Cuando tu corazón te duele y se llena de angustias, ve a los pies de la Cruz, toca con tus manos a los Pies de Tu Señor y permanece allí.
Pon tus manos sobre las Manos de Cristo y comienza a sentir Sus Llagas. Cierra los ojos, permite que la memoria viva de Su Pasión te sea mostrada y permanece allí.
Deja que tu silencio te conduzca al Corazón de Tu Señor y que tu oración silenciosa se convierta en una oferta de reparación.
Sentirás en tu pecho un dolor mayor que el tuyo. Ese es el dolor de Cristo, una gota del océano infinito que Él asumió para salvarte. Aprende así, hijo, a convertir tu pesar en oración, tu petición en una oferta y tu silencio en un bálsamo que acoge al Corazón de Tu Señor.
Tu angustia se hará pequeña delante de la angustia de Cristo por el mundo. Tu pesar desaparecerá dentro de Su pesar por las almas.
Deja que tus lágrimas se conviertan en un puente para rescatar a aquellos que están perdidos. Ofrece tu silencio por los que no saben escuchar a Dios. Si no consigues orar deja que tu oración sea sostenida por las Manos de Cristo y, en un momento, percibirás que tus manos, que fueron a pedir, estarán allí para amparar y tu dolor se transformará en oferta. Buscando cura, repararás el Corazón de Dios.
Tu llanto se unirá al océano de Su Gracia y, aun pensando que estabas allí para pedir, estarás sirviendo a este mundo.
En este día de reparación, aprende en tu vida a hacer de todo una oportunidad para reparar el Corazón de Dios y aliviar el sufrimiento de las almas en este mundo.
Tienes Mi bendición para eso.
Tu Padre y Amigo,
San José Castísimo
Una nueva alianza se instituye entre el Cielo y la Tierra, entre los pacificadores y el Señor.
Sentados a la mesa de la redención, el Maestro purifica el espíritu de cada discípulo, lavándolo con Su Agua de Vida.
El Señor moja sus cabezas para que el Santo Espíritu los bautice con sus Dones.
El Señor lava las manos de Sus discípulos para que vivan, a partir de ahora, una vida de íntegra donación incondicional.
El Maestro lava los pies de Sus discípulos, así como Él lavó en el pasado los pies de Sus apóstoles, para que caminen por la senda de la pureza, de la resignación y de la obediencia.
Y así, todos son preparados para celebrar la comunión interna y espiritual con el Santo Cáliz del Señor.
Los pecados más impuros fueron disueltos. Las dudas más profundas fueron aclaradas.
El sentido del propósito de cada alma hoy es revelado. Nadie quedará prisionero de la ignorancia.
Todos los discípulos de Cristo ya son conscientes de la responsabilidad de su compromiso. Así el Plan de Amor se diseña en la consciencia de los que lo acogen, porque siendo tocados por la Luz del Espíritu de Dios reciben una Gracia que no merecen.
Llegó el momento. Llegó la santa hora.
El Santo Cáliz es tomado del altar por las Manos del Sacerdote Mayor.
Todos reverencian este nuevo acontecimiento. El legado que una vez fue confiado a la raza vuelve a despertar como un tierno recuerdo en el corazón de los que dijeron “sí”, de verdad.
El Santo Cáliz es elevado.
La sagrada fórmula de la consagración es pronunciada por el Altísimo Señor, y Sus discípulos, postrados en el suelo, reciben la inspiración de la Llama Sagrada del Espíritu Santo.
Se vuelve a consumar la alianza, pero esta vez no irá el Cordero al matadero; Su Sangre fue, es y será el testimonio de la victoria celestial a lo largo de los tiempos y de las generaciones.
Los Nuevos Cristos repoblarán la Tierra y se respirará, finalmente, la paz.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
De todas las almas imperfectas, Yo hago algo nuevo y renovado.
De todas las miserias, Yo transformo lo viejo y con todo eso construyo los nuevos tiempos. Es semejante a su Maestro con los apóstoles; con los que transformé y redimí al mundo, a pesar de que fueran imperfectos.
Nada se desperdicia en este Universo, todo se recicla y se transforma para ofrecer lo mejor a la Creación y a los demás.
Entonces, si te estás transformando, redimiendo y trascendiendo es por un bien mayor, por un fin que beneficiará no solo a tu consciencia, sino también al mundo.
Todo se transforma, todo se renueva.
Confía en que, más allá de los defectos, algo bello existe dentro de ti para ser ofrecido al Creador, para ser donado al Universo Mayor.
Sigue adelante, confiando en todo lo que el Universo te enviará para que aprendas.
Vive cada momento como si fuera el último y en cada etapa encontrarás la enseñanza que necesita tu consciencia.
No te canses de decirme “sí”.
¡Les agradezco por guardar Mis palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
Ora por las almas que están dormidas y que, en su trayectoria por la Tierra, olvidaron el verdadero propósito de la vida.
Ora por los espíritus que deben aprender a dejarse amar por Dios para que, así, curen sus más profundas heridas.
Ora por los corazones que se deben renovar delante del Padre para que puedan estar abiertos a Sus Leyes, a Su Tiempo y a Su Verdad, cuando estos comiencen a mostrarse en la Tierra.
Ora por todos los seres que hoy viven en el mundo para que despierten a su misión mientras hay tiempo.
Ora por lo que ya despertaron pero que, ante los asedios y las ilusiones del mundo, necesitan protección y amparo espiritual para no perderse.
Ora, hijo, por todas las almas creadas por el Padre Celestial porque para cada una de ellas hay una Voluntad perfecta. En el interior de todos los seres habita el Propósito Divino que debe manifestarse a su tiempo.
Que todos los seres reciban una oportunidad de amar, de conocer el verdadero Amor y de renovarlo en su interior.
Tu Padre y Amigo,
San José Castísimo
Hijo:
Las almas creen que tienen la autoridad de cuestionar o de poner en peligro Mi Plan de Amor a través de sus elecciones, disgustos o formas de vida.
La misión que Yo le ofrezco a las almas es muy seria, porque se trata del futuro y del destino de toda la humanidad y del planeta.
Por eso, todas las almas deben aprender a comportarse adecuadamente Conmigo, porque lo que Yo estoy haciendo por ustedes, lo hago también por la humanidad.
Ya no es tiempo de querer estar en una actitud o de querer estar en otra actitud. Este es el tiempo en el que los seres humanos, ante la Ley de la Justicia, definen su próxima etapa o su juicio definitivo, el que repercute en la evolución o en el estancamiento de toda la consciencia.
Sé que no es fácil para ti comprender y aceptar esto, pero no se puede jugar con Mi Plan así como algunos juegan con el fuego.
Llegó el momento de tomar decisiones con discernimiento para que ninguna acción tenga un efecto contrario sobre el propio ser.
¡Les agradezco por guardar Mis palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
Separarse de Mí significa separarse de la Verdad. Lo mismo es desconsagrarse de Mí, es perder la aproximación de Mi Corazón a la vida del ser.
Existen almas que vinieron a la Tierra con un compromiso espiritual que es irrefutable y que va más allá de toda la situación humana, moral o interna.
Cuando esa alianza entre el alma y Mi Corazón se quiebra, todo lo que rodea al mundo, sus más inexplicables miedos, frustraciones y engaños de un aparente bienestar llegan a la vida de quien, por voluntad propia, se separó de Mí.
En verdad, quien en este tiempo tiene el coraje de llevar adelante semejante acción significa no haber aceptado, vivido ni participado ni una sola vez de los códigos que una vez Yo derramé y entregué a quienes antes Me seguían.
En ese sentido, es la acción de la propia alma lo que impide la intervención de Mi Divina e Insondable Misericordia.
No existe ser sobre la superficie de la Tierra que después de haberme abandonado y después de haber abandonado a sus hermanos descaradamente, pueda tener paz o alegría en un momento tan crucial como este.
Este es el tiempo de darlo todo o de retenerlo todo. Es el tiempo en el que las almas fácilmente ponen en juego su camino espiritual por sentirse desajustadas.
Quien en verdad bebe de Mi Fuente nunca sentirá sed aunque se esté purificando.
Esta es Mi declaración de transparencia para los que se hayan decidido a vivir en la Verdad.
¡Les agradezco por considerar Mis Instrucciones!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
Ver la realidad del mundo día y día y, sobre todo, la realidad en la que se encuentran las almas, que una vez estuvieron a Mi lado, es como recibir de nuevo una lanza en Mi costado o cargar una cruz más pesada que la que Yo una vez cargué.
Los seres humanos no pueden saber lo que verdaderamente significa la vida espiritual sin antes amarla, vivirla y respetarla.
Es por esa razón que algunas almas que antes estuvieron Conmigo, no consiguieron corresponderme porque ellas no llegaron a amar de verdad el camino que Yo les había ofrecido. Esas almas solo pasaron por Mi Camino, pero Mi Camino no pasó por ellas.
Es así que esas almas podrían creer estar felices o libres de cumplir su compromiso, pero en verdad quedaron vacías como una barca que está sin brújula, quedando a la suerte del mundo, quedando al juego de lo que se disputa entre la vida material y el caos.
Pero, para esas almas reconocer la falta de fidelidad a Mí es como sentirse con una espina atravesada en el pie, porque el camino quedó inconcluso, el alma quedó sin la oportunidad de finalizar y de cerrar lo que una vez la endeudó.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
No existe preocupación más grande que Mi Amor, porque Mi Amor disuelve en luz toda preocupación. Nada opuesto al amor puede ser más grande.
Por eso, cuando hay preocupación es algo comprensible, es el punto de fricción que las almas encuentran cuando tienen que dar un gran paso por algo desconocido y mayor a sus pequeñas posibilidades.
La preocupación coloca a la consciencia en una tensión constante.
La preocupación se disuelve, también, a través de la confianza que el alma puede expresar por la Voluntad Mayor.
Hoy las almas se preocupan demasiado porque pierden el hilo conductor que las trajo hasta aquí, hasta esta vida, para cumplir el Propósito.
Pero también la preocupación sucede cuando el alma le teme al resultado de su destino o al destino del semejante.
Todos esos sentimientos, que son alimentados por la consciencia inferior de la humanidad, son vencidos a través de un amor confiante, de una fe capaz de ir más allá de toda dificultad y de todo obstáculo.
Yo, como Hombre y Consciencia encarnada, atravesé la preocupación y el miedo de enfrentar la Pasión. Pero la fe en Dios y la confianza en Mi Padre Me llevaron a darlo todo y a sostenerme en un propósito inquebrantable.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
El tiempo de este mundo pasa, y en el Universo, el Tiempo de Dios se aproxima.
Los ciclos se van transformando, las leyes viven un intercambio entre sí para que los impulsos recibidos por la vida sean otros.
Dentro de los seres, sus espíritus gritan, y aquellos que realizaron fuertes compromisos con Dios, ya no podrán permanecer en su ignorancia y en un común vivir en sus días.
Los rayos que espiritualmente descienden de los Cielos mueven en las almas la necesidad de despertar, mueven en los que están despiertos la necesidad de madurar, y mueven en los que están maduros la necesidad de profundizar. Nada quedará como está.
El Tiempo de Dios traerá inquietudes hacia todos los seres porque sus células cambiarán de vibración, sus esencias se aproximarán a su origen, sus espíritus verán en el horizonte la posibilidad de retornar a Dios. Todo los impulsará a la vida evolutiva.
Escuchen la voz de sus corazones. Sepan responder a sus almas y, delante de un llamado divino, siempre digan sí.
Su Padre y Amigo,
San José Castísimo
Queridos hijos:
En el día especial de la celebración celestial de la Inmaculada Concepción, que sus almas reciban el bálsamo de la Fuente del agua pura de la Gracia Divina, para que sus consciencias se puedan curar de las dolencias espirituales e internas, las que afectan al mundo entero.
Como hace más de ciento sesenta y un años atrás, hoy, la Inmaculada Concepción llega al mundo para decirle que no se olvide de la penitencia y de la urgente remisión de las faltas, a fin de que más y más corazones alcancen la Misericordia de Dios.
Hoy la Fuente espiritual de la Gracia Divina llega a Mis hijos que están en Lourdes y a todos los que de corazón, se unen a Mi Consciencia Inmaculada para que el estado de Gracia purifique y limpie sus almas y puedan renacer a la vida material y espiritual que el Padre Creador les concedió para que fueran felices en la Tierra.
Su Madre, Señora de Lourdes, hoy reza por Sus hijos más enfermos de espíritu, para que aprendan de los enfermos verdaderos del mundo que padecen todos los días y no pierden la esperanza de recibir la cura bendita de Dios.
Por eso, hijos, así como el agua que brotó en Massabielle, sus almas sean lavadas para que limpias por la acción del Espíritu Santo vuelvan a reencontrar la Paz y el Amor incalculable del Padre Celestial.
Los bendigo a todos.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Este es el ciclo de reconocer y de enfrentar en sí mismos las miserias para ser transformadas; pero también es el ciclo de descubrir los talentos que Mi Hijo dejó guardados en sus corazones.
Será necesario, hijos amados, que sustituyan sus defectos e imperfecciones por los talentos y las virtudes, las que deberán estar al servicio del amor por la humanidad.
Por eso, hijos, vivan el tiempo presente como la oportunidad de trascender los límites de la consciencia y del sufrimiento que todo eso genera.
Descubran, dentro de sí, las semillas de Luz que Mi Hijo una vez plantó dentro de ustedes.
Atribuyan, de verdad, el potencial que las virtudes del alma tienen para estos tiempos y todo, absolutamente, todo pasará.
Así aprenderán a ser más humildes, disponibles, considerados y serviciales con todas las necesidades que se presenten.
Solo les pido, Mis hijos, que ya no justifiquen sus actos o modos de vida. Reconozcan cada aspecto personal como una oportunidad de trascendencia y de perdón y no de batalla y de lucha.
Tienen Mi bendición para poder ir al encuentro de los Doce Talentos del Señor.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Soy la Madre que derrama sobre el mundo la Luz de la Gracia, para que las heridas más profundas sean curadas, y las almas se regeneren a través de la Luz poderosa del Padre Celestial.
Es esta Luz la que traigo al mundo, a las almas, a todos, sin distinción, cada vez que desciendo del Cielo para encontrarlos en el fervor de la oración, en la comunión con Mi Hijo, en la adoración y en la alabanza a Su Santísima Presencia.
La Luz de la Gracia se aproxima a las almas para consolarlas, fortalecerlas e impulsarlas al cambio y a la transformación de la consciencia.
Por esa razón, la Luz de la Gracia se derrama como un potentísimo caudal cada vez que las almas y los corazones están ante la presencia de la Sierva Fiel de Dios.
Reciban entonces esta Gracia de Dios, tan necesaria y urgente en estos tiempos de definición y de cambios.
Les dejo todo el Amor de la Gracia de Dios para que ella colme sus espíritus.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
A veces las almas pierden la unión Conmigo, porque pierden la fe en todo lo que he pensado para ellas, lo que trae como resultado la vivencia y la experiencia del sufrimiento.
Por esa razón, la llave fundamental está en la entrega de las almas al Corazón del Redentor, porque en esa entrega las almas tienen la posibilidad de trascender el control y el poder sobre las cosas.
Al contrario, cuando las almas no viven de verdad esa entrega, por diferentes razones, ellas se sumergen en las corrientes del mundo y quedan vulnerables, sin protección ni resguardo de la energía divina.
Esto sucede porque las almas no tienen la seguridad y el impulso suficientes para dejarse transformar por algo superior y desconocido a sus raíces.
El puente de la entrega permitirá que el alma siempre se beneficie, permitirá que todo se supere y se trascienda. Solo el alma debe dar el permiso para poder hacerlo.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
Queridos hijos:
Cada oración que Me ofrecen es como una flor que colocan a los Pies de la Madre Celestial. Esa flor es la súplica del corazón humano, el que, con esfuerzo y dedicación, se deja templar por el Amor Crístico.
Recuerden que cada vez que Me ofrezcan una sincera oración, Yo recibiré en el Reino de Dios, el testimonio perfecto de su amor por Mi Corazón.
Con todos esos pedidos, y por la intercesión de Mi Hijo, Yo puedo atender a las almas y al mundo, puedo llegar a donde existe mayor necesidad de amor y de redención.
A través de sus ofertas de oración, sus aspiraciones se concretan porque ellas estarán colmadas del amor de los ángeles del Cielo, y los obstáculos, internos o externos, no interferirán en el camino de sus pasos hacia el Propósito de Dios.
Por eso, por medio de su oración, Yo puedo colocarlos ante la realidad planetaria y ante situaciones complejas que solo la oración, como puente hacia Dios, resolverá, porque la oración verdadera es la que nace del corazón.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Que la Gracia y la Misericordia de Dios estén en ustedes, para que también la Misericordia y la Gracia estén en el mundo.
Reciban de Mi Corazón el Amor Maternal para que sus consciencias se fortalezcan en Cristo durante este ciclo de transición.
Que nunca les falte el ímpetu y la alegría de servir al Señor para que así, Su Obra de Misericordia se siga cumpliendo en la humanidad.
Nunca dejen de buscar al Señor, de llamarlo, de implorar a Su Sagrado Nombre, porque así estarán en contacto y en unión con la esencia de Su Propósito.
Que las Obras de Dios se cumplan en la humanidad y en todos los seres para que las almas estén más conscientes de lo que, en verdad, es necesario cambiar, curar y redimir.
Alaben a Dios y a todos Sus Sagrados Nombres.
Que el Cielo descienda a la Tierra y que la Tierra sea reconsagrada a los principios de la Fuente Primordial.
Que en todo esté la presencia del Amor de Dios, a fin de que la humanidad sea reconstruida.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Ofrezco Mi Corazón como refugio y reparación de las almas.
Ofrezco Mi Corazón como fortaleza de protección y de amparo, pero, ¿quién ingresará a Mi Corazón para poder vivir Mis atributos?
Ofrezco Mi Consciencia y Existencia por cada uno de Mis hijos, para que puedan conocer en sí mismos las Virtudes y los Dones de Dios.
Por eso, ofrezco Mi Corazón, incansablemente, hasta que las almas aprendan a dar los pasos, por sí mismas, en la seguridad espiritual necesaria para estos tiempos.
Mi Corazón es el Templo que se ofrece a las almas para que Dios sea adorado y alabado, y así se cumpla Su Voluntad en el Universo y en la Tierra.
Ofrezco Mi Corazón como amparo de los corazones, para que el misterio de Amor esté vivo en Mis hijos y ellos aprendan todos los días a amar a Dios, más allá de todo.
Ofrezco Mi Corazón como refugio de los desamparados y como alivio de los que necesitan reencontrar a Dios.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
La Sangre que aún derraman Mis Llagas expresan el dolor que todavía Me ocasiona el mundo con sus actos, decisiones y engaños. Eso es proporcional a la Sangre que derraman Mis Manos, Pies y Costado.
¿Quién Me aliviará y Me curará?
Es verdad que no necesito de almas perfectas, sino de almas buenas, por más defectos que tengan.
Es muy grande lo que Me hace sentir el mundo todos los días, aunque en verdad no existe ningún remedio que Me pueda sanar.
Por eso, es a través de Mis servidores que Yo Me apoyo, completamente, para llevar adelante Mi Obra de Amor y de Redención.
Necesito que esta Sangre que Mis Llagas hoy derraman sea recogida por el cántaro de sus oraciones y súplicas, así el alivio interior llegará para todos.
Los animo a compartir Mi sufrimiento y a hacerlo parte de ustedes para que, dentro de este ciclo, la Misericordia pueda descender y actuar en todas las almas.
Que Mi Sacrificio, el que una vez viví, sea recordado todo el tiempo para que el mundo no pierda la paz.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
Queridos hijos:
Deseo que la Faz de María, Rosa de la Paz finalmente sea pintada y que ella esté en el altar el día del aniversario de Mis mensajes diarios.
Ya pasó mucho tiempo de ese pedido, pero en este año 2019 quiero que María, Rosa de la Paz sea conocida en el mundo conforme a las indicaciones que, una vez, fueron entregadas.
Por esa razón, la revelación de la Faz de María, Rosa de la Paz, en este año 2019 indicará el comienzo de un nuevo ciclo de su Madre Celeste en la Obra que los Sagrados Corazones llevan adelante.
El mundo, conociendo la Faz de la Rosa de la Paz, podrá profundizar en el misterio y en la ciencia divina de la Madre de Dios y así se develarán los conocimientos de la vida universal para todas las almas.
Por este motivo, la Faz pintada de María, Rosa de la Paz, cumplirá promesas espirituales para todos los que tengan la imagen. Dichas promesas ayudarán a las almas para que ellas sepan atravesar el fin de estos tiempos.
Entre esas promesas, a quienes tengan consigo la Faz de María, Rosa de la Paz, no les faltará la paz, el ímpetu de orar de corazón, la alegría y el júbilo de estar en Cristo, el reconocimiento de la Gracia de Dios, el sentirse merecedor de la Divina Misericordia, el reconocerse como digno hijo de Dios, el vivir una fe fortalecida y amparada por el Espíritu Santo.
El día 2 de marzo de 2019 espero ver en los altares de Aurora esta santa Faz de María, Rosa de la Paz, para que así como fue con Faz de Jesús Glorificado, ella sea presentada al mundo en ese día especial.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Mientras, por un lado, la mayor parte de la humanidad está sumergida en el sufrimiento y en el dolor, por otro lado, existen almas que claman a los Cielos y ese pedido, que proviene del corazón, es el que permite mantener el equilibrio espiritual y mental de la humanidad.
Aunque existan acontecimientos dolorosos, el pedido de las almas orantes permite atraer hacia la Tierra la intervención divina, angélica y cósmica y, de esa forma, las almas son beneficiadas.
Vengo en este día para agradecer el trabajo maravilloso que cada alma orante, que cada grupo de oración y que cada país le está ofreciendo a Mi Corazón a través de la Oración por la Paz en las Naciones.
En estos últimos tiempos los corazones que sostienen este trabajo de oración consiguieron establecer en sí mismos esa filiación espiritual Conmigo; eso también permite derrotar muchos planes malignos y, a su vez, fortalece a las almas en el cumplimiento del Propósito de Dios.
Por esa razón, hijos Míos, envío y derramo Mis bendiciones sobre cada hijo Mío que cada día se esfuerza por aliviar Mi Corazón de todo lo que ve del mundo, como también por abrir la puerta para que Yo pueda interceder por todos.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Siempre los esperaré, día y noche, hasta que finalmente puedan llegar a Mí para vivir el encuentro interno con Mi Espíritu hasta el retorno de su Señor. Llegaré a ustedes a través de la Comunión, de la oración, de la confesión y del Amor vivo de Mi Corazón.
Quiero estar presente todo el tiempo cerca de ustedes para que sigan conociendo, en esta hora, el momento que vive su Maestro y Señor por la humanidad. Quiero tenerlos cerca para que Me acompañen en este ciclo, ya que hay mucho por hacer y obrar en este sufrido planeta. Aún es necesario expandir y llevar Mi Amor al mundo para que las almas se arrepientan de verdad y sus vidas cambien para siempre.
Por eso, les traigo el sostén para sus consciencias a través de los Sagrados Sacramentos. Les traigo la oportunidad de cargar Conmigo, la pesada cruz espiritual de la humanidad porque juntos, deberemos triunfar en el amor y por el amor vivir eternamente.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más