MENSAJE SEMANAL DE SAN JOSÉ TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Ve, hijo, en auxilio de las almas que sufren; de las almas que, en la soledad de su corazón, cargan el peso de la desesperanza, del desespero, del desaliento; almas que están buscando un sentido para su propia vida y que necesitan auxilio para reencontrar la Luz del Propósito Divino.

Ve en auxilio de las almas y dale sentido a tu existencia a través del servicio, de la oración y de los Sacramentos que conducen a las esencias al reencuentro con su origen divino.

Ve en auxilio de las almas, escucha a los corazones que sufren, quédate al lado de los que necesitan ser sustentados para no caer en los abismos que están tan cerca de sus pies.

Sostiene de la mano, a través de la oración verdadera, a los Hijos de Dios que necesitan retornar al hogar. Sé un puente para que esas almas reencuentren el camino de la Morada Celestial.

Ve, hijo, ve en auxilio de las almas solitarias y desamparadas, de los que se comprometieron con Cristo, pero que se perdieron en las aguas turbias y agitadas del final de los tiempos.

Que tu corazón sea una isla de salvación, que tu espíritu sea el puente y la puerta para que los que necesitan rescate puedan ser ayudados. Esto es a lo que eres llamado a vivir hoy.

En el vacío de ti mismo, permite que Cristo te use como Su instrumento, porque las únicas cosas que rescatarán a las almas en este tiempo son la Unidad y el Amor. Estas son las dos llaves que encienden la Luz de un mundo interior que está en la oscuridad; esta es la mano que se extiende hacia un alma aprisionada en abismos profundos.

Por eso, en la virtud del servicio, ejercita los dones del Amor y de la Unidad, porque las almas necesitan rescate y Luz en este mundo que se apaga de adentro hacia afuera.

En tiempos de un caos cada vez mayor, sé un puente de Amor y Unidad para las almas.

Tienes Mi bendición para esto.

Tu padre y amigo,

San José Castísimo

Mensaje extraordinario
MENSAJE DEL PADRE ETERNO, TRANSMITIDO EN LOS ALPES, FRANCIA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el cansancio, los fortaleceré. 

En la desesperación, los ampararé. 

En la oscuridad, siempre seré la Luz.

En la entrega sincera, Yo Me alegraré.

En el silencio, Yo Me haré sentir.

En el amor, Me verán manifestado.

Bajo los puros de corazón, estará el suelo sagrado de Mi Reino.

Sobre los misericordiosos, estará la bóveda de Mi Iglesia Celestial.

De los perseverantes, haré brotar infinitos impulsos.

De los incansables, nacerá Mi Fuego de superación y de trascendencia.

Mi Mano siempre estará sobre los justos. 

Mi Soplo del Espíritu conducirá la barca de sus almas, y siempre les mostraré la salida ante el aparente mar tormentoso.

De los entregados, haré surgir la Fuente Inagotable de Mi Amor.

Mi Paz estará abrazando a los simples.

Mi Luz guiará, como las estrellas, el camino de los consagrados.

Mi Sacerdocio estará protegiendo, a pesar de las batallas, a los que, sinceramente, le dijeron sí a Mi Hijo.

Nunca Me detendré, a pesar de lo que suceda en Mi Creación, porque Mi Amor es inagotable, Mi Misericordia desea ser la puerta para la redención de todos Mis Hijos.

Una y otra vez, Me renuevo en los que están adorándome a través de Mi Hijo en el altar, porque así Yo mostraré Mi Victoria en los que caminan a Mi lado.

Hijo, hoy puedes descansar en paz; porque si Me buscas, Me encontrarás; porque si Me llamas, allí siempre estaré; porque si confías en Mí, nada deberás temer.

Yo te hice libre para que crecieras en Mí. Te hice puro para que fueras un testimonio de Mi Presencia.

Descansa en Mis Brazos. 

Sigue dando pasos en el amor maduro. 

Mi Hijo es tu única escuela. 

Tu Madre Celestial te abrazará con Su Manto.

Eres sacramentado cada vez que Me escuchas. 

Eres sanado cada vez que estás en comunión Conmigo.

Así, eres fuerte para aprender a ser humilde.

Adelante, estoy aquí contigo. 

Soy el que Soy.

Soy Adonai.

 

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN FÁTIMA, PORTUGAL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, CON MOTIVO DEL 8.° ENCUENTRO ANUAL DE LOS HIJOS DE MARÍA

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Oremos:

 

Adonai,
Misericordia, Misericordia, Misericordia,
Redención, Redención, Redención,
para este planeta.

Amén.
(seis veces)

 

Aunque la oscuridad parezca aprisionar a la consciencia del planeta y a todas las almas posibles, Yo les digo: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Aunque todas las guerras se desaten en el mundo y las almas emigren a diferentes naciones, Yo les digo: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Aunque se avecinen los tres días de oscuridad y la confusión mental esté presente en la mayoría de Mis hijos, Yo les digo: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Aunque, en las ciudades de diferentes lugares del mundo, muchas consciencias vean caminar a entidades, Yo les digo: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Aunque la desesperación, la angustia y la ceguera espiritual estén presentes en la mayoría de Mis hijos, especialmente en aquellos que dirigen las naciones y someten a toda la sociedad; Yo les digo: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Aunque el sufrimiento parezca más grande que el amor, aunque el dolor sea más grande que la cura, aunque la mentira parezca más grande que la verdad y aunque la impunidad sea más fuerte que la fraternidad; Yo les digo, hijos Míos: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Y aunque las almas de este mundo, es decir todas las personas, vean que suceden cosas horribles, que se abren muchas puertas inciertas y que se sigue sometiendo a las almas por la injusticia y la mentira de este mundo; Yo les digo, hijos Míos: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Mi promesa sigue vigente y latente.

Yo vendré, después de Mi Hijo, para restablecer el Reino Espiritual y Celestial en el planeta. Por eso, hijos Míos: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Esta es la hora de todos los Hijos de María. Esta es la hora de la confirmación de todos los apóstoles de Cristo.

¿Quién sostendrá, junto a la Madre Celeste, el estandarte de la Paz?

¿Quién no permitirá que su corazón se enfríe delante de esta indiferencia planetaria?

Este es el tiempo de la confirmación final de todos los Hijos de María, porque el tiempo de la preparación ya pasó. Ahora ya no son Mis niños, ahora son los servidores adultos en evolución.

Ahora, deben ser embajadores de la paz y ciudadanos de este universo, para que los Atributos Divinos desciendan a la Tierra y los millones de almas en el mundo, debido a las guerras y los conflictos, no se olviden de que Dios es Amor, Verdad y Justicia, y que nadie, ni ningún acontecimiento borrará de los corazones la esencia del Amor de Dios, aunque parezca que el sufrimiento, los conflictos y las migraciones borren en los corazones la Verdad, que es el propio Dios Vivo.

Por eso, Yo les digo, hijos Míos: “No teman, porque Mi Inmaculado Corazón triunfará”.

Este es el tiempo de que los Hijos de María sean verdaderas consciencias decididas a servir al Plan, que permitan que el espíritu superior de cada hijo Mío descienda y que, a través de su propio origen universal, se establezcan en la Tierra los Espíritus Guerreros de la oración, los Espejos de la oración, los Contemplativos de la oración, los Guardianes de la oración, los Vigilantes del Plan, los Curadores del Amor de Dios y los Gobernantes del Rey Universal.

Coloquen sus consciencias en la dirección correcta, no permitan que lo superficial y lo horizontal los envuelva. No permitan que las fuerzas contrarias a la Luz sigan sometiendo a todas las consciencias a través de la desinformación y de la mentira.

Coloquen sus consciencias en dirección vertical y vean, en lo alto de los montes de este mundo, la victoriosa y luminosa Cruz del Redentor, que ya no será la Cruz del sufrimiento, sino la Cruz de la Misericordia, de la Justicia y del Amor que se ofrece a ustedes, de tiempo en tiempo, para que a través de la victoria de la Cruz en sus vidas, sus consciencias se eleven  a Dios y, en nombre de todos los que niegan al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, establezcan en este mundo la Justicia Espiritual y la Compasión, lo que permitirá que los que se han condenado al fuego del infierno, hablo de los que dirigen las naciones y todos sus súbditos, tengan la oportunidad de que, a través de Mi Hijo, el Cristo Redentor y Resucitado, todos se puedan redimir, porque ese es el verdadero Amor, amar al enemigo y no destruirlo. 

Aunque el enemigo destruya en lo material, mental o espiritual, los invito, Mis amados ejércitos orantes, los invito, Mis amados Hijos de María, a que en este tiempo sean verdaderos estrategas del Plan de Dios, que no luchen con armas, que no ofendan con palabras, que no atraigan a través del pensamiento lo que es negativo, sino que sean como Mi Hijo, el Cristo, que en lo alto del Monte Calvario redimió al mundo entero, hasta el último momento de Su expiración.

Por eso, Mis amados hijos, es hora de cambiar la frecuencia de este mundo y permitir que, a través de las columnas de la oración, del servicio, del diálogo, de la compasión y del entendimiento, se abran las Puertas de los Cielos para que las Gracias de la reparación, de la cura y de la redención desciendan sobre las almas más necesitadas en este tiempo y, así, se cierren los infiernos de la superficie de la Tierra, en donde grandes consciencias negativas trabajan en la involución de las consciencias y de las almas.

Pero en esta estrategia espiritual que Yo los invito a practicar por medio de la oración, de la adoración, de la Comunión y del servicio, no deben desafiar ni tampoco tentar al enemigo. La estrategia del silencio será su escudo. La estrategia de la oración será su espada que cortará los grilletes del mal y disolverá los infiernos, en donde muchas almas radican sin poder encontrar la Luz y el Amor.

¿Ahora, comprenden la estrategia de estos tiempos? 

Porque el mal se disolverá por su propio mal. Recuerden que Mi Hijo es el Amor, Él es la Verdad y Él es su Vida, y que Su Amor es lo que le cierra las puertas al mal.

Decídanse, Hijos de María, no solo a ser los apóstoles del fin de los tiempos, no solo a ser consciencias disponibles, decididas y definidas, sino también ofrézcanse a Mi Hijo y a Mi Materno e Inmaculado Corazón como chispas de la Luz de Cristo, códigos de Su Amor Redentor, espejos de la Madre Celeste, que pueden brillar en la superficie de este planeta para que el caos sea vencido, extirpado y retirado de la consciencia humana.

Así como les dije ayer, no quiero venir con un Mensaje de advertencia o de miedo. A través del Universo Celestial, Yo les traigo la verdad y la realidad para que sus ojos ya no se confundan, para que su atención no sea desviada por el caos de este mundo y por la ilusión.

A través de las almas bondadosas y generosas, a través de las almas de sacrificio y de las víctimas del Amor de Cristo, es en donde, una vez más, triunfará el Amor, la Justicia y el Bien de Dios. Y esa será la gran y victoriosa justificación ante todos los pecados y errores del mundo, y mismo delante de todas las guerras, condenaciones, sacrilegios e indiferencias, porque las almas serán esa justificación ante Dios, las almas, los Hijos de María, que a partir de hoy decidan que sus vidas ya no les pertenecen, sino que sus vidas pertenecen a Dios, el Creador.

Así abrirán la puerta correcta para vivir Su Divina Voluntad. Crean que esto es así. Crean y sientan, en este momento, la misma situación interior y espiritual que su Madre Celeste, la Virgen María, vivió con el Arcángel Gabriel.

¿Acaso ustedes creen que Yo dudé del Llamado de Dios cuando recibí ese Llamado del Cielo?

Ustedes están ante el mismo momento interior. Están ante la gran oportunidad, en nombre de muchos hijos perdidos, de abrazar el Llamado de Dios, de amar la cruz, para que ella se vuelva más victoriosa y redentora.

Hoy, vengo de un lugar del universo, de un lugar de este sistema solar, en donde los Espejos Celestes vuelven a trabajar por la paz en el mundo, de una forma silenciosa e imperceptible. 

Por eso, invito a todas las almas orantes, a todos los corazones espejo, a que, en este día, muy especial para Mí, en donde muchos Hijos de María tienen la oportunidad de renovar sus votos internos y de dar un paso definitivo y verdadero, a que los corazones orantes estén muy unidos a los Espejos Celestes de la Madre de Dios; porque ustedes saben que la humanidad lo necesita, necesita de esa paz que fue boicoteada, de esa esperanza que fue condicionada, de ese amor que fue oprimido y sepultado, de esa fraternidad que fue disuelta a través del mal, de la impiedad y de las guerras.

Son los Espejos Celestes de la Madre de Dios que hoy se reflejan en los corazones orantes, que elevan su verbo hasta los Tronos de Dios para suplicar por Misericordia y Redención.

Que se alegren los que han persistido hasta este momento del camino.

Que mediten los que no consiguieron seguir los Pasos de Cristo.

Que oren todos Mis hijos por aquellos que fueron desviados del propósito del Amor, por diversas situaciones y circunstancias.

Quiero que cada Hijo de María, hoy, delante de la cruda realidad del mundo, del dolor y del sufrimiento de las almas más inocentes e inofensivas, que Mis hijos, los Hijos de María, no solo se sientan envueltos por Mi Manto Celeste para que en sus corazones brille la Estrella de la Hermandad, sino que en nombre de aquellos que no pueden llegar hasta Mí, por el conflicto y las guerras, por la desesperación y la angustia, por la oscuridad y el absoluto vacío de los desiertos de la vida, quiero que Mis Hijos de María, en nombre de cada uno de ellos, coloque su cabeza sobre Mi pecho para que Yo los pueda abrazar con Mi Luz y con Mi Amor.

En este momento, sientan en el silencio del corazón el latir del Corazón de la Madre Divina, de un Corazón que los ama, de un Corazón que los acepta, de un Corazón que los abraza, de un Corazón que los baña con el Amor de Dios, de un Corazón que los ilumina en cada uno de sus pasos.

Sientan, por un momento, el Corazón de la Madre de Dios, un Corazón que sufre por el mundo cuando las almas se distancian de Dios, cuando las almas se alejan del Padre de la Divina Misericordia.

Ahora, abrácenme, colocando sus manos en Mi cintura, sobre el cinturón dorado de la Madre de Dios, y coloquen sus oídos sobre Mi pecho, el Centro de Luz Femenino de la Creación, que guarda y protege a todo el universo y la vida.

En esta alianza Conmigo, internamente, renueven sus votos con el Padre Creador.

Yo les agradezco por escucharme y también les agradezco por tener la valentía de persistir, para que el Retorno de Cristo sea una victoria en el mundo entero.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús: 

Oremos. Aún con nuestra cabeza sobre el pecho de la Madre de Dios, oremos junto a Ella en unidad y confianza, en fraternidad y amor.

 

Señor,
 que se cumpla el advenimiento de la Nueva Raza,
que la humanidad pueda expresar su arquetipo,
que la palabra sea viva y construya Tu Templo,
que se expanda en nosotros Tu misterio
y que se revele al mundo la verdadera existencia,
para que podamos reunirnos en Tu Nombre
y glorificar la perfecta unidad.

Amén.
(tres veces)

 

¡Gracias, Madre Divina, por cuánto nos das!

En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Oración del alma despojada

Si mi sufrimiento, Señor, aunque parezca pequeño,
sirve de alivio del sufrimiento de mis hermanos, 
que se haga Tu Voluntad, Señor.

Si mi vacío, sequedad, agonía y abandono de Ti 
sirvieran de auxilio, de aliento y de alegría para mis hermanos, 
que se haga Tu Voluntad, Señor.

Si mi cansancio, desierto y aridez, 
sirvieran para llenar el vacío, la aridez y el desierto de mis hermanos, 
que se haga Tu Voluntad, Señor.

Si mis noches de asedio, de batallas o de soledad, 
sirvieran para dar fortaleza, ánimo y fe a mis hermanos, 
que se haga Tu Voluntad, Señor.

Si la falta que a veces siento de Ti, la ausencia de consuelo 
y el aumento de trabajo agradaran a Tu Corazón herido, 
que se haga Tu Voluntad, Señor.

Si mi desesperación, mis tormentos y mis noches oscuras 
ayudaran a salvar a las almas perdidas, abandonadas y no amadas, 
que se haga Tu Voluntad, Señor.

Si no recibo amor y solo desprecio, 
si no me siento comprendido y solo juzgado, 
si en este momento no encuentro sentido de estar a Tu lado, 
amado Cristo, que se haga Tu Voluntad, Señor.

Dame fuerza interior para no temer nada. 
Dame valentía todos los días para aprender 
a salir de mí mismo, cada día más.
Dame amor para aprender a amar y a aceptar al semejante, 
porque si hasta ahora no siento nada, 
si en esta noche de frío o en este día nublado 
no consigo ver el Sol de Tu Corazón 
y si esto sirve para que mis hermanos del mundo 
consigan ver la Luz, el Amor y la Misericordia de Dios, 
que se haga Tu Voluntad, Señor.

Solo espero agradarte en los pequeños detalles. 
Solo quiero, Señor, ser un instrumento en Tus piadosas Manos, 
para que en cualquier lugar de la Tierra 
al que Tú me envíes Te puedan reconocer, 
para que puedan sentir amor y esperanza, 
para que así el sufrimiento, el dolor y el abandono 
de los corazones desesperanzados sean aliviados 
en honra a Tu Victoria Celestial. 

Amén.

 

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice,

Su Maestro y Señor, Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN MEDJUGORJE, BOSNIA Y HERZEGOVINA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

No quiero que algún día sientan frustración, incomodidad o desesperación por estar cansados, porque Yo llegué a la cruz más exhausto y destruido que todos ustedes; por eso tienen la oportunidad, en este día, de padecer por Mí.

Sé que para sus núcleos internos a veces es demasiada exigencia, pero ya es tiempo de que vean que nada, absolutamente nada les falta y que Mi propio Padre, a través de Su Madre Celeste, cuida hasta esos detalles.

Recuerden a todos aquellos hermanos suyos que nada tienen, que nada reciben y que se encuentran en peores condiciones de vida espiritual y material.

Yo llamé a cada uno de ustedes para que Me dieran algo de su interior, y muchos aún no Me lo dieron.

No busco su desarrollo material ni intelectual. Lo que siempre busco es que sus corazones ofrecidos plenamente por la humanidad estén conmigo también en este momento en el que tal vez sus células desean o aspiran a otras cosas.

Yo les prometí Mi Reino por medio de sacrificios soportables para ustedes. Ahora es el tiempo de ofrecerse completamente en las manos de su Redentor para que milagros e intervenciones más grandes se puedan dar.

Les prometí decirles la verdad, reconozco los demás esfuerzos, pero hoy necesito que individualmente se coloquen ante Mí y Me pregunten ¿Señor que más debo hacer?

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice,

Su Maestro y Señor Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE PALERMO, SICILIA, ITALIA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Ora y deja que tu oración abra las puertas del Cielo para que el Creador eleve a las almas que se perdieron en los mares de este mundo, cuando buscaban esperanza y consuelo para sus vidas. 

Ora por los que emigran de sus países en busca de paz y de una gracia y que, sin embargo, no encuentran aliento, sino soledad, desesperanza y el sufrimiento de sentirse perdidos en los mares del mundo. 

Clama por Misericordia para que sus almas sean aliviadas. Clama por Misericordia para que las naciones se pacifiquen. Clama por Misericordia para que los corazones conozcan la Piedad y se arrepientan de sus errores y de sus pecados, rediman su pasado y diseñen su futuro con actos de paz.

Ora, hijo, porque no solo las almas agonizan, el planeta agoniza y llora las mismas lágrimas que su Madre Celestial porque ya no soporta el mal que lo oprime por el error y por la indiferencia de los seres. 

Ora porque la Justicia Divina se aproxima al mundo y los que están ciegos ya no tendrán muchas oportunidades de ver la Verdad y la Gracia de Dios. 

Ora para que tu corazón sea colmado de Piedad Divina y, así, tu intercesión ante el Padre se torne cada día más sincera y verdadera.  

Ora porque la Gracia de Dios ya está sobre ti y se debe expandir por este mundo. Deja que la Misericordia del Padre fluya de tu clamor por la paz.

Siente la urgencia. Siente el dolor del mundo. Siente el pesar de Dios y dispone tu corazón para reparar este planeta. 

Tu Padre y Amigo, 

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

No dejen de remar en esta barca de salvación y de rescate del fin de los tiempos, aún hay almas preciosas que rescatar y tenderles la mano para que puedan subir a la Barca del Señor.

No dejen de navegar porque aún hay lugares que redimir y convertir para la Gloria de Dios.

No dejen de navegar, hay puertos internos que todavía esperan la reaparición de Cristo y quieren escuchar las palabras de amor de Sus apóstoles.

No dejen de navegar mar adentro para ir al encuentro de los náufragos, de los que se perdieron en el mar de la desesperación y de la culpa. A todos ellos Dios desea darles Su infinita Misericordia.

Sigan remando, hijos, aún hay dolor que aliviar y cura que dar a los corazones solitarios y enfermos.

Lleven en sus almas y en sus labios el poder de la Palabra de Cristo para que, siendo anunciada al mundo, las almas despierten al llamado del Universo Mayor.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Siente Mi Corazón percibiendo al mundo y a todos sus hijos dispersos en la ilusión y en la realización personal, sin que la mayoría busque verdaderamente a Dios.

Siente Mi Corazón clamando por un poco más de consciencia y de responsabilidad por parte de las almas que, a cada paso que dan, comprometen sus vidas.

Siente Mi Corazón suplicando para que Mis hijos del mundo despierten del sueño profundo e inerte en el cual Mi adversario los colocó.

Siente Mi Corazón intercediendo por las naciones del mundo y por los errores de sus dirigentes que llevan a los pueblos a comprometerse espiritualmente. 

Siente Mi Corazón rezando para que terminen las guerras, la violencia entre los seres humanos, la desesperación interior y la falta de amor.

Siente Mi Corazón rogándole al Padre Eterno para que los que Me sirven y siguen la Iglesia de Cristo sean transparentes y disciplinados en la protección de la comunión de las almas con Mi Amado Hijo.

Siente Mi Corazón sosteniendo este tiempo y esta humanidad que deberá arrepentirse de corazón para poder salvarse.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO DURANTE EL VIAJE DESDE LA CIUDAD DE JOINVILLE HACIA LA CIUDAD DE FLORIANÓPOLIS, SANTA CATARINA, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

En tiempos de batalla, que reine la paz del corazón.

Que entre Mis soldados reine la unidad, para que así el enemigo no ingrese por ninguna brecha.

Que en el tiempo del Apocalipsis puedan escuchar Mi Voz y prepararse, para que algún día sientan la paz, igual que los oídos que escuchan una cálida melodía.

Hoy, queridos hijos, he venido en esta hora crítica para apartarlos del peligro y de la inseguridad que Mi adversario despierta a través del desorden humano.

Por eso, como en la victoria de Cristo en la Cruz, su Madre de las Siete Espadas se coloca en sus caminos para guiarlos y retirarlos de la adversidad y del peligro inminente que crea Mi adversario.

Su Madre Celeste enfrenta las primeras batallas con Su enemigo, para impedir la destrucción espiritual de los corazones, para evitar que las almas pierdan la fe en Dios y en Su Plan.

Por eso, los ejércitos de la Madre del Mundo se preparan para responder a situaciones inesperadas y no planificadas. Como verán, Mis hijos, el ritmo de los acontecimientos cambió y será a través de esas experiencias inesperadas que ustedes se transformarán en esencias de sacrificio y de entrega permanente para que, hasta el alma más distante de Dios, la más pecadora y condenada, encuentre Su Misericordia.

Hijos amados, no se desesperen. Sé que es difícil para sus vidas vivir tantos inesperados cambios, pero sepan que Yo Me he comprometido con Mi Hijo a retirarlos del peligro y del engaño que Mi adversario infunde en todo el colectivo de la humanidad, en lo que Yo llamo de tendencias y modernidades.

Los últimos acontecimientos han comenzado a desencadenarse entre el Cielo y el caos, y por todas las almas o por solo una, todo está permitido.

Síganme, Mis ojos no dejan de observar sus pequeños pasos.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los protege más que nunca,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Mi adversario está decidido a destruir los planes de paz que Yo deposito como luz en los corazones de los seres. Pero él, que le tiene miedo al poder del Amor que a todo vence, viene en búsqueda de las buenas almas para hacer de todas ellas el polvo de sus pies.

La bestia nunca podrá parecerse a ningún ángel del Cielo. Su postura, aridez y robustez son las formas que maneja para engañar a las almas a través de la mentira, de la competencia y de la desunión.

Su aliento es de fuego y azufre y fue manifestado por haberse alimentado del dolor y del sufrimiento ajeno. Con sus garras mantiene a muchos corazones presos, que están embriagados por la inercia, el placer y por todos los tipos y formas de apetitos. Además de estos corazones, otros más están presos inocentemente, porque la bestia sabe que no puede perder a sus prisioneros.

Ella es muy astuta, pero pierde la fuerza de acción en todo espacio en donde la verdadera unidad, el fuerte amor y la invencible oración se manifiestan; allí se siente débil. La bestia encuentra espacios profundos en los abismos del inconsciente, de la falsedad y del orgullo; por esta causa, muchos de los que están en el cautiverio de ese abismo es porque abrieron la puerta, desde la que espiritualmente llegaron hasta allí.

Sus diez cuernos atraen todas a las acciones del mundo, aquellas que la humanidad realiza injustamente y de las cuales nunca se ha arrepentido ante Dios. Cada cuerno de la bestia es la degeneración terrenal de un principio capital, que fueron activados por los pecados y las deudas descontroladas de las almas presas.

Sus patas delanteras son robustas, ellas son los pilares del falso poder y de la conquista de los hombres a través de las modernidades. Sus patas traseras son los pilares de la negación y de los constantes ultrajes a la vida de la Tierra, que son promovidos por sus aliados del mundo.

La bestia lleva sobre su lomo una capa que seimpuso para crear su falso reinado sobre las mentes de los que se creen maduros e inteligentes. La ceguera de muchos seres es provocada por la bestia y ella manipula el juego de las gratificaciones, para así poder ganar más terreno.

Su mirada refleja la desesperación y la soledad de todos los que fueron sumergidos en los abismos de su reino, a través de la ejecución, de la muerte y de las prisiones humanas.

Este es el falso reino y esta es la bestia que hace sucumbir, día a día, a la humanidad. Pero ella le teme a la Luz del Reino de Dios y no puede aproximarse ni siquiera a la Mujer coronada por las doce Estrellas de las tribus y apoyada sobre la gran Luna del renacimiento interior y de la esperanza.

La Santa Mujer del Sol ya está en el desierto, llevando a todos aquellos que lo permiten hacia las cuevas intraterrenas. Allí, una especie de pequeño paraíso fue creado y el propio Manto dorado de la Santa Mujer del Cielo protege y ampara todo ese lugar, que es impenetrable y desconocido por la bestia. En ese pequeño paraíso, que existe en el interior de muchos seres, se proclama el Verbo Divino de la oración, que hace fuerte y victoriosa a la fortaleza de ese lugar interior.

En ese recinto se vive el amor y todas las criaturas son colmadas por la esencia de la Misericordia de Dios. Todos conocen a la bestia, pero ninguno de ellos le teme, porque la fuerza de todas esas almas es la unidad y el amor donado al Creador.

La Mujer se prepara para enfrentar a Su adversario y el Arcángel Gabriel se unirá a la Santa Mujer. Ella se hará fuerte y mucho más invisible, penetrará los abismos oscuros como un gran Lucero universal. En esa hora, el dragón rojo ya habrá soltado su ira y muchos la sentirán; pero los ejércitos de la Luz estarán preparados para dar la respuesta a los comandos de la Santa Mujer, para poder actuar en la hora correcta.

Cuando la Mujer haya ingresado en el infierno terrestre, los Arcángeles descenderán a través de Sus más poderosas emanaciones de Luz y de Amor; y la bestia será retirada de la esfera de la Tierra. Ese será el momento de la gran liberación y así el mundo entero se iluminará por mil años seguidos.

Verán surgir en el horizonte la Luz solar del Rey y muchos se liberarán de los eternos naufragios. Se establecerá un nuevo principio de vida y muchas almas, que se mantuvieron en la fe, portarán los códigos de la victoria crística. Todo se desterrará de este mundo para que tenga espacio nuevamente el Reino de Dios.

Los ancianos tendrán sueños de esperanza, los jóvenes verán los mundos celestiales como parte de sus propias moradas y los niños enseñarán, a través del amor y de la alegría, lo que guarda el universo.

La Santa Mujer volverá a erguir el trono para el Hijo amado y los ángeles traerán entre sus manos la oferta de los puros de corazón. Al final, la humanidad recibirá su última Gracia si las almas responden al llamado del Cielo a tiempo; y los Sagrados Corazones triunfarán, al menos, en los más simples y verdaderos, porque en ellos estará el paraíso.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los instruye en la Sabiduría Celestial,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Profeta del Salvador

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Cuando un lugar se consagra a Mi Sagrado Corazón, y en ese espacio las almas participan de la consagración, una puerta de paz se abre para el mundo entero y, así, muchos de los que han caído en la desesperación reciben una Gracia Mayor de absolución.

En este camino de consagración, el Padre se inclina ante los Suyos para irradiarles el Amor, la gratitud y el porvenir. De esta manera, la humanidad, día a día, es liberada y transmutada gracias a las puertas que ella abre ante el Universo Celestial.

La ayuda mayor de los ángeles se concreta en estos tiempos por medio del poder misericordioso de la oración. De esta manera, las almas reciben del Reino el impulso que necesitan para seguir caminando, y nada perturbará el caminar de los corazones en el esfuerzo por dar los pasos hacia Dios.

En esta era de Divina Misericordia, los seres orantes y los no orantes deberán consagrarse todos los días al manantial infinito de Mi Corazón Misericordioso. Así podrán construir dentro de cada esencia un templo indestructible y sólido ante las grandes batallas de la tribulación.

Yo necesito que los corazones puedan representarme como soles que irradian el Poder Infinito de Mi Misericordia. Por eso, hoy quiero dejar para los Míos una puerta abierta que cada uno cruzará a su debido tiempo.

Solo les digo que ya no hay mucho tiempo para decidirse, el reloj marca un nuevo ciclo de cambios y de renuncias para los que siempre Me dijeron sí; por ellos Yo podré cumplir con Mis Preciosos Designios de redención y de paz.

Los aguardo en la puerta de Mi Divina Misericordia.

Bajo el Amor de Dios, sean bienaventurados.

Gracias por buscar la unión perfecta con Mi Invencible Corazón.

En unión con Mis rebaños,

Cristo Jesús de la Misericordia

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Mi Corazón Misericordioso, a las tres de la tarde, genera una explosión de Luz y de Gracias sobre los corazones que aguardan con fe y confianza Mi Divina Misericordia. Pero Mis Poderes también se derraman sobre los corazones que están ciegos de espíritu y no pueden ver la grandeza de Mi Humilde Presencia. 

Yo necesito a todos los rebaños; por eso, en esta era Mi Corazón se servirá de los valientes para poder llegar a las esencias más distantes del camino de la redención espiritual.

Ahora llegó el momento de revertir los males que el mundo genera y a los que la humanidad, en su mayoría dormida, se abraza como ovejas sin pastor. Por eso Mi Misericordia viene para restaurar los espacios profundos de la consciencia.

Mi Corazón se aproxima con la intención de aliviar la gran desesperación de muchas almas a las que les falta la paz, porque les falta la oración del corazón.

Mi Deseo Divino es que todos puedan vislumbrar que el Gran Señor, aquel que les pertenece desde el principio, está retornando; pero esta vez para dar testimonio de la verdadera Presencia de Dios y de la Vida Mayor.

Para eso, los buenos rebaños deberán unirse como uno solo para ayudarme, retirando del pensamiento las críticas, las indiferencias, los pareceres y los juicios; porque a aquella alma que no se disponga a estar vacía de sí, le costará el doble de esfuerzo encontrar la paz.

Es hora de morir para sí mismo y es hora de ver la realidad que acongoja a gran número de corazones que están solos, en un desierto extenso de soledad y sed.

La Fuente de Vida que representa el Sagrado Corazón de Jesús viene para saciar la sed espiritual y Él quiere que la humanidad repare el Bendito Corazón de las ofensas gravísimas que lastiman el Corazón del Todopoderoso.

Si hubiera una respuesta verdadera y permanente por parte de los orantes, la humanidad recibiría la Gracia del Perdón y, si la devoción al Misericordioso Corazón de Jesús se estableciera, ella tendría un tiempo más de paz.

Bajo la Gracia del Padre, sean bienaventurados.

Gracias por escuchar Mis Palabras con atención.

Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Tú que te desesperas, mírame a los Ojos.

Tú que te perturbas, mírame a los Ojos.

Tú que vives el calvario de la vida terrenal, mírame a los Ojos.

Tú que sientes que todo está perdido, mírame a los Ojos.

Tú que piensas que no serás salvado por Mí, mírame a los Ojos.

Tú que pierdes las fuerzas y el valor de seguirme, mírame a los Ojos.

Tú que estás en el camino de la transformación, mírame a los Ojos.

No dejes de contemplarme y mírame a los Ojos.

Confirma tu permanencia en Mí y mírame a los Ojos.

Sacia la sed de tu espíritu en Mi Corazón y mírame a los Ojos, porque Yo te confortaré y contigo sostendré la cruz que debes cargar hasta el fin de la meta.

Siempre búscame y mírame a los Ojos.

Estoy aquí, mírame a los Ojos.

Fortalece tu fe y pierde tus miedos, mírame a los Ojos y siempre dime sí, a pesar de tu soledad, de tu cansancio, de tu inquietud.

Mírame a los Ojos, porque conocerás el poder de Mi Misericordia para ti.

Mírame a los Ojos y no te olvides de Mí.

Mírame a los Ojos y encuentra la Luz Salvadora de Mi Corazón.

Mírame a los Ojos y confiésate Conmigo, Yo te conozco muy bien.

Mírame a los Ojos y abandónate en Mí.

Bajo la Gracia del Padre, sean bienaventurados.

Gracias por recibir Mis Palabras en el corazón.

Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Cuando sientas soledad, Yo estaré contigo.

Cuando veas que la vida es un naufragio, Yo estaré contigo.

Cuando dudes de tu fe, Yo te fortaleceré.

Cuando sientas que cargas mucho sobre ti, Yo te aliviaré.

Cuando busques a Mi Hijo, Yo te Lo mostraré y te daré de beber de la Fuente de la Misericordia y de la Redención.

Cuando veas que todo está vacío, Yo te llenaré con el Espíritu de Mi Amor.

Cuando nadie pueda socorrerte, Yo te colocaré bajo Mi Manto para que, junto a los ángeles del Cielo, alabes a Dios, la Fuente del Amor y del Perdón.

Cuando sientas alegría, Mi Corazón estará contigo.

Cuando sientas tristeza o desesperación, llámame, porque allí Yo estaré y te pondré en Mis brazos, así como lo hice con Jesús, para irradiarte la Luz de Dios, entonces, ya no sentirás soledad, sentirás el Consuelo Materno de Mi Corazón.

Cuando cultives la oración en tu corazón, allí estará Dios, porque las almas necesitan aún del perdón.

Cuando no encuentres el camino, clama por Mi Corazón, y Yo irradiaré la Luz de Mis ojos para que camines hacia Mi Hijo, el Redentor. Así serás como una oveja que aspira a la guía del Gran Pastor y, junto a los corazones de todo el mundo, suplicará por redención.

Será el momento en que tu corazón se guarde dentro del Sagrado Corazón porque así estarás protegido de todo dolor.

Ahora, en este día, aspira a estar en Dios y en vigilia, en eterna oración por las almas.

Cree en el poder de la Misericordia y eleva tus súplicas como flores hacia los Cielos, porque Yo las recogeré para entregarlas con amor al Creador como una oferta de un alma en redención. Y cuando veas de nuevo el amanecer, recuerda que está naciendo la Luz de Dios para cada ser.

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Con inmenso gozo y alegría en el corazón doy Mi Bendición y Paz Maternal a todos Mis hijos amados de Argentina. Por este motivo, hijos Míos, los reúno a todos entorno al Sagrado Corazón Divino de Cristo para que vuestras almas reafirmen la alianza con el Universo del Amor y de la Paz.

Queridos hijos, hoy es un momento más para recordarles la confirmación de cada uno de ustedes con el universo y con la vida de oración, necesaria y fundamental para la humanidad en este final de los tiempos.

Queridos hijos, como Reina de la Paz en Medjugorje y en el mundo, hoy les pido que recen desde el manantial que existe en vuestros corazones.

Hoy de nuevo les pido oración para evitar guerras, persecuciones y desórdenes en la vida de la humanidad.

Hoy, queridísimos hijos, les pido oración para evitar el sufrimiento, el dolor y la desesperación que Mi Inmaculado Corazón presencia día a día en este mundo.

Hoy los llamo a orar para aliviar Mi flagelado Corazón que es lastimado por las graves ofensas de la humanidad.

Queridos hijos, hoy los estoy llamando a despertar vuestra pequeña consciencia delante de los acontecimientos que se desarrollan en este mundo.

Como Madre de las Gracias, hoy les pido que coloquen vuestros corazones bajo los Rayos Misericordiosos y Redentores de Mi Amado Hijo, porque es en Cristo que hallarán el Alivio, porque es en Cristo que hallarán la Luz y el Perdón, porque es en Mi Hijo que encontrarán la Reconciliación que vuestras vidas y las vidas de la humanidad necesitan.

Por eso, Mis pequeños, que en ustedes despierte la esperanza y la alegría de servir a Dios, porque sepan que muchos de Mis hijos deben vivir la redención del corazón.

Hijos Míos, en este día de encuentro Conmigo en Luján, Santuario de amor y de fe, les pido que mediante la oración se unan a Jesús, llamen a Jesús y que lo busquen para que Su Divino Espíritu de Amor esté con ustedes, los visite, los guíe y los ampare de todo.

Queridos hijos, por un mes más Yo les digo: ¡Gracias por responder a Mi llamado a todos los corazones peregrinos de Argentina!

¡Les agradezco!

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Eleven sus corazones. Aspiren a los Cielos. Sepan que Yo soy vuestra Madre que los regocija y los ama al igual que amé a Jesús. Que desaparezca de ustedes todo desespero; que puedan en este momento encender Mi Paz Maternal en sus pequeños corazones.

Aspiren el perfume de Mis palabras, Yo soy la Reina de la Paz que acoge a todos los hijos de Dios. Yo soy para el alma la Mensajera del Espíritu Santo que quiere llevarlos hasta el Redentor.

No se desanimen por nada en la vida; renazcan ahora delante del Creador. Acepten los cambios que se aproximan; vivan hoy el Verdadero Amor del corazón. Dios escucha las plegarias cuando la oración es sincera porque ella adquiere la fuerza del Amor del corazón.

Levanten los brazos, Mis queridos hijos, que el Redentor Jesús llega de nuevo a sus vidas.

Sé que el mundo clama por la paz; Dios envía a Su Sierva para proclamar el amor en Mis hijos y el perdón de todo el pasado. Sientan en vuestros corazones la unión para que sean partícipes del nuevo espíritu de paz que está emanando desde Mi Inmaculado Corazón para el mundo.

Sepan que los conozco a todos muy bien, así como Mi Corazón de Madre conoce a Jesús. Sé qué necesitan y en qué ustedes deben madurar. Por eso, hijos Míos, sean verdaderos para que vuestros ojos puedan ver de cerca las huellas del retorno del Pastor del Amor.

Preparados como para una gran cena, vuestros corazones se alegrarán cuando escuchen el llamado que Mi Corazón proclamará.

Retornen todos los días a Dios para que Mis estrellas de la paz y de la anunciación sean la guía para sus consciencias. Vigilemos en oración para que todos sean partícipes de Mi Luz Maternal.

Los amo y los espero en oración.

¡Les agradezco!

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

El alma que vigila en oración estará en el Reino de Mi Corazón.

Queridos hijos:

Hoy, en especial, preparemos el ministerio de Mi llegada a sus corazones los días 12 y 13 de este mes. Sembremos en los corazones el mensaje de la Buena Nueva porque en ellos Mi llamado brotará de nuevo como un manantial.

Los aguardo hoy, como cada día, permeados por la Luz de la oración reparadora.

Mis pequeños, cada aparición y cada encuentro con sus corazones significa un momento único de rescate de almas que están olvidadas en la desesperación y el sufrimiento. Por eso, Mis queridos, cuento con sus oraciones para que ellas llenen de paz a la Tierra y abran los Cielos donde se encuentra el Amadísimo y Misericordioso Redentor de todas las criaturas.

Los días 12 y 13 de este mes permitan que Mi Amor Maternal los impregne profundamente para que reconozcan así Mi presencia universal. En especial, Mis queridos, ustedes permítanse sentir en sus corazones la llegada victoriosa de Mi Luz Celestial.

Reunidos en oración y en paz los encontraré, escuchando, desde los Cielos, el llamado de todos Mis hijos. Confío que cada uno de sus pequeños corazones acompañará el triunfo inmaculado de Mi Corazón.

Los adora en Cristo Glorificado,

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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