Domingo, 19 de mayo de 2013

Mensajes mensuales
MENSAJE MENSUAL DE SAN JOSÉ CASTÍSIMO,TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE SAN FRANCISCO XAVIER, SAN PABLO, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Que en este día, de Gracias y de Gloria infinita en el Reino de los Cielos, el Espíritu Santo esté en vuestros corazones.

Queridos compañeros de camino, vengo por los que dijeron sí a la presencia del Santo Espíritu de Dios y, en conmemoración a este día Santo, el Espíritu Salvador recorre la Tierra tocando todo aquello que esté abierto a Su Fuego de Transformación y de Renacimiento.

Queridos hijos del Señor, la presencia de Mi Corazón Castísimo viene una vez más a tocar al mundo para que, poco a poco, el mundo interior de cada uno de ustedes se vea transformado y consagrado al Corazón de Dios.

Vengo a indicarles los pasos hacia la humildad por medio del servicio para que, de la misma forma como hizo Mi Castísimo Corazón hace 2013 años atrás, vuestros corazones y vuestros espíritus puedan encontrarse profundamente con Dios, a través del servicio abnegado y silencioso.

A los Misioneros consagrados que viven y sirven en todo el mundo, Yo hoy les doy una llave: en el silencio encuentren a Dios y en el servicio manifiesten este encuentro. Pues el servicio vacío de Dios no nutre la esencia del prójimo, sólo aumenta la vanidad en Mis servidores. Y Dios, para los que aspiran a servir incansablemente, será encontrado en el silencio.

Cuando estuve sobre la Tierra, pleno del Espíritu Santo, al lado de Mi Hijo Jesús, fue el silencio en Mi Corazón que Me permitió comprender lo que estaba viviendo. Y este mismo silencio permitió que el Espíritu Santo se aproximase a Mi Corazón y que lo condujese al contacto eterno con Dios.

La Sagrada Familia creció en la constante confianza en Dios, porque por medio del amor que cada uno de nosotros nutría por Él y mediante el silencio, que ese mismo amor causaba en nuestros corazones, Dios nos mostró Su Rostro y Su Espíritu nos instruía a vivir una vida de simplicidad y de eterna caridad, unos con los otros y con todos los que se nos acercaban.

Permitan hoy y para siempre que el silencio pueda brotar en vuestro interior, un silencio que nazca del profundo amor a Dios y que se manifieste por la simple voluntad de estar más próximos a Su Sagrada Consciencia.

Para alcanzar al verdadero arquetipo de servicio, es necesario antes encontrarse con Dios y para encontrarse con Dios, llámenlo en vuestros corazones y encuéntrenlo en el profundo silencio de vuestro templo interior.

Yo los acompaño y guío vuestros pasos rumbo a la transformación y a la consagración de la vida.

Permitan que Mi presencia esté en vuestros corazones.

Les agradezco por acompañar Mis pasos.

San José Castísimo.