Sábado, 25 de octubre de 2014

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR SANTA MARÍA DE AURORA A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Quiero que Mi manto universal de cura se expanda por el mundo y llegue a los más olvidados, a los enfermos de cuerpo, de alma y de espíritu; a los que mueren en vida y a los que ya no están en este mundo, para que todas las heridas del pasado y del presente puedan cicatrizar y curarse delante de Mi Corazón.

Yo Soy la Señora de Aurora, la que amanece en el corazón de los que viven en la oscuridad, siempre y cuando una pequeña esperanza viva allí.

Mis queridos, verdaderamente quiero llegar al mundo para tocar cada partícula de vida. Mi Corazón tiene la potestad celestial de transformar todo lo que fue creado, de lograr que la creación de Dios retome su camino original y cumpla con este propósito para el cual fue creada. Mas es necesario que los corazones del mundo me den una señal, un permiso, por mínimo que sea.

No vengo a pedirles grandes obras, ni grandes sacrificios. Vengo a pedirles lo que la humanidad no quiere entregar a Dios, que es un corazón humilde, manso, bondadoso, fraterno y servicial; un corazón que ora, que contempla a Su señor en todas las cosas, un corazón que sabe encontrar y recorrer el camino dejado por Cristo.

Mis amados, muchos en el mundo aspiran a grandes cosas, obras heroicas que sean reconocidas por todos, grandes actos de servicio y caridad, pero pocos saben que el mayor servicio se encuentra en el olvido de sí en el amor al prójimo, a los que tienen al lado todos los días.

Si quieren curar, junto Conmigo, las indiferencias del mundo y todas las injusticias generadas por la falta de amor, entonces comiencen por transformar la falta de amor que existe en vuestras vidas, entre los servidores de Dios. Caminen hacia la vivencia de un amor pleno, permanente, que acepta todas las imperfecciones, para así curarlas.

Quiero que los que se autoconvocaron para este tiempo sean portadores del Mensaje Vivo de Cristo. Que Su Verbo Divino no esté solo en sus bocas o en sus acciones públicas. Que la actuación de Cristo sea permanente en las acciones más ocultas de vuestras vidas, porque esas acciones son las que tienen más valor a los ojos del Creador que todo lo ve.

Mis amados, vengo en el día de hoy, para que la Cura Universal descienda y se expanda sobre el mundo. Por eso les digo todas estas cosas, que son la raíz del sufrimiento humano y de todas las enfermedades.

Que el amor sea el único remedio y que la oración sea el camino recorrido para encontrar ese amor.

Les agradezco siempre por persistir respondiendo a Mi Llamado, y en este día les pido que no solo vengan a Mi encuentro todos los días, sino que vivan Mis palabras. De esta forma abrirán las puertas, para que la cura que traigo en Mis brazos sea derramada no solamente sobre ustedes sino también sobre el mundo entero.

Yo los amo profundamente y los bendigo, para que sean incansables delante de las pruebas que Dios les envía.

Que la Paz y la Cura Universal estén hoy en vuestras vidas.

María, Señora de Aurora