Viernes, 10 de abril de 2015

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE MONTEVIDEO, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos Míos:

En vísperas de la Fiesta Anual de la Divina Misericordia, día santo en el cual ustedes se encuentran en cenáculo y oración, deseo que difundan a todos Mis hijos la importancia de vivir el Día de la Divina Misericordia que Mi Hijo instituyó para el mundo.

Hijos, vengo para todos, para los pecadores y fieles, para los conscientes y para los ignorantes de corazón; vengo en nombre de Mi amado Hijo para toda la humanidad.

El día de la Fiesta de la Misericordia será dedicado, de manera especial, a todos ustedes y a todos aquellos hijos Míos que participen en ese día. Desde donde se encuentren, si comulgan y piden perdón, haciendo un acto de reparación y rezando con devoción la Coronilla a la Divina Misericordia, serán absueltos de las deudas graves que los han mantenido presos de la involución y así, recobrarán un espíritu de fe y fuerza interior para los tiempos que llegarán.

Esos hijos Míos tendrán la Gracia de ayudar espiritualmente a sus familias y seres queridos a través del acto de la Comunión en el Día de la Misericordia; y Mi Hijo, desde Su Reino, impartirá una Gracia de salvación, nunca vista en los últimos 50 años, a todas las almas pecadoras.

¿Por qué es importante que todos celebren Conmigo el Día de la Divina Misericordia?

Porque haciéndolo consciente en sus vidas, permitirán que atributos como la redención y la conversión toquen los corazones de los no creyentes y, sobre todo, los pecadores e injustos reciban la última tabla de salvación, que será la Divina e Insondable Misericordia.

El universo se prepara y ustedes también, y los ángeles derramarán los dones sobre aquellos que comulguen en nombre de todos.

Durante ese día habrá una expiación universal a través de la Misericordia que Cristo derramará sobre el mundo y sobre las almas que especialmente celebren ese día de gloria y de resurrección espiritual para todos.

Por esta causa, deseo que el 13 de abril, en el Centro Mariano de Aurora, sean levantados dos altares que estarán representando a Jesús Misericordioso y a su Madre Divina. En honra a la victoria que Mi Hijo alcanzó, deseo que coloquen guirnaldas de color sangre y agua, y que decoren no solamente el altar, sino también la sala en donde Jesús y María descenderán ese 13 de abril para dar una bendición especial al mundo y una expiación centenaria de todas las deudas cometidas contra el Sagrado Corazón del Padre Celestial.

Si Mis hijos se unenen esfuerzo y amor para preparar la casa para su Señor, los ángeles comprenderán que podrán trabajar ampliamente sobre la consciencia planetaria.

En el Día de la Divina Misericordia, su Dios estará atento a las súplicas e intenciones de todos Sus Hijos. Así, ustedes podrán ingresar en el océano de las Gracias y muchas posibilidades de despertar y de arrepentimiento brotarán de los corazones.

Queridos hijos, los esperamos a todos ese día.

¡Les agradezco por responder a este importante llamado!

Los prepara para el Día de la Misericordia de su Señor,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz