Domingo, 26 de abril de 2015

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE SAN PABLO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

A través de la Gracia Suprema, la Misericordia de Dios desciende y se derrama sobre las impurezas de este mundo, para que al menos algunas almas despierten al camino de la consagración y de la redención.

Por eso, hijos, Mi voz maternal se pronuncia a ustedes para que reconozcan que en cualquier parte de este mundo se necesita mucha oración por aquellos que no hacen nada y se olvidan todo el tiempo de Mi Hijo.

En esta hora, en la que se inicia la tercera etapa de la misión en el Congo, su Madre Celeste quiere darles a conocer las injusticias graves que llevaron a esta nación a perder la paz interior.

Ustedes, misioneros Míos, que ya aprendieron a caminar por medio de la paz y de la oración del corazón, ofrezcan a su Padre Celestial la oportunidad de que los corazones cerrados descubran la Fuente de la salvación y de la redención: Mi amado Hijo.

Por eso, queridos Míos, en estos días en los que conocerán una realidad paralela a la que vive Ruanda y Uganda, su tarea de caridad deberá tener el motivo principal de penetrar en el espíritu y en el corazón de cada alma esclava de Mi amado Congo.

Su constancia en querer escuchar y sentir con el corazón el sufrimiento ajeno, los hará descubrir los diferentes abismos espirituales en donde Mis almas del Congo se sumergieron, por falta de consciencia y de amor entre las criaturas.

El camino a recorrer en estos días será amplio y al mismo tiempo profundo y desconocido.

Ustedes, misioneros Míos, estarán delante de una cultura sometida por la incredulidad y por el error constante de retirar los mejores beneficios y riquezas de un pueblo empobrecido espiritualmente. De allí, hijos, nacen y surgen las causas de la esclavitud y del trabajo esforzado que llevan a redoblar los esfuerzos físicos para poder sobrevivir y no perecer.

Por eso, queridos misioneros y orantes Míos, allí tienen una tarea de oración, y valederos son los motivos para poder hacer algo por sus hermanos del Congo, pidiéndole al Creador que este cautiverio sin fin pueda terminar.

Su Madre Santísima de Kibeho, llega al Congo para impartir un manantial de Gracias a todas las almas que mueren de sed.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los unifica y los llama a la oración por la paz,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz