Lunes, 10 de diciembre de 2012

Mensaje extraordinario
MENSAJE DE LA VIRGEN MARÍA, TRANSMITIDO DURANTE LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Mientras aún mantengo al mundo en Mis Brazos, Yo los estoy invitando a considerar la vida de oración, grandes pasos que sus vidas pueden dar.

Queridos hijos, como la Reina de la Paz, los recojo a todos dentro de Mi Corazón, para que puedan vivir dentro del Corazón de Mi Hijo Amado.

Hoy, dejo en ustedes Mi año de Méritos y Gracias que fueron concedidas por Mi intercesión ante Dios.

Queridos hijos, Yo los necesito en la firmeza y en la fortaleza de la oración; y quiero hoy que ustedes compartan todo el Amor que fue derramado sobre este santo e inmaculado lugar.

Si aceptan en reverencia este llamado, Yo podré seguir guiándolos hacia el encuentro con Mi Hijo.

Hoy, necesito de ustedes que irradien la Paz que les fue concedida a todos a través de Mi Inmaculado Corazón.

Jesús los acompaña en este nuevo camino, camino que Mi Corazón preparó para que ustedes encuentren al Redentor.

Hoy, quiero dejar en ustedes Mi Amor Inmaculado, principalmente a Mis hijos de Figueira, que Me han recibido en gloria, amor y alegría.

Por motivo de esta especial celebración con Mi Corazón, hoy los invito a que preparen sus seres para que Me reciban nuevamente el próximo año.

Ahora, Mi Corazón se recoge en los Cielos, porque llegó la hora de que Mis hijos manifiesten el Amor que Yo les entregué en nombre de Jesús.

El Señor les agradece por su fe en Mis Planes de Paz, porque eso significa que muchas almas sedientas de la Luz de Dios están encontrando el camino para vivir la redención en este tiempo.

Necesito de su constante oración en este lugar, porque el Cielo ha abierto una ventana hacia este lugar de oración y contemplación.

Quiero transformar sus vidas en vidas preciosas bajo la Presencia del Espíritu Santo, porque sus corazones, día a día, deben ser portadores de Mi Gracia y Mi Paz.

Camino incansablemente con ustedes, camino sin cansancio en este mundo para despertar la Luz del Corazón de Dios en todas las almas.

Estoy escuchando en este momento sus corazones que Me hablan y Me dicen que me aman todo el tiempo. Con esto quiero revelarles que sus corazones son el verdadero Templo de Dios, donde debe tener morada Mi Hijo cuando Él retorne.

Quiero que sepan que Yo los aguardo día y noche, vigilando desde el Templo Interior de Mi Inmaculado Corazón. Por eso, hijos Míos, no se cansen de buscar la pureza en sus seres, porque esa Pureza Original les permitirá ascender a los Cielos, al Paraíso.

Estoy compartiendo Mi esperanza con ustedes por un mundo mejor, lleno de la Misericordia de Dios, porque quiero que la Divina Justicia repare todas las causas activadas por las faltas de la humanidad.

Queridos hijos, a lo largo de todo este año, muchos fueron despertando por Mi Presencia Maternal y, sobre todo, por la permanencia consciente de sus oraciones.

Quiero que sepan que aún hay mucho por hacer, la eternidad se alcanza a través de grandes esfuerzos, esfuerzos por parte de todos Mis soldados, que deben ser estrellas que brillen por la paz.

Quiero que guarden Mi Paz en lo profundo de sus seres, porque cuando Mi Hijo retorne, Él la reconocerá.

Por eso, hoy estoy en sus caminos, al igual que en los de muchas almas que son fieles a Mi llamado y que en Mí encuentran el puente para la salvación y la redención.

Como Madre de la Luz, quiero que vivan en Mi Luz y no permitan que el enemigo apague la luz en sus seres.

La oración los socorrerá en estos tiempos. Mi Corazón los ayudará para que caminen hacia el Reino de Mi Hijo. Jesús Misericordioso los salvará, porque Él los ama como parte de Dios.

Irradiando la Paz de Mi Reino, los guío en este nuevo ciclo, ciclo de Misericordia y purificación.

No teman por lo que no sucederá. Abran las puertas de los Cielos, llamándome a cada momento, para que Yo venga en Gloria junto a Mi Hijo, el Salvador.

Dios los libera de sus faltas, porque hoy Mi Amor intercedió por todos.

¡Salve, Estrella de Luz de Figueira!, que como un árbol sabio permitió que floreciera en los corazones, para que los frutos de los talentos y los dones iluminaran los caminos de Mis hijos.

En tus pies, amada Figueira, se encuentran las raíces de los orígenes del Génesis de la Creación y en lo más alto de tu copa, florecida y resplandeciente, posa hoy Mi Inmaculado Corazón, revelándoles la victoria de la salvación a los corazones caídos.

Te nombro como Estrella, querida Figueira, porque Dios, el Altísimo, dio fruto en Mis hijos a través de los frutos de tu Instrucción.

Que la paz, el bien y la luz, sean las nuevas Figueiras, para que unidas como una sola, irradien la Luz del Espíritu Santo.

Los colmo, los amo y les agradezco,

María Santísima, Reina de la Paz