MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Si no puedes adentrarte en los desiertos de la Tierra como lo hacían los Padres de otrora para curar sus pecados y convertir su profunda condición humana, adentra, hijo, en el desierto de tu corazón.

En estos tiempos finales, las cosas del mundo son como imanes que atraen constantemente tu consciencia hacia el más profundo abismo de la oscuridad y de la perdición. Pero tú, como hijo de Dios, consciente de Su Presencia en tu interior, puedes optar por no seguir las tendencias de la Tierra y adentrarte en el desierto de tu corazón para que, solo y en soledad, encuentres a Dios.

Dialoga con el Padre todos los días y siente Su proximidad divina cerca de tu corazón. No dejes que te consuman las cosas del mundo y que te hagan olvidar o colocar en segundo plano aquello que es el verdadero sentido de tu existencia.

No te olvides de contemplar el Universo en tu corazón, así como el Infinito, y de reconocer, una y otra vez, tu pequeñez. El corazón que se reconoce pequeño y es agradecido con Dios, con su simplicidad abre las puertas al Cielo, a las dimensiones divinas, a la realidad superior en donde la verdad se revela.

Deja que tus oraciones se tornen cada vez más profundas y sinceras. Cruza el umbral entre ser un hijo y un compañero de Dios, parte Suya viva, renovándose en Su Creación para retornar al Todo con un Amor mayor.

Que el Propósito Divino siempre esté visible para los ojos de tu corazón, para que jamás pierdas las oportunidades de amar, de perdonar, de comprender al prójimo y de encontrar a Dios.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Contemplen a la Consciencia de Dios como un gran Reino de infinitas proporciones y belleza, y a cada uno de Sus Aspectos como una puerta a un estado de consciencia de ese Reino Celestial.

Contemplen a los Aspectos de Dios como un gran camino de ascensión construido por el propio Padre para que Sus hijos puedan llegar a Él.

Cada Aspecto de Dios es un puente de elevación hacia una dimensión superior, y el contacto gradual con Ellos los hace retornar a la Fuente de la Unidad, en donde todo se hace Uno nuevamente.

Cada Aspecto de Dios, además de un puente, también es un Reino que se revela cuando el corazón se abre para descubrirlo.

Dentro del corazón humano se encuentra una llave única que abre las puertas a cada una de las dimensiones del Reino de Dios, en la medida en que ese corazón vive mayores y más elevados grados de Amor.

El Reino de Dios en la Tierra, aún desconocido para los hombres, es la manifestación de un Aspecto del Padre que solo se puede revelar a los corazones que aman. Para vivir la Revelación de la Vida en este mundo y conocer lo que está oculto, tanto en el interior de la Tierra como en lo invisible de la superficie que pueden ver con sus ojos materiales, primero ustedes deben aprender a amar aquello que les es accesible, palpable y visible.

Para acceder a un estado superior y vivir una Revelación Divina, primero deben aprender a manifestar el amor en el nivel en que se encuentran.

Manifiesten el amor a la vida, a sus hermanos, a los Reinos de la Naturaleza, a la propia consciencia del planeta y ustedes verán como sus corazones y sus consciencias accederán a dimensiones de la vida que siempre estuvieron aquí, pero que nunca pudieron ver.

Encontrarán, entonces, la verdadera expresión de Dios en la Tierra, la Revelación de Su Reino y de lo Sagrado que Adonai manifestó en la vida material como parte de sí mismo, como una dimensión de lo que Él es y que fue entregado a los hombres para que, en comunión con el Dios que se manifiesta en la materia, pudieran renovar la Consciencia Divina a través del amor.

Mientras el mundo se estremece, Dios los llama para despertar sus consciencias al verdadero sentido de la vida y que, a través del amor que nace de sus corazones, puedan acceder a lo que es real y trasciende a todo el conocimiento e incluso a toda la sabiduría humana.

Solo con el corazón y la consciencia sumergidos en la verdad y en la Revelación del Reino de Dios, Reino que cohabita con la vida en la Tierra en dimensiones que los corazones que no se abren al amor no pueden ver, es que ustedes podrán superar los tiempos que llegarán.

Todas las mentiras saldrán a la luz. Todo lo que parecía perfecto, pero que pertenecía a la ilusión, caerá por tierra y volverá al polvo.

Para los corazones que no sepan amar y que no vivan la Revelación del Reino de Dios, no quedará vida, porque las bases de sus vidas se desmoronarán y no verán más que polvo delante de sus ojos y confusión en su mundo interior.

En contrapartida, los corazones que despierten al amor y a la Verdad y permitan que Dios les revele Su Reino y la vida superior que en Él habita, mirarán el polvo y, detrás del polvo, verán la Verdad manifestada.

Por eso hoy Yo les digo, hijos, que para vivir tendrán que amar, porque solo encontrarán la vida cuando el amor les revele lo que, sin él, no se ve.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Así como lo anuncian las señales en el Cielo, que son claras y bellas para los ojos que saben verlas, así llega Dios a la Tierra y manifiesta dentro y fuera de los hombres Su Esplendor y Su Gracia.

Tan simple como contemplar un arcoíris que surge en una tarde fría en el Cielo de la Tierra y que alegra a los corazones, así también las almas deberían contemplar en su interior la Presencia de Dios.

El Universo Celestial, bello y sublime, es tan simple como las cosas que alegran verdaderamente a las almas y a los corazones humanos; pero para alcanzarlo es necesario buscarlo con el mismo amor y con la misma voluntad que buscan las señales que se manifiestan en el Cielo.

Dentro de ustedes se guarda un misterio que se oculta por detrás de lo que piensan que son. Este misterio es el Universo Sublime de Dios, cuya puerta no se encuentra en las alturas, entre las nubes, sino en el propio corazón.

Dios se hace tan accesible al espíritu de los hombres como la belleza de un arcoíris lo es para sus ojos. Pero así como buscan el arcoíris y lo encuentran, así también sus espíritus deben buscar aquello que los nutre, los alegra y los torna plenos, que es Dios dentro de sí mismos.

Para encontrar a Dios en el propio corazón, pueden dejar que Él se refleje como un espejo en su interior. Cuando contemplen un Cielo pleno de belleza, cuando contemplen una expresión pura de la Naturaleza, no solo permanezcan en lo que ven, sino más bien abran los espejos de sus corazones y dejen que eso que es bello les revele la belleza y la pureza de sus espíritus, eso que verdaderamente son.

Todo lo que fue creado por Dios es bello y es perfecto, y esa misma expresión divina que encuentran delante de sus ojos pueden encontrarla dentro de sí mismos, cuando se abran para encontrar la Verdad en su mundo interior.

Que todo los eleve.

Que todo los lleve a Dios.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE SEMANAL DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE FÁTIMA, PORTUGAL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Paz, hijo, es el estado que tu corazón alcanza cuando se une a la Verdad de Dios.

Paz es el estado inalterable que nace de la certeza de una realidad superior que trasciende la existencia humana.

Paz es un estado que despierta o que nace en los corazones cuando ellos se abren para amar y conocer el Plan de Dios, reconociendo su grandeza y perfección y, en consecuencia de eso, reconociendo la pequeñez humana.

Paz es un estado que el corazón encuentra cuando sabe que está cumpliendo su parte todos los días y que hace todo lo que puede por la evolución de los seres, por el despertar del amor, por la expansión de la fraternidad.

Cuando el corazón no está en paz no es porque falte la paz en el mundo, no es porque Dios lo prive de la paz; es el propio ser el que se aparta de ella por saber que está en falta, por saber que no hace todo lo que podría estar haciendo, por saber que no está dando todo de sí.

Descubre el camino hacia la paz a través de la transparencia, de la sinceridad, de la verdad, de la donación.

El corazón que se confiesa encuentra la paz porque retorna a la Verdad, porque desnuda sus mentiras y vanidades ante Dios y se renueva, se torna digno de reconocer la paz, de estar en ella y de multiplicarla.

El mundo está en caos, viviendo el dolor y el sufrimiento. Las almas están en agonía, viviendo su definición, en el miedo; pero, a pesar de todo eso, es posible estar en paz, encontrarla y vivirla, porque la paz no depende del mundo, depende solo de ti.

La paz no es el fin de las guerras ni el fin de una humanidad viviendo según sus tendencias y necesidades superficiales, porque un corazón puede tenerlo todo, todas las cosas que desea, puede que no viva en medio de conflictos y, sin embargo, no conocer, no encontrar y no vivir la paz.

La paz es un estado interno, fruto de la unión con Dios y de la transparencia delante de Él.

Por eso, hijo, hoy Yo te invito a redescubrir la paz dentro de ti confesando tus miserias ante Dios, desnudando tus personajes para darle espacio a una transparencia desconocida que es la puerta a la verdadera libertad.

Experimenta ser libre en un mundo que se tornó la prisión de sí mismo. Experimenta estar en paz y ser un instrumento para que Dios le dé a conocer al mundo la paz a través de ti.

Entra en un nuevo ciclo de aspiraciones verdaderas, de acciones verdaderas, de amor verdadero, de verdadera paz.

De esa forma, caerán los hombres a tu derecha y a tu izquierda y la paz de tu corazón, que no tiene su base consolidada en las cosas del mundo, sino en tu unión interna con Dios, jamás será derrumbará.

Persiste en la búsqueda de la paz, pero sigue por el camino correcto. La transparencia y la verdad son tus vehículos para alcanzar la paz.

Tienes Mi bendición para eso.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE PARA LA APARICIÓN DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA SAGRADA CASA DE MARÍA, MADRE PAULISTA, SAN PABLO, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Hijos Míos:

Coloquen sus ojos y sus corazones en la Verdad de Dios, porque hoy, y a partir de este nuevo ciclo, Yo vengo a despertarlos del sueño de este mundo y a liberarlos de los cautiverios de la vida material.

Yo vendré para remover de su interior aquello que los ata a este mundo, les hablaré al corazón y también a todos los aspectos de sus consciencias que se resisten a la transformación; porque ya llegó el momento de ser otros y, ante todo lo que saben y todo lo que recibieron, no pueden continuar sus vidas como si fueran los mismos tiempos de hace quince o veinte años atrás.

Hijos, ya no deben basar su entrega y su donación en la falta de entrega y en la crisis material que vive el mundo en este tiempo. Esta crisis es el anuncio de un tiempo de pruebas y, cuanto más difícil sea la vida sobre la Tierra, cuanto más les cueste donar material o espiritualmente algo de sí, más deben saber, hijos Míos, que es hora de hacerlo, porque el hecho de que el mundo esté en crisis significa que Mi Corazón, así como el Sagrado Corazón de Jesús y el Casto Corazón de San José, deben llegar a las almas y a las naciones que necesitan despertar.

No midan los Planes de Dios de acuerdo con las necesidades humanas. No piensen que, si las naciones están en crisis y la economía es escasa, los Sagrados Corazones ya no deberían peregrinar por las naciones; porque estos pensamientos son semillas de árboles dañinos que están naciendo en sus consciencias para distraerlos y hacerles olvidar el Plan de Dios.

No tengan miedo ni resistencias al escuchar Mis Palabras, porque Yo vengo a tocar en donde la humanidad no se quiere transformar, Yo vengo a abrirles los ojos a aquello que no quieren ver.

Sí, el mundo está en crisis. Sí, las personas en las naciones están con dificultades económicas y cada vez lo estarán aún más, porque las bases de sus vidas no deben estar formadas según las necesidades materiales.

No es para acumular bienes físicos, disfrutar ni usufructuar del planeta que vinieron al mundo, hijos Míos.

Vinieron al mundo para vivir este exacto momento por el cual hoy están transitando. Momento en el que Dios los llama a transformar la condición humana, a no tener miedo de donar aquello que no tienen, más allá de lo que les sobra. Y les hablo de todos los niveles de donación, no sólo material como también espiritual.

La crisis del planeta se expandirá por todos los sectores de la vida, y ustedes son llamados a consagrarse cada vez más a los Planes de Dios.

Muchos los verán como locos y criticarán Mis Palabras, pero no tendrán precio las Gracias que las almas y el planeta recibirán durante su mayor crisis, cuando los Mensajeros permanezcan en el mundo y fortalezcan los corazones para su prueba mayor.

Aún necesitaremos llegar a muchas naciones de este mundo para abrazar y alcanzar a aquellos hijos Míos que, en lugares remotos, condenan la propia existencia, y para curar heridas planetarias que de otra manera no podrían ser curadas.

Porque no son muchos, hijos Míos, los que tienen la dádiva de ser conscientes de lo que Dios realiza espiritualmente en el mundo por intermedio de Sus Mensajeros. Y, a esos pocos, a los que les damos todo, también les pediremos todo, porque a través de sus conciencias es que transformaremos los conceptos humanos y, a través de sus vidas, testimoniaremos al mundo que es posible entregarse, aún en tiempos de crisis, de miedo y de caos.

Sus corazones deben estar en el establecimiento de los Planes de Dios y, de esa forma, vacíos de conceptos humanos en un mundo lleno de miedo, ustedes, hijos, serán como antorchas que simbolizan el despuntar de una nueva vida.

Y es en esas bases, formadas por sus corazones y en las que rendirán al viejo hombre, que Mi Hijo vendrá para reconstruir la Tierra.

Crean y tengan fe de que cuando les hablo estas cosas estoy preparando, en ustedes y en este planeta, el esperado Retorno de Cristo al mundo.

Yo los bendigo y los llamo a la profunda reflexión del corazón.

 Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Mensajes mensuales
MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Todo lo que les pueda decir o revelar el Universo a través de la Instrucción, los llevará a la Verdad y sus ojos no estarán ciegos; al contrario, por medio de la Instrucción divina ustedes conseguirán ver una parte y un poco más, de lo que normalmente pueden ver.

Así podrán estar a la altura de los acontecimientos y, con espíritu de premeditación, sabrán qué hacer y de qué manera proceder.

De esa forma, sabiendo todo lo que el Universo les revela por medio de la Instrucción, ustedes caminarán firmes y, por más que en algún momento esa instrucción parezca extrema para la vida de un ser y para la definición de una consciencia, aprenderán a agradecerla todos los días, por no estar ausentes o lejos de la Verdad que solo intenta colocarlos en un nuevo escalón del despertar.

Sepan, entonces, amar la Instrucción como ella es y podrán estar preparados para recibir y escuchar nuevas revelaciones, las que en estos tiempos solo intentarán colocar a las almas en el camino correcto de la definición y de la entrega.

A pesar de todo, la humanidad ya fue muchas veces advertida de que llegaría el tiempo en que el propio Tiempo de Dios separaría la paja del trigo y todo sería dicho.

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Siempre los bendice,

Vuestro Maestro, Cristo Jesús

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE QUITO, ECUADOR, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Hijo, deja que en tu corazón se muestre el Corazón de Dios, para que sepas que no eres solo esa pequeñez humana en la cual te enredas todos los días sin saber cómo salir.

Deja que se muestre en tu corazón el Corazón Vivo de Dios, no solo para que vivas una experiencia espiritual, sino por una necesidad de emergencia que necesitas suplir para lograr estar sobre la Tierra.

¿Qué temes purificar, si para eso fuiste llamado a este mundo? ¿Por qué temes reconocer la verdad sobre ti mismo, si para este momento viviste toda tu evolución sobre la Tierra?

Viniste al mundo para curar tu espíritu, crecer y ser un milagro de conversión, no solo según los conceptos de la Tierra, sino para todo el Universo.

Ya sabes que el Infinito te aguarda. Ya sabes que debes tornarte algo nuevo y desconocido. ¿Por qué, entonces, no te rindes a lo que Dios tiene para ti?

Pequeño hijo Mío, alma en redención, deja que se cumpla en ti lo que Dios pensó. Ya sea en la humillación o en el engrandecimiento, ya sea en la soledad o entre las multitudes, abraza lo que Él diseñó para tu vida, porque todo es para que Su Voluntad se cumpla.

Ya sea entre los hombres o solo, contigo mismo, deja que emerja de tu corazón el Corazón de Dios que habita en ti. Haz el ejercicio y vive la Gracia de sentir la Presencia de Dios en tu interior, porque Él es quien te dará la fuerza para estar entre las multitudes o en la prueba del Getsemaní. Él es quien te dará la humildad para cuando seas aclamado y honrado, y para cargar la cruz con el mismo amor y el mismo vacío interior.

Es Dios, hijo, en tu corazón, quien vivirá cada prueba, así como cada triunfo. Él es quien se renovará a sí mismo por medio de tu corazón. Pero si tú no crees y no vives eso, estarás solo en este mundo con tu condición humana, sin saber a dónde ir, aunque el camino se revele en tu propio interior.

No quieras estar solo contigo, sino con Dios. No quieras ser tú mismo, sino una expresión del Padre.

Cristo, hijo, alcanzó todo lo que alcanzó porque Él era Uno con el Padre y lo sabía, lo vivía y lo proclamaba. Él experimentó ser parte viva de Dios y te dijo que ese era el Camino, la Verdad y la Vida. No hay Camino, Verdad y Vida fuera de Dios.

Tú no estés muerto, caminando por este mundo sin saber hacia dónde ir. Nace para la Vida; deja que Dios, que es la propia Vida, se exprese en ti. Entrégale al Padre el lugar que le corresponde en tu corazón. Sé un simple siervo, instrumento Suyo en este mundo.

Yo te bendigo y te invito a rendir el corazón a Dios.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE PARA LA APARICIÓN DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

He aquí que vendré del Cielo con el Cetro de Dios para abrir las dimensiones, decretando el Poder de la Luz Divina y de Su Voluntad.

Vendré del Cielo con el Cetro de Dios, para abrir las puertas hacia Su Reino y disipar la ilusión de los ojos y de los corazones de Mis hijos, para que reconozcan la Verdad y la sigan.

Vendré del Cielo con el Cetro de Dios, el que simboliza Mi profunda unión con el Creador; simboliza Mi Origen y demuestra a los corazones ignorantes del mundo la verdadera existencia de la Madre Celestial.

Vendré del Cielo con el Cetro de Dios, demostrando que el Verbo Divino es Uno, no solo con el Hijo, sino también con la Madre, con el Vientre Puro del cual surgieron todas las cosas, inclusive el Hijo, que es Uno con el Padre.

Vendré del Cielo con el Cetro de Dios para que todas las almas y todos los espíritus reconozcan la Potestad Divina que Me fue entregada desde el principio; para que reconozcan el nuevo ciclo, cuando Mi Vientre gestará nuevas cosas, así como gestó todo lo que hasta hoy fue creado.

Vendré del Cielo con el Cetro de Dios y muchos Me reconocerán, pero no comprenderán que este es el Poder Divino, hasta que este Poder toque sus ojos y los libere de la ceguera y del mal.

Vendré del Cielo con el Cetro de Dios, para unir lo que estaba separado, para que las mentes se rindan y los corazones se abran a la Verdad Divina.

Vendré del Cielo con el Cetro de Dios, como vengo hoy, y todos los ojos Me verán, porque cuando este día llegue ya no estaré preparando el retorno de Mi Hijo, sino que traeré en Mi Vientre a la Nueva Vida, que Él establecerá después de Su segunda Venida al mundo.

Con esto les digo que, después del Hijo, vendrá la Madre Celestial. Prepararé Sus pasos en Espíritu y en Divinidad, así como preparé Su camino en silencio, cuando Él estuvo sobre la Tierra. Pero después de que Su promesa se cumpla y que las Escrituras del Nuevo Tempo, expresadas en las palabras de los Mensajeros Divinos, también se cumplan, Yo vendré con el Cetro de Dios y reconstruiré el mundo con Mis Hijos.

Les daré a conocer al Niño Nuevo que durante este tiempo estoy gestando en Mi interior, y este Niño nacerá y crecerá en el interior de los que sean perseverantes y que, venciéndose a sí mismos y vaciándose de sí, se rindan completamente ante Dios.

Así como Mi Hijo ascendió una vez, ascenderá nuevamente, y así como Yo ayude a los Apóstoles en aquel tiempo, ayudaré a todos ustedes. Juntos construiremos el nuevo mundo, el nuevo tiempo, y las dimensiones se harán visibles.

En ese momento, las miserias ya no serán lo que predominará en sus vidas. Su transformación ya no será solo una batalla contra las fuerzas capitales de este mundo, que habitan dentro y fuera de ustedes; la transformación será eterna y constante, porque todo en el Universo se transforma; sin embargo, les digo, hijos Míos, que cuando Yo descienda al mundo después de Mi Hijo, les traeré una nueva vida y les daré a conocer un nuevo camino, en el cual se consumará la transición entre el viejo y el nuevo hombre. Y sus pasos consistirán en unirse al Universo, recuperar la filiación con Dios y reintegrarse a Sus Leyes.

Les daré a conocer los principios de la Unidad con toda la Vida y el orgullo que hoy hace que muchos se sientan únicos en toda la Creación Divina desaparecerá, y reconocerán a toda la Vida que habita en el Cosmos desde el principio, y que en humildad aguarda que ustedes puedan crecer y despertar.

He aquí que vendré del Cielo con el Cetro de Dios y estableceré la Paz dentro y fuera de ustedes, en este mundo y más allá de él. Pero hasta que llegue ese momento perseveren, ríndanse, humíllense, perdonen todo, inclusive a sí mismos y busquen el vacío, con constancia y con fe.

Pues ya llegará el día en el que verán en Mis manos al Cetro de Dios y darán gracias por ver  cumplirse todo lo que un día les dije.

Yo les agradezco y los bendigo, para que no pierdan la fe ni la divina esperanza de ver cumplirse las Sagradas Escrituras de estos tiempos.

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Mensaje extraordinario
MENSAJE EXTRAORDINARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ  Y MADRE UNIVERSAL, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

El corazón que se une a Dios sabe que las Verdades Celestiales aún están guardadas, para este mundo, detrás de los velos de los misterios divinos; sabe que la humanidad estuvo, durante estos millares de años de existencia, madurando su crecimiento espiritual, para algún día manifestar el Propósito de Dios para el corazón humano.

Por más que la mayoría de los hombres aún no esté pronta para conocer la Verdad de Dios, los tiempos se aceleran, y esa Verdad se revelará y causará el despertar y la evolución brusca de aquellos que nunca quisieron abrir sus ojos a la existencia de la Luz.

Hoy, hijos Míos, les revelo la grandeza de Mi Corazón que, en el universo, reina junto a Cristo, junto a Dios, y conduce Sus ejércitos divinos para la concreción de Sus Planes en esta Tierra y mucho más allá de ella. 

Vengo abriendo el camino a San Miguel Arcángel, porque soy Aquella que conduce la Voluntad de Dios para Sus Padres Creadores, los Cocreadores de todas las cosas. Y así fue desde la manifestación de Mi existencia, en el principio de toda la vida, anticipando toda la manifestación de la Creación Divina.

Antes de tornarme un espíritu divinizado, Mi Consciencia ya habitaba en la Consciencia de Dios, como vientre materno, de donde proviene la manifestación del Pensamiento Divino. Mi Espíritu fue generado en el universo, en la Fuente de la Consciencia de Dios; porque así como en consciencia Yo ya manifestaba el Pensamiento Divino para todo el cosmos, como espíritu encarnado en Su Proyecto principal debería dar vida a Aquel que representaría al Pensamiento Divino encarnado, el Verbo de Dios hecho carne y hombre.

Sé que muchos ignoran esa verdad, por eso vengo a hablarle al mundo y no a unos pocos; porque la soberbia y el orgullo hicieron desaparecer la humildad del corazón de los seres humanos y así les impidieron contemplar y creer en la grandeza de la Creación, cuando esta se manifiesta delante de sus corazones.

La falta de humildad en el corazón humano no le permite reconocer la propia pequeñez y la grandeza de Dios. Por eso, muchos comparan a Su Hijo con la humanidad común y a Su Madre Celestial con un espíritu humano común, ignorando las posibilidades de que Dios se manifieste en la Tierra para conducir la creación de esta raza que deberá alcanzar la semejanza con Él. 

Para que alcancen la semejanza con Dios y así lleguen a Su Universo espiritual y divino, fue que Él Se hizo carne en el hombre como en la mujer y, de esa forma, mostró a todos cómo seguir Sus Pasos; y por medio del Corazón Castísimo de San José, el Creador demostró que si la humanidad siguiera e imitara los pasos de Su Hijo y de Su Madre Divina, podrá alcanzar Su estado de Divinidad. Fue así que San José, como hombre, se hizo semejante a Dios; y la única llave que abrió las puertas a ese grandioso paso fue la sublime humildad que expresó Su corazón. 

Por eso, hoy, hijos, delante de San Miguel Arcángel, abandonen el camino de la oscuridad y del pecado, libérense de la ignorancia y ábranse para vivir según la sagrada humildad que Dios les ofrece. Así podrán estar prontos para escuchar lo que debo decirles en los próximos días.

Yo los amo y los conduzco a la Verdad Divina.

Su Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EXTRAORDINARIA EN EL CENTRO MARIANO DEL ESPÍRITU SANTO, CÓRDOBA, ARGENTINA, TRANSMITIDO POR MARÍA, MADRE UNIVERSAL DEL ESPÍRITU DE DIOS, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

Como niños recién nacidos, todos son llevados a Mi regazo de Madre para que reciban el calor del Corazón de Dios y así puedan ser colmados por los dones de Su Santo Espíritu.

En este ciclo, en donde la humanidad ha perdido la inocencia, Yo vengo en nombre del Espíritu Santo para instaurar la devoción a los Dones Santos de Dios. Para que la devoción a los Dones de Dios se pueda establecer, Yo les daré a conocer las grandes virtudes de Dios, virtudes que ayudarán a recuperar la espiritualidad santa que muchos hijos han perdido en los tiempos de hoy.

Como Madre del Infinito, Yo les traigo desde el Universo Celestial la posibilidad de que cada uno de ustedes retome el camino de la consagración a Dios, para después poder vivir el Sagrado Apostolado de Cristo.

Hijos amados, la finalidad espiritual de Mi presencia maternal entre ustedes para este día extraordinario, tiene la misión de aproximar a vuestras almas hacia la esencia de los Dones del Espíritu de Dios. Ustedes, como frutos del origen, guardan en vuestras esencias la unión perfecta con cada uno de los dones del Espíritu Santo y en verdad, el que más la humanidad necesita conocer es el Don del Temor a Dios.

Este don, les revela la oportunidad interna de reconocer al Creador como vuestro Único y Verdadero Padre Espiritual y Divino, sin dejar de observar y de aprender que solo a través del Altísimo, ustedes alcanzarán la Misericordia y el Perdón.

El Don del Temor a Dios, es uno de los menos practicados y vividos por las almas de este mundo; muchos pierden la filiación primordial con Dios por estar influenciados en este ciclo por las cosas del mundo y al no vivir el Don del Temor a Dios, este don divino se vuelve Fuente y acción de la Justicia Divina, la que los corregirá y les mostrará el verdadero camino.

Por eso, como vuestra Madre del Espíritu Santo de Dios, vengo en este tiempo definitivo para advertirles y anunciarles que están a tiempo de corregir vuestras vidas y de dirigirse al Universo de Dios, el que es altamente sustituido por las modernidades y por las vanguardias del mundo.

Si esto no cambiara a tiempo, muchas almas padecerán el resultado de sus propias elecciones de vida. Me corresponde guiarlos de la mano como vuestra Madre y de llevarlos al encuentro con el Creador.

Si ustedes vieran que hermanos e hijos próximos a vuestras vidas están distantes de escuchar Mi llamado, ¡recen por ellos, ayunen por ellos y adoren a Cristo por ellos!, así serán ayudados y rescatados a tiempo.

El Cielo les anuncia el ciclo de poder encontrar la Verdad Divina. Ustedes, Mis queridos hijos, están cruzando como humanidad el portal de un nuevo ciclo y de una nueva era. Les pido que busquen vivir los Dones de Dios a través del corazón y de la oración, porque así estarán ayudando a toda la humanidad que está sorda y ciega.

En este día, Mi Corazón se ennoblece por poder reencontrarlos maduros y en otro punto dentro de la escuela del perdón y de la redención.

Recuerden, que Yo Soy vuestra Madre de la Paz y que hoy derramo sobre ustedes la bendición del Santo Espíritu de Dios.

¡Agradezco a todos Mis hijos por haber respondido a Mi llamado!

Los cura y los consagra,

Vuestra Madre María, Reina y Señora del Espíritu Santo

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, TRANSMITIDO POR MARÍA, NUESTRA SEÑORA DE FIGUEIRA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Como un ave que sobrevuela el mundo, Yo llego buscando a los que no despertaron para Mi último llamado.

Muchos escucharon el resonar de Mi voz a lo largo de los siglos, pero pocos fueron los que verdaderamente pudieron comprender la esencia de lo que estaban viviendo.

Por primera vez en la historia de la humanidad, la Mujer Vestida de Sol, viene a revelar Su verdadera Faz, para que los seres de esta Tierra puedan salir de la ignorancia en la que se encuentran en vida. Por eso los preparé por tanto tiempo, para que puedan ser las manos que retirarán los velos de la inconsciencia humana. Mas, para eso hijos Míos, es necesario que la propia inconsciencia esté curada y que vuestros corazones ya se hayan definido en este tiempo de purificación.

Necesito corazones firmes, que conozcan la esencia de estos tiempos y no pongan su atención en lo que viven aquí en la Tierra, sino en lo que vivarán en el universo, a partir de lo que alcanzaron en este mundo.

Hijos Míos, todos se purificarán en este tiempo. No habrá alma sobre la superficie de la Tierra que no viva su instancia de purificación. Por eso les pido hoy, que se afirmen en el Poder de la oración y en el amor a lo desconocido. De esta forma, cuando llegue la hora de purificar y equilibrar todas las deudas que tienen ante Dios, lo harán sobre una base fuerte que los sustentará en el camino correcto y les mostrará que están viviendo lo que les fue anunciado y que pronto pasará.

Mis amados, si se afirman en la oración, podrán purificarse de una forma más armoniosa, porque a pesar de todo el sufrimiento interior, contarán con Mi auxilio que de alguna forma los conducirá y los amparará siempre. Pero, si por el contrario no construyen esa base orante, podrían llegar a sentirse muy confundidos en este momento y permitir que el enemigo les hable al corazón mentiras que parecerán verdades totales, desviando vuestras almas que por tanto tiempo perseveraron fielmente en este camino.

Quiero que crezcan, Mis amados, definitivamente. Los tiempos de hoy, ya no son más los mismos de ayer. No pretendan mantener dentro y fuera de ustedes el mismo escenario planetario, porque eso no será posible.

Aquel que se apegue a las imágenes del pasado, sufrirá la transformación brusca que vive el mundo; mas aquel que se deje transformar y que permita que se derrumben sus estructuras internas, jamás sufrirá, pues se transformará junto con el mundo y a pesar de vivir internamente el caos que se vive externamente, también verá emerger en sí una nueva vida, en cuanto en el mundo se establezca esta vida.

No quiero que se asusten con lo que viven, pero sepan que muchos no soportarán las transformaciones y las purificaciones internas y externas; no obstante por todos los méritos que generaron, su evolución tendrá salvación, aunque sea en los niveles del espíritu.

Mis amados, Mis palabras resuenan con el tono de estos tiempos; para comprender lo que ocurre verdaderamente en el mundo deben estar maduros. No tengan más ojos infantiles delante de realidades que los esperan maduros, sino con los pies firmes en esta barca de salvación, remen, remen sin titubear.

Yo Soy la Figueira Madre, la que da savia de Vida para que no se acaben sus frutos. En Mí se unen la Tierra y el Cielo, espíritu y materia, el viejo y el nuevo hombre.

Comprendan que si Mi presencia no estuviera entre ustedes, los autoconvocados no podrían responder a su compromiso.

Yo Soy la voz de la verdad Divina. Aquel que me escucha con atención, encontrará en Mí cada paso que deben dar. En Mis palabras se encuentra el camino para concretar los Planes de Dios. No estén sordos delante del Verbo Divino. Sigan el eco de la Mensajera Celestial.

Yo los amo y los conduzco al Corazón de Cristo, el Rey Universal.

María, Señora de la Sagrada Figueira

Mensaje extraordinario
MENSAJE ESPECIAL DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, CON MOTIVO DE LA REUNIÓN ANUAL DE LA ORDEN GRACIA MISERICORDIA

Si en verdad Me vieran como Yo los veo, muchas cosas ya no sucederían en su mundo interior y exterior. Yo vengo a llamar a los que se pierden en sí mismos y se escapan muchas veces de la Verdad. En ellos, Yo He repetido Mi Propósito durante mucho tiempo y aguardaré hasta el final una sabia respuesta, una respuesta verdadera. Pero ahora, que todo parece estar confuso en muchos, la Luz de Mi Sabiduría los envuelve, confortándolos. 

Veo que Mi Padre, a través de tantos sabios y seres celestiales, Ha confiado en todos ustedes y en muchos más; pero el camino de la Verdad comienza buscando la transparencia en sí mismo, para irradiar después la pureza y en consecuencia la verdadera intención del corazón. 

Cuando el Propósito sea visto por ti mismo, te aseguro que fallarás en el primer intento, porque la Verdad no te ha sido mostrada y estarás sujeto al engaño permanente. Por eso, líbrate de ti mismo, para que Yo pueda hacer lo que tengo previsto, desde antes de tu nacimiento en el mundo. Pues Mi Verdad, que no es conocida, se encuentra en el espíritu de la Paz y ese mismo espíritu es sembrado por el Amor de Dios, en donde existe el centro supremo de la Verdad. 

Como muchos no conocen estos simples misterios de la vida, Yo vengo a revelarles la Verdad de que ya no deben actuar por los impulsos de su propia imperfección. Por esta causa, muchos hacen padecer a Mi Corazón Sagrado y Él muestra la Sangre que derrama por los errores del mundo, que ofenden a Dios, sin que perciban la gravedad de estos tiempos. 

Antes de que la Ley descienda del Cielo, en donde Yo vivo en Gloria todo el tiempo, Yo intercederé ante Mi Padre para aliviar las causas y heridas espirituales imborrables que muchos ocasionan al Altísimo Creador. 

Yo padecí por ustedes, para que ustedes no padecieran en vida. Yo morí por ustedes, por Amor, para que ustedes no murieran en espíritu. 

¡Ay de aquellos que Me ofendan, por ignorancia y falta de consciencia, en estos tiempos que vendrán! 

Aquel, que se oponga a Mi Propósito, sufrirá por la acción de su propio querer y Mi Misericordia Infinita se convertirá en un manantial de Justicia en los que Me sean infieles. 

La vida no puede vivirse en dos caminos, escojan a tiempo qué camino seguirán, el de la Luz o el de la eterna oscuridad del mundo. Fieras y redes diabólicas se soltarán sobre el mundo, como lluvia en noche de frío, y convencerán a muchos para seguir falsos caminos, movidos por la emoción y por el engaño. ¡Pobres de estas almas que Me abren heridas antes de tiempo!

¿Dónde quedará lo que Yo les He dado con tanto amor y confianza?

Pero la Verdad se busca en la humildad, que nunca debe acabar, más si ella llegara a faltar, invoquen a Mi Presencia para que el orgullo que muchos tienen no los ahogue y no los inunde como una barca en el mar. 

Yo Soy la Salvación y el Camino Perfecto para los que se humillen ante Mí; pero sé que muchos, por sus ideas y sus propios preceptos, no se dejarán rendir a Mi Amor y ante la aparición de la menor crisis de vida, decidirán serme infieles y en verdad no saben lo que esto significará en este tiempo de tribulación. 

Recen para que sus seres se desprendan de las causas de la perdición. No sean orgullosos, sino sean valientes y humildes para encontrar la rendición. A quien esté dispuesto a seguirme, Yo lo ayudaré hasta el final y no lo dejaré solo a pesar de la gravedad de los tiempos. Por eso, busquen la unidad sincera con sus semejantes; así sus corazones serán espejos de la Verdad y de la Misericordia que, por el propio poder que Yo les daré, expulsarán el mal, disolviéndolo en cualquier camino. 

Para ser Mi apóstol es necesario ser humilde y no astuto, sus propias miserias pueden sumergir el proyecto confiado a sus vidas. Únanse y todo se resolverá a través de Mi Presencia Infinita.

Bajo el Amor del Padre, que los acoge y los perdona, sean verdaderos, y así Me agradarán.

Cristo Jesús Glorificado

Mensaje extraordinario
MENSAJE PARA LA APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE MARÍA, REINA Y ESTRELLA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE SAN PABLO, SAN PABLO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Levántate de donde hayas caído y tómate de Mis sagradas manos, porque Yo te liberaré del dolor y del error.

Sumerge tu espíritu en la Fuente de la pureza y de la renovación para que las piedras, con las que has tropezado, sean retiradas de tu camino.

Querido hijo de Dios, Yo te llamo a la reconciliación. Une tus lazos internos a Mi Inmaculado Corazón y camina en silencio hacia el Reino del Redentor.

Observa con atención el descenso de Mis Gracias, Yo soy la Estrella Madre, soy la que alumbra los espacios y los universos de todas las consciencias. Yo soy la Reina de la Paz, soy la que por amor al mundo socorre a Sus pequeños hijos.

Querido hijo, querida hija, Dios Padre te ha dado el ánimo para crecer de corazón, te ha dado la esperanza para vivir el renacimiento en Cristo, te ha dado la paz para calmar tus inquietudes, te ha dado la Misericordia para lavar del pasado, en la Fuente, a tu rostro y a tus manos.

Todo soldado que sirve a la Madre Santísima enfrentará, en oración, a las grandes crueldades y guerras humanas que apagan el amor en el corazón de los hombres.

Mis soldados son como las perlas de Mi eterna oración, Mis soldados son los instrumentos en donde Mi Luz se derrama para disolver el mal del mundo.

Aquiétate en Mi materno Corazón y ofrece a Dios tus pequeños sacrificios. Confiesa ante Dios tus errores, pero ya no te culpes, pues el Océano infinito de la Misericordia de Cristo golpea en la margen de tu vida para anunciarte el camino que te llevará a la redención.

Trabajar para Dios es estar en el constante vacío de sí. Trabajar por amor a Dios es vivir en la humildad permanente. Servir a Dios es despojarse, en cuestión de segundos, de lo que pudo haber sucedido.

Pero todo es perfecto para Dios. Él ama a los que se esfuerzan, ama profundamente a los que descansan y ama a los que en este tiempo se sumergen en la oscuridad y en los aspectos modernos del mundo.

Pero la oración del Santo Rosario intercede ante Dios. El Santo Rosario repara por entero a una consciencia herida en el espíritu. El Santo Rosario une y fortalece el amor al Plan de Dios. El Santo Rosario libera, purifica, ordena, armoniza y cultiva la esperanza de vivir la santidad. La santidad, para las almas humanas, es un desafío que pocos se animan vivir, porque la santidad primero despoja los velos de la consciencia y después impulsa a los corazones para que vivan la consagración interior.

Y en todo este camino de constante purificación de las almas, está la regencia y la observación del Cielo; porque Dios Altísimo y Jesucristo acompañan, paso a paso, los avances o los retrasos de los hijos.

El Cielo aguarda por el nacimiento de nuevos y humildes santos, como los que había en el pasado, para que a través de la simplicidad y de la entrega se oferten para transformar el caos del mundo y la gran escala de perdición que viven las preciosas almas.

Por eso, como fue en otros tiempos, los menores en el mundo harán cosas mayores y el Universo Celestial acompañará desde cerca el desafío que vivirán los nuevos apóstoles. Al fin, todos los buenos y fieles servidores se congregarán en el Cielo para compartir la Gloria y la Gracia de Dios por haber sido convertidos en ejemplo de servicio y de entrega a Dios.

La Reina del Cielo siempre socorrerá a Sus hijos, pues Su Madre Divina esperará que muchos más se animen a servir a la humanidad en este tiempo, para que así descienda la Misericordia y el Perdón de Dios, en vez de que descienda la Justicia.

Pero el camino por recorrer será infinito. Mis servidores cruzarán puentes casi quebrados, praderas y desiertos del mundo que han perdido el brillo original de la Creación; y todo será realizado a través del esfuerzo y del amor por cambiar la consciencia de los que aún duermen en el propio sueño del mundo.

Su Madre viene, Aparición tras Aparición, para despertar a todos Sus hijos a la Verdad suprema, a la consciencia de que es urgente rezar para ayudar al mundo entero a salir de la superficialidad en la cual vive.

Si surgieran nuevos discípulos marianos, Mi Corazón Inmaculado triunfará en América y en el mundo entero.

El tiempo, que hoy ustedes viven, es un tiempo de grandes cambios, solo les pido que despierten a lo que muchos de Mis hijos no quieren ver, que es la necesidad de purificarse y de consagrarse a la Voluntad suprema del Padre.

Siempre los guiaré, mientras recen el Santo Rosario por la salvación de la humanidad.

Los bendigo y les agradezco a los grupos de Campinas por permitir que la Misericordia de Dios sea derramada.

María, Reina y Estrella de la Paz

 

Mensaje extraordinario
MENSAJE PARA LA APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA, REINA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Entra en Mi Paz, para descubrir las verdades del Cielo y conocer los misterios más antiguos del corazón.

Entra en Mi Paz, para que tu corazón se aquiete y encuentre un camino seguro por el cual seguir en dirección a Mi Hijo.

Entra en Mi Paz, para que tu consciencia comprenda Mi Presencia y tu corazón reconozca a Mi Espíritu.

Entra en Mi Paz, para que tu alma se aproxime y tu espíritu viva unido a tu corazón, ayudándolo así a consolidar los pasos de la consciencia.

Entra en Mi Paz, porque solo en ella conocerás a Dios y a Su Reino Celestial.

Entra en Mi Paz, porque dentro de ella estarán libres de las tribulaciones del mundo y tu corazón no se envolverá con lo que vive fuera de Mi Corazón. 

Entra en Mi Paz, para estar bajo Mi Manto y, a partir de ahí, ser intercesor de las almas que más lo necesitan.

 

Entra en Mi Paz, para conocer el silencio. Entra en el silencio, para conocer Mi Paz.

Entra en Mi Paz, esa que Mi Presencia deposita en los corazones e irradia al mundo.

Para estar en Mi Paz, hay que estar en Mi Presencia, y para atraer Mi Presencia, hay que estar en oración perpetuamente.

Estén en Mi Paz, viviendo en oración. Irradien Mi Paz, viviendo la oración. Sean Mi Paz, siendo la oración.

Estar en Paz, hijos Míos, es una gran necesidad del mundo, porque la paz muere en los corazones de los hombres, y cuento con los dedos de Mis manos a aquellos de Mis hijos que hoy pueden vivir en eterna paz, porque viven en eterna oración.

Por eso, oren, oren mucho. Disuelvan en la oración las aflicciones de sus corazones y las aflicciones del mundo. Aparten de sus corazones el dolor, a través de la alegría de vivir en Dios y de cumplir con Su Voluntad Divina.

Coloquen, día a día, a Mis pies aquello que les impide vivir en paz y, a través de la oración, fortalezcan esta paz en el mundo e irradien la paz a las consciencias.

Ya no alimenten los conflictos, las críticas, los juzgamientos; no se unan con el prójimo para alimentar el mal, para juzgar, para destruir, para atraer la discordia entre los corazones.

Corten los impulsos de la maldad que viven en las células humanas. No alimenten a las fuerzas mundanas que viven en los corazones; pero sí, como soldados marianos, vivan la primer batalla, en ustedes mismos, para retirar el mal e implantar la paz.

Oren, Mis queridos, oren mucho, porque el mundo así lo necesita.

No se permitan emitir un verbo que no construye la Luz, y si la voluntad de hacerlo fuera mayor que el poder de la paz en sus corazones, silénciense, silénciense y entren en oración.

Es tiempo de crear con consciencia, es tiempo de vivir el amor entre las criaturas. Los invito a disolver, en Mi Corazón, todo lo que fueron hasta este instante, para vivir en Mi Propósito universal de la Paz.

Como en Fátima, despierto los corazones del mundo para que renazcan en Mi eterna Paz.

Les agradezco por responder a Mi llamado.

María, Madre y Reina de la Paz

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA VIGILIA DE ORACIÓN, DE MARÍA, REINA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Una vez más estaré entre ustedes en el Centro primordial de oración del Brasil. Yo estaré entre ustedes en el Centro de oración de Figueira.

Queridos hijos, hoy con la especial devoción que irradia Mi Corazón, les transmitiré una instrucción de Madre a hijo, del universo al discípulo.

Hijos Míos, Dios se manifiesta prodigiosamente de tres formas para las almas, para Sus criaturas. Dios se puede manifestar a través del espíritu de Sus criaturas y transmitir Su Sabiduría, Dios se puede manifestar a través de las mentes de Sus criaturas para transmitir Sus Ideas del Plan de Amor para el universo y Dios se puede manifestar a través del alma de Sus criaturas para transmitir Su Amor a todos los espacios de la Creación.

Dios es una Esencia de Amor puro, sabio y divino; de Él provienen todos los poderes de la Creación y de la vida manifestada. A Dios se le debe honra, gloria y alabanza, porque Él alcanza Su mayor expresión a través del amor y la unidad entre las criaturas.

Hoy, queridos hijos, quiero enseñarles en este tiempo a vivir una lección de humildad, porque Dios espera que sus consciencias maduren. Esta lección de humildad consiste en que reconozcan que Dios tiene la majestad y el poder de manifestarse a Sus criaturas de diferentes formas, con el fin de que las almas lo puedan conocer y sentir como la Fuente del Amor para la vida en la Tierra.

Cuando Dios reconoció la oferta de Su Sierva fiel, la Virgen María, nunca hubo intención de apropiarse, en este misterio de entrega y sacrificio. En Mi consciencia maternal reposó el Amor de Dios, un Amor puro y verdadero que ingresó en Mi Corazón para volverlo inmaculado.

Vean, Mis queridos, cómo Dios actúa y se revela ante Sus hijos con Amor y Fe, porque Dios espera que la humanidad alcance la paz a través del conocimiento de la Verdad Divina.

Cuando un corazón se dona al universo, Dios consigue manifestarse en esa criatura y después Su Voluntad se dibuja en esa consciencia que, a través de la fe y de la devoción, ella deberá cumplir.

Quiero, Mis pequeños, que vean y reconozcan que Dios es Humildad y Sabiduría. Dios nunca engrandecerá Su poder porque, de lo contrario, no sería Dios. Dios despierta la paz para la vida, como fuente para el espíritu; la fe como esencia para el crecimiento interior; la unidad como principio de fraternidad y el amor como sostén espiritual para las almas.

Todo es simple, queridos hijos, quien está en Dios no temerá ser despojado de sí mismo para poder curarse desde el espíritu. Dios es la Fuente del Amor que se presenta para que todos lo puedan vivir a través de él.

Cuando el alma no escucha, Dios no consigue acercarse. El Amor Universal necesita impregnarse como luz en las células de todas las almas para que, al fin, ustedes imiten Mi camino de entrega y confianza. Porque así, como almas, ayudarán en el amor a Dios para que pueda seguir manifestándose entre las criaturas, los Reinos y el mundo.

Dios es renovación, es Espíritu de vida y esperanza. Dios es concreción de misiones internas para las criaturas. Dios es Amor presente en la esencia de todos Sus hijos. Dios debe ser buscado desde del corazón, porque Dios es constante oración y refugio para los corazones que viven en el desierto y con sed interior. Dios resucita la vida del espíritu en los que la han perdido. Dios cura a través de Su bondad y humildad, porque Dios es el Espíritu Santificado en el Universo Celestial.

Dios es el único Bien Mayor para todos, porque el Padre del Cielo es su principio y su fin en esta vida. Él es eternidad, es eterno Amor.

Queridos hijos, guarden en sus corazones la aspiración del Padre de estar más presente en ellos.

¡Gracias por responder al Llamado de Dios!

Les agradece y los bendice, en la Luz de Dios,

María, Madre y Reina de la Paz y del Amor de Dios

 

Páginas

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

SEA VOLUNTARIO

Contacto