendo Mis brazos hacia ustedes y les ofrezco Mis manos para que se puedan tomar fuerte, y sobre todo les ofrezco Mi Corazón para que puedan estar guardados en Mí y protegidos en Mí en este ciclo.

Llegó el tiempo de que se manifieste su consciencia madura para que, en adultez, asuman esta  escuela planetaria del fin de los tiempos, una escuela que nunca vivieron y que nunca experimentaron en ningún otro tiempo ni en ninguna otra época.

Por eso, todo será removido, desde lo material hasta lo espiritual, desde lo social hasta lo religioso, desde lo más puro hasta lo más impuro para que, finalmente, ya no exista dualidad, sino equilibrio, paz y armonía.

Con coraje y valentía, que cada uno de Mis hijos viva el calvario que Dios le entregó y que lo haga por la humanidad, así como lo hizo Mi Hijo, para que muchas más almas se puedan salvar y encontrar el camino de salida, el camino de retorno hacia la Casa del Padre.

Hoy vengo con estas palabras para hacerlos conscientes y no para asustarlos. Vengo con este grado de instrucción y de conocimiento, de verdad y de transparencia, así como he venido en otros tiempos y en otras Apariciones, en donde su Madre Celeste ha tenido que corregir a la humanidad y advertirla.

Este es el tiempo y este es el momento definitivo, hijos Míos, y eso deben tenerlo presente. Ya no hay espacio para la vida superflua, ya no hay espacio para lo mezquino, para la mediocridad, para la indiferencia, para el desamor, para la falta de compasión.

Este es el tiempo en el que ustedes deberán rehacer sus vidas bajo la Presencia de Dios y de Su Poder, para que sean contemplados por Su Misericordia y por Su Gracia, y así también ustedes puedan vivir el Plan de Rescate, aquel Plan que la Jerarquía Espiritual llevará adelante en este tiempo, en este ciclo.

A medida que se desarrollan los acontecimientos en la humanidad y las naciones viven sus pruebas, las Puertas del Universo se están cerrando, porque llegó el momento del Apocalipsis, del fin del tiempo para el comienzo del nuevo tiempo, porque está llegando el momento del Retorno de Cristo, y ese momento traerá para la humanidad un gran cambio a nivel universal.

Me tomo el tiempo de hablarles lentamente para que puedan memorizar Mis Palabras y no las olviden, porque Mi tarea con ustedes está finalizando y Mis hijos deben estar fuertes y firmes para atravesar lo que deberán atravesar en el fin de estos tiempos.

Yo, como Madre de cada uno de ustedes, Me recogeré en oración como lo estoy haciendo ahora, para orar por su salvación, conversión y redención y para que, sobre todo abiertos y entregados, a pesar de lo que suceda y acontezca en el mundo, puedan recibir a Cristo cuando Él retorne al mundo.

Deben terminar de beber de la Fuente del Conocimiento y de la Instrucción, porque todo lo que fue dicho a lo largo de los años no fue en vano, sino por una causa justa y mayor que va más allá de sus vidas, consciencias y almas.

Sírvanse de lo que les está siendo entregado, porque lo necesitarán en el momento más culminante del planeta. Es a través del amor a ese Conocimiento y del amor a la oración que estaremos unidos, a pesar de dónde se encuentre cada uno en el momento de los grandes acontecimientos. Allí no les faltará la Paz y la Luz para que sepan decidir con sabiduría y discernimiento, y lleven adelante todo lo que Dios les pida.

Yo les dejo este mensaje y los invito a revivirlo y a compartirlo, porque es para todos Mis hijos, independientemente de la religión, del credo o de la raza. Todos son Mis hijos.

Ese es el compromiso que Mi Hijo, en la Cruz, Me pidió vivir por cada uno de ustedes, hasta el fin de los días.

Que la Sabiduría de Dios bendiga sus consciencias y que esa Sabiduría les traiga la cura para el surgimiento del nuevo ser y de la Nueva Humanidad, libre de los errores, de los traumas, de los sufrimientos y del mal.

Que la Gracia de Mi Maternidad los envuelva y que en ustedes se pueda cumplir la Suprema Voluntad para que, en unidad de hermanos y de comunidad, guarden entre ustedes los tesoros sublimes de la Jerarquía para sostener al planeta y a la humanidad.

Yo los bendigo y les doy Mi Paz, la Paz que fortalece el espíritu, la Paz que eleva el alma hacia el Reino de los Cielos, hacia la Vida Mayor.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

En ofrenda a Dios y en unión a la Santísima Madre, respondiendo a Su pedido, vamos a rezar por tres veces la oración “Sagrada Unidad de Dios”, para que Su Unidad, la Unidad del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo colme con Su Luz este momento y nuestras almas a fin de que tengamos la fortaleza necesaria para seguir los pasos de Cristo.

Sagrada Unidad de Dios
unifica nuestras vidas,
unifica nuestro a ser,
unifícanos en profunda fraternidad.
Amén.

¡Gracias, Madre Divina, por cuánto nos das! ¡Gracias, Señor, por cuánto nos das!

En este encuentro, Te honramos Señor.

Y bajo la bendición del Amor del Inmaculado Corazón de María: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE FLORIANÓPOLIS, SANTA CATARINA, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

A pesar de los tiempos de oscuridad y de apremios, Yo siempre vendré, como el Sol del atardecer, para anunciarle al mundo la hora de su salvación.

Seré más fuerte e intenso que los océanos, porque en ellos las almas encuentran la paz.

Seré más fuerte que el viento, porque a través de él las almas pueden sentir la caricia perpetua de Mi Amor.

No los abandonaré cuando los tiempos estén difíciles. Estaré allí, entre ustedes, en el silencio de la noche, para escucharlos y para que escuchen Mis consejos.

El tiempo que se aproxima será conmovedor para todos. Por eso, quien se una a Mí no perecerá, encontrará el alivio y la calma que tanto espera.

Yo solo les pido una cosa, que persistan y que se sostengan a través de Mi Fe, porque Cielo y Tierra pasarán, pero Mis Palabras permanecerán en los corazones valientes.

Reciban, de Mí, toda la fuerza interior necesaria para atravesar el fin de los tiempos por amor a Mí; así Yo siempre les tenderé Mis Manos para llevarlos hacia la Casa de Mi Padre, lugar en donde una nueva etapa comenzará.

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice,

Vuestro Maestro, Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE FLORIANÓPOLIS, SANTA CATARINA, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Desciendo al mundo envuelta en la Luz de Dios para poder derramar todos los rayos divinos del Universo Espiritual.

Desciendo al mundo envuelta en la Luz de Dios para elevar a las almas hacia la Casa del Padre Celestial.

Desciendo al mundo envuelta en la Luz de Dios para que Mis Rayos Divinos toquen a los corazones que necesitan de mucha redención.

Desciendo al mundo envuelta en la Luz de Dios para que las esencias de Dios reconozcan su filiación con el Universo.

Desciendo al mundo envuelta en la Luz de Dios, como Madre, para darles a conocer a los corazones el potente Amor del Padre para con todo lo creado.

Desciendo al mundo envuelta en la Luz de Dios para despertar el sagrado compromiso de las criaturas con la Creación.

Desciendo al mundo envuelta en la Luz de Dios para estar con Mis hijos e impulsarlos al verdadero cambio de consciencia.

Desciendo al mundo envuelta en la Luz de Dios para traer la cura espiritual que muchas almas necesitan.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Alegren sus corazones en la Fuente de Paz que proviene del Corazón de Dios y que permea lo más profundo de la Tierra, como la savia que nutre a los árboles y les da vida.

La Paz de Dios es la fuerza sublime que proviene del Cielo y nutre a la consciencia del planeta, creando fuentes menores en lo profundo de la Tierra, en recintos sagrados llamados Centros de Amor.

Comulguen de los Dones de Dios que ingresan en el planeta y están disponibles para todos los que se abran en gratitud para recibirlos.

Comulgar y vivir los Dones de Dios es más simple de lo que imaginan. Basta que sus corazones estén dispuestos a la transformación, y a veces, distraídos de sí mismos, para que en un acto de servicio al prójimo, al Plan, a la vida, sus seres sean permeados por las Gracias que provienen del Padre.

Yo los congrego en el espíritu de servicio, no solo para que reparen algo o por el servicio en sí; Yo los congrego en el servicio para que, olvidándose de sí mismos, dejen que el Amor y la Alegría que provienen del Padre los transforme, los renueve y los torne dignos de ser llamados hijos de Dios, compañeros de Cristo.

Cuando sirven en un lugar sagrado, por más simple que sea su servicio, el Amor que proviene de Dios y que allí encuentra su morada, puede permear también sus corazones y, más allá de ellos, llegar a toda la consciencia humana.

Hoy, hijos, Yo les entrego la llave para la cura, para la transformación y para la vida fraterna. Sirvan con alegría, sabiendo que, en este momento, Dios los observa.

Ya no miren al Cielo para pedir cura, transformación o gracias, porque todo les fue dado en forma de oportunidades de servir y de descubrir que la vida superior está dentro de ustedes y que se manifiesta cuando ustedes se distraen de lo que piensan que son y se abren para ser lo que son en verdad. 

Dentro de ustedes habita lo sagrado, lo divino; y si no lo ven, deben buscarlo, pero no solo consigo mismos, sino en el servicio, en unión con sus hermanos.

Yo los congregué aquí porque quiero conducirlos a una nueva escuela de amor, aunque piensen y sientan que nada de lo que hacen es nuevo. Renuévense en este, Mi pedido, de estar juntos sirviendo, construyendo y manteniendo esta, que es su casa, y la casa de Dios.

Dejen que nazca de sus corazones la alegría que sienten los niños y, en poco tiempo, ustedes verán que todo cuanto clamaban a Dios, ya se manifestó en ustedes sin que lo percibieran.

Mi gracia está en sus vidas. Yo solo los llamo a encontrarla.

Hoy, Yo los bendigo, les agradezco por responder a Mi llamado a la unidad y les pido que no bajen los brazos, pues verán nacer los frutos del propio esfuerzo.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Mientras las almas peregrinan por los Centros Marianos, confortan el Corazón de Dios y alivian las llagas que la indiferencia humana provoca en lo profundo de ese Sagrado Corazón.

Las almas que peregrinan por los Centros Marianos también son almas reparadoras, porque no solo están curando y reparando su propio ser y su espíritu, sino que también están curando y reparando la consciencia humana, muchas veces distante del Corazón del Padre.

Peregrinar a los Centros Marianos es como caminar hacia la Casa del Señor, subir los escalones de Su Iglesia Celestial y estar ante Su Divino Altar para vivir la redención y, así, abrir las puertas para que otros también puedan vivirla.

En estos tiempos de caos y de indiferencia en el mundo, el Corazón de Dios encuentra Su aliento y Su alegría en las almas que peregrinan a los Centros Marianos, porque, a pesar de sus vidas y de sus responsabilidades, ellas reconocen la importancia y la urgencia de crear un vínculo verdadero con Dios en su interior.

Este mundo, hijos, necesita de almas reparadoras que peregrinen a los Centros Marianos, no solo para encontrar la paz, sino también para abrir la Fuente de la Paz al mundo.

Las almas que peregrinan a los Centros Marianos también son sembradoras, porque, como pájaros de luz, buscan en la Fuente las semillas de la nueva vida y las llevan a sus casas, ciudades, naciones, fecundando ese principio de lo nuevo en la consciencia humana.

Los peregrinos que llegan a los Centros Marianos reciben del Padre Su Gracia y la llevan para multiplicarla al mundo, dondequiera que estén.

La importancia de peregrinar a los Centros Marianos aún es desconocida para muchos, porque los misterios que se guardan como tesoros espirituales en la contraparte interna de los Centros Marianos todavía no fueron revelados a los hombres.

Felices los que peregrinan a los Centros Marianos, porque se tornan instrumentos del Señor y portadores de la nueva vida sobre la Tierra, aunque no lo sepan.

Hoy, hijos, les agradezco por ser peregrinos y por llegar a los Centros Marianos buscando la paz.

Felices aquellos que los reciben con amor y dejan en sus corazones el Amor de la Jerarquía. Multipliquen lo que recibieron. Sean pacificadores en este mundo.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Y, algún día, vendrás al Cielo para estar Conmigo y Me contarás cómo fue tu experiencia de amor y de perdón en la Tierra.

Me relatarás, paso a paso, lo que has vivido por Mi causa y Yo te volveré a bendecir en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Así, tus heridas se sanarán y ya no recordarás nada sobre el sufrimiento. Entrarás por la puerta principal del Reino de los Cielos para unirte y hermanarte con los bienaventurados.

Allí encontrarás, cara a cara, a los que has amado de verdad y aquellos que amaste una vez se aproximarán a ti para darte el calor de su fraterno abrazo.

Sentirás una felicidad desconocida en tu espíritu y ya no recordarás las luchas que alguna vez viviste para poder superarte. Solo tendrás el recuerdo del verdadero cariño que algún día sentiste de parte de los que amabas de corazón y con todas tus fuerzas.

Serás colocado en la Fuente de la Purificación para que tu cabeza, manos y pies sean lavados y, así, enseguida, entrarás solo a la Casa del Padre Celestial, conocerás Sus Siete grandes Portales de Oro y se revelará ante ti la majestuosa humildad de Su Reino.

Por eso, te digo que vale la pena que sigas sacrificándote por Mí, porque después de toda esta historia de vida, que en este momento estás atravesando, hallarás el júbilo poderoso de haber vivido en Dios y por Dios.

Ayudarás a recrear la Creación con tu ejemplo de renuncia y de redención y construirás, en tu espíritu, el resultado de una larga trayectoria de amor y de servicio por la humanidad.

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice,

Vuestro Maestro, Cristo Jesús

Maratón de la Divina Misericordia
Aparición de Cristo Jesús durante la 60ª Maratón de la Divina Misericordia, en la Ciudad de Viena, Austria, al vidente Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús

Ahora provengo de un lugar que muchos no conocen, un lugar en el cual fui recibido una vez y desde donde retornaré al mundo. Lo pueden conocer como la Casa del Padre, la Fuente Celestial o el Universo.

Provengo del Corazón de este Universo, que se ofreció para gestar la vida y la Creación, para que todas las almas pudieran vivir una experiencia de amor verdadero y alcanzable, para que las almas pudieran vivir una experiencia de redención y de perdón.

Vengo desde ese Corazón que pulsa en el centro del Universo y desde ahí me envía el Padre al mundo, para poder proclamar Su Palabra de Salvación y de Luz, para traerles los impulsos que necesitan a fin de que sus consciencias puedan despertar a la verdadera realidad que emerge del Corazón del Universo.

Hoy les muestro Mi Faz de Universalidad.

Soy Aquel que estuvo entre ustedes hace más de dos mil años atrás.

Soy Aquel que resucitó, que padeció por ustedes y que se ofreció a ustedes por amor; por un amor que aún no es conocido.

He aquí a quien ascendió a los cielos y está cerca del Padre Celestial para darles a conocer la inmensidad de Su Misericordia, la gran bondad de Su Alma Eterna, la Infinitud de Su Amor por cada una de las criaturas que surgieron de este Universo, para vivir una experiencia de amor y una gran oportunidad de perdón.

Aún la historia de la humanidad no ha terminado, ni tampoco su pasado ha sido disuelto. Aún el Universo necesita curar a la humanidad y para que eso sea posible, primero deberán curar sus corazones, para que después se pueda curar el mundo y finalmente se pueda redimir.

Con Mi Mensaje Universal vengo a retirarlos de la superficialidad de estos tiempos, de la ignorancia de estos tiempos, de lo que los separa de la Verdad y del Amor.

No quiero instituir en ustedes una nueva iglesia. Quiero instituir en sus corazones Mi eterna Iglesia Celestial que es invisible, superior e infinita ante los ojos de los hombres.

Crean, compañeros, en el manantial que existe dentro de ustedes, en el universo que existe dentro de ustedes y que ningún hombre les podrá quitar.

Los invito a religarse al espíritu de Mi Universalidad, porque si ustedes contemplan el Universo, contemplarán la Creación y alcanzarán el propósito de sus vidas.

Necesito Nuevos Cristos que sientan como Mi Corazón y como Mi Alma; que conozcan la inmensidad de Mis Obras, que van más allá de todas las iglesias de la Tierra.

Porque Yo ascendí a los cielos por ustedes y vengo del Cielo por ustedes, para revelarles Mi nueva Tarea y el propósito que el Padre Celestial depositó en Mi Misericordioso Corazón.

Por eso, los invito a abrir la consciencia para que sepan que soy más que Jesús, un hombre humilde que vino a la Tierra, para enseñarles sobre el amor y la importancia de la instrucción para sus vidas.

Superen los límites de la materia. Abriendo sus consciencias, sus corazones sentirán Mi Presencia y sabrán que desde donde vengo es un lugar especial para todos, en donde todos pueden comulgar con esa preciosa Energía Divina que se ofrenda de tiempo en tiempo, que se muestra de ciclo en ciclo, para que las almas puedan reconocer la Voluntad de Dios.

No vean al Padre como un juez. Vean al Gran Único y Eterno en la infinitud de Su Misericordia. Reconozcan en su interior los atributos que Él les entregó por amor. Sagrados Dones de Su Espíritu que deberán despertar sus talentos, para que al igual que muchos hombres y mujeres de la Tierra, se animen a servirlo plenamente, viviendo el servicio con alegría y con un profundo gozo en el corazón.

Yo vengo desde ese lugar del Universo, para que sepan que soy más que un nazareno y que vine aquí, a la Tierra, así como vengo en este tiempo para llevarlos al Universo de Mi Verdad.

En la Universalidad de Mi Corazón, la que ustedes pueden encontrar, no tendrán restricciones ni límites. Porque lo que proviene de la Fuente y está en el Corazón del Hijo de Dios, invita a las almas a vivir los Proyectos del Padre y a realizarlos en este planeta por medio de la donación de las almas.

Los invito, compañeros, a encontrar Mi Espíritu Divino más allá de las formas y de las religiones; porque Yo provengo de un lugar superior que concibió la gran oportunidad para el mundo de traer a la Tierra el Amor y la Redención, a fin de que todos los seguidores de Mi Corazón, algún día se volvieran testigos de Mi Presencia y de Mi Palabra.

Es así que Yo no los vengo a evangelizar, ni tampoco los vengo a comprometer. Les vengo a traer el mensaje del despertar, porque este mundo y esta humanidad debe salir de la inercia en la cual se ha colocado, para que viva su gran transformación en nombre de todo el Universo y de toda la Creación.

Anímense a dar ese paso y háganlo más allá que Mi Nombre. Háganlo por todo el Universo, por la verdadera experiencia de amor que vivieron en otros tiempos, la cual hoy les traigo para que puedan recordar y así despertar.

No están aquí, en este planeta, solamente por una vivencia humana. Son parte de un Propósito y de un gran Plan Infinito, que fue pensado y meditado por la Fuente y entregado a los grandes Arcángeles de la Creación, quienes en el nombre del Amor y de la Sagrada Unidad han gestado los proyectos en todos los universos y especialmente dentro del universo interior de cada ser.

Por eso reconozcan su filiación con lo Alto. No les pido que se vuelvan religiosos. Les pido que sus vidas se rediman y se conviertan según Mi Mensaje, para que los Atributos de Dios puedan emerger en sus corazones.

Desde ese lugar del Universo vengo a ayudar al mundo y no me detengo por los que han quedado para atrás. Sigo adelante por los que Me acompañan. Cada alma tendrá su momento ante Nuestro Señor y eso es algo irrefutable.

Por eso con la consciencia que les traigo y con todo el Amor que les entrego, establezcan esa alianza con el Universo y sigan elevando sus consciencias, no solo a través del servicio o de la oración, no solo a través de la fraternidad y de la consideración, sino también a través del despertar de la consciencia para lo que verdaderamente cada ser de este planeta se ha comprometido a realizar en nombre de la Creación, por la redención de esta raza y la purificación de este planeta, para el establecimiento de una nueva y sagrada humanidad en comunión y en alianza con todos los Reinos de la Naturaleza.

Así, la historia de esta dolorida humanidad, cambiará para siempre si más consciencias responden a Mi llamado; si más consciencias se animan a buscar dentro de sí la riqueza de su universo interior, que es una memoria inapagable.

Yo necesito, compañeros, que descubran dentro de ustedes lo que verdaderamente son, así ayudarán también a construir los nuevos tiempos y llevarán al mundo la paz y el amor que tanto necesita, para que muchas más almas, al igual que ustedes, se animen a dar nuevos pasos en el sagrado compromiso con el Creador.

Buscando la unión con su universo interior, estarán en comunión con el Universo Superior y las leyes en sus vidas cambiarán y aprenderán por medio del amor y de la alegría. Así serán Mis testigos por medio de la transformación de sus vidas.

Por eso hay algunas consciencias en este tiempo, que temen dar ese paso, prefieren quedar en su resistencia y en sí mismos, para no cambiar. Las almas piensan que sufrirán por poder transformarse. Pero la Ley que Yo les traigo del Universo es totalmente lo contrario.

Anímense a cruzar el portal que Yo he cruzado una vez, aceptando la Voluntad del Padre y realizándola en la Tierra según Sus sagrados designios de la Fuente.

Por medio de Mis Palabras y del Universo que hoy les traigo a todos, disuelvo el pasado de Austria, los hechos de sufrimiento y de dolor, para que en el renacimiento de la Llama de la Fe y de la confianza en lo divino, las almas se animen a dar un gran "sí" al Universo.

Toda la humanidad está frente a una gran elección que podría cambiar el rumbo de los acontecimientos. Por eso, como hace más de dos mil años atrás, pero ahora en todos los lugares del mundo, vengo a llamar a Mis rebaños que vienen con diferentes experiencias, culturas, lenguas e historias profundas que Yo vengo a transformar y a sublimar en la Presencia del Dios Vivo, por medio del Hijo y de Su Corazón.

Celebremos este momento, en donde el Universo Superior ingresa en el universo interior de los corazones, para disolver el sufrimiento y el pasado y hacer renacer la alegría de estar en comunión con lo Alto.

Sean partícipes de este momento, no solo por medio de los Sacramentos, sino también a través de la unión interna de cada una de sus esencias con el Hijo del Amor.

Incienso.

El altar será bendecido para profundizar aún más en la unión interna de los corazones con el Creador y para que Sus Ángeles resplandecientes desciendan a la Tierra y traigan la Gracia, el Perdón y la Misericordia, por medio de la transustanciación; una Ley que hoy se cumple en los corazones que comulgan con el Amor.

Única y poderosa Fuente del Universo, que creaste todo lo que existe y todo lo que vibra y que Te haces presente en el universo interior de cada ser; desciende ahora a la Tierra, para que las almas se liberen del error y renazcan en el poder de Tu Glorioso Amor. Amén.

Por el agua que brotó de Mi Costado, que esta agua de conversión y redención brote como una fuente inmaterial en los corazones que se abran para comulgar con Mi Espíritu. Amén.

Quien hoy se lave los pies, se librará del pasado y se le concederá una Gracia por los méritos alcanzados por Mi Corazón. Amén.

Te ofrecemos, Universo, el Sacramento de la Redención, para que las criaturas de este Universo material, que vibran según Tu propósito y entendimiento, puedan recibir Tus células de Luz, vibraciones sutiles e inmateriales que transforman lo más profundo de los seres, a fin de que se cumpla Tu Voluntad.

La Fuente Inmaterial del Amor que proviene del Universo, encarnó como un hombre para testimoniar al mundo la grandeza del Amor y de la Redención.

La Fuente Inmaterial les entrega el Cuerpo y la Sangre de Cristo para que sus células reciban los impulsos y los méritos que alcanzó el Redentor.

Por eso, hoy les recuerdo el Legado que quedó registrado en la memoria del planeta hace más de dos mil años.

Coman y beban del Cuerpo y de la Sangre de Cristo, para que comulguen con el legado universal, que Dios expresó por medio de Su Hijo.

He aquí el Amor Vivo entre los hombres y mujeres de la Tierra. Felices serán los que comulguen con Él, para recibir la Gracia de la Fuente y la Misericordia del Único.

Que así sea.

Padre nuestro...

Este es Aquel que se entregó por ustedes y que se seguirá entregando. Dichosos serán los que participen de la comunión con la Fuente Inmaterial. Amén

Que en Austria y en Europa Oriental se establezca la Paz, a fin de que los corazones despierten al llamado de la Fuente para renovar los tiempos, para cambiar las formas, para encender nuevamente los espíritus y alegrar los corazones.

En el nombre de la Fuente del Amor y del Centro de este Universo, Yo les doy la Paz, para que sean paz, para que irradien paz, para que lleven la Paz de Mi Corazón a los que más lo necesitan.

Dios bendiga en este día, por intercesión de Su Divina e Insondable Misericordia, a todos los que escuchan Mi Palabra.

Reciban la Paz y la Misericordia de Dios.

En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Les agradezco por responder a Mi gran Convocatoria Universal.

Ahora pueden darse el saludo de la paz.

¡Les agradezco!

MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO DURANTE EL VIAJE DESDE EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, HACIA SAN PABLO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Yo Soy la Reina de los ángeles y, bajo Mi cuidado, tengo varias legiones y coros angélicos que protegen Conmigo la evolución del Plan de Dios.

Adonde Yo los envíe, ellos van y sirven silenciosamente a las almas, para guiarlas y que no pierdan el camino de regreso a la Casa del Padre.

Yo Soy la Reina de los ángeles y con Mi Presencia cuido a diversas legiones de ángeles que expresan linajes y virtudes que agradan a Dios, dones divinos que ayudan en la transmutación del planeta y de su humanidad.

Cada ángel de la guarda, que está unido a Mí por la oración del alma devota, Me anuncia cómo está el camino espiritual del ser al que acompaña desde hace bastante tiempo. Y esto es lo que el ángel de la guarda necesita para cumplir su misión en esta humanidad.

Los ángeles son altamente obedientes y solo viven un propósito.

Ellos no pueden escoger, son naturalmente serviciales y cumplen amorosamente los Designios de Dios.

Ellos trabajan día y noche por la redención del planeta y tienen la potestad de advertir y guiar a las almas que conscientemente se unen a ellos.

Ellos aman lo que hacen y buscan todo el tiempo poder llevar el bien a toda la raza, no importándoles el resultado o el precio de esto.

Los ángeles son capaces de proteger el mundo esencial de las almas si por alguna razón estuviera en peligro. Ellos pueden advertirles de cierto peligro a través tres llamadas internas, de las cuales la tercera define si el alma continuará encarnada o partirá de este mundo hacia una escuela mejor.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DEL NIÑO REY, RIO DE JANEIRO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

El Corazón de María: Un Portal hacia Dios

Queridos hijos:

Poco a poco les enseño a estar en contacto con Dios permanentemente. Por eso, en este tiempo, Mi Corazón se comportará como el Portal hacia Dios para cada uno de ustedes.

Necesito que den un paso hacia la madurez espiritual y que no pierdan tiempo buscando la felicidad humana lejos de Dios.

Yo les ofrezco un único camino, Yo les entrego todos los días y por un tiempo más la posibilidad de poder reencontrarse con el Padre Celestial.

Espero que sus ojos se abran, y especialmente que sus oídos internos escuchen con atención y concentración los Misterios de Dios que en este tiempo Yo les estoy revelando.

Queridos hijos, el Portal de Mi Corazón los conducirá a la Casa del Padre, y en la Casa del Padre serán uno en esencia, en espíritu y en vida.

Es hora, queridos hijos, de que ustedes penetren las revelaciones de estos tiempos y que a partir de este ciclo puedan comprender y vivir el tesoro divino que se les entrega.

Ninguna consciencia en este planeta, en este ni en ningún otro tiempo, llegó a conocer y a penetrar el misterio de los Aspectos de Dios.

En ese sentido, queridos hijos, la llegada y el descenso de los Aspectos del Padre sobre ciertas áreas del planeta se deben primero a la necesidad planetaria y, en segundo lugar, a la unión interna de las diferentes Faces de Cristo.

Después de la Ascensión de Jesús, nunca en la humanidad ni en el mundo se conocieron las Faces cósmicas de Cristo, es decir, los aspectos espiritual y divino del Redentor.

Por eso, queridos hijos, esta unión de los Aspectos divinos de Cristo es parte de la etapa previa a Su segunda y última venida.

La consciencia humana de hoy, la que está sumergida en las apariencias de la ilusión y está apartada del alma, vivirá los próximos acontecimientos como algo renovador y al mismo tiempo como un ciclo de profunda definición espiritual e interna.

Esta unión o fusión espiritual de los aspectos o de las Faces divinas de Cristo, después de las revelaciones realizadas por Mi propio Hijo, como el Sagrado Corazón, el Cristo Misericordioso y el Cristo Glorificado, marcan en esta etapa aguda de la Tierra un antes y un después en la ciencia humana, algo que no tiene explicación mental.

Después de las tres importantes revelaciones sobre las Faces de Cristo, Mi Hijo viene a unirlas en este tiempo para que un importante impulso universal sea dado y, en esa coyuntura, la unión espiritual de los Aspectos divinos de Cristo abra las puertas de los Universos espiritual, mental y material para que la Consciencia Única, llamada Dios, se manifieste esta vez a través de los Aspectos del Hijo y del Espíritu Santo.

Es así que en este acontecimiento único que preparará el apocalipsis de la humanidad, cientos de almas serán tocadas inesperadamente, y de la noche a la mañana se consagrarán al Plan de Dios de una forma nunca antes vista.

Es por eso que ese impulso espiritual, que está dando Cristo en los niveles superiores a la séptima dimensión de consciencia, trae como resultado la transfiguración del estado corrupto humano en un estado incorrupto, libre de deudas y de retrocesos.

La llegada espiritual y autónoma de los Aspectos de Dios a los Centros Marianos, promete en primer lugar ayudar a esa parte de la consciencia humana que está en un grave peligro de comprometerse con fuerzas del caos planetario.

En este ciclo, la unión y la adhesión de cada alma con los Aspectos sublimes de Dios, permitirá restablecer ciertos principios evolutivos que estaban perdidos.

Es hora de cruzar el Portal de Mi Corazón Materno para poder conocer en profundidad los Misterios divinos.

Les agradezco por responder a Mi llamado.

Los bendice en este día,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Maratón de la Divina Misericordia
APARICIÓN DE CRISTO JESÚS DURANTE LA 41.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA, EN LA CIUDAD DE MONTERREY, MÉXICO, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Y a pesar de que gran parte del mundo está en su muerte espiritual, Yo perseveraré con ustedes y no descansaré hasta conseguir lo que Mi Padre necesita para esta humanidad y para este Universo.

Y a pesar de que el mundo no escuche, no abriendo los oídos del corazón, Yo perseveraré con ustedes y no descansaré hasta conseguir lo que Mi Padre necesita.

Ayer les di a conocer un misterio que muchos no comprendieron, porque todo lo que se guarda en el Cielo no puede ser vivido por la mente.

Solo el corazón, sus corazones, tienen la capacidad de comprender lo que no es visible para todos; lo que vibra existe en todo el Universo.

La humanidad no puede restringirse a la vida material. En verdad les digo, la vida material es algo secundario.

Ustedes no pueden perder la unión con sus espíritus, porque serán sus espíritus, su mundo interior, los que comprenderán todo lo que existe en la Casa de Mi Padre.

Por eso, ha llegado la hora en que la humanidad, despierta y dormida, conozca la verdad que se guarda en el Universo.

Como un impulso espiritual para la redención de los corazones de todos los que están caídos en sus propios abismos, vengo a retirarlos, a cada uno, de su condición humana a través de los impulsos de Luz que viene a entregarles Mi Corazón.

Mi Corazón es el verdadero tesoro para ustedes, porque en Él se guardan todas las virtudes y dones que Dios constituyó desde el principio de la Creación.

Mucho antes de Adán y Eva, Mi Corazón ya pulsaba en el Universo como una realidad inmaterial, que después vino a encarnar entre ustedes para enseñarles a amar y sacarlos del error.

En Mi humildad les digo: están ante un Corazón poderoso, que no solo Me pertenece, sino a Mi Padre, porque Mi Padre es en Mí, así como Yo Soy en Mi Padre; y cada uno de ustedes puede estar en Dios. Cuando crean que eso es posible, así sucederá.

Esa es la razón por la cual las almas sufren mucho: se alejan del Padre, se alejan de Su Reino, de todos Sus tesoros celestiales que se guardan como una sagrada memoria, en Su Corazón Eterno.

Yo vengo a invitarlos, no solo a comulgar con Mi Cuerpo y con Mi Sangre, porque sé que es necesario para sus vidas vivir un ritual material, a una profunda comunión con Mi Corazón, como parte de una ceremonia interior para las almas.

Pero hoy Yo los estoy invitando a que se sirvan de Mi sagrada mesa todos los dones que Dios les está entregando por medio de impulsos espirituales que solo los renovarán, los redimirán y los curarán de todo, cuando se animen a dar ese paso, a abrir cada vez más sus consciencias a todo aquello que es desconocido por su vida material y por sus mentes.

Las Leyes que rige el Padre Celestial son Leyes Superiores y Divinas que la humanidad nunca consiguió seguir.

Una vertiente de esas Leyes, entre todas las que existen, son los Diez Mandamientos, las reglas básicas que se entregaron a la humanidad en el principio, a través de vuestro Patriarca, Moisés.

Si esas reglas hubieran sido vividas y no alteradas por la humanidad, la raza estaría en otro punto de su despertar y de su evolución. El sufrimiento no existiría en la humanidad.

De lo que ustedes llaman “deudas”, los corazones estarían libres si cumplieran las Leyes de los Mandamientos.

Pero como eso no ha sucedido, Yo tuve que encarnar en esta humanidad a través de la Sagrada Faz de Jesús de Nazareth, para enseñarles en las cosas simples los grandes misterios del Corazón de Dios, por medio de las parábolas que se guardan como llaves dentro del Evangelio que una vez Yo prediqué.

Aún así, compañeros, la humanidad no ha correspondido a lo que la Voluntad de Dios le ha colocado. Esa es la razón también, compañeros, por la que a través de los tiempos, nuestros Sagrados Corazones, el de Mi Madre María, el de San José, el del propio Cristo, hayan venido al mundo para poder instruirlo y corregirlo, para que puedan seguir el camino que Dios tiene previsto que puedan vivir.

Y aunque eso todavía no ha sucedido, Mi Sagrado Corazón les trae todas estas revelaciones.

Como fue la de Monte Shasta, así revelé en el Monte de las Bienaventuranzas todos los prodigios y las Gracias que las almas, en aquel tiempo, podían vivir.

Aún todas esas reglas están vigentes, aunque la mayoría de las almas del mundo estén separadas de esa realidad espiritual y solo los espera redimirse y consagrarse a Mi Corazón.

Si ahora, en este tiempo y por medio de este encuentro, tienen miedo a todo lo que Yo les digo, a las Revelaciones de la Consciencia de Dios, directamente de Su Fuente y en todo lo que Él ha creado, como en Monte Shasta, ¿cómo podrán, compañeros, esperarme cuando retorne con Mi verdadera Faz, aquella que Yo mostré en el Monte Tabor, en la Transfiguración?

¿Estarían listos para conocer Mi Ser Superior?

No quiero que se espanten, pues Mi Poder no es conocido por el mundo. Solo el diez por ciento fue el que descendió cuando Yo estaba en la Cruz y expiré.

Los templos se rompieron, las estructuras más rígidas se cayeron, los muertos resucitaron y hablaron y pronunciaron Mi Nombre.

Todos temieron en aquella hora por lo que le habían hecho al Hijo, al Primogénito, y a pesar de que todo eso sucedió y que reverberó en la memoria de muy pocos a través de los tiempos, aún tengo que venir aquí porque los amo y espero el bien para todos.

Pero es hora de que salgan del letargo para despertar a la nueva consciencia que trae Mi Faz de Gloria para los corazones más perdidos en el mundo, para aquellos que destruyen la Creación y los Reinos de la Naturaleza, solo buscando la conquista y el poder de sí.

Ha llegado la hora, compañeros, de preparar el mundo interno de la humanidad para poner fin a muchas cosas y para desenmascarar lo que aún muchos no ven con sus propios ojos.

El poder de la experiencia divina está descendiendo desde el Universo a este mundo, y cada vez que se aproxima, mayor será la purificación de los corazones para que estén libres de sí, limpios de todo y aptos para recibir al Redentor en Su segunda Venida.

Solo deseo que no sean indiferentes, como lo es el resto de la humanidad, que solo mira para sí misma y no para el semejante, para el que sufre, para el pequeño animal que está desprotegido, para el árbol que está lastimado, amarrado por las cadenas del hombre.

¿Ahora entienden que Mi Padre Me ha permitido estar en todo?

No solo estoy en la humanidad, sino en la esencia de los Reinos de la Naturaleza, que son la primera manifestación de la Creación del Padre Celestial.

Si esto se está volviendo corrupto por las manos de los hombres de superficie, ¿cómo la vida espiritual de la humanidad no se corromperá a sí misma por lo que vive y por lo que siente, por lo que hace y practica en contra de las Leyes de Dios?

Perdonen, compañeros, pero vengo a decirles la verdad para que abandonen el sueño mundial que muchas consciencias viven, sin siquiera percibirlo.

Les traigo Mis Gracias, las Gracias de Mi Gloria, para que puedan despertar cada día más y ver que el mundo está sufriendo las consecuencias de sus propios errores; es algo que el Padre no quiere ver más en esta humanidad, en este planeta y en todo el Universo.

Vengo a reactivar en ustedes el espíritu de la capacidad de amar, porque es el Amor que los liberará. Y así sus súplicas serán escuchadas y en el momento cierto, recibirán lo que tanto necesitan.

Sean corazones pacientes en la verdad y en el amor, así ayudarán a las almas que desesperan en el infierno de su propio error.

Les doy la potestad de amar cada vez más, sin límites, sin restricciones y sin fronteras, porque es el Amor, como ustedes lo han visto a través de Mi Pasión, el que todo revertirá.

Esta es una humanidad que ha alcanzado pocos grados de amor, a diferencia de otros Universos, en donde el amor crece, día a día.

Por eso están siendo ayudados por Consciencias que no conocen y que tal vez nunca conocerán. Consciencias al servicio del Amor, así como los santos ángeles y los santos arcángeles, que vienen a su encuentro cada vez que su Maestro desciende a la Tierra; y aunque no los puedan ver, ellos están aquí para colmar los corazones heridos y así, abrir las puertas a la Redención.

Mi esperanza en este día sagrado era decirles muchas cosas más, expandir el Sagrado Conocimiento que Yo les traje desde Monte Shasta, así como de otros lugares benditos en la Tierra, en donde se guardan las llaves para la Nueva Humanidad.

Tan solo cuando las almas se unan en una profunda oración accederán al legado celestial que está guardado en esos lugares para todos los corazones de la Tierra, como el Monte Sinaí, el Monte Tabor, el Desierto de Shamballa, las sagradas montañas de los Andes; lugares que están abiertos para que las almas puedan contemplar todo lo que Dios creó para cada una de Sus criaturas.

¿Ahora comprenden la diferencia compañeros, de poder contemplar y no destruir?

¿Cómo tendrán un mundo nuevo si lo están lastimando?

¿Cómo nacerá una nueva consciencia?

¿Cómo las Leyes de la cura descenderán a la humanidad, si la humanidad está enferma por no vivir la Ley del Creador?

¿Cómo se establecerán los puentes de la hermandad y de la fraternidad si los que oran son tan pocos?

Estoy invitando a los que nunca se animaron a penetrar el misterio de Mi Divina Misericordia, para que así como he hecho con cada uno de ustedes, pueda convertir sus corazones en fuentes de vida y de renovación.

Y ahora Me preparo para algo muy importante, en donde ustedes son partícipes y podrán serlo aún más, si colaboran Conmigo para que esta misión a los Estados Unidos se cumpla, independientemente de quién esté presente allí, en esa nación, o todo lo que haya hecho, a través de los tiempos, a otras naciones del mundo.

Nuevamente, bajo el espíritu de la Fe del Padre , los invito a colocarse por encima de todas esas cosas. Así, estarán dando un paso seguro hacia Mi Corazón, y no hacia otro, en donde todo está vacío.

Hoy, finaliza una etapa en México.

Los Sagrados Corazones en Centroamérica y en México consiguieron abrir las puertas para una sagrada oportunidad que se verá en un futuro cercano.

Las semillas que formarán la Nueva Tierra se siembran de a poco, para que sus frutos nazcan fuertes y den más semillas, para las nuevas almas que encontrarán este camino hacia Mi Corazón.

Que sus corazones busquen todo el tiempo ser sinceros, para que la proclamación guardada en esta canción sea escuchada por todos los que tienen que abrir sus oídos al llamado del Creador.

El corazón sincero es el que vive en Cristo.

El corazón sincero es el que busca a Cristo y a pesar de todo, aspira estar en Él.

El corazón sincero gesta en sí los tesoros de Dios, que formarán parte de la Nueva Humanidad.

El corazón sincero no es indiferente, sino atento, vigilante y solícito ante el llamado que enfrente en su camino. Vive así, como corazón sincero, en un servicio mayor.

El corazón sincero se abre para escuchar las correcciones de la vida, y sin prejuicios, acepta en humildad lo que Dios le envía.

El corazón sincero ama más allá de él y penetra las dimensiones en donde el Gran Amor de Dios se guarda y desde donde parte la Vida Eterna.

El corazón sincero atiende a las necesidades del mundo y no pierde ni un segundo para poder donarse por amor al Creador y a Su Hijo Primogénito.

Un corazón sincero es libre de sí y de todo lo que ha creído de sí mismo, porque su propia sinceridad lo lleva a liberarse de todas las amarras.

Un corazón sincero imita al Señor y sigue Sus caminos hasta poder encontrar su misión en estos tiempos.

El corazón sincero suplica a su Creador teniendo fe de que alcanzará lo mejor para todo este mundo.

Un corazón sincero abre las puertas al Reino de Dios con la expresión de su amor interior por todo lo que fue creado, y así, está en comunión eterna con todo el Universo y con su absoluto Rey, el Redentor.

El corazón sincero transmuta en silencio y no se incomoda por todo lo que vive, porque si en él está la humildad y la capacidad de amar, estará viviendo la Voluntad Divina.

El corazón sincero está disponible a su Maestro del Amor para poder cumplir todo lo que Él pide, confiando profundamente en que eso es verdad.

El corazón sincero muere para sí mismo para poder hacer nacer a las almas al Amor de Dios.

El corazón sincero es un apóstol del nuevo tiempo, es el discípulo de la sagrada renuncia y de la aceptación de todo lo que es divino y sublime en el Reino de su Padre.

El corazón sincero sirve para que se cumpla el Plan de Dios en esta humanidad y en todo el Universo. Así concretará la parte que le cabe y estará en el camino de la Luz siendo permeado por Mis Rayos, por la Luz de Mi Divina Misericordia, hasta que se cumpla Mi esperado Retorno.

El corazón sincero canta para proclamar la venida del Amor a través del Hijo de Dios.

El corazón sincero cree en el Retorno de Cristo y espera que cada minuto pase para que su Maestro llegue a su encuentro.

Sean corazones sinceros y se transformarán en algo que nunca han conocido.

Conocerán la libertad interior y estarán, a pesar de todo, en el Universo del Amor de Dios.

Con estas palabras, bendigo a los que se sacramentarán en nombre de muchos que serán tocados, como en esta nación, por Mi Luz redentora (*)

Cuando todos son sacramentados, puertas inciertas se cierran y nuevas puertas a la luz se abren, con el fin de que los corazones reencuentren su filiación y su profunda comunión con el Padre Celestial.

Después de esta consagración, compañeros, en donde sus almas y estos elementos fueron nuevamente bendecidos, con el fin de que siempre busquen vivir en la Ley, Mi Corazón ya está listo, así como lo estuve en la plaza de la flagelación, para ingresar a los Estados Unidos.

Les agradezco.

Hoy quiero que canten una canción que resuene en el pueblo de Dios, que busca vivir en la esperanza y en la comunión con el Redentor. Como ustedes una vez me dijeron: “Eso que soy, eso te doy”

No importa cómo sea, sino, que sea verdadero. Porque si lo que Me dan es verdadero, Yo siempre les agradeceré porque serán corazones sinceros que darán lo mejor de sí, a pesar de lo que suceda.

Me elevo a la Casa de Mi Padre llevando sus súplicas y las oraciones de todos Mis hijos en estos dos días.

Así, alzando Mi Mano hacia lo Alto, pidiendo la Gracia de Dios, colocando Mi Mano izquierda sobre Mi Corazón, Yo los bendigo bajo el Poder y la autoridad de la Santa Cruz, que redimió a las almas, exorcizó a los demonios, liberó a los corazones, e instituyó la unión del Cielo y de la Tierra a través de los servidores que viven en la buena voluntad, en la esperanza y en la fe, abriendo las puertas para esta próxima misión a los Estados Unidos.

Yo los bendigo y los absuelvo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. (x3)

No olviden que si están en paz, allí Yo estoy.

Les agradezco.

(*) El coral entona “Corazón Sincero”.

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Tu espíritu es como una barca en alta mar, y tu vida es permeada por muchas experiencias.

Cada momento es significativo para el espíritu, porque él debe entrenarse en cómo navegar en la paz o en la tempestad.

El espíritu es como una barca de luz que nunca pierde el impulso de encontrar las estrellas, pues de ellas provienen todas las Gracias, y una nueva historia se escribe en el alma que vive la redención.

El espíritu tiene coraje premeditado y toma fuerza interior para superar las dificultades de un posible naufragio.

Mira tu espíritu con valentía y serenidad; todo tiene un retorno hacia la Casa del Padre Celestial.

Navega, como la barca que descubre y conoce nuevos horizontes. Las puertas de los mares están abiertas; para eso mantente calmo y seguro porque un Gran Vigía te guiará. Él es el Rey del Universo, que todo colma y completa por medio de Su Gracia.

Sigue a la gran barca rumbo al infinito; tu hora de libertad está cerca en los tiempos que vendrán.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los conduce en la barca espiritual de la Paz,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Mensaje extraordinario
MENSAJE EXTRAORDINARIO DE LA VIRGEN MARÍA TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Quiero dar a conocer al mundo los Misterios del Espíritu Santo, porque ya se aproxima el tiempo en el que este Santo Espíritu cumplirá con Su misión primordial de vivir en la materia y así, divinizarla.

De la Consciencia de Dios nace Su Espíritu Santificado que habitará en Su Creación y traerá la vida divina a aquello que es materia física y no física.

El Espíritu Santo vive en Dios porque no solo proviene de Él, sino que también Él lo Es. El Espíritu Santo vive como una parte propia de Dios, Consciencia Suya separada de Su Gran Consciencia, pero que actúa como Dios, como Su Voluntad y Principio, porque lo Es.

Siendo Dios, el Espíritu Santo es como Su Brazo activo y vivificador que anima a todo lo que toca, colmándolo de Divinidad, de Alma Divina. Es como un Fuego, porque el Fuego en Él representa a la vida activa en Dios, la Luz que vive e incendia la materia y los espacios.

El Espíritu Santo es como el Corazón vivo de Dios, que recorre el Universo Celestial para tocar la Creación de Dios y dar vida a toda ella, vida divina.

Así, el Reinado de Dios se fue expandiendo en los Cielos. El Espíritu Santo vivía en lo que Dios creaba; y Él se tornaba como Dios, Padre-Madre de toda la Creación Celestial.

El Espíritu Santo no tiene nombre, porque está en todo, Él Es para vivir en todo, para ser Dios en todas las cosas.

El Espíritu Santo nace, cuando nace en el universo la necesidad de que exista el Amor, un Amor diferente al que ya existía en el Cielo, un Amor que sea el propio Amor de Dios en Sus criaturas. Y, para que eso fuera posible, era necesario que el Amor de Dios encarnara en la materia, que era lo que había de más denso y distante del Reino de los Cielos; porque tan infinito era ese Amor que, para vivir en su plena extensión, nacería en lo más bajo y alcanzaría lo más Alto, el Reino de todos los Reinos, la Casa del Padre de todos los Padres del Universo. 

Fue así que Dios retornó a la materia nuevamente .

Muchos se preguntan: "¿Porqué el Señor, que era todo Divino, manifestó Su Amor en la materia?" Porque desde ahí y hasta que alcanzara el Cielo, la extensión de ese Amor sería única.

Así fue como Dios envió a Su Hijo a la Tierra, Espíritu que provenía de Su Espíritu Santo, Verbo que encarnaría y traería a la Tierra Su Verbo Divino. De ahí nació el Cristo, Jesús, hijo de María y de José, de la estirpe de David.

Su Madre en la Tierra era como Su Madre en el Cielo, de la misma forma que Su Espíritu Crístico nació del Espíritu Santo. Para que ese Amor viviera, en carne y alma, sobre la Tierra, fue necesario que se hiciera en la Tierra como fue hecho en el Cielo. El Espíritu de Dios tomó de la Creación un cuerpo santo, un alma pura e inmaculada, limpia de cualquier mancha, eternamente santa como Su Espíritu.  Así, nació la Virgen María, parte encarnada del Espíritu de Dios, arquetipo de Su más pura creación.

Con estas palabras, les dejo este nuevo impulso de Dios para que abran el corazón y no teman conocer los grandes misterios de la Divinidad y todas las Faces del Espíritu Santo.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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