Sábado, 5 de octubre de 2013

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS, TRANSMITIDO AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

3.ª Maratón de la Divina Misericordia – primer día
 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Hoy, el Maestro vino a nuestro encuentro con un presente especial.

Él abrió las puertas del Cielo e hizo descender una cantidad innumerable de palomas que comenzaron a rodear nuestras cabezas.

Algunos de los hermanos presentes fueron bendecidos con Cálices; ya que algunos Ángeles del Señor derramaban el líquido de los Cálices sobre ellos y, a través de este encuentro interior con Cristo, nos transmitió Su Mensaje.

Cuando Él llegó, abrió Sus Brazos y Sus Manos para bendecirnos; y en Sus Brazos había dos cintas, una cinta azul y otra cinta roja que representaban, según nos dijo, Su Sangre y Su Agua, y tenían escritas las siguientes palabras: “Paz Infinita”.

Así, Él nos comenzó a instruir en este día.

 

Paz Infinita será el nuevo bautismo de sus seres, porque solo por la Paz Infinita sus almas alcanzarán la misión que Dios les ha encomendado en estos tiempos.

Queridos compañeros:

Este es el amor que Yo les quiero revelar: a través de Mi Paz Infinita sus vidas se podrán unir al Universo, y la Tierra y el Cielo serán uno como estaba previsto desde el principio.

Para que esto suceda, primero deberán encarnar la Paz Infinita en sus corazones porque ella será el camino perfecto para que ustedes se puedan amar de verdad, como Yo les enseñé desde el principio, cuando Mi Vida estuvo entre ustedes.

Solo a través de la Paz Infinita encontrarán el sendero predilecto de la humildad y así sus almas resplandecerán ante Mi Reino, porque estarán cumpliendo con el don precioso de vivir en paz.

El mundo se apaga por la falta de verdadera Paz; busquen esta Paz Infinita en el Origen, en la Naturaleza, en el corazón de cada hermano pacificador.

Hoy, les pido que sean ejemplo de paz, para que al menos los grandes acontecimientos de la Ley de Dios sean leves sobre los que no son pacificadores.

Que a través de esta Tercera Maratón de Oración a Mi Infinita Misericordia, ustedes, como soldados de la oración por la paz, puedan salir fortalecidos y amparados, salir listos para realizar la tarea misionera y de apostolado a la que Yo los invito en estos tiempos.

Hermanos, siento una profunda alegría por ver corazones argentinos un poco más maduros y dispuestos a colaborar con el Plan de Mi Padre.

Que en este encuentro sus seres puedan renacer y recibir el Espíritu de Dios, para que obren unidos de corazón y de alma con el prójimo.

Buena jornada misericordiosa para el día de mañana.

Mi Corazón acompaña sus plegarias de amor.

Bajo la Luz del Padre, sean bienaventurados.

Gracias por vivir en Mi Corazón.

Cristo Jesús de la Argentina