Viernes, 19 de febrero de 2021

El Sagrado Llamado
APARICIÓN RESERVADA DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, PARA EL SAGRADO LLAMADO DEL 20 DE FEBRERO DE 2021

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Hoy vengo antes del tiempo previsto para que Me escuchen. 

Ustedes saben que Yo no busco la perfección de sus vidas, sino busco que hagan el camino hacia el encuentro Conmigo.

Mientras eso no suceda, compañeros, aún esperaré para realizar muchas tareas y operaciones.

Aún guardaré, en Mi Corazón, las aspiraciones que tiene Dios para cada una de sus vidas y consciencias; porque este es un tiempo muy crucial y definitivo, y ustedes ya lo saben.

Este es un tiempo en el que cosas nuevas surgirán, experiencias desconocidas se mostrarán para que ustedes puedan aprender y crecer interiormente.

Yo no necesito que hagan las cosas perfectas, sino que en sus vidas hagan lo mejor para Mí, porque de todo eso Yo me serviré para preparar Mi Retorno al mundo.

No solo les pido que se decidan a atravesar el desierto en el cual aún no ingresaron, sino también les pido que tengan la valentía suficiente para seguirme y acompañarme, para obedecer Mis directrices.

Este es el tiempo más exigente de todos, Yo necesito que puedan reconocerlo. Necesito que puedan confiar en todo lo que les digo y que puedan hacer todo lo que les pido, los esfuerzos se multiplicarán.

Algunas consciencias ya se están definiendo, y eso no es algo personal Conmigo, sino con Mi Padre.

Los Designios de Dios no son profundamente comprendidos, mientras demoren en poder amarlos no los comprenderán, no los sabrán, no los conocerán.

Por eso, Yo les entregué el valor de los ejercicios espirituales, de su propio ejercicio espiritual y personal, pero también de sus ejercicios grupales; porque la conexión con la Fuente depende de cada uno de Mis compañeros y no de unos pocos.

El planeta arde en su proceso de purificación, el planeta sufre en su proceso de enfermedad, los desplazados cada vez son más en el mundo. ¿Quién los refugiará? ¿Quién tendrá su corazón sensible para poder recibirlos? ¿Quién irá al encuentro de ellos?, no solo para darle un alimento, sino para entregarles Mi Paz.

Yo no pido algo imposible, solo pido algo sincero y verdadero. Depende de ustedes que Mis Obras se puedan cumplir y realizar.

La deuda de la humanidad es muy grande y ustedes lo saben, y aún esa deuda espiritual sigue creciendo. ¿Quién Me ayudará internamente a disolver esa deuda?

¿Quién reconocerá, una vez más, el valor de la Sangre derramada por el Cordero de Dios para que todos los errores sean justificados una vez más, para que las almas no pierdan nuevamente la oportunidad, para que las consciencias puedan despertar?

Mi Corazón guarda muchos misterios, pero también guarda muchos sentimientos. ¿Han pensado alguna vez en conocerlos y penetrarlos? ¿Dónde está su atención por Mí?

El universo los coloca en donde necesitan aprender y crecer, compañeros.

Ya no son tiempos de hacer las cosas más difíciles de lo que ya están. Es tiempo de forjar el guerrero, es tiempo de hacer despertar al valiente apóstol para que puedan vivir lo que la Jerarquía está viviendo y sintiendo, para que puedan sostener con Nosotros esa llama espiritual de la Fe que no se puede apagar.

Deben aprender a sintonizarse con Mi Gobierno Espiritual. De allí parten todos los impulsos y la revelación de todos los misterios, principalmente de sus misterios internos, de lo que deben conocer de ustedes mismos, de lo que deben transformar de ustedes mismos, de todo lo que deben redimir.

El planeta se encuentra en el momento de su gran encrucijada, el destino aún no está claro. 

La evolución avanza, pero los acontecimientos también. Se corre una carrera sin precedentes, es hora de tomar consciencia de esto y de no retroceder. Los soldados tienen que avanzar en este campo de batalla y tener fe en que Yo los sostendré.

Abran sus corazones para sentir todo lo que les digo. No rechacen ni una palabra, estamos en tiempos culminantes, en momentos definitivos; y lo debo repetir, una y otra vez, para que sus consciencias lo capten.

Todos estamos atentos a los próximos momentos. Lo que parece estar demasiado difícil se vuelve un gran sacrificio para todos. El esfuerzo, en este momento, es la justificación de tantos errores y faltas, de tantas contrariedades y causas.

Yo no necesito que lo entiendan todo, necesito que Me sigan, que Me sientan y que Me reconozcan.

Esta es la Cuaresma más importante después de Mi Ascensión a los Cielos, después de más de dos mil años.

Deben dejarse señalar por las cenizas de la Resurrección. Que la Señal de la Cruz sea el epicentro de todos sus movimientos y acciones, porque así los infiernos estarán atormentados y no prevalecerán.

Busquen dentro de ustedes el camino hacia lo verdadero, hacia lo que es transparente y fiel.

Yo estoy llamando al mundo a responder a las necesidades humanitarias, porque si esos desplazamientos siguen sucediendo, el Juicio será muy grande. Tienen las llaves y tienen los atributos para poder hacerlo, no renieguen y no retrocedan. 

Este es el tiempo en el que cada uno tendrá la oportunidad de cumplir Mi Voluntad, de hacerla parte de sí y de vivirla.

Hoy no solo los invito a estar en Mi Corazón, sino que también los invito a tener consciencia y discernimiento. Que la llama de Mi Fe los impregne de sabiduría y amor, de ciencia e inteligencia, para que los talentos que tanto espero tener disponibles, estén disponibles, estén al servicio de Dios a través de cada uno de ustedes.

Compañeros y hermanos, están en tiempos semejantes a los de los primeros cristianos, que tuvieron que ser testigos de Mi Presencia y de Mi Palabra, y dieron la vida por Mí hasta el último instante, hasta el último momento.

Pero ahora ustedes no son perseguidos, solo son buscados por Mi enemigo que intenta dividirlos y hacerlos fracasar. ¿Se lo permitirán?

Durante tantos encuentros de Misericordia, Yo les entregué todas las instrucciones e indicaciones. ¿Cuándo las harán propias?

Yo los invito a ser valientes y perseverantes. Los invito a amar lo que no conocen ni saben. Los invito a penetrar el misterio del espíritu por medio de la fe y de la unión Conmigo en la Eucaristía.

Que para esta próxima Sagrada Semana sus virtudes puedan florecer y sus aspectos humanos puedan desaparecer, porque no tengo tiempo para esperar que se den cuenta de esto.

Tengo al mundo en Mis Espaldas, y al tener al mundo en Mis Espaldas los tengo a cada uno de ustedes y de sus hermanos del planeta. Tengo sobre Mí todos los tipos de caos y de sufrimientos, de injusticias y de indiferencias. ¿Quién los soportará Conmigo, como lo hizo Juan, el apóstol, hasta la Cruz?

Por eso, Yo les entregué Mi Faz de Misericordia y Mi Faz glorificada para que las veneren y las vivan dentro de ustedes, porque precisarán de Mi Misericordia y de Mi Gloria para poder atravesar estos tiempos, para que cada día más sean instrumentos vacíos y no llenos de sí mismos, humildes para poder reconocer la Palabra de Dios y el Llamado del Padre Eterno, así como lo hizo Mi Madre, la Virgen María. Imítenla y ámenla.

En Su maternidad está su consuelo, en Su Amor está su fortaleza, en Su convicción está la superación de todos los tiempos, y en Su pureza está su paz.

Que la Sagrada Semana que llegará no sea un momento pasajero, sino una nueva oportunidad para cada uno de ustedes, de recoger los códigos divinos de Mi Pasión; porque cuando lo hagan, Yo estaré ahí con ustedes hasta el fin de los tiempos.

“Adonai, escucha las plegarias de Tu Siervo y de Tu Hijo, hazte presente, Señor, en este momento y, sobre todo, en los corazones que dudan de este camino.

Enciende en cada corazón la llama de Tu Fe para que todo se renueve y así se sientan unidos a Ti, hasta que cuando Yo retorne todo se pueda renovar”.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.