Domingo, 26 de enero de 2020

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Cuando un ser ingresa en el desierto, aunque simplemente haya tocado su arena y sentido su calor, ya no puede caminar hacia atrás.

El desierto puede parecer peligroso, lleno de sufrimientos y padecimientos. Pero hoy les digo que no hay mayor padecimiento para un alma que ingresar en el desierto y no profundizar su experiencia en él, no rendirse a Dios y descubrir sus misterios.

El alma que pisa el desierto, pero no camina por él, sino que queda presa de sus temores, no suelta las muletas que apoyaban sus pasos ni descubre en ellas su verdadero apoyo y tampoco sabe lo que es caminar con los propios pies. 

Esa alma vencida por sus temores, sin querer soltar los afectos, las sensaciones o el pasado en sí, termina buscando, en más muletas y más cadenas, las sensaciones que no encuentra con las que tiene en sus manos y con las que están presas a sus pies.

Esa alma se torna prisionera de sí misma, cada vez más vacía, más esclava y más temerosa, simplemente por no conseguir rendirse al infinito del desierto que se presentó frente a ella. 

Dios los llama a madurar en el desierto, a dejar las emociones humanas para descubrir y consolidar el corazón en el Amor Crístico. Pero para eso, hijos, necesitan soltar las muletas, quebrar las cadenas, experimentar el vacío y caminar en él, aunque no sientan una base bajo los propios pies.

Esto se llama experimentar la fe.

No sean esclavos de sí mismos. Reconozcan que no hay otro verdugo sino el orgullo, la vanidad y la ignorancia de los corazones que creen que están más seguros cuando están llenos de sí, pero no perciben que ni siquiera se conocen a sí mismos.

Les dejo Mi bendición para que clamen por liberación y la vivan.

Si sienten que sus pies están en las arenas del desierto, caminen y no detengan sus pasos. Consoliden la unión con Dios y fortalezcan la propia fe. Esto los hará verdaderamente libres.

San José Castísimo