Mensaje extraordinario
MENSAJE ESPECIAL PARA LA 82.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA, RECIBIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, TRANSMITIDO POR CRISTO JESÚS GLORIFICADO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Que el Espíritu Santo resida en sus mentes y corazones.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Hoy bajo del Cielo para estar en este encuentro, para decirle al mundo que en este ciclo todo está permitido, Mi Padre así lo decidió. La humanidad necesita crecer interiormente para poder expresar lo que vino a hacer a este mundo.

Yo necesito que estén aquí Conmigo, en vigilancia, porque en esa vigilancia siempre encontrarán la paz y tendrán sabiduría para saber tomar buenas decisiones.

El planeta es como un frágil cristal que está a punto de romperse, así como todo lo que está dentro de él.

Pero ustedes, por medio de la oración misericordiosa y de su fe, aprendieron a fortalecerse, y esa fortaleza no puede ser tibia, sino que tiene que ser firme, basada en lo que creen y viven, en lo que ejercitan y ofrecen como servicio al mundo, como también a sus hermanos.

Por eso, todo está permitido para que la humanidad pueda aprender lo que aún no aprendió. Eso no significa que sigan sufriendo, porque aún los rige una ley fundamental que es el libre albedrío. En esa elección que hace la humanidad está la condenación, la perdición y la oscuridad.

Pero hoy los invito a colocarse por encima de esa ley y a unirse a Mi Conocimiento Divino, a Mi Palabra, para que por medio del amor y de la verdad aprendan a decidir con sabiduría y discernimiento, sin tener que ser tocados por la acción de esa ley.

Sé que no todos conseguirán hacerlo, porque aún están en el tiempo de vencer la dualidad. Hasta que Yo retorne eso no sucederá y los corazones deberán vivir lo que necesitan vivir para poder formarse como verdaderos servidores, siempre y cuando decidan seguir el camino que Yo les ofrezco no solo a ustedes, sino también al mundo entero, a todos los pueblos y a todas las religiones, porque Yo no solo soy el Cristo de los cristianos, soy el Maestro y Señor de todas las almas.

En las almas no hay religión, no hay doctrina; hay fe, confianza y unidad en el Padre Eterno, es ahí en donde Yo estoy. Y es así que Yo busco estar siempre en sus corazones y vidas, para que puedan reflejar los dones que les vengo entregando hace ya un tiempo.

Mis tesoros, que son internos, profundos e inmateriales, nunca se perderán. Cuando las almas no viven los talentos que Yo les entrego, retiro los dones y las virtudes de los corazones que no cumplen con Mi Propósito, y eso no significa que Yo los abandone.

En la soledad y el silencio Me detengo para observarlos, hasta el momento en el que ustedes aprendan a dar los pasos, así como Yo les enseñé desde el Huerto Getsemaní hasta la Cruz.

En cada instante de sus vidas se puede vivir la redención.

En cada paso de sus vidas está la oportunidad de la liberación cuando están bajo la Ley del Amor y de la Verdad.

Este mundo sufre y está dolorido, con penas no solo en su consciencia, sino también en su alma, porque el planeta es parte de todos y ustedes forman esa gran consciencia del planeta, la cual está enferma y necesita de cura. 

En el sostén de su fe y de su confianza en Mí, siempre existirán los puentes por los que Yo podré descender para socorrerlos y auxiliarlos, aunque no me sientan, aunque no me perciban, aunque Yo esté en silencio. 

Por eso, este es un momento definitivo, en el que el planeta está ante un acontecimiento impredecible, ante un destino incierto, sin saber cómo continuará el próximo tiempo. 

Pero ustedes, que han crecido con el amor de Mis Palabras y de Mi Sabiduría, no deben colocar sus mentes en lo que sucederá, sino en lo que está sucediendo. Allí, está la enseñanza que necesitan para poder crecer y aprender y, nuevamente, poder superar los obstáculos y las pruebas en la confianza infinita que les ofrece Mi Corazón.

Tal vez, lo que hoy les digo, compañeros, lo pudieron haber escuchado en otros momentos, a través de otras Palabras que ya he pronunciado. Pero sepan que en todo lo que hoy les digo está la respuesta que cada ser necesita según su escuela y su momento de purificación.

No crean que no veo lo que les sucede, lo que sienten interiormente, lo que sucede en sus mentes, lo que viven sus almas, a lo que aspiran sus espíritus para poder encontrar la verdad. 

Por eso la Jerarquía, en una única sintonía y vibración, se une en este momento, bajo Mi consenso y autoridad, para poder llevar al mundo entero los últimos impulsos que necesita a fin de que la humanidad despierte aún más su consciencia y perciba que no está bajo la Ley y que deberá retornar a ella.

Así, los tiempos y los momentos de incertidumbre, de sufrimiento, de pandemia y de inseguridad terminarán. Así estarán abiertos para poder recibirme en ese gran momento de Mi Retorno, que no está lejos, que cada día está más cerca y que deben tener presente, porque no le avisaré al mundo ni tampoco a ustedes. Llegaré en el momento más necesario y urgente, aunque todo se muestre tranquilo.

En ese momento, Yo podré volver para corregir a este mundo como nunca fue corregido. Y así, el juicio del Amor llegará y todos tomarán consciencia de eso, no importará que crean o que no crean, que sepan o que no sepan nada. Todos serán iguales ante la Mirada del Padre. 

Yo nunca les traeré un castigo, les traeré la Verdad a través del Amor que los liberará para siempre. 

Y serán lo que Yo necesito, lo que Yo tanto espero, lo que tanto anhelo desde hace más de 2000 años, porque si hoy estoy aquí es porque Mi Padre Me lo pidió, y Él Me lo mostró claramente en el Huerto Getsemaní, antes de entregarme en la Cruz.

Aún tengo Cálices llenos de Misericordia para que las almas los puedan beber.

Es tanto el Amor que he colocado en cada uno de los Cálices que ellos desbordan por el poder de la Luz de Mi Sangre. Esos Cálices, al no ser bebidos ni considerados por las almas, derraman los Códigos de Mi Pasión y de Mi dolor en el mundo.

Este es el sacrificio que Yo quiero que puedan vivir Conmigo; algo que va más allá de ustedes y de sus consciencias, de sus conocimientos o de sus intenciones.

Los Cálices del sacrificio serán los que salvarán al mundo y le concederán una amnistía espiritual y extraordinaria a gran parte de la humanidad, por medio de la vida consagrada, sacerdotal y misionera.

Por eso, cuanto más difícil es el momento, más duras son las pruebas y más doloroso para ustedes es saber la verdad tal cual es.

Este es el tiempo y la gran oportunidad de darlo todo por el todo, así como Yo lo di por ustedes, sin pensar ni un segundo en retroceder ni en desistir. Porque Yo sabía, compañeros, lo que vendría después. No hubo dolor humano, sentimiento o pensamiento que haya impedido realizar Mi tarea por el mundo, así como hoy realizo esta tarea por ustedes y con ustedes.

Mis Palabras terminan de ser escritas en el Libro de Dios, y ustedes deben ser parte de esa historia que está siendo escrita a través de Mi Obra.

En esta Maratón de la Divina Misericordia clamemos por el discernimiento divino, por la sabiduría universal, para que todos tomen buenas decisiones en este tiempo crucial, en el que la oración y el servicio serán el escudo que los protegerá y el impulso que los llevará a estar a Mi lado, incondicionalmente.

Hoy no vengo a ver sus errores, sus traumas o sus desiertos, porque ya los conozco. 

Yo vengo a dar valor y poder a cada Código de Luz, de Amor y de Palabra que he depositado en sus corazones, porque creo que ustedes los harán valer y se responsabilizarán de ello, sabiendo que Yo necesito de espejos en la Tierra, de servidores y misioneros en la superficie, para curar el dolor a través del Amor que Yo les entregué y el que siempre podrán dar sin miedo.

Arriésguense a amar, más de lo que Yo los amo.

Arriésguense a entregarse, más de lo que Yo Me entregué.

Aún nadie Me ha superado en el Amor, y espero que eso se cumpla algún día.

Hoy Me llevo del mundo el sufrimiento que vive, para que sea curado y liberado, transmutado y sublimado y para que, en esta Maratón, Mis discípulos, amigos y compañeros, renueven sus votos internos Conmigo. 

Que en este mes de junio, mes del Sagrado Corazón de Jesús, las almas recuerden que en Mi Corazón hay un lugar para cada una, un lugar que espera ser ocupado por ustedes.

Les agradezco por orar Conmigo, por orar por el mundo, para que el Proyecto de Su Redentor se cumpla en la humanidad. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN LA CIUDAD DE FÁTIMA, PORTUGAL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Abro Mi Corazón para que el Universo de Dios llegue a ustedes y puedan encontrar el sentido de la Vida infinita. 

Como hace 102 años atrás, retorno al mundo en este día para recordarles la importancia de su inocencia original que los llevará a encontrar la pureza. Una pureza que los salvará y los redimirá, que los hará dignos en el Señor y partícipes de Su Gracia.

La pureza original que Dios les dio, desde el principio de su existencia, no puede ser olvidada por el mundo y tampoco por los servidores de Cristo, porque los tiempos que están llegando son definitivos y colocarán a sus consciencias ante acontecimientos muy importantes de la vida planetaria.

Por eso hoy les traigo, a través de Mi Corazón, el Universo de Dios para que sientan y perciban a toda la Creación, a todas las estrellas, soles y galaxias, a toda la vida desconocida y misteriosa que la Creación guarda desde antes de este planeta.

Por eso, hijos Míos, sientan en este momento que están ante una de las Voluntades de Dios, en el momento cuando el Padre pensó en la Creación y en todo lo que vendría después de que Él emanara Su Divino Pensamiento sobre las Esferas Sublimes para que los Arcángeles, los Padres Creadores, junto con Sus huestes angélicas pudieran crear los Universos y la Vida Infinita.

Ustedes, como humanidad y como almas, son parte de un principio, son parte de un misterio que, en el fin de este tiempo, se develará para que la consciencia humana tome conocimiento de la Verdad y pueda salir, finalmente, de la ilusión en la cual se encuentra.

No dejen que las influencias de estos tiempos los hipnoticen o los puedan hacer cegar espiritualmente. Coloquen su corazón en el Corazón de la Jerarquía y siempre verán la luz en sus caminos. Siempre participarán de la revelación de los Misterios de Dios y tomarán consciencia de las grandes herramientas que el Universo guarda desde los orígenes, desde la existencia de los grandes Lagos de Luz, llamados Nebulosas, de las cuales la humanidad entera proviene.

Este es el tiempo y el momento de recuperar y de proteger los valores de Dios para que esos valores estén presentes en sus vidas. Es tiempo, hijos Míos, de que ustedes, en el nombre de Cristo y en el nombre de Su Amor, den valor a lo sagrado. 

Pero para que lo sagrado esté presente en sus vidas, ustedes deben aspirar a lo sagrado, deben buscar lo sagrado por medio de la devoción y de la fe para que lo sagrado no se desvanezca del mundo y de la consciencia humana por las influencias de estos tiempos. Todos los atributos de Dios los llevarán a descubrir su verdadera Vida Divina y la razón por la cual están aquí, que no es solo una razón material o humana.

Abran las puertas de sus corazones para que sus almas puedan obrar y realizar la tarea que vinieron a cumplir.

Este es el tiempo de dar importancia a lo sagrado para que lo sagrado pueda prevalecer sobre la superficie de la Tierra y existan almas que, congregadas por Mi Hijo, puedan reflejar como espejos la Vida Divina, en un tiempo de caos y de conflicto. Eso fortalecerá la fe en la consciencia de la humanidad. Eso hará que el Amor Universal pueda estar más presente en la consciencia planetaria y que no desaparezca de los hombres la Compasión y la Misericordia de Dios.

Deben seguir siendo testigos, hasta el final, de la Presencia de Cristo en sus corazones y en sus vidas. Dios solo necesita que la inocencia no se pierda en el mundo, porque si la inocencia se pierde en el mundo la pureza no estará presente en las almas ni en los corazones, y será difícil para la mayoría de las almas porque no podrán alcanzar la Vida Universal. 

Por eso, la entrega total de sus consciencias es importante para Dios, cada uno a su tiempo y a su ritmo, pero que sea una entrega verdadera, sin condiciones, porque así serán semejantes a Mi Hijo como Él lo fue, en Su entrega, cuando estuvo presente en la Tierra y los hizo partícipes de Su Palabra, de Su Buena Nueva, de Su Mensaje de paz y de reconciliación.

Dios necesita que la inocencia no se pierda en el mundo para que no se desvanezca la paz. Por eso el mundo conocerá, aún más, a los Recintos Sagrados que están presentes en la Tierra y que, silenciosamente, encienden sus principios de Luz y de Misericordia para que las almas los puedan recibir y acoger.

Lys es un Recinto Sagrado para Dios, es un lugar en donde la pureza puede ser recuperada para el mundo entero. Por eso Su Mensajera fue enviada aquí y no a otro lugar. Aquí está la Fuente de lo que el mundo necesita verdaderamente. Aquí está la Fuente que puede llenar su vacío interior y hasta aliviar su desesperación humana. Aquí está la paz, está el amor, está la cura de las esencias del mundo.

Por eso, Lys siempre reverberará y le recordará al mundo entero este lugar, tan simple y humilde para los corazones que buscan, en su interior, la unión con Dios y Sus Mensajeros Celestiales. 

Esta Fuente saciará la sed espiritual del mundo y siempre podrá llevar al mundo la reconciliación para que las almas no pierdan el sentido de estar aquí y del compromiso que tienen con lo Alto.

Por eso, lo sagrado es importante en este tiempo hasta en los pequeños detalles. Me ofrezco como Madre y como Consciencia Divina a llevarlos hacia el camino de lo sagrado para que en ustedes esté presente la devoción a Dios y la confianza absoluta en el cumplimiento de Su Propósito Divino.

En lo sagrado encontrarán la verdad y en la verdad descubrirán la cura que necesitan, no solo como seres humanos, sino también como almas, como esencias.

Reverencien este momento de estar dentro de la Fuente de Lys en nombre de todos sus hermanos que esperan, con esperanza, poder sentir y vivir este espacio sagrado para recibir lo que necesitan.

Pero como el Padre es Omnipresente y Omnisciente, hoy la Fuente de Lys llega a todos como un bálsamo de luz y de paz. Detiene, por un tiempo, los conflictos del mundo, la división entre las familias, el odio entre los corazones, la enfermedad de los cuerpos y la maldad humana.

El triunfo de Mi materno e Inmaculado Corazón, hijos Míos, también se dará cuando sus vidas alcancen el atributo de lo sagrado con el esfuerzo interior, con el amor del corazón, con la devoción que pueden proclamar sus espíritus en unión a la Divina Fuente, a fin de que las Gracias sigan descendiendo al mundo y a los corazones que necesitan de redención.

Hoy derramo, como un Código de Luz en cada uno de ustedes, la oportunidad de encontrar el camino de lo sagrado para que la inocencia no se pierda en el mundo y la Verdad de Dios los haga libres de espíritu y así, se pueda cumplir Su Voluntad.

Por eso, como Madre y Mensajera, como Guardiana y Mediadora, los llevo a todos por las naciones del mundo para que puedan testimoniar, junto Conmigo, la falta de inocencia y de la pureza original. Y para que, por intermedio de los servidores de Cristo, se puedan sembrar en la Tierra los códigos de la pureza y de lo sagrado para que, en cada nación, pueda brotar una fuente de luz que renueve a los corazones y que despierte la fe en los que la han perdido por diferentes razones y motivos.

Por eso hoy, a través de Mi Corazón, los aproximo al Universo de Dios, al Origen del origen, para que a través de este Universo puedan ver y sentir las Virtudes de Dios y los Dones de Amor que Él le entregó a la Creación para que todo existiera.

En unión al Ángel de la Paz, Yo los bendigo y le agradezco a cada hijo Mío su oferta y su donación para que se cumpla el triunfo de Mi Inmaculado Corazón y la victoria del Sagrado Corazón de Jesús, en la humanidad y en las naciones del mundo.

Lys siempre será un lugar donde podrán encontrar la paz cuando la necesiten y así, abrir su corazón al perdón.

Les agradezco por responder a Mi llamado y los bendigo con la Luz del Reino del Santuario de Lys.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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