MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Para llegar a ser conocedor de Dios, después de cruzar los abismos, las tribulaciones y los vacíos, deben persistir en oración.

El Rosario, hijos, será su abrigo en todas las etapas del desierto.

El Santo Rosario los sustentará cuando sus corazones estuvieran enflaquecidos.

El Santo Rosario los protegerá cuando sus corazones estuvieran asediados. 

El Santo Rosario los elevará cuando sus corazones estuvieran libres.

El Santo Rosario les mostrará la Faz de Dios cuando sus espíritus estuvieran enteros en la oración, entregados al Padre, y su aspiración única y verdadera sea llegar a Él.

Es de las manos de María Santísima que llegarán a Cristo e imitarán Su camino.

Así como Su Señor estuvo interna y enteramente unido a Su Madre Celestial, y de esta forma fue amparado por Sus silenciosas y ocultas oraciones, tanto en el desierto como en la Cruz, así debe estar cada uno de ustedes. Con el corazón íntimamente unido al Corazón de María, déjense guiar y proteger por Ella.

Conocedora de los desiertos como de la cruz, conocedora de la muerte y de la fe en la resurrección, conocedora de la superación y del apostolado, conocedora de los misterios celestiales y de los misterios profundos de la consciencia humana, Su Madre Santísima siempre los guiará.

Por eso, sea en el desierto, en el calvario, en la vida, en la muerte, en la resurrección o delante de los misterios celestiales, confíen en la guía y en el amparo de la Madre de Dios; Sierva incansable, pensada, manifestada y enviada por el Creador para conducir Sus criaturas a Su Corazón.

Vean en María las Manos de Dios, que cruzan dimensiones para buscarlos, y en el Santo Rosario el puente y la conexión correcta para mantenerse unidos a Su Inmaculado Corazón.

Tienen Mi bendición para eso. 

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Cuando un ser ingresa en el desierto, aunque simplemente haya tocado su arena y sentido su calor, ya no puede caminar hacia atrás.

El desierto puede parecer peligroso, lleno de sufrimientos y padecimientos. Pero hoy les digo que no hay mayor padecimiento para un alma que ingresar en el desierto y no profundizar su experiencia en él, no rendirse a Dios y descubrir sus misterios.

El alma que pisa el desierto, pero no camina por él, sino que queda presa de sus temores, no suelta las muletas que apoyaban sus pasos ni descubre en ellas su verdadero apoyo y tampoco sabe lo que es caminar con los propios pies. 

Esa alma vencida por sus temores, sin querer soltar los afectos, las sensaciones o el pasado en sí, termina buscando, en más muletas y más cadenas, las sensaciones que no encuentra con las que tiene en sus manos y con las que están presas a sus pies.

Esa alma se torna prisionera de sí misma, cada vez más vacía, más esclava y más temerosa, simplemente por no conseguir rendirse al infinito del desierto que se presentó frente a ella. 

Dios los llama a madurar en el desierto, a dejar las emociones humanas para descubrir y consolidar el corazón en el Amor Crístico. Pero para eso, hijos, necesitan soltar las muletas, quebrar las cadenas, experimentar el vacío y caminar en él, aunque no sientan una base bajo los propios pies.

Esto se llama experimentar la fe.

No sean esclavos de sí mismos. Reconozcan que no hay otro verdugo sino el orgullo, la vanidad y la ignorancia de los corazones que creen que están más seguros cuando están llenos de sí, pero no perciben que ni siquiera se conocen a sí mismos.

Les dejo Mi bendición para que clamen por liberación y la vivan.

Si sienten que sus pies están en las arenas del desierto, caminen y no detengan sus pasos. Consoliden la unión con Dios y fortalezcan la propia fe. Esto los hará verdaderamente libres.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO DURANTE EL VIAJE DESDE LA CIUDAD DE SANTA MARÍA, RIO GRANDE DO SUL, BRASIL, HACIA EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Entrega tu corazón y tu vida en las Manos de Dios, para que tu sufrimiento interior termine.

Deja que los rayos que descienden del Cielo para la definición de los seres no causen dolor en ti, sino que te liberen de tus resistencias, de los muros de piedra que te separan de lo que eres, que te impiden llegar a Dios. 

Deja que se quiebren las barreras de la resistencia; deja que se renueven tus fuerzas y tu amor por el Plan de Dios.

Todas las oportunidades para la ascensión y la iluminación de la consciencia se encuentran en tu día a día; la llave está en tu actitud frente a los acontecimientos, a las pruebas y a las necesidades que te llevan a la superación. 

Tus pies ya no están en el calvario de este mundo, por eso no detengas tus pasos, sino abraza la cruz que te fue dada, con paz en tu corazón.

Recuerda el abrazo de tu Señor a la madera, cuando la cruz de tu redención pesó sobre Él, y hoy que eres llamado a imitar Sus pasos y dar todo de ti por amor, haz lo mismo: abraza la cruz, por la redención de los ciegos de espíritu y por los duros de corazón, por los indiferentes e ignorantes, por los que no recibieron Misericordia porque creyeron que su estado de miseria era el tesoro de sus vidas. 

Cuando abraces la cruz, desde Cielo vendrá el auxilio para que puedas cargarla.

Cuando abraces la cruz, vivirás la revelación del Amor de Dios en Cristo.

Cuando hubieres consumado tu entrega en la cruz de estos tiempos, verás el Amor de Dios renovarse en ti.

Tienes Mi bendición para esto.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

A veces, al llevar la paz al mundo pierdes la paz en tu interior, porque el sacrificio y la entrega constantes hacen que emerjan tus resistencias más ocultas, hacen que tu condición más retrógrada salga a la luz y sea liberada inconscientemente de tu mundo interior. Eso, hijo, también es parte del servicio que prestas a la humanidad y a este planeta en el nombre de Cristo.

La paz interior debe ser conquistada todos los días. La unión con Dios debe ser construida y reconstruida a cada instante. En estos tiempos, en los que la humanidad está en el centro de una batalla que define la evolución de toda la Creación Divina, todos los días las consciencias son blancos de los estímulos incansables de la vida de ilusión para que no avancen en su despertar, para que no profundicen en su unión con Dios, sino para que retrocedan o al menos se estanquen en el punto en el que están.

Por eso, hijo, observa con calma este momento, sé consciente de que las pruebas de este tiempo son desconocidas para toda la Creación y, todos los días siempre que puedas, recuerda el propósito de tu vida y de tu consagración. Reconstruye, poco a poco, tu vínculo con Dios y no dejes de intentar llegar al Padre. Mantén un diálogo con Él en tu interior, una confesión sincera de tus debilidades, no para reafirmarlas, sino para transformarlas y liberarlas de tu corazón.

Siente que la confesión con Dios limpia tu corazón y que comienzas a retornar al Padre, sintiéndote digno de Su Presencia. Haz esto todos los días. Haz esto siempre que lo recuerdes.

Piensa en el espejo de tu corazón y únelo a los Espejos del Cosmos con un simple pensamiento. Piensa en la Esencia de Dios y siente que Ella está en ti. Piensa en la vida superior, en la vida universal, y siente como ella te aguarda.

Renueva tus fuerzas en las pequeñas cosas, porque es también allí en donde el enemigo va minando tu evolución y tu unión con Dios.

Ora y reencuentra la paz todos los días.

Tienes Mi bendición para eso.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE DÜSSELDORF, ALEMANIA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Acompaña, con tu corazón y con tu espíritu, los pasos de tu Señor por este mundo.

Clama, en nombre de la humanidad, para que las raíces de la corrupción de la consciencia humana sean arrancadas de lo profundo de los seres y de la Tierra. Permite que las Manos Divinas se sumerjan en el océano de los registros de la humanidad para liberarlos y purificarlos, retirando de la consciencia de los hombres y de las mujeres de este mundo el peso que no les permite caminar.

Ruega por la Gracia y por la liberación.

Deja que la Misericordia descienda a la Tierra como un caudal transformador y dispone tu corazón para que sea el primero en ser curado y transformado por Dios. Porque así, hijo, con tu propio ejemplo, abrirás una puerta aún mayor para que la Misericordia de Dios descienda al mundo. 

Clama y sé ejemplo de la actuación de la Divina Misericordia. Pide a Dios que transforme el mundo y déjate transformar. Pide al Padre que sublime la corrupción humana y deja que Él arranque de ti las raíces corruptas, las energías y las fuerzas ocultas y milenarias que te impiden que profundices en tus pasos hacia Dios.

Mira hacia el mundo, hijo, y siéntete un espejo de él. Si transformaras lo que hay dentro de ti, aquello que está fuera de ti también se transformará.

Tu Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE ZAGREB, CROACIA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Cuando una nación clama, escuchen su clamor y oren por la paz.

A veces, hijos, no son solo las almas de una nación las que claman por auxilio, por liberación y por paz. Cada nación tiene una vida espiritual, un Principio Divino que le fue entregado para guiar a su expresión y a la misión de su pueblo.

El espíritu de la nación es la consciencia que abarca toda la vida que habita en ella en diferentes niveles. Es aquel espacio espiritual que guarda el Propósito de Dios para los diferentes pueblos que habitan en la Tierra. Es un estado de consciencia vivo que guarda, protege y ampara a la evolución de las naciones.

El espíritu de una nación auxilia en su crecimiento e influye en los pasos internos del pueblo que vive en ella. Pero, de la misma forma, él también es influenciado por la vida de los seres y por todo lo que sucede en esa nación.

Cuando los pueblos viven conflictos y, poco a poco, los seres destruyen sus propias esencias con el odio y con el miedo generado en las guerras, el espíritu de esa nación también va muriendo y distanciándose de su propósito.

Cuando un pueblo escoge el camino de la oscuridad a través de sus costumbres, hábitos y formas de vivir, el espíritu de su nación también es influenciado. Por eso, cuando el Creador puede intervenir en el planeta a través de las oraciones de Sus hijos, Sus Ojos también se colocan sobre los espíritus de las naciones. Cuando un pueblo clama a través de las almas que piden auxilio, el espíritu de esa nación clama aún más alto.

Los espíritus de las naciones son partes del espíritu del planeta, son cuerpos de esa consciencia espiritual de la Tierra, y todo esto es parte de la ciencia de la Creación Divina. Todo esto es parte del Plan de Dios para la evolución de Sus hijos.

En el principio, cuando el Padre creó las tierras y los mares, también creó los espíritus de esas tierras y el espíritu de los mares. Todo en la Creación Divina es vida. Por eso, hijos, aprendan a escuchar con sus oídos internos el clamor que surge de lo profundo de las naciones y únanse a ese pedido de paz y de redención del planeta.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE PALERMO, SICILIA, ITALIA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Que en este día 13 de mayo sus almas pidan una Gracia a Dios: la redención de los corazones, la liberación de este mundo para que las almas encuentren la paz.

Hoy hagan penitencia y oren para que la Luz de Fátima se expanda hacia aquellos lugares más necesitados.

Unan sus voces a la voz divina de su Madre Celestial. Unan sus rosarios a Su Rosario de Luz y clamen, con la potencia de las esencias, que los haga dignos hijos de Dios.

Enciendan en sus corazones lo que los hace semejantes a su Creador y oren, hijos. Vigilen, en oración, para que el mundo sea redimido.

Únanse a las coyunturas universales y divinas, en las que Leyes Mayores se congregan por las oraciones de todos los seres que, en diferentes naciones, se unen al Corazón de Nuestra Señora de Fátima.

Con los espejos de sus corazones encendidos y unidos al Espejo Mayor de su Madre Divina, permitan que una Gracia Suprema se establezca y dé al mundo una oportunidad de liberación, de redención y de paz.

Hoy, oren por la paz.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Queridos compañeros y siervos de Cristo:

Hoy quiero hablarles de la esencia del perdón y de la importanciade aprender a perdonar en estos tiempos y en los que vendrán.

El perdón es la puerta para la redención de las almas. Una consciencia que verdaderamente es perdonada se libera de las corrientes que le impiden seguir su trayectoria evolutiva.

Cuando ustedes no son capaces de perdonar algo en sí mismos o en los demás, están obstaculizando no solo su propia evolución, sino también la de toda la humanidad.

En el actual ciclo planetario las almas tomarán iniciativas movidas por fuerzas descontroladas que surgirán del propio interior y, muchas veces, no comprenderán la razón de las propias acciones. Principalmente los seres que no se conocen a sí mismos, y que ignoran todo lo que generaron en esta y en otras vidas, sufrirán por el propio descontrol mental, emocional y físico durante la etapa de purificación más aguda del planeta.

Muchos de los que acompañan Nuestros pasos podrán sufrir las consecuencias de esas acciones descontroladas y, para impulsar el crecimiento del amor en su interior, deben aprender a perdonar.

El perdón del que les hablo no es un perdón mental, que la boca proclama, pero que el corazón no admite. Les hablo del verdadero perdón; el perdón que, cuando toca a los seres, los transforma y los hace percibir la ilusión en la que estaba sumergida la consciencia al equivocarse. Les hablo del perdón que eleva a los seres y los impulsa a descubrir el verdadero amor.

Deben aprender a perdonar de verdad, ejercitando, desde ahora, el perdón en cada instante de sus vidas. Perdonen aquello que nunca fueron capaces de perdonar, sobre todo a sí mismos, reconociendo la ignorancia y abriéndose para descubrir la verdad de esta Creación Divina, que es la consciencia humana.

Todos los seres humanos que asumen un camino de transformación, a diario, dejan de ser lo que fueron el día anterior. Al comprender un error o una equivocación, deben perdonarse; pero perdonarse sin descuidar el aprendizaje, comprendiendo la razón de su error y consolidando en la consciencia el necesario aprendizaje.

Aquellos que aprendan a perdonar, Mis queridos, estarán más próximos de la liberación de sí mismos y de los atavismos de esta vida material.

Ingresen en la esencia del perdón con el reconocimiento de un propósito superior

Yo los guío y los conduzco a la redención de todas las almas.

San José Castísimo, en la esencia del Perdón de Dios
 

MENSAJE SEMANAL DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Vengo al mundo para arrancar de los corazones los miedos internos y para liberar a las esencias del sufrimiento perpetuo.

A cada momento les entrego Mi Divina Misericordia, para que la reconozcan como vuestro camino de salvación y de redención.

Pero la Paz inalterable será la gran llave para el fin de este tiempo, llave que les permitirá proyectar el porvenir y llevar adelante la transición y los cambios. Yo Soy ese Gran Sol Espiritual que busca constantemente alumbrar el camino de los que están ciegos y de los que no quieren ver la verdad y la entrega que hoy le ofrezco a la humanidad.

Pero algo más allá de lo normal deberá suceder si la humanidad no cambia ni reza con el corazón, para pedir a Dios por Su Misericordia.

Mientras tanto, el Amado Padre envía a Su Sacratísimo Hijo para llamar al mundo al despertar de la consciencia y de los acontecimientos. Busquen sin demora el Fuego Eterno de Mi Corazón y sientan profunda confianza; los que Me siguen prevalecerán, aunque con tan poco tiempo Yo pediré, para algunos, cambios internos que parecen imposibles.

En verdad, Yo sé con quienes cuento para esta hora de definiciones; en verdad, ya sé con quienes contaré para Mi Retorno.

Mientras los acontecimientos suceden, preparen todos los días vuestras moradas; el gran día de la revelación llegará para los que lo quieran ver y para los que se quieran ocultar más allá de Mi Luz Celestial.

Ahora los reúno internamente en el Cenáculo de Mi Corazón y les doy a conocer los misterios del Cielo; ellos preparan vuestras esencias para el esperado momento. No se mortifiquen, ofrezcan a Dios lo que en sinceridad le pueden ofrecer, el Cielo se alegrará por recibir vuestras pequeñas entregas.

El tiempo amerita una acción evolutiva y consciente. La hora marca el gran encuentro con el Rey del Amor. Estén en Paz.

Bajo el Bien Mayor del Padre, sean bienaventurados.

¡Gracias por volver a escuchar Mi Corazón!

Cristo Jesús, el Sol de la Eterna Gracia

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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